Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.

  —28→  

ArribaAbajoCuadro tercero

 

La escena en Palos de Moguer. -El teatro representa la choza del MARINERO VIEJO, construida de cañas y paja, y dispuesta de modo que al fin del cuadro pueda incendiarse y dejar ver el puerto, que se figuró en el cuadro segundo. -Dos lechos de paja, uno en cada ángulo del foro. -Una mesa tosca, y encima de ella una lámpara de hierro. -Dos sillas o taburetes de madera; un banco. -Colgadas de la pared algunas redes y otros enseres de pescar. -Toneles en el suelo. -Es de noche.

 

Escena I

 

DOÑA BEATRIZ, sentada cerca de la mesa; LUCÍA en pie a su lado. -La HIJA DEL PESCADOR, arreglando los muebles de la choza. -ALÍ, reclinado sobre el quicio de la puerta de la choza, que estará en el foro y será practicable.

 
BEATRIZ
Lucía; yo sueño,
deliro, estoy loca.
LUCÍA
Señora, se apoca...
BEATRIZ
Me siento morir.
HIJA

  (Aparte, mirando al esclavo.) 

¡Qué cara, qué ceño! 5
BEATRIZ
¿No iremos a Huelva?
LUCÍA
Sí tal; cuando vuelva.
BEATRIZ
Ya tarda en venir.
Ni sé dónde estamos.
Oídme, doncella. 10

  (A la muchacha.) 

HIJA

  (Acercándose.) 

¿Señora?
BEATRIZ
La bella,
decidme...
  —29→  
ALÍ

  (Deteniendo a la HIJA DEL PESCADOR.) 

Callar.

  (Vuelve a su puesto.) 

BEATRIZ
Que tal te suframos,
no esperes, esclavo.
LUCÍA

  (Aparte a BEATRIZ.) 

Señora, que al cabo... 15
HIJA

  (Aparte.) 

¡Me quiere matar!
BEATRIZ

  (A la muchacha.) 

Venid, hija mía;
venid, no temáis:
decidme...
 

(La muchacha se va a aproximar: ALÍ la mira, poniendo mano al puñal, mas sin sacarlo.)

 
ALÍ
¡Si vais!
BEATRIZ

  (A ALÍ.) 

¿Te burlas de mí? 20
 

(ALÍ se inclina profundamente en señal de respeto.)

 
Allá en Berbería
se manda a las damas:
aquí somos amas:
¿lo entiendes, Alí?
No el moro os asombre: 25

  (A la muchacha.) 

Decidme...
 

(ALÍ vuelve a amenazar con un gesto a la muchacha, que retrocede horrorizada.)

 
LUCÍA

  (Aparte a BEATRIZ.) 

¡Señora!
HIJA

 (Aparte.) 

¡Qué cara traidora!
BEATRIZ
Faltaba este mal.
HIJA

  (Aparte.) 

Es fiera; no es hombre.
BEATRIZ

  (A ALÍ.) 

¿Pues quién te ha mandado? 30
ALÍ
Mi dueño.
BEATRIZ
Menguado:
tú mientes, no hay tal.
 

(Breve pausa.)

 

  (A LUCÍA.) 

Don Pedro, en viniendo,
sabrá su osadía;
y entonces, Lucía...
LUCÍA

  (Misteriosamente.) 

Yo tiemblo.
35
BEATRIZ
¿Por qué?
LUCÍA
Señora, estoy viendo...
tan largo camino...
BEATRIZ
Mi riesgo previno.
LUCÍA
Será: no lo sé.
BEATRIZ
Nació caballero. 40
LUCÍA
Mas fue vuestro amante,
—30→
y os llama inconstante,
y encuentra ocasión.
BEATRIZ
Es noble.
LUCÍA
Sí; pero...
BEATRIZ
¡Tan vil un hidalgo! 45
LUCÍA
Fiadora no salgo:
pensad que Colón...
BEATRIZ
¡Traidor! -¡Pobre hermano!
LUCÍA
Pues era su cuna...
BEATRIZ
Infame o ninguna. 50
LUCÍA
Por noble pasó.
BEATRIZ
¿Por noble el villano,
sin Dios, sin conciencia,
que al oro y violencia
su esposa vendió? 55
LUCÍA
¡Un hombre tan cuerdo!
BEATRIZ
¿Ni quién lo creyera?
LUCÍA
Si acaso no fuera...
BEATRIZ
¿Lo puedo dudar?
LUCÍA
Estotro no es lerdo: 60
se saben sus mañas;
las tiene y extrañas.
BEATRIZ
¿Sabrá adivinar?
La seña le oíste.
LUCÍA
Es cierto.
BEATRIZ
Pues luego...
65
LUCÍA
Que oí, no lo niego...
BEATRIZ
¿Qué puedes decir?
LUCÍA
No sé en qué consiste;
mas sí que en el pecho
del juicio a despecho 70
se deja sentir...
 

