Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.

Volumen 9 - carta nº 244

De AMÓS DE ESCALANTE. (A Madrid)
A   MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO

Santander, 21 mayo 1888

Mi querido amigo: Mi sobrino Carlos Pombo y Escalante termina ahora sus estudios de quinto año de Jurisprudencia.

Deseo yo ayudar en lo posible al mayor lucimiento de sus exámenes de fin de curso, interesando en ello a sus profesores y jueces, que son: Don Rafael Conde y Luque, de Derecho Internacional, y don Tomás Montejo Rica, de Derecho Procesal.

Ruego a Vd. pues, muy encarecidamente, que ya por sí, ya por medio de sus mayores amigos en ese Claustro, medie con los citados señores, para que en cuanto posible y justo, logre yo un deseo que el muchacho merece por sus excelentes prendas de formalidad y despejo.

Mis ojos me dejaron por fin leer alguna cosa. No he leído sin embargo, toda la admirable introducción a la Historia de las Ideas Estéticas en España en el siglo XIX, y aún la leo a saltos, porque no puedo de otra manera.

Aquel análisis de Goethe y Schiller me parece maravilloso y creo que Wagner, con toda su gigante soberbia, se hubiera regocijado de verse tan sutilmente conocido. Ahora, un recelo. ¿Aguantará la relación del movimiento estético entre nosotros y en nuestros días, el grave peso de tan robusta introducción? Pienso que sí, cuando Vd. se la ha puesto; pero no he sabido defenderme de este amago de duda.

De cualquier modo, cada nuevo libro de Vd., mi querido amigo, renueva el asombro que causan su saber incomparable y su estilo tan suelto, claro y vibrante que de la substancia más árida hace alimento gustoso y fácil para el paladar más tardo y debil. ¡Qué feliz y salado comentario el de Vd. al dicho de Juvenal: Facit indignatio versum!

Con recuerdos a los buenos amigos en ésa le deja su admirador y amigo,

Amós de Escalante

 

Menéndez Pelayo, varias cartas , p. 61-62.