Visor de obras.

Real academia española. Fundada en 1713 y aprobada al año siguiente por el rey Felipe V. Tomó el título de española por ser la primera de España, concediéndole el rey además facultad para tener impresor propio y usar de un sello particular, y los privilegios y gracias que usan los empleados de casa real en actual servicio. El fin y objeto principal de esta academia es restablecer, cultivar y fijar la elegancia y pureza de la lengua castellana en todo su lustre y esplendor; desterrar los errores en ella introducidos por la ignorancia, la vana afectación, el descuido y la demasiada libertad de innovar; distinguir los vocablos, frases o construcciones extranjeras de las propias, las anticuadas de las usadas, las bajas y rústicas de las elevadas y cortesanas, las burlescas de las serias, y las propias de las figuradas. Para ello lleva publicadas ya varias obras utilísimas, como son el Diccionario general de la lengua, la Gramática, la   —198→   Ortografía, tratados de Poética, historia de la lengua, y otras de este género. Este cuerpo consta de 24 individuos de número y de residencia fija en Madrid, de varios académicos supernumerarios para suplir a los que se ausentan, y otros honorarios. Tiene sus sesiones a puerta cerrada los martes y jueves de cada semana en su casa propia calle de Valverde.

Real academia de la historia. Fue fundada con aprobación del rey Felipe V en 1738 con los mismos privilegios que la española. Su objeto es ilustrar la historia de España en todas sus partes, purgándola de errores y fábulas; ventilar las dudas a cerca de los hechos, distinguiendo en cada uno la mayor o menor probabilidad, y poniendo en claro los acontecimientos más notables, sus efectos, su influjo en el estado moral y físico de la nación, y sus conexiones con otras potencias y gentes. A este fin tiene la facultad esta academia de disponer viajes literarios y distribuir premios cada tres años sobre objetos de su instituto. Entre sus varios trabajos se debe contar el Diccionario geográfico y las Memorias. Consta de 24 académicos de número y 24 supernumerarios de residencia fija en Madrid, y además de académicos supernumerarios y correspondientes. Celebra sus juntas ordinarias todos los viernes, y una sesión pública cada tres años en la casa de la Panadería en la Plaza Mayor, donde está establecida, y tiene su biblioteca con gran número de manuscritos, planos geográficos de ciudades, y un precioso monetario.

Real academia de san Fernando de las tres nobles artes. Tuvo principio en 1744 y fue autorizada con   —199→   el título de Academia Real en 1752 por el rey don Fernando VI, que le dio su nombre. Se ocupa en la perfección y adelanto de las tres nobles artes de Pintura, Escultura y Arquitectura, para lo cual tiene varios profesores pensionados en Roma, París y esta corte; distribuye premios cada tres años, y tiene grandes aulas públicas, de que hablaremos más adelante. También le está cometido el examen de las obras públicas, a fin de que no se aparten de las sencillas reglas del arte. Consta de varios académicos y profesores honorarios y de mérito para las partes gubernativa y facultativa, y tiene sus juntas de establecimiento en la casa calle de Alcalá, conocida por el nombre de gabinete de Historia natural. Esta casa sirvió antes de estanco de tabaco, y la compró el rey Carlos III para destinarla a esta academia y al gabinete en 1774, habiéndose picado al tiempo de prepararla para estos objetos la ridícula fachada que tenía, adornando la puerta con dos columnas dóricas estriadas, de piedra berroqueña, con su entablamento y un balcón encima, y debajo de él la elegante inscripción siguiente: Carolus III rex, naturam et artem sub uno tecto in publicam utilitatem consotiavit. Anno MDCCLXXIV.

Unida a esta academia hay una real junta de damas académicas de honor y de mérito para gobierno de los estudios de adorno destinados a la enseñanza de las jóvenes.

