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El indulto general

Auto sacramental alegórico


Pedro Calderón de la Barca



Jesús, María, José



PERSONAS
 

 
LA CULPA.
EL MUNDO.
ADÁN.
CAÍN.
ABEL.
DAVID.
SALOMÓN.
ABRAHAM.
DIMAS.
GESTAS.
ÁNGEL.
LA JUSTICIA.
LA MISERICORDIA.
EL PRÍNCIPE.
LA ESPOSA.
MÚSICA.
Acompañamiento.




 

Dentro la MÚSICA y sale la CULPA como oyendo a lo lejos.

 
MÚSICA
¿Cuándo, Señor, será el día
de aquel gran prometimiento...
CULPA
«¿Cuándo, Señor, será el día
de aquel gran prometimiento...»
MÚSICA
...en que cielo y tierra unidos... 5
CULPA
«...en que cielo y tierra unidos...»
MÚSICA
...en admirable comercio...
CULPA
«...en admirable comercio...»
MÚSICA
...el cielo en la tierra,
la tierra sea cielo? 10
CULPA
«...el cielo en la tierra,
la tierra sea cielo?»
¿Qué nuevo cántico es,
qué nuevo ritmo, qué nuevo
himno que, para que sea 15
nuevo hoy todo, dando al eco
en suavidades de canto
consonancias de lamento,
desde lo profundo clama
una y otra vez diciendo... 20
ELLA y MÚSICA
...que en admirable comercio
el cielo en la tierra
la tierra sea cielo?
CULPA
Pero, ¿qué me desconfía,
cante o llore, el día que preso 25
en la cárcel del pecado
al género humano tengo?
Cárcel del pecado dije,
no sin soberanos textos
que lo apoyen: a Isaías 30
le dio el Señor, sobre el pueblo,
autoridad de librar
a los que estaban de asiento,
en la cárcel de las nieblas;
Job dijo en sus sentimientos 35
que Dios le tenía ceñido
en la cárcel de sí mesmo;
cárcel espiritual, dijo
allá en su epístola Pedro;
y Juan en su Apocalipsis, 40
que el fiero Satán fue suelto
de la cárcel del abismo;
y pues, para que un concepto
pueda explicarse a dos luces,
no en vano asentado dejo 45
ser la cárcel el pecado,
su fábrica el universo,
el Mundo el alcaide suyo
y el género humano, el preso.
¿Qué mucho, siendo la Culpa 50
agente fiscal de reos,
que cuando él clama piedades
ella apellide tormentos?
¡Ah de la cárcel del Mundo!
¡Ah del pavoroso centro, 55
en que delincuentes yacen,
no sólo cuantos nacieron,
porque nacieron, sino
cuantos por ser herederos
de aquel original crimen, 60
infestados se adurmieron
a la sombra de la muerte,
en el más profundo sueño
de la vida!
 

(Sale el MUNDO.)

