231
En la narración de Poe El cuento mil y dos de Scheherezade se alude así al tren: «un enorme caballo cuyos huesos eran de hierro y tenía agua hirviendo por sangre» (Sigo la edición de Todos los cuentos realizada por Julio Cortázar, Círculo de Lectores, Barcelona, 2003, vol. 2, p. 74).
232
Las brujas profetizaron a Macbeth que no sería vencido en tanto el bosque de Birnam no llegase a Dunsiname. El ejército de Malcolm y Macduff avanzará oculto tras una cortina de ramas y de hojas cortadas en el bosque de Birnam, lo que será el prólogo de la derrota y muerte de Macbeth.
233
Río griego de la Tesprótida, en el Epiro, en la costa oeste de la Grecia continental, que formaba en su desembocadura un pantano insalubre y pestilente, y era según la leyenda lugar de paso para los Infiernos. En La Odisea, Homero lo cita al pintar el mundo subterráneo infernal.
234
Divina Comedia, Purgatorio, canto V, 127-138. La pareja se encuentra en el Círculo de los lujuriosos.
235
En la Divina Comedia, al final del canto 32 del Infierno, Dante describe a Ugolino royendo el cráneo del arzobispo Rugiero. Perteneció G. Ugolino a la noble familia toscana de los Gherardesca y fue jefe de los gibelinos. Al frente de la Señoría de Pisa se portó con crueldad y a raíz de una sublevación, su palacio fue incendiado y él fue encerrado, con sus hijos y sus nietos, en una torre, cuyas llaves se arrojaron al río para que nadie pudiera socorrerlos. Todos murieron de hambre. Dante hizo popular la imagen de este personaje histórico y sobre él tendió sospechas de canibalismo y antropofagia, sugiriendo a los lectores que pudo sobrevivir alimentándose de la carne de sus descendientes. De tales sospechas lo libraron definitivamente las investigaciones del profesor Francesco Mallegni de la Universidad de Pisa, tras analizar su ADN y el de sus familiares.
236
Diosa romana, correspondiente a la griega Perséfone. Hija de Júpiter y Ceres, fue raptada por Plutón, que se la llevó a los Infiernos.
237
Barquero de los Infiernos encargado de transportar en su barca las «sombras» o almas de los difuntos, desde el mundo de los vivos hasta el Hades a través de la Laguna Estigia y los ríos Cocito y Aqueronte, previo pago de un óbolo.
238
Las tres deidades hermanas -Cloto, Láquesis y Átropos- con figuras de viejas: la primera hilaba, la segunda devanaba y la tercera cortaba el hilo de la vida del hombre.
239
En el canto XXXIII del Orlando furioso, estrofas 66 y siguientes. Gracias al santo, Astolfo hallará en la Luna, dentro de una ampolla, el seso perdido de Orlando.
240
En el canto XLV y último del Orlando furioso, Rodomonto aparece con armadura negra, en plena celebración de la boda de Rugiero y Bradamanta, para desafiar al primero por haber sido desleal a su rey.