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Resultado número:1
Texto
- Título:
-
Faustina de Bressier / Alberto Delpit ; versión castellana por A. Blanco Prieto ; ilustración de J. Cabrinetty - Registro bibliográfico
- Autor:
-
Delpit, Albert, 1849-1893
- Portales:
-
Biblioteca americana
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| Biblioteca Virtual de las Letras Mexicanas
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| Unidad Académica de Estudios Regionales
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- Pub. orig.:
- Barcelona, Biblioteca "Arte y Letras", 1887
- Materia:
-
Novela francesa -- Siglo 19º
- Fragmentos
'Cruzados de la causa' en la obra
: (15
coincidencias encontradas)
-
-
llamamiento á los condenados; y
éranlo en efecto aquellos hombres á quienes se obliga
ba á defender una causa
-
sorpresa, pues
al cabo de seis meses de sitio y dos de guerra civil,
las bajas habían sido numerosas, á causa
-
Al pare
cer sufría mucho; con el rostro lívido, los labios hin
chados y los ojos brillantes á causa
-
escuela
FAUSTINA DE BRESSIER
83
moderna ; el primer bosquejo que Delacroix hizo de la
Entrada de los Cruzados
-
El marido de Francisca, con los brazos cruzados, in
móvil y resuelto, estaba junto al sargento, y á
-
combate por el
derecho y la justicia conviene poder llevar alta la fren
te y no desmerecer de la sagrada causa
-
En aquel momento llegaban á la verja abierta y el
hombre las vió: estaba de pie en medio del camino,
cruzados
-
brillaban de malicia y de curio
sidad ; debía saber a qué atenerse ; y tal vez compren
dió vagamente la causa
-
ocho días; antes de este tiempo, Nelly, arrepentida y
enmendada, descorrería el cerrojo de su puerta, causa
-
Francisca le contemplaba, muda de asombro»
con los brazos cruzados, recordando las palabras de
Aurelia
-
extrañabas en otro
tiempo mi empeño en casarme, que te parecía singu
lar, y ahora te diré que por causa
-
a86
ALBERTO DELP1T
esta circunstancia la profunda tristeza del artista, el
cual sufría sin duda por causa
-
¿Confesaría que su esposo había sucumbido á
causa de su exagerada pasión por la belleza de una
mora?
-
XI
austina era la causa de la muerte de su pa
dre !
-
Cuando Faustina estuvo sola, serena al parecer, de
jóse caer en el sitial, con los brazos cruzados,
- Formatos:
-
-
Resultado número:2
Texto
- Título:
-
Hernán Cortés : descubrimiento y conquista de Méjico. Tomo IV / obra escrita por M. A. de Lamartine y en presencia de las de Chateaubriand, Solís, Prescott, Gomara, Roberston, Humboldt, etc. - Registro bibliográfico
- Autor:
-
Lamartine, Alphonse de, 1790-1869
- Portales:
-
Biblioteca americana
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| Biblioteca Virtual de las Letras Mexicanas
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| Historia
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| Hernán Cortés
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- Pub. orig.:
- México, Imprenta y Litografía de la Biblioteca de Jurisprudencia, 1887
- Materias:
-
América latina -- Historia -- 1492-1600 (Descubrimiento y conquista) | México -- Historia -- 1517-1521 (Descubrimiento y conquista)
- Mat. aut.:
-
Cortés, Hernán, 1485-1547
- Fragmentos
'Cruzados de la causa' en la obra
: (20
coincidencias encontradas)
-
-
—¿Por qué causa.
—Porque se halla enfermo.
—¿De gravedad?
—Hasta ahora no ofrece peligro.
-
La
que se goza en ser causa de tantas desventuras, debe tener eni trañas de fiera.
-
—Mucho me alegraré de que halléis la acogida que merece |
la causa que defendéis.
-
Pudiera decaer su prestigio, y yo no me perdonaría jamas
haber sido causa de su desgracia.
.
-
Hernán Cortés logró prender á algunos, y les preguntó la
causa de su fuga.
-
Su carácter altivo, intransi
gente, ha sido causa de grandes catástrofes en nuestra tierra.
-
Yo os ruego que por causa
290
HERNAN CORTÉS
mia no se derrame sangre.
-
Otras, por el con
trario, creo que alguna catástrofe es la causa de su silencio.
-
Esta fué la causa de que sin que precediera la menor expli
*
cacion le diera la muerte.
-
Tendría un eterno remordimiento si por mi causa
te sobrevenía alguna desgracia.
-
—Os obstináis en ocultarme la causa, pero yo os haré hablar.
¡Hola!
-
Os suplico que no inquiráis la causa.
—De ningún modo; tengo precisión de saberla.
-
¡Que siempre han de
ser ellas la causa de la perdición de los hombres! ¡Jesús Dios
mió!
-
devastada cabeza, salpica
da apénas con algunos mechones de plata, por la rojiza luz de
res inosas caoóas, cruzados
-
rosamente al cielo por la causa de la justicia (¡la causa de los
conquistadores!)
-
■ í
Ese hombre. ... es mucho rubor el que me causa esta deJilaracion; ese hombre sois vos.