 
MUNDO
¿A qué fin, Culpa,
hoy, de tu siempre severo 65
semblante, el ceño arrugado
tan segunda vez es ceño,
que de la hidra sobre hidra
cumplido tray el proverbio,
a estos calabozos llamas; 70
en cuyo lóbrego centro
todos, ya tú lo dijiste,
yacen, mayormente aquellos
que de culpas personales
han fabricado sus hierros, 75
sin excepción de personas
pues desde el cayado al cetro,
desde la toga al bastón
y desde el noble al plebeyo,
todos aherrojados viven 80
en mí? Dígalo el salterio
donde, en pública vindicta
de naciones y de pueblos,
afirma que se han de hallar
reyes y jueces a un tiempo 85
ligados de pies y manos
al grillo y cadena; y siendo
así, que están a mi cargo,
¿a qué fin, a decir vuelvo,
vienes hoy tan asustada? 90
CULPA
A fin de no sé qué acento,
sólo de mí percebido,
que se ha escuchado allá dentro.
¿Cuándo el día será, clama,
que en admirable comercio 95
el cielo y la tierra unidos
él sea tierra y ella cielo?
Esta nueva entonación,
entre otras sombras y lejos,
de que misterioso está 100
el sacro volumen lleno,
por ser la más adecuada
al equívoco concepto
de que cielo y tierra se unan,
me ha traído al pensamiento 105
la visión de aquella escala
que, uniendo sus dos extremos,
por ella, ¡tiemblo al decirlo!,
iban bajando y subiendo
tropas de alados querubes, 110
significándome en ellos
al Hombre cuando subían,
cuando bajaban al Verbo.
Con esta aprehensión, ya sea
o pasmo o delirio, intento 115
cautelarme, para cuando
Dios, movido de su ruego,
cumpla el esperado día
de aquel gran prometimiento,
que el cántico de Habacú 120
les profetiza diciendo
que del Austro vendrá un rey,
que haciendo piadoso acuerdo
de su gran misericordia,
disuelva su captiverio. 125
Dirásme tú agora, ¡oh Mundo!,
¿cómo cautelar pretendo
mi temor, si de su grande
misericordia habla el mesmo
cántico? Y diréte yo 130
que, si en ese y otros versos
dice el texto que es su suma
misericordia en eterno,
también en sus versos dice
que visitará severo, 135
sin que su misericordia
se desaproveche en ellos,
con la vara y el azote,
la iniquidad del protervo.
Y siendo así, que no puede, 140
por ir, en rey tan excelso,
a más su misericordia
venir su justicia a menos,
¿quién duda que haya de hacer,
de su parte el Real Consejo 145
la visita general
de la Pascua del Cordero
el día que residencie
la cuenta de los talentos?
Conque, para prevenirme 150
a que halle en sus procesos
tan sustanciadas las causas,
los cargos tan manifiestos,
que conozca la justicia
sin misericordia de ellos, 155
vengo a requerir la lista
de los criminales pleitos
en que he de fiscalizar.
Y así, vamos recorriendo
las estancias para que 160
sea, cuando llegue el tiempo,
memoria de sus olvidos
el libro de mis acuerdos.
MUNDO
Siendo tú la querellante
parte, a cuyo pedimiento 165
presos están (pues sin ti,
Culpa, no estuvieran presos),
y siendo yo el Mundo, que
en mi confianza los tengo,
mientras la muerte no traiga, 170
(ministro tuyo a quien dieron
vara de Corte tus iras),
de soltura el mandamiento,
para que del mundo salgan,
o ya al castigo, o ya al premio, 175
mal impedirte podré
ese reconocimiento
que hacer intentas. Aquel
que miras, campo desierto,
sin más población que chozas, 180
al sol y al agua y al viento,
es el de Adán, donde habitan
él y sus hijos y nietos
en ley natural, ceñida
solamente a dos preceptos: 185
de amar a Dios más que a sí
y a todos como a sí mesmo;
pero, aunque suaves ambos,
como infestados nacieron,
del quebrantamiento de uno 190
pasó su quebrantamiento
a los dos; conque, mandadas
juntar las causas, se vieron
cómplices de inobediencias,
homicidios, adulterios, 195
robos y usuras; y, en fin,
idólatras sacrilegios;
bien, que no desconfiados
de que vendrá su remedio,
fiados en que arrepentido 200
Adán de su error primero,
con sus familias está
a todas horas diciendo:
 

(Ábrese el carro primero; se ven en él a ADÁN, CAÍN y ABEL.)

 
ADÁN
Pequé, Señor, y aunque infinito ha sido,...
MÚSICA
...pequé, Señor, y aunque infinito ha sido,... 205
ADÁN
...por tu infinito objeto, mi pecado,...
MÚSICA
...por tu infinito objeto, mi pecado,...
ADÁN
...que temo en tu justicia ser perdido,...
MÚSICA
...que temo en tu justicia ser perdido,...
ADÁN
...espero en tu bondad ser perdonado. 210
MÚSICA
...espero en tu bondad ser perdonado.
ADÁN
Todo el género humano, contraído...
MÚSICA
Todo el género humano, contraído...
ADÁN
...en mi deuda, tras mí truje obligado.
MÚSICA
...en mi deuda, tras mí truje obligado. 215
ADÁN
Duélate, que no puede mi delito...
MÚSICA
Duélate, que no puede mi delito...
ADÁN
...lo infinito pagar sin lo infinito.
MÚSICA
...lo infinito pagar sin lo infinito.
CAÍN
Inútilmente porfías, 220
pues no son más tus lamentos
que dar al mar lo llorado
y lo suspirado al viento.
ABEL
No digas eso, Caín,
que el llanto es llave del cielo, 225
y quien abre sus candados
también abrirá los nuestros.
CAÍN
Eso será tarde, o nunca.
ADÁN
Al humano entendimiento
no le toca saber más 230
de lo que le diga el tiempo;
aprovecharle le toca.
Y así, para que en provecho
nuestro resulten sus frutos,
valgámonos, hijos, de ellos. 235

  (A CAÍN.) 

Tú, que dado a la labranza
de la tierra, cuyo aumento,
arrojándosele en granos,
vuelve en espigas el feudo,
ofrece a Dios sus primicias, 240
que es justo agradecimiento
el darle de ciento uno
pues Él da por uno ciento.