Real sociedad económica de Amigos del País. Este cuerpo fue aprobado por S. M. el año de 1775, concediéndole el uso de sello particular en que se representan los símbolos de la agricultura, industria y artes con este lema Socorre enseñando. Su objeto   —200→   es el fomento de la industria popular y los oficios, promover la agricultura y cría de ganados, tratando por menor todos sus ramos subalternos, y exponer públicamente el resultado de sus tareas y cálculos políticos en sus Memorias anuales. Para protección y adelanto de la industria y oficios, puede la sociedad erigir escuelas de teórica, mecánica y práctica, y repartir anualmente premios a los sobresalientes. Son notables los trabajos de esta ilustrada sociedad, que muchas veces han ayudado al gobierno en sus disposiciones, y se pueden ver en sus Memorias impresas. Este cuerpo se compone de socios de número, de fija residencia en Madrid, socios correspondientes ausentes en pueblos de Castilla, y socios agregados en las demás provincias de España. En el día no se reúne.

Unida a esta sociedad está la junta de damas que cuida de varios establecimientos de beneficencia.

Real academia de medicina. Tuvo principio en 1732, y se aprobaron sus constituciones en 1734 erigiéndose en academia real con un sello particular. Por el reglamento general de las academias de medicina publicado en el año pasado de 1830 se ha dado a esta nueva forma. Comprende la provincia de Castilla la Nueva, y se compone de tres clases de socios, numerarios, agregados y correspondientes. Sus objetos son esmerarse en el cuidado de la salud pública, recogiendo observaciones y demás; favorecer los progresos de la ciencia médica, estimulando el trabajo de los individuos, etc.; asegurar por este y otros medios la estimación de los profesores, desempeñar las enseñanzas que se establecieren y los encargos de la real junta. Las tareas literarias consisten en experimentar   —201→   los nuevos remedios y específicos; censurar las Memorias y obras médicas; publicar programas; mantener correspondencias con otras academias, y formar la historia natural médica de España. Además ilustrar a las autoridades en todos los ramos de policía médica, como son construcción de hospitales, lazaretos, cárceles, cementerios, canales, nuevas poblaciones, iglesias, teatros, y otros. Las juntas ordinarias son cada quince días, y se celebran, en la sala de juntas del real hospital del Buen-Suceso.

Real academia de derecho de Fernando VII. Fue erigida en academia bajo otro nombre en 1763, y su objeto es el estudio de la jurisprudencia especulativa y práctica, dedicándose los jóvenes que concurren a ella a formar disertaciones sobre los más interesantes puntos de derecho público; explicar las leyes de nuestros códigos, cuyos ejercicios intermedian con los simulacros de toda clase de demandas para aprender el modo de enjuiciar en los tribunales del reino, así superiores como inferiores. Los años de esta academia, acompañando la asistencia a los bufetes de los abogados del colegio, equivalen a cursos de universidad para la reválida en el consejo. Está situada en el convento de trinitarios calzados, donde celebra sus juntas los martes y sábados de cada semana.

Real academia de jurisprudencia teórico práctica de Carlos III. Fundada en 1742, y erigida en academia real en 1773. Tiene por objeto las mismas ocupaciones que la de Fernando VII, porque están divididas en dos para mayor comodidad de los jóvenes, a quienes se puedan distribuir los trabajos con igualdad y método. Estas academias tuvieron varias   —202→   denominaciones; de santa Bárbara, de nuestra Señora del Carmen, y de la Purísima Concepción; pero su objeto siempre fue el mismo, y en las unas y en las otras se han visto producciones dignas de la luz pública. Está situada en el convento de padres trinitarios calzados, donde celebra sus sesiones los lunes y jueves.

Real academia de sagrados cánones, liturgia y disciplina eclesiástica. Fue erigida en academia real en 1773 con sello particular. Su objeto es el estudio del derecho canónico; el examen de la antigua y nueva disciplina de la Iglesia, y la aclaración de los puntos dudosos; el estudio de los concilios y obras eclesiásticas, y la adquisición de nuevos documentos; formar disertaciones, censurar obras, y demás. Anualmente se dan tres premios de medallas sobre asuntos que se disertan, teniendo opción a dos de ellos los académicos, y al tercero de la medalla de oro todos los literatos sin distinción. Se compone este cuerpo de jubilados de mérito, académicos de mérito, jubilados actuales, honorarios y correspondientes. Se reúne en el convento de trinitarios calzados los miércoles.