(Óyese abrir la puerta por fuera.)

 
BEATRIZ
Ya viene; callemos.
LUCÍA
Obrad con cautela:
yo haré centinela.
BEATRIZ
Tu yerro verás. 75
LUCÍA

  (Aparte.) 

Con bien escapemos.
Sabed lo que intenta.
BEATRIZ
En breve contenta,
Lucía, estarás.

  —31→  

Escena II

 

Dichos, DON PEDRO, inquieto y desasosegado.

 
DON PEDRO

  (En la puerta. Aparte.) 

¿Dónde diablos se ha metido? 80
Reniego, amén, del bufón.

  (A ALÍ.) 

Anda en busca de Chacón,
que el villano se ha perdido.
 

(Vase ALÍ.)

 
 

(Entra y hace seña a la HIJA DEL MARINERO para que se retire; ésta lo verifica en el momento. -DON PEDRO y DOÑA BEATRIZ se miran con la ansiedad propia de personas que desean y temen a un mismo tiempo entablar una conversación penosa e importante.)

 
DON PEDRO

 (Aparte.) 

Vive Dios, no sé que diga:
tengo miedo a esta mujer... 85
¿Y qué diablos puede hacer
pájaro preso en la liga?
LUCÍA

 (Aparte a BEATRIZ.) 

Pensativo está.
BEATRIZ
Veremos.
DON PEDRO

  (A BEATRIZ.) 

¿Reposasteis ya, señora?

 (Con embarazo.) 

BEATRIZ
¿Cuándo partimos?
DON PEDRO

 (Breve pausa:) 

Ahora.
90
LUCÍA

 (Aparte a BEATRIZ.) 

Preguntadle adónde iremos.
BEATRIZ

  (A DON PEDRO.) 

¿Y esta noche misma en Huelva...
y en la casa de mi tía...?
DON PEDRO
Dejadnos solos, Lucía.

  (Aparte.) 

Ya es forzoso me resuelva. 95
BEATRIZ
No está bien que ella se yaya.
DON PEDRO
Ved que fuera conveniente...
BEATRIZ
Podéis hablar libremente.
DON PEDRO

 (Aparte.) 

¿Por qué mi aliento desmaya?

  (A BEATRIZ.) 

Pues que vos me lo mandáis, 100
debo explicarme, y lo haré.
BEATRIZ
Ya tardáis, don Pedro, a fe.
  —32→  
DON PEDRO
Tal vez, señora, sintáis...
BEATRIZ
Quien vio a su hermano morir,
y por un vil fue vendida, 105
poco tiene en esta vida
ya, don Pedro, que sentir.
Hablad pronto, y sin rodeos.
DON PEDRO
¿Beatriz, por qué tanta priesa?
Vais a ver cual luego os pesa 110
que cumpla vuestros deseos.
Vuestra tía...
BEATRIZ
¿La habéis visto?
DON PEDRO
Y no os quiere recibir.
BEATRIZ
¡Infeliz! ¿Dónde he de ir?
¡Cómo a mis males resisto! 115
DON PEDRO
Con escrúpulos de anciana,
por la muerte de Gonzalo...
LUCÍA

  (Aparte.) 

¡Puede haber hombre tan malo!
BEATRIZ
¿Y me acusa a mí, su hermana?
DON PEDRO
Las apariencias condenan 120
con frecuencia al inocente.
BEATRIZ
¡Tal mancha sobre mi frente!
DON PEDRO
Los sucesos se encadenan...
BEATRIZ
¿Qué apariencias, qué sucesos
puede haber en contra mía? 125
DON PEDRO
Yo, señora, presentía...
LUCÍA

  (Aparte.) 

Malditos sean tus huesos.
BEATRIZ
Pero explicadme...
DON PEDRO
Señora...
BEATRIZ
Por cuanto améis os lo ruego.
DON PEDRO
Sosegaos, no me niego. 130

  (Aparte.) 

¡Qué hermosa esta cuando llora!

  (A BEATRIZ.) 

