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181

A. H. N., Consejos, legajo 5552, núm. 29; esta pieza nos había sido indicada antes de la puesta al día del fichero Consejos, por N. Glendinning. Respetamos la ortografía, por otra parte mucho más correcta que la del inventario. Cf. cap. XXIV, página t. II, 271.

 

182

BNM, ms. 20-242-32, cuentas con don Gaspar de Candamo.

 

183

BNM, ms. 18656-66, título copiado con cuidado al dorso de «Mi cántico de muerte, plan para su composición...», en medio de notas relativas a la vida universitaria salmantina.

 

184

BNM, ms. 20-242-32, lista de los recados que conduce el ordinario de Valladolid Pedro Barba (que comprende principalmente «dos mesas de juego»).

 

185

Cf. cap. X, págs. 355 y 393-399.

 

186

Prólogo de Nimes, 1815, BAE, t. LXIII, pág. 90.

 

187

Tomamos los elementos de este retrato de QUINTANA: Noticia, BAE, t. XIX, pág. 120; del divertido romance «A cualquiera Fulana», Rev. hisp., 1895, pág. 180a; de CADALSO: Rev. hisp., 1894, páginas 298-328 y, sobre todo, págs. 317-318; de FR. DIEGO GONZÁLEZ: BAE, t. LXI, págs. CXXXV-CXXXVII. Tenemos a la vista el retrato pintado por Goya en 1797 en sus tres versiones muy parecidas: la del Bowes Museum, Barnard Castle, Gran Bretaña; la del Banco Español de Crédito, Madrid, y, finalmente otro lienzo de Madrid (colección particular). También tenemos una reproducción del retrato, copia anónima de Goya, que se conserva en la Biblioteca Nacional de Madrid.

 

188

En el retrato de Goya, el iris aparece muy oscuro, casi negro. Sin embargo, el Libro de Exámenes (1769-1819), fol. 49, precisa: «Ojos azules, con dos cicatrices en la frente» (A. U. S.).

 

189

Según los cuadros, sin embargo, el romance precisa: «Mi cara es muy pasadera; / mas Naturaleza libre / avara anduvo en las cejas / y pródiga en las narices». En la oda A Anfriso, hay una alusión a «su cabello / dorado, luengo y rizo» (BAE, t. LXIII, página 107c).

 

190

En el inventario de la biblioteca, dictado por el poeta, varias S en lugar de Z parecen demostrar el seseo; la jota se convierte en africada prepalatal: Majes por Mayer (caso de no tratarse de un simple error ortográfico); la F, muy debilitada, se oye como una fricativa interdental sorda, Z: Graffigny se convierte en Grazini, etc.