  (A ABEL.) 

Tú, que al pasto de las crías
más aplicado te veo 245
que a la labor de los campos,
de aquesos rebaños bellos,
que en océanos de nieve
cubren los prados amenos,
y en bruta esmeralda, Abel, 250
les dan de balde el sustento,
ríndele también a Dios
piadosos ofrecimientos,
que si en ésta son primicias
en otra edad serán diezmos. 255
ABEL
De mis ganados, señor,
iré a escoger el cordero
que en ellos dé más sin mancha
su cándido vellón terso
para ofrecérselo a Dios 260
en sacrificio, creyendo
que símbolo, desde ahora,
de algún alto sacramento
a ser venga.
CAÍN
Si a eso va,
también yo en trigo te ofrezco 265
darle, señor, de mis mieses
algunas; pero las menos
granadas, que no he de darle,
costándome al sol y al hielo
afanes de todo el año 270
a su destemplanza expuesto,
lo mejor, cuando lo habré
menester para mí mesmo.
 

[Vanse CAÍN y ABEL.]

 
ADÁN
Id, pues, que yo quedaré
pidiendo a Dios sean acetos 275
uno y otro sacrificio
hasta que logre mi anhelo.
ÉL y MÚSICA
Que el cielo en la tierra,
la tierra sea cielo.
CULPA
Dejemos la natural 280
ley en su estado primero,
que no quiero saber de ella
más de que, si en ella temo
ver que hay cordero inmolado,
también hay para consuelo 285
dañado trigo; con que,
si en uno y otro hay misterio,
también habrá en uno y otro
castigo a unos, si a otros premio.
Vamos, pues, más adelante, 290
Mundo.
MUNDO
Si de mi primero
tránsito, primera edad
y primera ley, tan presto
pasar pretendes (en fe
de que en fantásticos cuerpos 295
de alegóricas figuras
no se da lugar ni tiempo)
hasta dar con la segunda
ley ven conmigo; y supuesto
que, en los cómputos del siglo, 300
fue de Adán a Noé el entero
círculo de la primera
edad del mundo, pasemos,
desde Noé hasta Abraham
la segunda transcendiendo, 305
de Abraham a Moisés. Vamos
a la tercera.
CULPA
Primero
di ¿por qué la edad segunda
pasas sin hacerme acuerdo
de qué presos hay en ella? 310
MUNDO
Porque, en aquese intermedio
que hay desde Adán a Moisés,
se inundó todo el terreno
de la gran cárcel del Mundo,
conque no me quedó preso 315
en ella, puesto que todos
ya sentenciados salieron;
y así, por sentencia dada
en cosa juzgada, dejo
su edad aparte, y pasando 320
a que sólo se eximieron
del diluvio ocho personas
en no sé qué retraimiento
que sobre mí elevó el agua
a las regiones del viento, 325
voy a que ellos fabricaron
segunda cárcel de nuevo
para la segunda ley,
que en los incultos desiertos
de Sinaí promulgó, 330
esculpida en mármol terso,
Moisés; conque en natural
y escrita, los dos preceptos,
a diez dilatados, vuelven
a ser los diez los dos mesmos. 335
En esta ley se labró
nuevo cuarto; y así vemos,
pasando desde Abraham
a tercera edad, el tiempo
hasta David, suntuosos 340
edificios, y entre ellos
la gran torre de David,
donde siguiendo el concepto
de tu idea, también yace
entre sus gentes, diciendo: 345
 

(Ábrese el segundo carro, y se ven DAVID y SALOMÓN.)