Real academia greco-latina. Este cuerpo literario, que antes llevaba el nombre de academia latina matritense, fue instituido en 1755 reinando Fernando VI, que la concedió varios privilegios y uso de sello particular. S. M. actual, que tanto se desvela por la pública ilustración, ha dado a este cuerpo una nueva vida con los estatutos aprobados por el real y supremo consejo de Castilla en el año próximo pasado de 1831, por los cuales ha unido a su instituto el idioma griego lo mismo que el latino, nivelándola con   —203→   las academias más célebres de Europa. Su objeto es promover la enseñanza de ambas lenguas, y excitar el buen gusto y la afición a unos estudios tan importantes; y los trabajos que han acordado y distribuido entre los ilustrados académicos, hacen esperar fundadamente que muy pronto eleven este cuerpo a un grado eminente de celebridad en la república literaria. Está facultada para examinar a todos los que aspiran al magisterio de las dos lenguas, y para presidir y juzgar las oposiciones a las cátedras de aquellas clases que vacan.

Se compone de 20 individuos numerarios, 20 supernumerarios, y un número indefinido de honorarios, sin más diferencia entre ellos que los segundos no pueden ser elegidos para los oficios académicos, y los terceros tienen voto en materias literarias solamente.

La academia se reúne todos los domingos por la mañanas, y el lugar interino de sus juntas es en la calle de las Huertas, casa sin número, pasada la del León.

Real academia de teología dogmático-escolástica. Fue establecida en 1754 con el objeto de dedicarse al estudio de la teología dogmática, moral y expositiva, a la escritura, concilios y santos padres. Los profesores y actuantes se ejercitan en disertar y argüir, perfeccionando los conocimientos que adquirieron en las cátedras. En dos domingos y días festivos de la cuaresma tienen públicamente sermones que predican los profesores para ensayarse en esta parte de sus obligaciones, la más interesante y principal. En las dominicas de verano tienen sus actos mayores. Está situada esta academia en santo Tomás, y celebra   —204→   sus ejercicios los martes de moral, los jueves de escolástica, y los domingos lección de media hora sobre un punto del dogma.

Reales estudios de san Isidro. Fueron fundados estos estudios públicos en 1625 por el rey don Felipe IV, y puestos a cargo de los padres de la Compañía de Jesús, que los dirigen de nuevo desde 1816, después de su restablecimiento. Hay en ellos cátedras de historia y disciplina eclesiástica, de metafísica y filosofía moral, de física experimental, de matemáticas, de lógica, de lenguas hebrea, árabe y griega, de humanidades y de latinidad en toda su extensión. Están situados en el mismo colegio imperial con huerta a la calle del Estudio.

Seminario de nobles. Fundado por el rey don Felipe V en 1725 para instrucción de los jóvenes nobles, poniéndole a cargo de los padres de la Compañía de Jesús. En esta casa se les recibe precediendo las pruebas de nobleza, y mediante una retribución de 4000. rs. anuales, se les da un trato sumamente esmerado, usando de uniforme particular. El célebre don Jorge Juan fue director en su tiempo de este establecimiento. Las materias de enseñanza son religión, calografía, humanidades, filosofía, geografía, cronología, historia, matemáticas, lenguas, dibujo, música, esgrima y baile. El edificio es uno de los mayores de Madrid, y con la comodidad necesaria para el objeto. Fue reducido a cuartel en tiempo de los franceses, y ha sido rehabilitado en 1828. Está contiguo a la puerta de san Bernardino.

Nuevo seminario. Estudios fundados por el rey   —205→   don Fernando VII en el año de 1828 a cargo de los padres de la Compañía de Jesús, en beneficio de los que no pueden hacer las rigurosas pruebas de nobleza que en el de nobles se exigen, y se proponen seguir todas las carreras de clases mayores. Está en la calle del duque de Alba, en un espacioso edificio propio para el objeto. La cuota que se paga es de 3500 reales anuales.

Colegio de santo Tomás. En este colegio hay cátedras de filosofía, cuatro años de instituciones teológicas, de Melchor Cano, de religión, moral y escritura, cuyas enseñanzas por reales decretos gozan del privilegio de incorporación a las universidades de Alcalá y Toledo, y sirven para graduarse. Está situado en la calle de Atocha.

