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Enciclopedia de libros españoles de aforismos. Tomo III

Demetrio Fernández Muñoz (ed.)

Alberto CHESSA, Un solo punto suspensivo

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 75 págs.

La poesía es el esperanto de la literatura: una lengua universal que muy pocos hablan y casi nadie entiende.

En algunas caricias se abren arenas movedizas.

Nunca se llega a ser adulto por completo. Quien sí lo consigue es porque nunca fue del todo niño.

La ironía hay que merecérsela.

El susurro es el sexo de la voz.

Nada tan diferente como el sexo con la misma persona a las mismas edades.

Voy con una vida de retraso.

Cuando nos quedamos sin palabras. Ahí es precisamente donde (y cuando) empieza a incubarse el poema.

Una escama de noche coagula la mañana.

Se desparraman los remordimientos como se abre un paraguas a cubierto.

El soneto es (o era) la mili del poeta.

Se miró en la ventana. No le quedó otra que saltar por el espejo.

En todos los tesoros nos aguarda un mapa.

El pasado -se sabe- es un lugar apócrifo.

Álvaro SALVADOR, La vida no te espera

Renacimiento, Sevilla, 2014, 74 págs.

La vida no te espera.

La verdad de los precios es proporcional a la del amor: más que ayer, pero menos que mañana.

¡Qué vértigo comprar unos calcetines que puedan sobrevivirnos!

Lo peor del siglo XXI es que acaba de empezar.

El pasado llega tarde.

Bienaventurados los que dudan.

Si quieres que sea sublime, hazlo breve.

Contra el miedo: dos.

La lluvia cae sobre su belleza con un ruido de aplauso.

Ander MAYORA & José Luis TRULLO, Meandros

Apeadero de Aforistas & Themata, 2020, 60 págs.

Lo que la naturaleza ha unido no lo puede separar el hombre, so pena de resultar él mismo despedazado. (JL)

La naturaleza se oculta para mostrarse en lo más cercano: el ojo mismo. (AM)

Arriba y abajo: una sola verdad, si es vertical. (JL)

El camino desaparece cuando el que va es idéntico al que vuelve. (JL)

Pocas son las gotas de lluvia que abarca nuestra boca. (AM)

La sabiduría anida a flor de piel. (AM)

Cuando el tiempo describe un círculo, alcanza la suprema conciliación. La recta es necesariamente cainita. (JL)

El excremento es una prueba de vida. (AM)

Andrés GÓMEZ-FLORES, Morirá Ferlosio y estaremos más solos

La isla de Siltolá, Sevilla, 2018, 118 págs.

Buscarse uno como se busca una sombra.

Un abrazo en legítima defensa.

La memoria es la ceniza de la vida.

El hambre piensa.

El futuro solo existe una vez.

Andrés NEUMAN, Caso de duda

Cuadernos del Vigía, Granada, 2016, 54 págs.

Se sale por deseo y se llega por error.

Mire quien mire, el mar sabe ser espejo.

Ser un vago incansable.

La intimidad se hace selva.

El amor es entrópico. La soledad, simétrica.

Nos espera una larga infancia.

Sísifo tiene mucha nada que hacer.

La eternidad encoge.

Media vida planeando lo que seremos, la otra media pensando en lo que no hemos sido.

El insomnio insemina.

La ironía como arte marcial

El aforismo llega después y entonces se anticipa.

El pasado es una lesión sintáctica.

Leer fabrica tiempo.

Andrés NEUMAN, El equilibrista

Acantilado, Barcelona, 2005, 143 págs.

Somos testigos de lo que no vemos.

Mirar es una antología.

El pasado también transcurre.

El olvido requiere una buena memoria.

No confundir la moral con quienes la defienden.

Conviene burlarse un poco de casi todo, y mucho de casi nada.

Paz: placer con disciplina.

Al morir, el pescador pondrá boca de pez.

El odio puede ser la semilla, pero difícilmente el fruto.

La voluntad es un músculo.

A su modo, todo hijo es un lento autorretrato.

El futuro ensaya en la memoria.

La imaginación completa la verdad.

¿La tradición como ancla o como trampolín?

Leer como si, dentro de un minuto, nos fueran a apagar la luz.

Brevedad, cuán larga eres.

Lo que asevera un aforismo podría ser verdad solo después de escrito.

