Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

1

Bioy Casares dice en el prólogo de la Antología: «Hemos seguido un criterio hedónico; no partimos de la intención de hacer una antología. Una noche de 1937 hablábamos de literatura fantástica, discutíamos los cuentos que nos parecían mejores; uno de nosotros dijo que si los reuniéramos y agregáramos los fragmentos del mismo carácter anotados en nuestros cuadernos, haríamos un buen libro. Hemos hecho este libro».

 

2

Véase Bioy, Borges y Sur, de María Teresa Gramuglio. Punto de Vista Nro. 34 Julio-septiembre, 1989.

 

3

Aunque como hemos señalados en el ensayo La indeterminación de lo real, (C. Dámaso Martínez, La seducción del relato, Buenos Aires, Alción, 2002) hay que tener en cuenta los relatos fantásticos de Horacio Quiroga y Roberto Arlt, contemporáneos de Bioy Casares y los de Julio Cortázar, que escribe sus primeros cuentos por ese entonces.

 

4

En cuanto a la idea de que las narraciones deben tener fuertes o sólidos argumentos no es casual que muchas veces Bioy -y también Borges- al referirse a alguno de sus textos de ficción destaque que la anécdota se le ocurrió en determinada circunstancia o simplemente -les fue sugerida- por alguna de sus amistades literarias. Y se ha dado el caso de que alguna de las historias de relatos haya sido divulgada mucho antes de que el texto se escribiera, como por ejemplo, el argumento de El sueño de los héroes, que según Ofelia Kovacci (Adolfo Bioy Casares, ECA, 1963) Bioy había contado a Carlos Mastronardi unos diez años antes de la aparición de la novela.

 

5

Reportaje a Adolfo Bioy Casares. Carlos Dámaso Martínez. El Periodista Nro. 197, julio de 1988. Reeditado en el libro El arte de la conversación. Diálogo con escritores latinoamericanos. Córdoba, Alción, 2008.

 

6

Lo subrayado me pertenece.

 

7

Sur, Número 133, nov. 1945.

 

8

Rosmary, Jackson: Fantasy, Buenos Aires, Catálogos, 1986.

 

9

Ana María Barrenechea: «Ensayo de una tipología de literatura fantástica», en Textos Hispanoamericanos, Caracas, Monte Ávila editores, 1978.

 

10

Jackson refiriéndose a las formas de lo fantástico en el siglo XIX expresa: «Pareció convertirse en un género por derecho propio, gracias a su relación con la novela un género al que socavó. Como dice Bajtín la novela surgió como una forma dominada por la visión secular, una estrecha conciencia monológica. Al subvertir esta visión unitaria, lo fantástico introduce confusión y alternativas. En el siglo XIX explica una oposición a la ideología burguesa sostenida, por la novela realista».