Carta de Vicente Blasco Ibáñez a María Blasco del Cacho1
París, 10 de febrero de 1891
Transcripción
Vicente Blasco Ibáñez
-[fol. 1r]-
París, febrero 10/91
Mi querida Marujita:
Hasta hoy no te he podido escribir por encontrarme muy ocupado en la conclusión de un capítulo para mi obra.
Dentro de un instante voy a empezar la carta para El Correo que también llevo retrasada y aprovechando este espacio de tiempo libre te escribo para decirte una vez más lo mucho remuchísimo que te quiero y enviarte un besito aunque solo sea en pensamiento.
Me alegro mucho de que Pilar vaya a tu casa y Amalia y Teresita también. Así te distraerás que bien lo necesitas y estaréis alegres.
Yo cada día estoy aquí más triste y aburrido y tengo -[fol. 1v]- cada vez más ganas de que esto acabe pronto porque si no voy a caer enfermo.
A las ocho de la noche la mayor parte de los días me meto en casa y por no aburrirme me estoy calentando al fuego o escribiendo hasta las tres o las cuatro de la mañana que me entra el sueño, pues yo no sé aquí qué tengo que nunca siento ganas de dormir.
A casa Estévanez voy algunas noches por distraerme pero no voy seguido pues aunque me reciben muy bien temo siempre estorbar y ser pesado.
Además ya conoces tú mi carácter y sabes que no me gusta hacer visitas.
Cualquier día de estos te enviaré un tomo de poesías políticas muy bonitas que ha publicado aquí D. Nicolás Estévanez y allí podrás ver su -[fol. 2r]- retrato.
Además su hijo está ahora estudiando para examinarse así es que no puedo ir con él a paseo a ninguna parte.
El Carnaval aquí es más tonto que en Valencia fuera de los bailes pues por la calle apenas si van media docena de máscaras. En fin, ya lo verás en mi carta del Correo que voy inmediatamente a escribir.
Adiós nenita mía. Dispénsame que no te escriba más pero a la otra vez lo haré más largo.
Da expresiones a todos, recuerdos a tu mamá y tú recibe un abrazo de quien más te quiere en el mundo, de tu
Vicente
-[fol. 2v]-