Andrés ORTIZ-OSÉS, Del sentido de vivir y otros sinsentidos

Anthropos, 2005, 142 págs.

La aforística como conocimiento trasero: trastero.

El logos habla porque el mito posibilita hablar: fabular.

Resignarse es signarse doblemente: persignarse.

Apertura versus apretura.

Sentido vendo y para mí no tengo.

La cópula «es» significa «es decir»: lenguaje.

No te vengues: en su vivir le va su penitencia.

Limitar con el otro: limarse mutuamente.

Antonio RIVERO TARAVILLO, La orfandad de Orfeo

Apeadero de Aforistas & Themata, 2020, 84 págs.

Estoy reescribiendo el mundo. Ya voy por la letra B.

Orfandad viene de Orfeo: todo el que canta es huérfano.

Como un teclado predictivo, la muerte es la corrección automática de la vida.

Un escritor que va a más: cada vez borra mejor.

Aunque escrita en nuestra lengua, la poesía es siempre otro idioma.

El gran poeta no es solo el que da en el blanco: también sabe -intuye- dónde colocar la diana.

Bien mirada, toda muerte es un desenlace fetal.

En general, todo es excepción.

Todos los aforismos tienen algo de viento. No sabemos si traen cosas o se las llevan.

Los aforismos son piropos que decimos a la realidad.

El aforismo es un travestido: va ataviado de prosa, pero es bajo ella poesía.

Las dos líneas de un buen aforismo, piedras que al frotarlas dan la chispa del fuego.

Llamamos angelical al ser que más podría destruirnos.

En las vidrieras, los ángeles siempre usan lentillas.

Carmen CAMACHO, Minimás

Baile del Sol, 2008, 108 págs.

Descarto -no del todo- que haya alguien más que sea yo.

La guerra de mis galaxias.

Uno es multitud.

Calladita estoy más triste.

Poesía: palabra que acontece.

Tallo tu nombre en el Google, junto al mío.

Un campo de girasoles ante un eclipse.

(T)acto.

Dejad que los dioses se acerquen a mí.

Poesía lo serás tú.

... Y la tristeza como unas medias rotas.

Yo estoy hecha de derribos.

Letraplejia.

Para el amigo que viene, era el puente de plata.

Prefiero tener un pasado a vivir en subjuntivo.

Yo lisboo, tú lisboas, él lisboa...

Sevilla está barroca de remate.

Escupir en la Fontana di Trevi.

Estoy mar.

Abrir los ojos hasta verte.

Times New Woman.

Punto y amarte.

Asombrarse de luz.

Carmen CANET, Legere, eligere, 99 aforismos sobre la lectura

Apeadero de Aforistas & Cypress. 2021, 68 págs.

Releer es revivir.

Cuando se lee a un buen ritmo ya se camina distinto.

Lector aprovechado: se podía leer en su cuerpo.

A veces tienes que volver a un libro, como el mar, como el amor.

Se volvió escritor mientras leía. Cuando escribía era lector.

Persona lectora: a pie de página.

Daniel MOCHER, Jon BENGOETXEA, Michel F. & Daniel RIVALLO, El punto sobre la y

Talón de Aquiles, 2021, 76 págs.

DANIEL MOCHER

La alegría es el asunto más serio.

Los planes de futuro siempre llegan tarde.

Hay quien se hace el muerto toda la vida.

Esa lluvia fina que te coge sorpresa: un buen aforismo.

En el vacío encajan todas las piezas.

JON BENGOETXEA

La línea que separa el bien del mal tiene forma de pliegue cerebral.

La muerte es la última primera vez.

Somos tesoros con el mapa dentro.

Vivimos para nacer.

Cuando estés con el móvil recuerda que nos enseñaron a no agachar la cabeza ante nada ni ante nadie.

MICHEL F.

Duda entre ajardinar su vida o echarse al monte.

Los hijos son poemas en fuga.

Temblor: estado natural del pensamiento.

Algunos fracasos son el ejemplo a seguir.

Se traiciona a sí misma aquella palabra que no es puente.

Donde antes había dioses ahora vuelan las moscas.

En la felicidad no se mira los lados.

La palabra es el verdadero gato de Schrodinger.

DANIEL RIVALLO

El panta rei de un escupitajo.

Las inclemencias meteorológicas de un estornudo.