Aquella noche funesta,
en que el pérfido Colón
vendió vuestro corazón...
BEATRIZ
¡Qué noche, cuánto me cuesta! 135
DON PEDRO
Yo penetré en vuestra casa,
más por salvar vuestro honor,
que por el fuego de amor
en que el alma se me abrasa.
Iba Lucía delante, 140
yo no cerré por olvido,
—33→
y el traidor que os ha vendido
tras mí se vino al instante.
Sale en esto vuestro hermano,
y da conmigo el primero: 145
yo, Beatriz, cual caballero,
le recibo espada en mano;
pero el traidor genovés,
como villano cobarde,
le da muerte, y hace alarde 150
en seguida de sus pies.
Mató la luz, que de no,
mi mano le castigara;
y os juro que no escapara
sin saber quién era yo. 155
A oscuras, un hombre muerto;
vos que venís al rumor
y perdéis con el dolor
toda mesura y concierto;
la justicia que acudía; 160
los vecinos que gritaban;
la puerta que derribaban;
y los gritos de Lucía,
tal me pusieron, Beatriz,
que loco en tal confusión, 165
con la mejor intención
os hice más infeliz.
Así, estando desmayada,
y Lucía medio muerta,
salí con vos por la huerta, 170
y os conduje a mi posada.
Ahora dice vuestra tía,
y con ella el vulgo insano,
que en la muerte del hermano
alguna culpa tendría... 175
BEATRIZ
¡Qué vais a decir, señor!
DON PEDRO
Quien con huir se confiesa
criminal. -A mí me pesa
de veros en tal dolor.
BEATRIZ
Y a mí pesa del punto 180
en que os vi la vez primera.
DON PEDRO
Yo con mi vida quisiera
—34→
devolvérsela al difunto.
BEATRIZ
Sin vuestro amor infernal
nunca Colón fuera ingrato. 185
DON PEDRO

  (Irónicamente.) 

Es cierto: su noble trato
le acredita de leal.
BEATRIZ
¿Sin vuestro celo indiscreto
quién se atreviera a acusarme?
DON PEDRO
En cuanto alcance, emplearme 190
por vindicaros prometo.
Las quejas hoy son demás;
nada remedian, señora.
 

(BEATRIZ abatida. DON PEDRO la contempla con satisfacción.)

 
LUCÍA

  (Aparte.) 

Arda tu lengua traidora
en poder de Satanás. 195
DON PEDRO
En fin, Beatriz, en el mundo
no tenéis más que un amparo.
BEATRIZ
¿Y cuál es?
DON PEDRO
¿Pues no está claro?
Yo: si con vos no me hundo.
Noble nacisteis, es cierto; 200
deudos tenéis, ¿quién lo niega?;
pero la gente que ciega
os acusa de haber muerto...
BEATRIZ
¡Calumnia infame, baldón,
que yo sabré confundir! 205
DON PEDRO

  (Fríamente.) 

No sé quién os pueda oír
si os ponen en reclusión.
BEATRIZ
Morir mil veces primero,
que soy noble aunque mujer.
DON PEDRO
¿Qué podréis, señora, hacer? 210
BEATRIZ
Recobro mi honor, o muero.
DON PEDRO
¿Y cómo, si no os escuchan?
Los llantos de un infeliz,
contra los gritos, Beatriz,
de un pueblo entero no luchan. 215
BEATRIZ
Callad, don Pedro...
DON PEDRO
El destino
os impele siempre al mal:
amasteis al desleal
y depreciasteis al fino;
—35→
y cuando aquel os entrega 220
a las penas que lloráis,
y os salvo yo, me acusáis
y no a Colón, que estáis ciega.
BEATRIZ
Tan sólo acuso a mi suerte.
DON PEDRO
Y perdéis el tiempo en vano; 225
y a quien os tiende la mano
en desventura tan fuerte,
cerráis, Beatriz, los oídos.
BEATRIZ
¿Cuáles son vuestros consejos?
DON PEDRO
Huyamos, señora, y lejos, 230
pues nos vemos perseguidos.
Estáis en Palos, Beatriz;
ya una nave se apareja;
si esta noche el puerto deja
podéis llamaros feliz. 235
BEATRIZ
¡Dejar la patria!
DON PEDRO
En España
no tenéis lugar seguro.
BEATRIZ
Mis deudos...
DON PEDRO
Yo os aseguro
si me seguís de su saña.
BEATRIZ
¿No veis que mi honor se estrella 240
si con vos...?
DON PEDRO
¿Pues hasta aquí
no fue lo mismo?
BEATRIZ
¡Ay de mí!
DON PEDRO
¿Os duele, Beatriz la bella,
deberme vida y honor?
Pues por Cristo que ya es tarde: 245
cuanto andéis de más cobarde,
tanto os ponéis de peor.
BEATRIZ
Nada peor es posible.
DON PEDRO
Sí tal; peor es morir.
BEATRIZ
No; que sin fama vivir 250
es el mal más insufrible.
DON PEDRO
Señora, a todo hay remedio.
BEATRIZ
¿Por qué en decirlo tardáis?
DON PEDRO
El temor de si os negáis...
BEATRIZ
Si es honrado vuestro medio... 255
DON PEDRO
Eslo, a fe de caballero,
—36→
y con él todo se alcanza.
BEATRIZ
Decidlo, pues, sin tardanza,
que ya con ansia lo espero.
DON PEDRO