Colegio de doña María de Aragón. El padre fray Alonso de Villaroel siendo rector de esta casa en 1679 puso en ella estudios públicos de teología escolástica y de filosofía, y por real decreto de S. M. la Reina nuestra señora continua disfrutando de la gracia que gozaba antes de la publicación del novísimo plan de estudios de que los cursos de humanidades y filosofía que en él se ganen, puedan incorporarse en cualquiera de las universidades del reino. Está situado en la plazuela de su nombre.

San Fernando, de padres esculapios. Fue fundado este colegio por los padres de la escuela pía en 1733, y en él enseñan principios de religión, primeras letras, gramática castellana y latina, retórica, poética, historia sagrada y profana, matemáticas, filosofía, lenguas francesa e inglesa, dibujo y música. Los discípulos son internos y externos, y los primeros usan de uniforme. El edificio es grande, y de su iglesia   —206→   ya hablamos en el capítulo VI. Está situado en la calle de la Hoz alta.

San Antonio Abad, de esculapios. La otra casa colegio de padres de la escuela pía, conocida por real seminario de san Antonio Abad; tiene enseñanza de las mismas materias que en su colegio de san Fernando. Los seminaristas no han de tener menos de seis años, ni más de doce, y por su alimento y enseñanza contribuyen con la cuota de diez reales. Fue fundado en 1755. El edificio es espacioso; y está situado en la calle de Hortaleza.

Nuestra Señora de los Desamparados. Fue fundada esta casa por la villa de Madrid hacia⁷⁹ los años de 1600 para la educación de los niños expósitos, y en el día está cometida su dirección al cuerpo colegiado de nobleza de Madrid, quien delega sus facultades en una comisión de su seno, cuyo nombramiento aprueba S. M. con el título de Real Junta de dirección del colegio. En este son admitidos los niños que se crían en la real Inclusa de esta corte, luego que las que se encargan de su lactancia los vuelven al establecimiento de donde los sacan, que es a la edad de siete años. También hay en dicho colegio la fundación que en 1766 hizo don Agustín de Torres, secretario de S. M., con objeto de que se sostuviesen veinte niños huérfanos sin necesidad de la cualidad de expósitos; pero esta se halla en suspenso, por no estar corrientes sus rentas desde la enajenación de fincas pertenecientes o obras pías. A dichos huérfanos y expósitos se les instruye en la doctrina cristiana, principios de civilidad y subordinación, leer, escribir, contar, gramática castellana, y elementos de geometría y dibujo, y luego se les procura su colocación   —207→   para algún arte u oficio en que puedan ganar su subsistencia con honradez. En este colegio hay capacidad para 800 niños. Está situado en la calle de Atocha.

San Ildefonso (vulgo los doctrinos). Es fundación de la villa de Madrid en 1478 para la educación de cuarenta niños huérfanos naturales de esta villa, a quienes se enseña a leer, escribir y contar, y luego se les pone a oficio de su voluntad: asisten a las procesiones y entierros, y sacan los números de la lotería. Está situado en la carrera de san Francisco.

Santa Bárbara. Fundó este colegio para niños músicos de la capilla real el rey don Felipe II en 1590. Está situado en la calle de Leganitos.

San Patricio, de los Irlandeses. Fundado en 1629 para irlandeses. Está situado en la calle del Humilladero.

Real colegio de san Carlos. Fundado por el rey don Carlos III en 1783 para la enseñanza de las ciencias médicas, y está bajo el gobierno de la real junta superior gubernativa de estos ramos. En él hay cátedras de anatomía y vendajes, de química, de fisiología, higiene privada, patología y anatomía patológica; de terapéutica, materia médica y arte de recetar; de afectos externos, operaciones y enfermedades de huesos, de medicina legal e higiene pública o policía médica; de obstetricia, las enfermedades propias del sexo, las de niños, y las sifilíticas; de afectos internos, agudos y crónicos; de clínica interna, de historia y bibliografía de la ciencia, que son los que componen los siete años literarios, contados cada uno de nueve meses desde 2 de octubre hasta 30 de junio siguiente; y fuera de dichos meses hay cátedra de dirección anatómica.