Un aforismo es un gran despliegue de pocas palabras.

En verano la luz se muere en alejandrinos.

Soy una forma de existenCía.

Las tormentas eclécticas.

Demetrio FERNÁNDEZ MUÑOZ, Plancton

Detorres, Córdoba, 2023, 68 págs.

El universo es un rosetón apedreado

La timidez te dispara en el ala sin salir del nido.

Incluso en la intemperie, el sueño es un hogar.

Mi principio de elección, el azar de tu margen.

Dios no tiene rodillas.

La orilla es la esencia de un estado.

Todas las firmas nacieron de una duda.

Me abrazó un pájaro y, por fin, caí en picado.

El miedo es una sombra chinesca con las luces apagadas.

Aforismo: desproporción áurea.

Eduardo SCALA, La semilla de Sissa

Delirio, Salamanca, 2010, 63 págs.

AjedreZ: Dos Letras extremas abren y cierran una Palabra-Universo.

Cada grano muere y renace en múltiples panes.

En el Cuadrado causal lo casual acontece.

El Universo está hecho de cuadrados encajados.

El Cuadrado Blanquinegro es Círculo Gris en movimiento.

Las Figuras Negras. Y sus sombras.

Cada Figura es el Instante.

Ver. Mover. Conmover.

El Rey y el Peón caminan lentamente con la máxima energía.

Jugar sin jugar. Que la jugada nos juegue. Conjugar.

AjedreZ, infinita palabra.

Eduardo TORRES, El hombre que rayaba los periódicos

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2020, 82 págs.

Gente sucediendo hasta que llegó la memoria

anochece en quien arrastra la queja

el yo que llora ante mi yo

al igual que ella yo vivía en un accidente

endeudarse de realidad

llama a las cosas por su sombra

el artista traduce una tiniebla

en el etcétera ha leído estrategias muy exactas

todo lo que reestablece la arbitrariedad

años desempolvados a última hora

sin la ficción sería mucho peor

el paso del tiempo le lleva a recorrer sus afueras

fiel a su pasión fragmentaria

pero también hay silencios para descubrirnos

era el momento de derribar el contexto

parece un delirio pero es un autorretrato para decir yo

no para de subrayar como aforista.

Emilio CALVO MORA, Catedral en construcción

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 78 págs.

La virtud extrema mira de reojo al puro vicio.

Perder el norte es, a veces, ganar todos los demás puntos cardinales.

El censor más locuaz es el olvido.

La verdad, incluso la más noble y necesaria, nunca debe arruinar una buena historia.

Dios se cuida mucho de no alardear. Un milagro es un descuido suyo.

No sabes el pasado que te espera.

La luz, como Ícaro, tensando de pájaros el cielo.

Todo lo que no se dice acaba por mordernos.

Puro embeleso el del agua en la acequia.

Volver a casa con el silencio dentro como una música.

El abismo se explora con los ojos cerrados. El vértigo te aturde si los abres. La realidad es cosa de aturdidos.

Soy una gárgola. La catedral me crece debajo.

Emilio CALVO DE MORA, Un poco de swing, por favor. Aforismos sobre jazz

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 64 págs.

Todo lo que no es jazz podría serlo.

El jazz es el hiato del ritmo; el diptongo del corazón.

El jazz, más que semántica, es sintaxis; más que significado, arquitectura.

Tócala otra vez, Sam, pero que no se sepa qué canción es.

El jazz ama el orden como la vida el caos.

Emilio LÓPEZ MEDINA, 69 aforismos porno & 96 aforismos antisexistas

Libros al Albur, 2016, 56 págs.

La mente es el escenario complicado del bajo vientre.

Lo único real de los sueños es que dejan bragas y calzoncillos mojados.

Quién pudiera sentir el cerebro en el acto de pensar de igual manera a como siente el miembro viril o el femenil en el acto sexual...

Después de cada relación sexual hay que reaprender a sufrir.

No te fíes nunca de ningune persone, sobre todo porque puede enamorarse de alguien.

En amores no hay gente madure.

Emilio LÓPEZ MEDINA, El mundo que se abre, 99 aforismos sobre filosofía

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2022, 70 págs.

Si filósofo es aquel que se asombra de las cosas de este mundo, según dijo Platón, entonces el buen filósofo sería aquel que se espanta.