 
DAVID
Inmenso Dios, de mí te compadece...
MÚSICA
Inmenso Dios, de mí te compadece...
DAVID
...al verme envuelto en mi mortal discordia,...
MÚSICA
...al verme envuelto en mi mortal discordia,...
DAVID
...no según que mi culpa lo merece,... 350
MÚSICA
...no según que mi culpa lo merece,...
DAVID
...sino según tu gran misericordia,...
MÚSICA
...sino según tu gran misericordia,...
DAVID
...y según el gran número que ofrece...
MÚSICA
...y según el gran número que ofrece... 355
DAVID
...de conmiseraciones la concordia.
MÚSICA
...de conmiseraciones la concordia.
DAVID
De tu piedad, del libro de los días,...
MÚSICA
De tu piedad, del libro de los días,...
DAVID
...borra, Señor, iniquidades mías. 360
MÚSICA
...borra, Señor, iniquidades mías.
DAVID
Con amplia gracia, pues tu gracia ha sido
la viva fuente de inmortal pureza,...
MÚSICA
Con amplia gracia, pues tu gracia ha sido
la viva fuente de inmortal pureza,... 365
DAVID
...lava las manchas en que me ha tenido
el lodo vil de mi naturaleza,...
MÚSICA
...lava las manchas en que me ha tenido
el lodo vil de mi naturaleza,...
DAVID
...no porque yo lo tengo merecido, 370
sino porque conozco mi flaqueza.
MÚSICA
...no porque yo lo tengo merecido,
sino porque conozco mi flaqueza.
DAVID
Y confieso que siempre conjurado
va contra mí, conmigo mi pecado. 375
MÚSICA
Y confieso que siempre conjurado
va contra mí, conmigo mi pecado.
DAVID
Pequé, Señor, pequé contra ti sólo.
CULPA
Ve adelante, que no quiero
que encienda mi ira la blanda 380
voz de su arrepentimiento.
MUNDO
Oye antes a Salomón.
SALOMÓN
¿Hasta cuándo tus extremos
han de durar?
DAVID
Hasta cuando
Dios se compadezca de ellos. 385
SALOMÓN
Todos ese feliz día,
Señor, esperamos, pero
no llorando, sino dando
gracias; ¿no has dicho tú mesmo
que con alegría sirvamos 390
a Dios y que le alabemos
con júbilos y con himnos,
con tímpanos y salterios?
DAVID
Sí, que el día del Señor
también es culto el contento, 395
como el contento sea culto;
mas, ¡ay de quien un pequeño
contento arrastró a mayor
precipicio y...! Pero esto
ya más es para llorado 400
que dicho. Lo que te advierto
es que te guardes de ver,
porque es la vista veneno
del alma tan poderoso
que ha menester por remedio... 405
ÉL y MÚSICA
...que el cielo en la tierra,
la tierra sea cielo.
SALOMÓN
Bien me aconsejas, mas no
sé si (por más que los cielos
me favorezcan, no sólo 410
con la herencia de tus reinos,
pero con los demás dotes
sobre la corona y cetro,
de infusa sabiduría),
podré vencer el afecto 415
que a idólatras hermosuras
arrastra mi entendimiento.

 (Vase.)  

CULPA
Bien me dijiste en que oyera
a Salomón, pues con eso,
si a uno aflige su pecado, 420
a otro lleva su deseo
al cuarto de las mujeres
que también presas tenemos,
sin que a la hermosura valga
el sagrado del respecto; 425
y ya que de aquí pasamos,
¿qué fábrica es la que veo
allí, que empezada y no
perficionada, en diseños
de lo que espera ser, sólo 430
tiene echados los cimientos?
MUNDO
Un cuarto, que aún no labrado
está, por falta de medios;
pero no por eso deja
de tener en un funesto, 435
hondo calabozo a cuantos,
en fe de Abraham, creyendo
que le reedifique aquel
deseado Príncipe excelso,
con los muertos reputados, 440
esperan su advenimiento:
profetas y patriarcas
son.
CULPA
Abre su obscuro centro
que para escribir sus causas
me importa reconocerlos; 445
abre.
MUNDO
Sí haré.
VOCES

 (Dentro.) 

¡Ah de la cárcel!
MUNDO
¿Quién llama?
VOCES

 (Dentro.) 

Allá van dos presos.
MUNDO
La ronda de la justicia
presos tray. Veamos primero
quién son y por qué los tray. 450
VOCES

 (Dentro.) 

Por ladrones bandoleros,
salteadores de caminos.
MUNDO
Entren pues, que el Mundo expuesto
está en recebir a cuantos
a él vengan.
 

(Salen DIMAS y GESTAS de bandidos.)

 
DIMAS
¡Valedme, cielos,
455
que ya sé que mis insultos
a morir me trayn!
GESTAS
¡Infiernos,
valedme, que por los míos
también sé que a morir vengo!
MUNDO
Para asentar la partida, 460
de que ya a mi cargo os tengo,
decid vuestro nombre.
DIMAS
Dimas.
MUNDO
Decid vos también el vuestro.
GESTAS
Gestas.
MUNDO
¿Por qué vos venís?
DIMAS
Por delitos que confieso 465
haber cometido.
MUNDO
¿Vos?
GESTAS
Por otros dicen, mas niego
haberlos yo cometido.
MUNDO
De modo que, ¿vos confeso
venís y vos negativo? 470
Mas, ¿quién me mete a mí en eso,
si eso ha de decir la causa
y al Mundo, sólo teneros
hasta que se vea, le toca?
Venid, pues, porque, en abriendo 475
este calabozo, en él
aseguraros pretendo.
CULPA
Haces bien, facinerosos
tales en su obscuro centro
es justo que estén.
DIMAS
¡Ay, Culpa,
480
en qué desdicha me has puesto!
CULPA
¿Luego me conoces?
DIMAS
Sí.
CULPA
Más valiera que no; pero,
aun conocida, seguirte
sabré hasta el último aliento. 485
Llegad, pues, llegad entrambos
a esos umbrales.
DIMAS
Lleguemos
dónde nuestra Culpa, Gestas,
nos lleva.
GESTAS
Llega tú, puesto
que la conoces; que yo 490
ni la conozco ni quiero
conocerla.
CULPA
Yo te haré
que me conozcas bien presto.
Mundo, abre esa puerta.
MUNDO

