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1291

(Se hiere.)-(Stabs herself.) Ed. Camb. con el texto. = (Kils herselfe.) Ff., al fin de la línea. = Om. Cc.

 

1292

-enmohece -rust, Texto y ed. Camb. con Cc. y Ff. = rest Dyce, Furness y otros con el C1.

 

1293

-enmohece en ella -there rust, -Sigo en la traducción a la edición Cambridge, que va de acuerdo con los Cc. y Ff. La imaginación de Julieta está excitada, y yendo, como dice perfectamente White, más allá de su suicidio, ve el puñal de su querido y muerto Romeo enmoheciendo en su pecho, en vez de oxidarse en el propio estuche, y exclama con amorosa alegría: «Ésta es tu vaina, enmohece en ella y déjame morir». -DOS HERMANAS.

 

1294

(Cae sobre el cuerpo de ROMEO, y muere.) -(Falls on ROMEO'S body, and dies.) La ed. Camb. con el texto. = (trows herself upon her Lover and expires.) Capell. = (Dies.) White, Han.

Esta precedente escena de la muerte de Julieta se consigna así en el cuarto de 1597:

«(Entra el MONJE, con una linterna.)

¡Cuántas veces, esta noche, han tropezado, al atravesar las tumbas, estos mis envejecidos pies! -¿Quién está ahí?

CRIAD. Un amigo, uno que os conoce bien.

MON. ¿Quién es el que hace compañía a los muertos a hora tan avanzada? ¿Qué luz es aquélla? No quiero engañarme; paréceme que arde en el sepulcro de los Capuletos.

CRIAD. Así es, reverendo padre, y allí está uno que os ama tiernamente.

MON. ¿Quién es?

CRIAD. Romeo.

MON. ¿Cuánto hace que está aquí?

CRIAD. Una media hora larga, y más.

MON. Acompáñame allí.

CRIAD. No me atrevo, señor; él no sabe que estoy aquí: bajo pena de muerte me mandó que partiese para no distraerle en su empresa.

MON. Tengo que ir entonces; la mente me presagia infortunio.

(Detiénese el MONJE y observa la sangre y las armas.)

¿Qué sangre es ésta que mancha el umbral de este pétreo, marmóreo sepulcro? ¿Qué indican éstos abandonados y sangrientos aceros? ¡Ay de mí! Estoy dudando. ¿Quién está aquí? ¡Cómo! ¿Romeo muerto? ¿Él y Paris también? ¿Qué aciaga hora es accesoria de tan negro pecado?

(JULIETA se incorpora.)

Se mueve Julieta.

JUL. ¡Ah, padre caritativo! Recuerdo bien el sitio de que hablamos y en que debía despertar. No veo, no, a la persona por cuyo bien tenté este accidente.

MON. Alza, señora; oigo ruido cerca; nos van a prender. Paris está asesinado, Romeo es cadáver, y si aquí nos sorprenden, nos van a tener por cómplices. Voy a darte asilo en un convento de monjas.

JUL. ¡Ah! Dejadme, dejadme; no quiero salir de aquí.

MON. Oigo ruido; temo prolongar mí estancia; ven, ven.

JUL. Sal, aléjate. -¿Qué es esto? ¿Una copa, comprimida en la mano de mi consorte? ¡Ah! ¡Avaro! ¡Tomárselo todo, sin dejar ni una gota para mí!

(Entra un GUARDIA.)

GUAR. Por aquí, por aquí.

JUL. ¿Ruido? Sí. Tengo que resolverme entonces. -¡Oh, dichoso puñal! Tú pondrás fin a mi temor. Permanece en mi seno. Así voy a tu lado.

(Se hiere y cae.)»

 

1295

(Entra la ronda, guiada por el PAJE de PARIS.) -(Enter Watch, with the PAGE of PARIS.) = (Enter Watch, and the PAGE.) Capell. = (Enter Boy and Watch.) Cc., Ff., al quinto verso.

Desde aquí, hasta la conclusion final, escribe de este modo el cuarto de 1597:

«(Entra la ronda.)

CAPIT. Adelantaos, registrad. ¿Qué armas son éstas? Ved, amigos, Julieta, hace dos días enterrada, herida, sangra de fresco. Buscad y ved quiénes se hallan próximos: aprendedlos y conducidlos a mi presencia al instante.

(Entra uno con el MONJE.)

1er. G. Capitán, he aquí a un monje, provisto de herramientas apropiadas para abrir una sepultura.

CAPIT.¡Grave sospecha! Custodiadle.

(Entra uno con el criado de ROMEO.)

1er. G. Aquí tenéis al criado de Romeo.

CAPIT. Retenedle para que sea interrogado.

(Entran el PRÍNCIPE y otros.)

PRÍNC. ¿Qué temprano mal tan temprano nos levanta?

CAPIT. ¡Ob, noble príncipe! Ved do yace Julieta, dos días puesta en la tumba, caliente y manando sangre fresca; a Romeo y al conde Paris, de igual modo, recién matados.

PRÍNC. Buscad, inquirid por las inmediaciones para dar con los asesinos.

(Entran el viejo CAPULETO y su esposa.)

CAP. ¿Qué rumor es éste que se ha alzado tan a primera hora?

MIAD. Unos gritan en las calles ¡Romeo! y otros nombran a Julieta, cual si ellos solos hubiesen sido la causa de una alarma semejante.

CAP. Atiende, esposa, este puñal ha equivocado el camino, pues, ¡mira!, nada hay en la trasera del joven Montagüe; el hierro se ha metido por error en el pecho de nuestra hija.