Los estudios para los cirujanos-sangradores están divididos en tres años en la forma siguiente: Primero: anatomía, elementos de fisiología e higiene. Segundo: elementos de terapéutica y materia médica, partos y enfermedades sifilíticas; y el tercero, vendajes, afectos externos, inclusos los de huesos y las operaciones, y elementos de cirugía legal. Estos estudios están en el hospital general y dirigidos por hábiles profesores que cuidan del adelanto de la ciencia. En el mismo edificio se halla un gabinete dividido en tres salas, donde se conservan modelos ejecutados en cera con una perfección admirable, que representan los partos, fetos, esqueletos, operaciones y demás necesario para el estudio; así como también una colección de esqueletos naturales, momias, fetos monstruosos, y otros objetos dignos de atención.

Real colegio de farmacia. Fue fundado por el Rey nuestro señor en 1815, y en él hay cátedras de física, química, historia natural, farmacia experimental, y materia farmacéutica. Está situado en la calle de san Juan a la de Hortaleza, en un gracioso edificio construido para este objeto en 1830.

Escuela de veterinaria. Fundada por el señor don Carlos IV en 1791, y según la nueva ordenanza aprobada por S. M. en 1827, hay un número de alumnos pensionados tanto paisanos como militares. Se enseña la veterinaria en toda su extensión, y además otros varios conocimientos. Los alumnos para entrar han de tener 16 años, y deben saber leer y escribir correctamente, y tener principios del herrado a la española. Los pensionistas han de pagar 4 rs. diarios. Este establecimiento está situado junto a Recoletos.

Escuela de comercio. Fue establecida en la real casa del consulado en Madrid en 1828. Esta escuela se divide en cuatro clases. La primera comprende la aritmética mercantil y la teneduría de libros, o sea cuenta y razón comercial y administrativa, cambios, arbitrajes, seguros, conocimiento y conversión de pesos y medidas, así nacionales como extranjeras. La segunda clase comprende las lenguas francesa e inglesa, y está dividida en dos cátedras; y la tercera y cuarta clases; que aún no se han establecido, han de comprender la historia del comercio, la geografía mercantil, la legislación y jurisprudencia comerciales, y el conocimiento práctico del comercio.

Cátedras de ciencias naturales. Han sido establecidas nuevamente en el real museo de ciencias naturales, y fueron fundadas por el rey nuestro señor en 1815; en él hay cátedras de mineralogía, zoología, química, física, astronomía, taxidermia, agricultura y botánica. Todas están establecidas en la casa gabinete de historia natural, menos las dos últimas que están en el jardín botánico.

Cátedra de la dirección de minas. La dirección de minas ha establecido una cátedra pública de química docimástica con su laboratorio. También tiene una biblioteca de las obras nacionales y extranjeras de la facultad y ciencias conexas, una colección geográfica de las producciones minerales del reino, y se ocupa en la formación de otras generales oritognósticas y geognósticas de todas las conocidas, y de la de un gabinete de dibujos y modelos de los instrumentos, máquinas y demás aparatos empleados en el laboreo de minas, a fin de que todo pueda ser consultado   —210→   por los que se dedican a este ramo. Finalmente, este establecimiento sostiene con sus fondos a diferentes jóvenes tanto en las reales minas de Almadén, como en las de Freyberg, en Sajonia, para que después puedan profesar la ciencia. Está situado en la calle del Florín, esquina a la carrera de san Gerónimo.

Cátedras de aplicación a las artes, establecidas en el real conservatorio de artes sito en la calle del Turco. Son tres; la primera comprende la geometría, mecánica y física; la segunda la delineación, y la tercera la química aplicada a las artes.