  (Después de vacilar algunos instantes.) 

Por tan extraño camino 260
os halláis bajo mi amparo,
que es ya, señora, harto claro
lo que ha dispuesto el destino.
Yo os conocí en el aurora
de la vida y la belleza: 265
quien vio vuestra gentileza,
¿no es sabido que os adora?
 

(BEATRIZ va a interrumpirle.)

 
No, Beatriz: dejadme hablar,
pues así lo habéis querido;
aquel mi tiempo perdido 270
dejadme al menos llorar.
Sí: al despuntar tu hermosura,
como la rosa temprana,
fresca, olorosa, lozana,
yo te vi por desventura; 275
de entonces, siempre en tu calle
me viste amante leal:
antes estaba a tu umbral
que el sol llegara a alumbralle.
Fui tu sombra por dos años, 280
tú en ellos me consentiste;
si luego infiel me vendiste,
culpa fue de artes y engaños...
BEATRIZ
No más, no más: mi paciencia
no alcanza a tanto sufrir. 285
¿Qué os vendí, osasteis decir?
¡Yo engañaros! -No en conciencia.
Verdad es, fuisteis amante,
pero amado... no por cierto.
¿Cuándo ese umbral os fue abierto, 290
en que estabais tan constante?
DON PEDRO
¡Oh traición! ¿Hora negáis?
¿Y cien billetes de amores
que recibisteis?
BEATRIZ
¿Favores
—37→
en respuesta me mostráis? 295
Que tolere una doncella
delirios de una pasión,
puede probar compasión...
DON PEDRO
¿A tal me trajo mi estrella?
¿También aquí me insultáis? 300
¿A tanto el orgullo alcanza,
que a vuestra sola esperanza
frenética renunciáis?
¿Qué ha de ser de vos, Beatriz;
qué fuera, diré mejor, 305
sin este sincero amor
que maltratáis, infeliz?
En fin, no el tiempo, que vuela,
perdamos necios hablando;
la nave os está esperando, 310
fuerza es darnos a la vela.
Yo os diré, ya sin rodeos,
lo que os prepara la suerte:
en España infamia y muerte;
salvaros son mis deseos, 315
salvaros vida y honor.
BEATRIZ
¿Qué es una sin otra cosa?
DON PEDRO
Pues sólo siendo mi esposa...
BEATRIZ
¡Vuestra esposa yo! ¡Qué horror!
DON PEDRO
¡Horror, Beatriz! -¿Tan horrendo 320
me hizo el cielo a vuestros ojos?
¿Rencores pagan y enojos
los extremos que estáis viendo?
BEATRIZ
¿Sabéis, don Pedro, sabéis,
que es ya delito el amarme? 325
DON PEDRO
No, no esperéis engañarme.
BEATRIZ
Soy ya esposa; ¿lo entendéis?
DON PEDRO
Mentís, Beatriz.
BEATRIZ
Os lo juro.
DON PEDRO
Mentís; mentís.
BEATRIZ
¿Para qué?
Colón tiene ya mi fe. 330
DON PEDRO
La ha perdido. Es un perjuro.
BEATRIZ
Cuenta dará ante el Eterno
de su delito: entre tanto
—38→
no es mi lazo menos santo.
DON PEDRO
Si se empeña el mismo infierno335
no saldréis de mi poder:
Beatriz, tenedlo entendido,
no seré vuestro marido...


Escena III

 

Dichos, y CHACÓN.