 [Intenta abrir la puerta.] 

Ya
lo procuro, mas no puedo 495
abrirla.
CULPA
¿Por qué?
MUNDO
Porque,
aunque la busco, no tengo
su llave yo en mi poder.
CULPA
¿Cómo?
MUNDO
Como no la encuentro
entre cuantas, de infinitos 500
tristes calabozos, tengo,
sepulcros de otros.
CULPA
Aparta
que yo la romperé. ¡Cielos!,
¿a dónde llegó la Culpa,
desde el instante primero 505
de los mortales, que no
encontrase el paso abierto?

 (Hace que quiere abrir la puerta y no puede.) 

Tampoco yo puedo abrirla,
que sus cerrojos de hierro
son, sus aldabas de bronce, 510
y sus candados de acero,
imposibles de que pueda
yo, ni abrirlos ni romperlos.
 

(Dentro instrumentos.)

 
MUNDO
Aún no es esa la mayor
confusión, sino que, dentro, 515
Abraham con sus familias,
de Adán y David siguiendo
la aclamación, también dice
en lastimosos acentos...
ABRAHAM

 (Dentro.) 

¡Cuándo, Señor, será el día 520
que abra la tierra su centro
y produzca al Salvador!
MÚSICA

 (Dentro.) 

¡Cuándo, Señor, será el día
que abra la tierra su centro
y produzca al Salvador! 525
DIMAS
¡Qué no esperado consuelo
en mí han causado estas voces!
GESTAS
En mí, ¡qué aborrecimiento!
CULPA
¡Qué ira en mí!
MUNDO
Y en mí, ¡qué pasmo!
ABRAHAM

 (Dentro.) 

¡Cuándo en blando rocío tierno 530
darán las nubes al justo!
MÚSICA

 (Dentro.) 

¡Cuándo en blando rocío tierno
darán las nubes al justo!
DAVID
¡Cuándo el paraninfo bello,
que ha de dominar la tierra, 535
consolará al universo!
MÚSICA
¡Cuándo el paraninfo bello,
que ha de dominar la tierra,
consolará al universo!
CULPA
Cuando a morir, sin morir, 540
se apure mi sufrimiento,
viendo que, unidas las voces
de Adán y David al seno
de Abraham, juntas en él,
repiten todas a un tiempo... 545
TODOS y
MÚSICA
¡Cuándo, Señor, será el día
de aquel gran prometimiento,
en que el cielo y tierra unidos
en admirable comercio,
el cielo en la tierra, 550
la tierra sea cielo!
 

(Ciérranse los carros.)

 
MUNDO
¡Qué mucho que tú te admires,
si se admira el Mundo, oyendo
que de esas confusas voces
repite lejano el eco...! 555
 

(Canta dentro el ÁNGEL.)