Últimamente por real orden de 30 de mayo del presente año se ha dignado S. M. mandar que se lleve a efecto el plan de enseñanzas de este real conservatorio con el objeto de propagar los conocimientos de la geometría mecánica, física y química que pueden servir para mejorar y adelantar las artes y fábricas inclusa la agricultura, poniendo estos conocimientos al alcance del mayor número de personas. Según este plan habrá tres géneros de enseñanza, a saber: particular, general y especial. La primera se subdivide en tres clases, comprensivas de aritmética, geometría y mecánica de las artes, química de las artes, y delineación o dibujo geométrico: la segunda en otras tres, a saber: nociones matemáticas y mecánica de las artes, dinamía y construcción, química de las artes, y delineación aplicada a la construcción. La tercera enseñanza tendrá por objeto ampliar o especificar la instrucción sobre ciertas y determinadas materias de más general aplicación o importancia, dando reglas y datos para el mejor acierto. Además se establecerán también otras enseñanzas   —211→   en las provincias donde S. M. tenga a bien señalar.

Escuelas de las nobles artes de san Fernando. Estas enseñanzas están a cargo de la real academia de su título. Se dividen en tres escuelas, en las cuales se enseña lo siguiente: en la de la calle de Alcalá matemáticas, modelo natural y yeso, arquitectura y geometría práctica; y en las del convento de la Merced y calle de Fuencarral, dibujo, perspectiva y adorno: las horas son por la noche; y por el reglamento son preferidos para entrar los niños que siguen algún oficio.

En dicha escuela de la calle de Fuencarral hay una clase de dibujo y adorno por las mañanas para señoritas jóvenes.

Cátedra de economía política. Fue establecida por la sociedad económica matritense, y está situada en la calle del Turco.

Real escuela de taquigrafía. Esta escuela del arte de escribir siguiendo la velocidad de la palabra fue confiada por S. M. al cuidado de la sociedad económica matritense, y está situada en la calle del Turco.

Real colegio de Sordo-mudos⁸⁰. Tuvo principio   —212→   en 1802 bajo el gobierno y dirección de la real Sociedad Económica, y en él hay seis plazas de número para pobres de solemnidad, y los demás colegiales pagan ocho reales diarios por su manutención y enseñanza. Los objetos de ésta son; leer, escribir, uso de la voz, gramática del idioma, religión, aritmética, principios de geometría y dibujo; y además a los colegiales de número se les dan los principios del oficio a que se inclinan. Está situado en la calle del Turco.

Real Conservatorio de Música María Cristina. Para la mejor enseñanza, fomento y progresos de la ciencia y arte de la Música así vocal como instrumental, se ha establecido de real orden, en el año pasado de 1830, un Conservatorio real de Música con el título de María Cristina, en obsequio de la Reina N. S., y bajo su protección augusta. Para el gobierno de este establecimiento y de la escuela de declamación, nuevamente unida a él, hay un director y varios empleados; y para la enseñanza hay un rector espiritual que instruye a los alumnos en la doctrina cristiana e historia sagrada; un profesor de primeras letras, otro de literatura castellana, dos de declamación, uno de baile y otro de esgrima; un maestro de composición, otros de piano y acompañamiento de violín y viola, de solfeo, de violonchelo, de contrabajo, de flauta, octavín y clarinete, de obué y corno inglés, de fagot, de trombón, de trompa, de clarín, de clarín de llave, de harpa y de lengua italiana; y para el departamento de alumnas una directora y otras señoras. Las clases de alumnos del Conservatorio son seis; gratuitos internos, auxiliados externos, pensionistas o contribuyentes de toda educación   —213→   internos, gratuitos de sólo educación facultativa externos, medios pensionistas de toda educación que sólo pagan alimento y equipo internos, y contribuyentes externos. Las cuotas que pagan los no gratuitos son, los de la clase tercera 4880 reales anuales, los de la quinta 2880, y los de la sexta 1440. Las plazas gratuitas son 24, mitad de cada sexo. El total de alumnos que hay en la actualidad pasa de doscientos. El Conservatorio expide además títulos de adictos de honor y facultativos.

El edificio que ocupa este establecimiento en la calle del Álamo es notable por su sencillez y espaciosidad, así como por los adornos de buen gusto con que se le ha embellecido para el decoro y cómoda distribución de todas las clases. Entre los objetos que le hermosean es muy digna de atención la capilla u oratorio y el teatro situado en el piso principal, donde caben cómodamente más de trescientas personas sentadas en bonitas banquetas forradas de paño azul. La pintura, tanto de la bóveda como del juego de decoraciones, es muy bella y obra del profesor don Lucas Gandaglia. Próximo al teatro hay un bonito gabinete delicadamente pintado por don José López y don Vicente Romero, y adornado con el mayor gusto, que sirve de pieza de descanso para SS. MM. cuando se dignan asistir a alguna función.