 
 

Éste entra despavorido interrumpiendo a DON PEDRO y asiéndole del brazo. -DOÑA BEATRIZ se sienta, y LUCÍA se le acerca para sostenerla y consolarla.

 
CHACÓN
¡Señor!
DON PEDRO
¡Chacón!
CHACÓN
A correr.
DON PEDRO
¡Vive Dios!... No más locuras. 340
CHACÓN
Locura será esperar,
démonos prisa escapar.
DON PEDRO
¿Qué sucede?
CHACÓN
Desventuras
muy largas y tengo priesa.
Anda el diablo en Cantillana8; 345
vámonos pronto, o mañana
viene un fraile, nos confiesa
y en seguida...
DON PEDRO
Yo te mato
si no acabas de explicarte.
CHACÓN
Pues señor, escucha aparte 350
que es negocio de recato.
Tú te fuistes a la nave,
me enviaste a los caballos...
¡Oh Dios, lo que son tus fallos!
DON PEDRO
Abrevie, Chacón, acabe. 355
CHACÓN
A espaldas de ese convento,
allá junto a las tres cruces,
al volverme di de bruces
con un hombre. -Cual si ciento
me cercaran me asusté; 360
y al preguntarme quién soy,
—39→
ni sé qué nombre me doy,
ni qué diablos contesté.
Él me agarra del gañote
y pregunta y repregunta 365
por ti, y tu dama presunta:
yo en medio de mi cerote...
DON PEDRO
¿Qué dijiste?
CHACÓN
Mil mentiras;
y en los dimes y diretes,
yo recibiendo moquetes, 370
él desfogando sus iras,
oigo la voz del morillo
que grita: «¡Chacón! ¡Chacón!»
Alienta mi corazón
y respondo: «Aquí, esclavillo.» 375
Vuela hacia mí, cual saeta;
siento que el otro me afloja,
y sobre el moro se arroja:
mas no contó con la treta;
le tiendo la zancadilla, 380
viene al suelo dando voces,
y yo moliéndole a coces
le ablando bien la espaldilla.
Pero Alí, que es impaciente,
y amigo de usar del hierro, 385
diciéndole: «Calla, perro»,
le dio tan furiosamente
con el puñal...
DON PEDRO
¿Y después?
CHACÓN
Clama el hombre confesión;
yo me escapo...
DON PEDRO
¿En conclusión?
390
CHACÓN
Te lo cuento, como ves.
DON PEDRO
Funesto lance, por Dios.
CHACÓN
Sobre todo para el muerto.
DON PEDRO
¿Con que murió?
CHACÓN
Sí por cierto;
y en pocos días van dos. 395
DON PEDRO
Vuela a la orilla, Chacón;
que acerquen luego la lancha.
CHACÓN
¿Y si hay otro que me engancha?
  —40→  
DON PEDRO
De hablar no es ésta ocasión.
 

(Vase CHACÓN.)

 


Escena IV

 

DOÑA BEATRIZ. -DON PEDRO. -LUCÍA.

 
DON PEDRO
Chacón, señora, me avisa 400
que nos vienen persiguiendo;
que ya el rumor se está oyendo;
que la gente se divisa.
No tardéis más, si el vivir
y el honor tenéis en algo. 405
BEATRIZ
Don Pedro, de aquí no salgo;
resuelta estoy a morir.
DON PEDRO
Beatriz, ya raya en locura...
BEATRIZ
No os canséis que no saldré.
DON PEDRO
Mirad...
BEATRIZ
No miro...
DON PEDRO
Que haré
410
lo que no vuestra cordura.
Hemos de marchar, y luego:
no me repliquéis, Beatriz,
harto he sido ya infeliz
por obedeceros ciego. 415
BEATRIZ
Por el alma de mi hermano
os juro que no me voy;
aún no sabéis lo que soy.
DON PEDRO
Mujer; y estáis en mi mano;
y estamos en tal extremo, 420
que por salvarme y salvaros
ha de ser fuerza obligaros...
BEATRIZ
Es en vano, nada temo.
DON PEDRO
Ved que no basta paciencia
a sufrir tal desvarío; 425
vos queréis que, a pesar mío,
llegue a usar de la violencia.
Me seguiréis, vive Dios:
que la vida aquí arriesgamos,
y no es bien que la perdamos 430
neciamente ambos a dos.
  —41→  
 

(En el momento de decidirse, DON PEDRO a asir a DOÑA BEATRIZ del brazo para sacarla de la choza, oyéndose rumor de voces y pasos, se detiene. -DOÑA BEATRIZ permanece impasible.)

