Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

81

La primera edición de Morir del todo se publicó en la revista Primer Acto, 201 (noviembre-diciembre de 1983), pp. 52-77, edición por la que cito. A partir de este momento, por razones de espacio, precisaré la referencia bibliográfica no a pie de página sino en el propio texto, con indicación entre corchetes de la abreviatura MT, dos puntos y la página o páginas correspondientes. Así, por ejemplo: [MT: 52].

 

82

«Preferí titular el experimento ‘crónica representable’; no tanto por humildad, como para adelantar un propósito: Yo no quería tanto ‘hacer teatro’ como contar una dolorosa historia» (Paco Ignacio Taibo I, «La crónica al teatro», en Morir del todo. México, Universidad Autónoma de Sinaloa, 1987, p. 11).

 

83

«La inauguración de exposición y teatro no pasó en Madrid sin problemas: el día de la apertura se retiraron de la sala dos grandes carteles en los que la bandera republicana española se fundía con la bandera mexicana. El ministro socialista de Cultura dijo que ‘había dado esa orden, porque las letras no se veían bien’. El hecho escandalizó a más de un visitante» («Historia de Morir del todo», en la edición mexicana de la obra, ob. cit., p. 8). Javier Solana Madariaga, el ministro aludido, es autor de «El exilio español en México», texto que se publica en la revista teatral Primer Acto, 201 (noviembre-diciembre de 1983), pp. 3-4, número monográfico dedicado a «El exilio español en México».

 

84

Juan Ribó, Pilar Bayona, Azucena de la Fuente, Isa Escartín, Ángel Barreda, Pedro Miguel Martínez, Arturo Martínez y Miguel Nieto constituyeron el reparto, con dirección escénica de José Luis Alonso de Santos, quien califica a Morir del todo como «teatro documento de un acontecimiento histórico» («Paco Ignacio Taibo: canto al exilio en una crónica representable». Primer Acto, 201 [noviembre-diciembre de 1983], p. 49).

 

85

La recepción crítica de la obra fue muy favorable, como prueban, entre otras, las reseñas críticas de Domingo Miras en Primer Acto, 202 (enero-febrero de 1984), pp. 105-107, y de Lola Santa-Cruz en El Público, 6 (marzo de 1984), p. 15. En la edición mexicana de la obra se citan fragmentariamente otras, tanto madrileñas (por ejemplo, la de Eduardo Haro Tecglen en El País) como barcelonesas (por ejemplo, la de Gonzalo Pérez de Olaguer en El Periódico de Catalunya).

 

86

El experimento era nuevo para mí y también para los organizadores de la exposición y resultó emocionante y sorprendente. Frente al hecho, doloroso, de que la gran mayoría de los espectadores jóvenes ignoraron no sólo la importancia del exilio español en México, sino también su significación y su razón de ser, estaba la rapidísima inmersión de los espectadores en el problema. Todos los días se repitió el clima de emotividad y las reacciones apasionadas; los espectadores continuaban en la sala después de terminado el acto y los actores y el director eran interrogados como si hubieran vivido verdaderamente los días del exilio en México. Esa misma actitud se repitió en Barcelona y también allí convocó a un número impresionante de jóvenes. Sentados en el suelo, arracimándose contra las paredes, teníamos un público no de espectadores, sino de participantes, de seres integrados» («Paco Ignacio Taibo I, La crónica al teatro», ob. cit., p. 11). Puedo dar fe, como espectador de una representación madrileña, de esa emocionante «inmersión».

 

87

He publicado un trabajo sobre «El exilio teatral español en la escena mexicana» en la revista barcelonesa Taifa, 4 (octubre de 1997), pp. 173-195, número monográfico realizado por los investigadores del GEXEL sobre «El exilio literario español en México (1939-1975)».

 

88

Sobre el tema puede consultarse también el libro colectivo El exilio teatral republicano de 1939, edición de Manuel Aznar Soler (Sant Cugat del Vallès, Associació d’Idees-GEXEL, colección Sinaia-4, 1999). Antonio Joven publicó una «Entrevista con Augusto Benedico» en el número monográfico 201 de Primer Acto (ob. cit., pp. 24-29).

 

89

De su amistad con León Felipe nos ha dejado testimonio literario en el «Segundo brindis» de Por el gusto de estar con ustedes, titulado «Paseo, con poeta de la mano, a través de una tertulia» (ob. cit., pp. 49-66).

 

90

«No había querido yo incluir poesía de Luis Rius, amigo entrañable en trance de muerte. En Barcelona, sin embargo, incluí un poema de Rius, que entrará ya en la representación que en México producirá y dirigirá Gómez Vadillo, con Ofelia Guilmain y Augusto Benedico» («La crónica al teatro», en ob. cit., p. 12). Puede leerse este poema, cuyo verso inicial es «llegó aquí después», en Cuestión de amor y otros poemas, de Luis Rius Azcoitia, con un prólogo de Ángel González y un estudio introductorio de José Paulino (Cuenca, Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 1998, p. 60). Un texto del autor sobre «Luis Rius» puede leerse en Por el gusto de estar con ustedes (ob. cit., pp. 165-169).