Los progresos que en el corto espacio que ha mediado desde su creación ofrece este establecimiento, han merecido la admiración y encomio de las personas más inteligentes nacionales y extranjeras (entre estas del célebre Rossini que le visitó en 1831); y convenido todos en el excelente método de enseñanza, como también en las brillantes disposiciones de   —214→   los alumnos, que acreditan lo general de nuestro país para este arte encantador.

Nuestra señora de Loreto. Fue fundado por el rey don Felipe II en 1581 para niñas huérfanas, habiendo también plazas para pensionistas, y a unas y a otras se da una educación esmerada. Está situado este colegio, con su iglesia pública, en la calle de Atocha.

Santa Isabel. Fundado en 1592: en él hay tres clases de colegialas, unas huérfanas, otras pensionistas que pagan, y otras hijas de criados del Rey. Está situado, con su iglesia y convento, de que ya hemos hablado en el cap. VI, en la calle de su nombre.

Nuestra Señora de la Presentación (vulgo Niñas de Leganés). Fue fundado por los años de 1603 para educación de niñas huérfanas, y también hay pensionistas. Está situado en la calle de la Reina.

La Inmaculada Concepción (vulgo el Refugio). Fue fundado en 1651 por la misma santa hermandad del Refugio, quien ha conservado su gobierno y patrocinio. Hay tres clases de colegialas, huérfanas pobres, pensionistas por el Rey, y pensionistas particulares, a todas las que se da una educación esmerada. Está situada en la Corredera baja de san Pablo.

Colegio de nuestra Señora de la Paz. Fue fundado en el año de 1663 para educación de las niñas expósitas, en donde son admitidas a los ocho años hasta que se establecen. En el día está reunido este colegio con la Inclusa, y situado en su casa calle de Embajadores.

Enseñanza mutua de niñas. Bajo la dirección y   —215→   cuidado de la Junta de Damas unida a la Sociedad económica, hay una enseñanza mutua de niñas situada en la calle de Preciados.

Enseñanzas de las Hijas de la Caridad. Calle de san Agustín, en su casa principal, y otra en el hospital de Incurables, además de la del colegio de la Paz, que también está a su cargo.

Escuelas de primeras letras de las diputaciones de los barrios. Según el plan y reglamento de escuelas de primeras letras de 1825, y arreglo hecho en su consecuencia por la Junta de Madrid con acuerdo de la de Caridad, hay diez escuelas de enseñanza de primera clase para niños y niñas pobres, una para cada cuartel; y el competente número de segunda clase de ambos sexos para los respectivos barrios, pagadas todas por las diputaciones de los mismos.

Academias y escuelas particulares. Hay además de esto en Madrid un gran número de escuelas de primeras letras, aulas de gramática castellana y latina, retórica y poética, colegios y casas de educación de ambos sexos; como también muchas academias de matemáticas, de geografía astronómica y política, comercio, idiomas, música, dibujo, baile, equitación, esgrima, etc.; todas con real aprobación.

Biblioteca Real. Felipe V estableció esta Real biblioteca, que se abrió por primera vez en 1712. Al principio sólo constaba de los libros que la regaló S. M., quien suplió todos los gastos, y en 1716 le dio reglamentos, y mandó que de cada impresión que se hiciese en sus reinos se había de colocar en ella un ejemplar. Al mismo tiempo la dotó competentemente,   —216→   y la dio constituciones para su gobierno nombrando un bibliotecario mayor y otros bibliotecarios. La biblioteca continuó aumentándose en el reinado de Carlos III con la numerosa y apreciable librería del cardenal Arquinto, que mandó comprar en Roma aquel monarca, y otros muchos dones. Igualmente fue enriquecida por el señor don Carlos IV con la librería del excelentísimo Muzquiz, embajador en París, y otras; y por último se ha visto notablemente aumentada en el reinado de nuestro monarca actual; por manera que en el día puede citarse como una de las más copiosas bibliotecas, como que posee unos doscientos mil volúmenes, con inmenso número de manuscritos.