Un aforismo no es solo un pensamiento más o menos agudo que te asalta, el aforismo también es toda una cosmovisión que te asalta en forma de aforismo. Y es que el hombre es una consciencia, una caja de resonancia del mundo y de la vida.

Desde el inicio de la cultura existen dos clases de filósofos (como existen dos clases de políticos): la del filósofo que dona a los hombres el fuego y la del filósofo pirómano.

La filosofía es una reflexión mediante la cual toda materia extraña se hace próxima y familiar, y toda materia familiar y próxima se convierte en extraña.

Filosofía: conjunto de errores para afrontar la existencia.

Bien es verdad que si raros somos los filósofos, más raros son aquellos que no filosofan nunca.

Emilio LÓPEZ MEDINA, El sexo

Apeadero de Aforistas & Themata, 2022, 149 págs.

Nuestro ser social: animal con el sexo cubierto. Animal adecuadamente vestido para el teatro.

El hombre está hecho por un instante de locura en una eterna sinrazón.

¿Amores jóvenes...? Un ángel vivo y un payaso.

Amor es ese fuego que busca otro fuego para poder consumirse antes.

El amor está más allá de la justicia, el odio más acá.

La felicidad siempre quiere más. Este es el comienzo de la infelicidad.

La felicidad solo comienza a ser identificada cuando comienza a perderse.

O quizás el sexo está puesto para que se nos olvide la muerte. Quizás por eso dan ganas de morirse después.

Emilio LÓPEZ MEDINA, La diversión

Apeadero de Aforistas & Themata, 2021, 149 págs.

Nosotros pensamos las cosas como efímeras y las vivimos como eternas. Nosotros nos pensamos como eternos y vivimos como seres efímeros.

Efectivamente, esta es la sociedad del bien-estar, no del bien-ser.

Y es que nadie más difícil de cambiar que aquel que se cree bueno.

Nada más insoportable que una persona que se aburre.

Uno, cuando viaja, jamás deja su pueblo.

La rutina es un preservativo contra la locura.

No hay que alegrarse de las fiestas hasta que no hayan pasado.

La felicidad es tan difícil que nos conformamos con su esperanza. La felicidad es la promesa de la felicidad.

Emilio LÓPEZ MEDINA, La ignorancia

Apeadero de Aforistas & Themata, 2020, 173 págs.

Estar pensando es estar sintiendo.

La evidencia es en sí misma. El hombre es su instrumento.

Después de pensar algo, el sentido con que se construye mediante el lenguaje es su verdad.

Dios, el ente más surrealista.

Donde no hay ciencia hay palabras.

Algunas cosas no se descubren más que creándolas.

Lo que se piensa como posible ya es posible.

No te fíes de nadie. Y menos de ti.

La juventud es la edad en la que los profesores nos parecen genios.

No hay maestros, sino, en la otra parte, gente desorientada.

Y es que el tonto, como está fuera de la lógica de las cosas, le encuentra explicaciones a todo.

La sabiduría nos abandona cuando no estamos a su altura moral.

Paradójicamente, la ignorancia siempre quiere tener razón.

Emilio LÓPEZ MEDINA, La verdad de la belleza, 99 aforismo sobre el arte

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 62 págs.

La naturaleza oculta lo mejor a fin de que el hombre lo descubra haciendo arte.

Sacar su mirada de sí mismo. He ahí lo que pretende el artista. Con ello, él saca su mundo de sí, y de esta manera lo crea para los demás.

Si no fuera por la transverdad del arte, la Verdad sería una cárcel insoportable.

El genio lo da Dios, pero el talento lo guía.

Con el arte, la emoción se convierte en Moral.

Felix TRULL, La lección de Pulgarcito

Karima, 2019, 82 págs.

El modo de buscarlo forma parte consustancial de la validez de lo encontrado.

Solo los valientes elogian por la espalda.

La diferencia entre un refrán y un buen aforismo es que este último te deja en la duda. A veces, para siempre.

Madurar es decir basta justo a tiempo.

La piedra que lancé con 20 años acaba de golpearme por la espalda, pasados los 50.

Nada evidencia tanto nuestro auténtico fondo moral como las motivaciones que atribuimos a las acciones de los demás.

Solo hay algo más ridículo que un vanguardista en un museo, y es un funcionario antisistema.

Todas las razones son de peso. Por eso se hunden tan deprisa.