-
—¿Acaso alguna provincia se alia á nuestra causa?
—Mejor que eso.
-
Esto habia sido causa de la revolución que se había apode
rado en su ser.
-
— Cree que soy adicto á su causa, porque tengo motivos po
derosos para quereros mal.
-
Este incidente fué causa de que se estropease el timón.
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Resultado número:1 Texto
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- Faustina de Bressier / Alberto Delpit ; versión castellana por A. Blanco Prieto ; ilustración de J. Cabrinetty - Registro bibliográfico
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- Delpit, Albert, 1849-1893
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- Pub. orig.:
- Barcelona, Biblioteca "Arte y Letras", 1887
- Materia:
- Novela francesa -- Siglo 19º
- Fragmentos 'Cruzados de la causa' en la obra : (15 coincidencias encontradas)
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- llamamiento á los condenados; y éranlo en efecto aquellos hombres á quienes se obliga ba á defender una causa
- sorpresa, pues al cabo de seis meses de sitio y dos de guerra civil, las bajas habían sido numerosas, á causa
- Al pare cer sufría mucho; con el rostro lívido, los labios hin chados y los ojos brillantes á causa
- escuela FAUSTINA DE BRESSIER 83 moderna ; el primer bosquejo que Delacroix hizo de la Entrada de los Cruzados
- El marido de Francisca, con los brazos cruzados, in móvil y resuelto, estaba junto al sargento, y á
- combate por el derecho y la justicia conviene poder llevar alta la fren te y no desmerecer de la sagrada causa
- En aquel momento llegaban á la verja abierta y el hombre las vió: estaba de pie en medio del camino, cruzados
- brillaban de malicia y de curio sidad ; debía saber a qué atenerse ; y tal vez compren dió vagamente la causa
- ocho días; antes de este tiempo, Nelly, arrepentida y enmendada, descorrería el cerrojo de su puerta, causa
- Francisca le contemplaba, muda de asombro» con los brazos cruzados, recordando las palabras de Aurelia
- extrañabas en otro tiempo mi empeño en casarme, que te parecía singu lar, y ahora te diré que por causa
- a86 ALBERTO DELP1T esta circunstancia la profunda tristeza del artista, el cual sufría sin duda por causa
- ¿Confesaría que su esposo había sucumbido á causa de su exagerada pasión por la belleza de una mora?
- XI austina era la causa de la muerte de su pa dre !
- Cuando Faustina estuvo sola, serena al parecer, de jóse caer en el sitial, con los brazos cruzados,
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Resultado número:2 Texto
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- Hernán Cortés : descubrimiento y conquista de Méjico. Tomo IV / obra escrita por M. A. de Lamartine y en presencia de las de Chateaubriand, Solís, Prescott, Gomara, Roberston, Humboldt, etc. - Registro bibliográfico
- Autor:
- Lamartine, Alphonse de, 1790-1869
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- Pub. orig.:
- México, Imprenta y Litografía de la Biblioteca de Jurisprudencia, 1887
- Materias:
- América latina -- Historia -- 1492-1600 (Descubrimiento y conquista) | México -- Historia -- 1517-1521 (Descubrimiento y conquista)
- Mat. aut.:
- Cortés, Hernán, 1485-1547
- Fragmentos 'Cruzados de la causa' en la obra : (20 coincidencias encontradas)
-
- —¿Por qué causa. —Porque se halla enfermo. —¿De gravedad? —Hasta ahora no ofrece peligro.
- La que se goza en ser causa de tantas desventuras, debe tener eni trañas de fiera.
- —Mucho me alegraré de que halléis la acogida que merece | la causa que defendéis.
- Pudiera decaer su prestigio, y yo no me perdonaría jamas haber sido causa de su desgracia. .
- Hernán Cortés logró prender á algunos, y les preguntó la causa de su fuga.
- Su carácter altivo, intransi gente, ha sido causa de grandes catástrofes en nuestra tierra.
- Yo os ruego que por causa 290 HERNAN CORTÉS mia no se derrame sangre.
- Otras, por el con trario, creo que alguna catástrofe es la causa de su silencio.
- Esta fué la causa de que sin que precediera la menor expli * cacion le diera la muerte.
- Tendría un eterno remordimiento si por mi causa te sobrevenía alguna desgracia.
- —Os obstináis en ocultarme la causa, pero yo os haré hablar. ¡Hola!
- Os suplico que no inquiráis la causa. —De ningún modo; tengo precisión de saberla.
- ¡Que siempre han de ser ellas la causa de la perdición de los hombres! ¡Jesús Dios mió!
- devastada cabeza, salpica da apénas con algunos mechones de plata, por la rojiza luz de res inosas caoóas, cruzados
- rosamente al cielo por la causa de la justicia (¡la causa de los conquistadores!)
- ■ í Ese hombre. ... es mucho rubor el que me causa esta deJilaracion; ese hombre sois vos.
- —¿Acaso alguna provincia se alia á nuestra causa? —Mejor que eso.
- Esto habia sido causa de la revolución que se había apode rado en su ser.
- — Cree que soy adicto á su causa, porque tengo motivos po derosos para quereros mal.
- Este incidente fué causa de que se estropease el timón.
- Formatos:
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