Este establecimiento estuvo primero en la calle del Tesoro, pero su casa y aun la calle fueron arruinadas en tiempo de los franceses, con lo cual se trasladó la biblioteca a los claustros del convento de los trinitarios calzados. Restituido S. M. al trono, la hizo colocar en la casa que hoy sirve para las secretarías del despacho; y por último, en 1826 la destinó casa propia en la plaza de Oriente del Palacio, esquina a la calle de la Bola. En ella está colocada con toda comodidad y elegancia en muchas salas espaciosas y perfectamente pintadas y adornadas, con una estantería elegante, particularmente la que contiene los Santos Padres, que es toda de nogal con columnas de capiteles dorados, y perteneció al príncipe de la Paz. Es igualmente rica la de la Sala del trono que contiene el Museo de medallas. Este precioso monetario, acaso el primero de Europa, empezó a formarse con la famosa colección que fue del abate Rotlein de Orleans, y se ha aumentado en términos   —217→   de poseer en el día más de ciento y cincuenta mil medallas, griegas, romanas, godas, árabes, y de otras naciones en oro, plata, cobre y hierro, muchas de sucesos notables, y trabajo exquisito, y todas perfectamente clasificadas y colocadas. También hay una multitud de camafeos preciosos. Hay igualmente una pequeña, pero curiosa colección de antigüedades, como son mosaicos, lámparas sepulcrales, ídolos, estatuas de metal y curiosidades, como asimismo esferas, minerales y otros objetos. Los manuscritos (entre los cuales se conservan algunos muy preciosos árabes, griegos, latinos, etc., y varias obras inéditas) y los libros prohibidos, se custodian en las salas bajas en estantes cerrados y cubiertos, los primeros se facilitan solicitando por escrito el permiso del señor bibliotecario mayor; y los segundos presentando la licencia competente para leerlos. Para visitar el monetario es necesario también dirigirse al bibliotecario mayor. En una de las salas se conservan las ediciones más lujosas, ya por su impresión, ya por su encuadernación, y algunas por sus materias: en otra llamada del Índice se guarda el catálogo general por autores y títulos de obras, y allí hay que acudir para saber en dónde está colocada la que se desea.

Esta biblioteca está abierta al público todos los días desde las nueve a las dos, en los meses de mayo, junio, julio, agosto y setiembre; y desde las diez a las dos en los restantes, excepto las fiestas de guardar y las temporadas de estero y desestero, de limpieza y reconocimiento de libros, que se ejecuta en los 15 días últimos de mayo y octubre.

Biblioteca de san Isidro. Esta biblioteca pertenece   —218→   a los padres de la Compañía de Jesús, y el señor don Carlos III mandó que fuese pública: es muy rica, pues contiene multitud de libros, que se van aumentando a causa de la obligación que hay de entregarle un ejemplar de cada obra que sale a luz, lo mismo que a la Real. Esta biblioteca está abierta al público todos los días no feriados, desde las ocho a las doce en los meses de mayo, junio, julio, agosto, setiembre y octubre, y de nueve a una en los restantes, excepto las temporadas de estero y desestero en los quince primeros días de mayo y noviembre. Está situada en la misma casa del colegia imperial.

Biblioteca de la Academia de las tres nobles artes. Está situada en la misma casa de la academia, y contiene una regular colección de obras científicas, con una de las más preciosas colecciones de estampas. Está abierta para el público los martes, miércoles y viernes de cada semana, excepto los festivos y temporada de la canícula.

Biblioteca del gabinete de historia natural. En la misma casa y en el piso segundo que ocupa el gabinete de Historia natural hay una pequeña biblioteca que es pública los mismos días que aquel.

Bibliotecas reservadas. Antiguamente eran públicas las numerosas de los duques de Medinaceli, Osuna y el Infantado; como igualmente las de los conventos de san Martín, la Merced calzada, santo Tomás, carmelitas descalzos, trinitarios, san Felipe el Real, y otras, que por los notables deterioros que padecieron en la guerra de la independencia no han vuelto a franquearse al público.