 
ÁNGEL
...pax hominibus in terris,
et gloria in excelsis Deo.
CULPA
¿Al hombre en la tierra paz
y gloria a Dios en el cielo?
¿Qué voces son éstas, Mundo, 560
tan contra el uso del eco,
que oyendo unas, vuelve otras
articuladas del viento?
MUNDO
No sé, no sé; porque sólo
sé que su dulce concento 565
suena en el aire, y que yo,
en mis ámbitos, no tengo
al dueño que las pronuncia.
CULPA
Pues, ¿quién puede ser su dueño,
que ni la Culpa ni el Mundo 570
le conocen?
MUNDO
Más atentos
oigamos, por si otra vez
se repiten y podemos
algo entender.
DIMAS
¿Has oído
jamás más dulces acentos? 575
GESTAS
¿Qué acentos? Que yo no oigo
sino gemidos y estruendos.
DIMAS
¿Cómo, cuando a cielo y tierra
dicen voces y instrumentos...
ÁNGEL y
MÚSICA
...pax hominibus in terris, 580
et gloria in excelsis Deo.
CULPA
En pie se queda mi duda.
Mucho escucho y nada entiendo.
MUNDO
La mía más adelante
pasa, pues pasa su extremo 585
a delirio, a frenesí,
a ilusión, a devaneo,
a pasmo, a letargo; pues,
dudando el mundo y creyendo,
ni creyendo ni dudando, 590
es enigma de sí mesmo.
CULPA
¿Qué hará la Culpa si al Mundo
en tal confusión ha puesto?
MUNDO
Lo que el Mundo: ir a inquerir,
los rumbos del sol siguiendo, 595
quién el músico es de tanto
armonïoso portento.
CULPA
Espera, ¿cómo en la cárcel,
sin encerrar, a unos presos
tan incorregibles dejas? 600
MUNDO
Seguros quedan, supuesto
que si en la cárcel entraron
por la puerta de ese viejo
edificio y tú los trays
a la puerta de este nuevo, 605
que no podemos abrir,
dejando a los dos en medio,
seguros los dejo, Culpa,
pues entre puertas los dejo.
CULPA
¡Oh, no sea que edificio 610
cerrado uno, otro aún no abierto,
uno nuevo y viejo otro
pasen, sincopando el tiempo,
a ser sombras de algún alto
Viejo y Nuevo Testamento! 615
MUNDO
¿De qué lo temes?
CULPA
De que
otra vez a dudar vuelvo...
DIMAS
Yo, a alegrarme...
GESTAS
Yo, a afligirme...
MUNDO
Yo, a estar absorto y suspenso...
LOS CUATRO
...oyendo que vuelven 620
a decir los ecos...
ELLOS y
MÚSICA
...gloria a Dios en las alturas
y paz al hombre en el suelo.
 

(Con esta repetición se van los cuatro, y sale el ÁNGEL, cantando en un bofetón, que dé vuelta al carro.)

 
ÁNGEL

 (Canta.) 

¡Gloria a Dios y paz al hombre
publiquen al universo 625
el sol con estrellas, el mar con espumas
la tierra con flores, con auras el viento!
¡Gloria a Dios y paz al hombre
sigan, tras los elementos,
sin sañas las fieras, las plantas con frutos, 630
con voces las aves y el pez con silencios!
¡Gloria a Dios y paz al hombre
de que el prometido tiempo
se acerca de aquel comercio admirable
que exalte lo humilde y humille lo excelso! 635
Dígalo yo, que del alto
Olimpo del sol desciendo
nuncio, enviado a tratar que se vean
lo eterno ceñido, abreviado lo inmenso;
a cuya causa, el divino 640
trocado al humano imperio,
batiendo las alas, el orbe discurro,
porque de todos repita el consuelo,
en felices albricias de ver
que, el cielo en la tierra, la tierra sea cielo. 645
TODOS y
MÚSICA
¡Gloria a Dios en las alturas
y paz al hombre en el suelo!
 

(Con esta repetición pasa el ÁNGEL, y salen el PRÍNCIPE, mirando un retrato, la JUSTICIA, dama, con espada, y la MISERICORDIA, con un ramo de oliva.)