 
DON PEDRO
¡Pesia mi vida, es ya tarde!
Mal haya, amén mi templanza.


Escena V

 

Dichos. -CHACÓN, que entra corriendo.

 
CHACÓN
Señor, ya no hay esperanza.
DON PEDRO
¿Por qué no, bufón cobarde? 435
CHACÓN
Porque viene en pos de mí
tanto mosquete y venablo,
tanto fraile, o tanto diablo...
DON PEDRO
¿Qué es lo que buscan?
CHACÓN
A ti.
DON PEDRO

  (A BEATRIZ.) 

¿Lo oís, señora?
BEATRIZ
Huid vos,
440
que podéis amar la vida;
yo me daré por servida
si me libra de ella Dios.
CHACÓN
Bueno está, mas ya están cerca.
DON PEDRO
Seguidme, Beatriz, seguidme. 445
O de no...
 

(Lleva la mano como involuntariamente al puño de la espada.)

 
BEATRIZ
No voy: heridme.
CHACÓN
Lo mereciera por terca.
 

(Óyese más inmediato el rumor.)

 
DON PEDRO
Cierra esa puerta, Chacón,
ganemos algún momento.
CHACÓN

  (Cerrando.) 

Señor, si la tira el viento. 450
UNO

  (Dentro.) 

Abre, asesino, ladrón.
CHACÓN
Pues señor, le han conocido.
DON PEDRO

 (A BEATRIZ.) 

¿Lo veis, señora, lo veis?
UNO

  (Dentro.) 

Abrid, o muertos seréis.
DON PEDRO

  (A BEATRIZ.) 

Gozaos: ya estoy perdido. 455
UNO

  (Dentro.) 

Echad abajo esa puerta,
pues que no quieren abrir.
 

(Voces y golpes.)

 
  —42→  
DON PEDRO
Yo sé que voy a morir,
mas vos conmigo; estad cierta.
CHACÓN
¿Abriré?
DON PEDRO
No me han vencido.
460
CHACÓN
Pues no hay hueco ni ventana.
DON PEDRO

  (Con un ademán de alegría.) 

Esa lámpara.
CHACÓN

  (Dándosela.) 

¡Santa Ana!
¿Candelita has prometido?
 

(BEATRIZ se esconde en los brazos de LUCÍA. -CHACÓN aterrado nada mira. -DON PEDRO corre con la lámpara a uno de los techos de paja y le prende fuego, extendiéndose éste con rapidez a toda la choza, hasta el fin del cuadro.)

 
DON PEDRO
Hora pronto hemos de ver

  (Aparte.) 

que la choza es muy pequeña, 465
todo en ella, paja y leña;
y muy en breve ha de arder.
 

(Redoblando los golpes.)

 
BEATRIZ
Don Pedro, abrid.
CHACÓN

 (Reparando el fuego.) 

San Antonio.
Este hombre ha puesto fuego;
digo que pasa por lego 470
con él, el mismo demonio.
BEATRIZ
¡Fuego! Válganos el cielo.
LUCÍA
Piedad, que nos abrasamos.
DON PEDRO
Como quisisteis estamos.
CHACÓN
¡Horca o fuego! -No hay consuelo. 475
 

(La puerta cede y se rompe, las llamas desquician al mismo tiempo la techumbre, de manera que los que iban a entrar en el edificio, retroceden horrorizados. Desmoronada la choza, las llamas iluminan la escena, dejando ver en el fondo la decoración del cuadro segundo, y entre el foro y el proscenio, marineros y paisanos armados con algunos frailes y mujeres. -Al caer la puerta y desplomarse el techo, DOÑA BEATRIZ se desmaya en los brazos de LUCÍA: DON PEDRO agarra de un brazo a CHACÓN y le obliga a tomar el de la criada, pasando el brazo izquierdo por la cintura de la dama, y saca la espada.)

 
  —43→  
DON PEDRO
Ya estamos libres, Chacón:

  (A BEATRIZ.) 

y otra vez eres tú mía.

 (A CHACÓN.)  

Ase del brazo a Lucía.
No perdamos la ocasión.
 

(Dirígese llevando a DOÑA BEATRIZ, y seguido por CHACÓN y LUCÍA, hacia los que rodean la choza incendiada, amenazándoles con la espada, y ellos se dispersan. -La ejecución de esta escena exige suma rapidez.)