(Entra el viejo MONTAGÜE.)

PRÍNC. Acércate, Montagüe; temprano te has puesto en pie para ver a tu hijo y heredero más temprano caído.

MONT. Augusto soberano, mi esposa ha muerto esta noche y el joven Benvolio ha finado también. ¿Qué nuevo infortunio puede aún ofrecer este sitio?

PRÍNC. Llégate y ve primeramente; habla luego.

MONT. ¡Oh, hijo degenerado! ¿Qué usanza es ésta de lanzarte en la tumba antes de tu padre?

PRÍNC. Ea, tened, sellad los ultrajantes labios, y dejadme inquirir para dar con los autores de un tan odioso y extraordinario infortunio. Haced que avancen los individuos sospechosos.

MON. Yo soy el más importante, el menos pudiente, dignísimo príncipe; dejadme, sí, contar la verdad y os informará de cómo acontecieron estas cosas. Julieta, aquí acabada, se hallaba desposada con ese Romeo, sin que su padre o madre la hubiesen autorizado; la nodriza estaba en el secreto del matrimonio. El funesto día de este infeliz consorcio fue el último de Tybal, por causa de quien se hizo salir de aquí, para Mantua, a Romeo. Fuera éste, el padre de Julieta, con indigna violencia, ideó casarla con Paris; mas la joven (repugnando un segundo contrato), se negó a consentir, y en consecuencia de ello, me insinuó resueltamente que si no la facilitaba el medio de evitar lo que con tal demasía trataba de imponerla su padre, en brazos de la desesperación, me prometía darse la muerte en mi propia presencia. En tal virtud (aleccionado por mi experiencia), la facilité una poción que la hiciera aparecer como muerta, prometiéndola que enviarla con toda prisa a Mantua por su Romeo, a fin de que pudiera acudir y sacarla de la tumba; mas el que tenía mis cartas, el hermano Juan, buscando un hermano que le sirviese de compañía, por causa de hallarse estacionado el mal contagio, fue detenido por los inspectores de la ciudad; lo que no impidió que Romeo, noticioso por su criado de la muerte de Julieta, tornase en posta a Verona para contemplar a su amada. Lo que ha sucedido después, referente a la muerte de Paris y a la de Romeo, me es del todo desconocido; pues cuando vino a librar de aquí a la joven, encontré a ésta ya en sí y a aquéllos sin vida. Satisfecho, habría sacado a la primera del sepulcro; mas al encontrarse inánime a su esposo, lo rehusó. En esto sentí la ronda y huí hallándome ignorante de lo que ha pasado después. Si en lo dicho ha ocurrido desgracia por causa mía o de los medios que he empleado, que mi vieja existencia, algunas horas antes de su plazo, sea sacrificada al más estricto rigor de la ley.

PRÍNC.* Siempre te hemos tenido por un santo varón. -¿Dónde está el criado de Romeo? ¿Qué puede decir sobre lo presente?

BALT. Yo llevé nueva a mi señor de la muerte de ella, y él al punto salió apresuradamente de Mantua para este panteón. Diome estas cartas y me encargó que las pusiese a primera hora en manos de su padre.

PRÍNC. Vengan las cartas; voy a enterarme de ellas. -¿Dónde está el paje del conde, el que llamó la guardia?

PAJ. Yo acompañé a mi señor a la tumbad e Julieta, y como alguno se acercara, advertí en el acto a mi amo. Concluyeron por pelear, y yo corrí a dar aviso ti la ronda. Esto es todo lo que sé o puedo decir.

PRÍNC. Estas cartas comprueban las palabras del monje. -Acércate, Capuleto; ven, viejo Montagüe. -¿Dónde están esos contrarios? Ved lo que el odio ha hecho.

CAP. Ven, hermano Montagüe, dame la mano, ésta es la viudedad de mi hija; pues al presente nada más puedo hacer por ella, que es mi único bien.

MONT. Pero yo intento darles más; erigiré su estatua de oro puro, para que mientras Verona por tal nombre se conozca no se alce en ella modelo de tanto valor como el de Julieta, la amada de Romeo.

CAP. De igual riqueza se alzará Romeo a su lado. ¡Pobres ofrendas de nuestras rencillas!

PRÍNC. Este día trae consigo una paz triste. Venid, salgamos de aquí para continuar hablando de estos dolorosos asuntos. Perdonados serán unos, castigados otros; pues jamás se oyó tan lamentable historia como la de Julieta y su Romeo.»

*El texto de 1597, sin duda por equivocación, pues aquí, PRY. en vez de PRÍNC.

 

1296

(Vanse algunos.) -(Exeunt some.) = (Exeunt some of the Watch.) Han., Dyce. = -the rest enter the Tomb. Capell. = Om. ed. Camb.

 

1297

-y apenas desfigurada; -and newly dead, -Traduzco esto conforme a Schlegel, y creo positivamente que es lo que el autor quiere dar a entender. -DOS HERMANAS.

 

1298

(Vanse otros gvardias.) -(Exeunt other Watchmen.) Texto, según Capell. = Om. ed. Camb.

 

1299

Aquí, la inagotable imaginación de Shakespeare consigna un triple juego de palabras, que hemos procurado reproducir. -DOS HERMANAS.

 

1300

(Vuelven algunos de los guardias con BALTASAR.) -(Re-enter Some of the Watch with BALTHASAR.) Traducción con Dyce, ed. Camb. y Furness. = (Enter some of the Watch, with BALTHASAR.) Texto con Rowe. -(Enter ROMEO'S man.) Cc., Ff.