 
PRÍNCIPE
Bella imagen que copié
del ejemplar de mi idea
para que tu gracia sea 650
el símbolo de mi fe,
de cuantos triunfos logré
el día que, en su heredad,
la suprema majestad
de mi padre me entregó 655
reinos y gentes que yo
rigiese a mi voluntad,
en ninguno puse más
(¡oh humana naturaleza!),
los ojos que en tu belleza, 660
que no olvidaré jamás;
tan en mi memoria estás
desde el punto que te vi,
que a mi ser tu ser uní,
con tan suave lazo fuerte 665
que me ofreceré a la muerte
por darte la vida a ti;
y pues sois en este día
(que aguardo ver su concordia)
Justicia y Misericordia, 670
polos de la monarquía
que de mí mi padre fía,
decidme, aunque yo lo sé
sobre dos leyes, ¿de qué
ley necesita un gobierno 675
para establecer eterno
los méritos de su fe?
Que ya que de su grandeza
dueño soy, consultar quiero
(pues obras de gracia espero 680
medir, para más fineza,
con las de naturaleza)
de qué una gran monarquía
consta desde el primer día
que se funda, porque en todo 685
nos ajustemos al modo
de mística alegoría.
MISERICORDIA
Una república bella
consta, Señor, de la gente;
y así, es lo más conveniente 690
que a poblalla y poseella
nazcan vasallos en ella,
que comercien en su abismo.
PRÍNCIPE
Suceda en ésta lo mismo,
pues cuantos a ella vendrán 695
Misericordia, podrán
renacer en el Baptismo.
JUSTICIA
Nacer, Señor, no es bastante,
si no se sigue al nacer
a perfecta edad crecer 700
y ser hombre el que era infante;
porque con fervor constante
confirme en su corazón
la ley y la religión
que le des.
PRÍNCIPE
Justicia es;
705
y, así, tú podrás después
darle la Confirmación.
MISERICORDIA
Nacer, Señor, y crecer
a perfecta juventud
no es la robusta salud 710
que el mortal ha menester;
y, así, le importa tener
remedios a la dolencia
de una y otra intercadencia.
PRÍNCIPE
Misericordia, a esa ruina 715
saludable medicina
le dará la Penitencia.
JUSTICIA
Aunque ella le ha de curar,
será fuerza que le des
convalecencia después, 720
en que pueda desechar
las reliquias que dejar
suele el mal.
PRÍNCIPE
De esa aflición,
Justicia, supla otra acción
la extrema necesidad 725
que deje la enfermedad
con nombre de Extrema Unción.
MISERICORDIA
Ves aquí, Señor, que atento,
nace el hombre, vive y crece,
que enferma y que convalece, 730
¿qué hará sin el alimento
que le sirva de sustento?
Pues, el más fuerte varón,
sin esta vital porción,
perecerá.
PRÍNCIPE
Pan de vida
735
todos, para su comida,
tendrán en la Comunión.
JUSTICIA
¿Qué importará que nacido
se vea el hombre, confirmado,
convalecido, curado 740
y, en efecto, mantenido,
si en justicia y paz regido
no está de algún tribunal,
que le gobierne en igual
ley, en que habrá menester 745
juez supremo?
PRÍNCIPE
Ese ha de ser
el Orden Sacerdotal.
MISERICORDIA
Aunque todos lograr puedan
altos favores, ningunos
vendrán a ser, como unos 750
en otros no se sucedan.
Monarquías que se heredan
de una en otra duración
las más políticas son.
PRÍNCIPE
De esa verdad, testimonio 755
será dar el Matrimonio
ligítima sucesión;
ésta espero yo lograr
con tan general consuelo
de todos que, ni del cielo 760
las estrellas, ni del mar
las arenas, numerar
puedan la gran población,
que de una en otra región,
coronada de laureles, 765
venga a ser unión de fieles;
a cuya causa, elección
tengo hecha ya de una esposa
tan perfecta y soberana
que en ella la idea humana, 770
naturaleza dichosa,
se cifra, tan toda hermosa
como veis en su ejemplar;
y así, traté de enviar
al vasallo más fiel, 775
para que en mi nombre él
me fuese a capitular.
JUSTICIA
¿Pues hubo dificultad
en que la elegida fuese?
PRÍNCIPE
No, que yo quise que hubiese 780
mérito en su voluntad,
resignada en la verdad
de mi amor.
 

(Sale el ÁNGEL.)

 
ÁNGEL
Bien de ese amor
logrado traigo el favor.
PRÍNCIPE
¿Cómo?
ÁNGEL
Como a tu propuesta,
785
sólo escuché por respuesta:
«esclava soy del Señor».
PRÍNCIPE
Con esa resignación
que la más pura belleza
que vio la naturaleza 790
dio en su nombre a mi pasión,
en alas del corazón,
inspiradas de mi fe,
y en su traje, pues ya sé
que en cortesanos amores 795
los disfraces son primores,
yo mismo en persona iré,
en muestras de mi afición,
hasta su tierra por ella,
a recibilla y traella 800
a donde la aclamación,
lealtad y veneración,
gloriosamente festiva
de mis gentes la reciba.
TODOS
Todos, desde luego, en muestra 805
diremos de la fe nuestra
que felices siglos viva.
PRÍNCIPE
Viva, y publicad por toda
la capacidad que encierra
la redondez de la tierra, 810
la felicísima boda
a que mi ser se acomoda.
ÁNGEL
En voz de pregón que, altiva,
el tiempo en bronces escriba,
toda la naturaleza 815
publique que igual belleza

  (Cantado.) 

reine, goce, triunfe y viva.
MÚSICA
En voz de pregón que, altiva,
el tiempo en bronces escriba,
toda la naturaleza 820
publique que igual belleza
reine, goce, triunfe y viva.
ÁNGEL

 (Canta.) 

Sepa el Mundo que el Deseado,
príncipe por apellido,...
 

[Sale el MUNDO.]

 
MUNDO
Sepa el Mundo que el Deseado 825
príncipe por apellido,...
ÁNGEL

 (Canta.) 

...con la esposa que ha elegido,
donde la Culpa no ha entrado,...
 

(Sale la CULPA.)

 
MÚSICA y
CULPA
«...con la esposa que ha elegido
donde la Culpa no ha entrado,...» 830
ÁNGEL

 (Canta.) 

...del rey, su padre, enviado
para que en sí la reciba,
y con prole sucesiva,
a siglos el tiempo aumente,
y a átomos el sol le cuente, 835
reine, goce, triunfe y viva.
CULPA, MUNDO
y MÚSICA
«...y con prole sucesiva,
a siglos el tiempo aumente,
y a átomos el sol la cuente,
reine, goce, triunfe y viva...» 840
 

(Vanse y quedan solos el MUNDO y la CULPA.)

 
LOS DOS
¿Cómo?
MUNDO
¡Culpa!
CULPA
¡Mundo!
MUNDO
¿Oíste
aquella voz que seguí?
CULPA
Sí, que yo te seguí a ti.
MUNDO
¿Qué es lo que de ella entendiste?
CULPA
Nada. Ciega, absorta y triste, 845
de ti, Mundo, a saber llego
qué Príncipe es éste.
MUNDO
Luego,
¿tú no le conoces?
CULPA
No.
MUNDO
Ni yo tampoco, que yo
también, triste, absorto y ciego, 850
no sé quién es. Mas, si aquí
me dices cuál es la esposa
tan perfectamente hermosa,
quizá por ella...
CULPA
¡Ay de mí!,
que jamás la vi ni oí. 855
Y, así, con terror segundo,
una duda en otra fundo.
¿Cómo, Mundo, pudo ser
príncipe en el mundo haber
y no conocerle el Mundo? 860
MUNDO
Como, para mi disculpa,
hubo quien para exaltada
reina halló en el mundo entrada,
sin conocerla la Culpa.
CULPA
Eso, más que te disculpa, 865
mi sentimiento atropella;
y es querer a mi querella
responderme poco fiel.
MUNDO
No es, que no saber yo de él,
es por no saber tú de ella. 870
CULPA
Aún no para en eso, pues,
a tercer duda, que acuda
quiere el cielo.
MUNDO
¿Qué es la duda?
CULPA
Atiende y sabrás la que es.
Para cautelarme, Mundo, 875
de aquel rey que, prometido
de los profetas, en tantas
figuras, sombras y visos,
como en arcanos misterios,
contiene el cerrado libro 880
de siete sellos, que sólo
el Cordero pudo abrirlos;
para cautelarme, Mundo,
segunda vez lo repito,
de que ya que venga, venga 885
de su justicia movido
a castigar riguroso
en vez de premiar benigno,
en metáfora de cárcel
dispuse que, convenidos 890
yo en prenderlos, tú en guardarlos,
hallase uno y otro siglo
tan acordado en sus penas,
tan olvidado en sus vicios,
que, como antes dije, sea 895
memoria de sus olvidos
el libro de mis acuerdos.
Haciendo estaba el registro
cuando otras distantes voces
de las de la tierra oímos 900
en el aire. ¿Culparás
que lo que sabes te digo?
Pues no más falta hacer suele
lo callado que lo dicho.
Las distantes voces eran 905
epitalamios festivos
de reales bodas, que han puesto
mi ira en tan nuevo conflito
como no salir de uno
y entrar a otro laberinto. 910
Porque, ¿qué tienen que ver
dos asuntos tan distintos,
como que cárcel y boda
concurran a un acto mismo?
Que seas tú, Mundo, la cárcel, 915
ya alegórico lo hizo
el sacro citado texto;
que a las bodas de su hijo
el padre rey convidase
a todos sus convecinos 920
a gran cena, ya también
hubo texto que lo dijo.
Pero no dijo uno ni otro
que habían de sonar unidos
tanto que, a un tiempo, se oyesen 925
dos tan disonantes ruidos,
allí de tristes endechas,
aquí de nupciales himnos.
¿Qué ingenio habrá...? Dejo aparte
si es o no es el que previsto 930
me amenaza hasta que el tiempo
el velo corra al sentido,
que agora anda entre dos luces,
ni ignorado ni sabido;
y voy a ¿qué ingenio habrá 935
que no discurra indeciso,
oyendo que a un propio asumpto
le suenan en los oídos
cítaras aquí y salterios;
y allí cadenas y grillos; 940
cánticos aquí suaves;
allí míseros gemidos;
aquí cláusulas sonoras,
allí funestos suspiros;
aquí gozos; allí penas; 945
y, en fin, entre llanto y ritmo,
confundiéndose mezclados
lamentos y regocijos,
aquí, el cielo todo glorias
y todo allí, ansias el limbo? 950
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