Todos somos fijos discontinuos de nosotros mismos.

Pensar es poner(se) en duda.

Estaba a punto de extender mi dedo acusador pero, por fortuna, el espejo se interpuso y me detuve a tiempo.

Aforismo sublime: para los doctos tenía tres sentidos; para los legos, otros tres, completamente distintos.

Tú: cañón de luz.

Felix TRULL, Líneas de flotación

Libros al Albur, 2018, 50 págs.

Tanto fluir, tanto fluir, acabo yéndose todo por el sumidero.

Lo que la pantalla ha unido la pantalla lo mantiene separado.

El no ya lo tenemos, y se llama muerte. A partir de ahí, todo afirma.

Nuestros silencios copulan como posesos.

Uno de los mayores placeres de la vida es ser llamado y no acudir.

La normalidad es del color del raro que la mira.

Si la escritura es un puente, ¿cuál es el río?

Mi plan B consiste en carecer de plan A.

La moda es una tradición en huida.

Es desesperante: cuanto más leo, más me queda por leer.

Cuando el aforista se suelta la melena, abrevia todavía más.

Felix TRULL & José Luis TRULLO, Nunca se sabe

Apeadero de Aforistas, 2021, 84 págs.

¿Pienso? Ni siquiera lo tengo claro.

La duda es una certeza nómada. La certeza, una duda sedentaria.

Sostenerle la mirada a la gorgona de la duda: negarse a decapitarla.

Ideología: pienso para los que no piensan.

Todo lo que toca la ideología lo acartona.

La dignidad es el sueldo diario de un espíritu en paz.

Amar es ver doble.

El conocimiento nos brinda la conciencia de la frontera; el amor, la pértiga.

Amar: llenarse volcándose.

Amar resulta agotador, pero no amar... puede acabar matando.

Ser no es ser percibido.

Lo eterno: lo exento.

Un corazón solo se apolilla cuando recuerda más que proyecta.

Fernando MENÉNDEZ, Dunas

Difácil, Valladolid, 2004, 80 págs.

Si la poesía es un vicio solitario, los poemas son un vicio público.

El poeta tiene el deber de escribir un pequeño libro denso.

En la vejez, tardes de infancia.

Mi alfabeto debe estar moldeado al vacío.

El amor es una metáfora sobre la metamorfosis.

La mayoría de críticos más que escribir críticas escriben adjetivos.

La mentira del siempre, la verdad del no sé.

Quiso ser poeta y se puso el sol de noche.

Fernando MENÉNDEZ, Los sueños de las sombras

Trea, Gijón, 2016, 102 págs.

Transformamos nuestra vida en una metáfora de la duda.

El tedio es la costumbre de no ser.

La felicidad como la certeza de lo inacabado.

Cada uno solo con su brizna de tiempo.

Después de todo, la incesante mudanza del instante.

Del fresco del rocío a los cerezos en flor, un verso de blanca sutileza.

La resistencia íntima del enmudecer.

Un gajo de luna cuelga de tus aforismos enhebrados de soledades y silencios.

Extender los dedos para acariciar la sombra del limonero y ser su luna.

El árbol genealógico de la casualidad.

Los aforismos son tu otra memoria.

Mientras tú piensas, la materia se transforma.

Todo hombre tiene su borrachera de principios.

Las edades de los hombres se miden por cansancios.

Los aforistas, como los profetas, son los pesimistas sin futuro.

Hay tantas estrellas como lunas y lunáticos.

Un sueño es una capa de nieve no cuajada.

Existimos entre deseos opuestos.

Nada se resuelve, todo se desplaza.

Cada uno tiene su pozo de ausencias.

La epidemia diaria de nuestras prisas.

Los frutos son las huellas sutiles del olvido.

El enojoso lloriqueo del yo virtual.

Maduras cuando te extrañas del mundo.

Fernando MENÉNDEZ, Tempo de silencios

Trea, Gijón, 2018, 102 págs.

Las sombras como el destino no tienen remordimientos.

Hay versos que sospechan de sus poetas.

Al hombre lo embauca ser inteligente.

Todo alumbramiento del presente se vuelve un lujo para el poeta.

La verbosa prosa del tiempo sobre la vejez.

La palabra cuanto menos se fragmenta más nos embosca.

El poder cuando detecta fragmentos de libertad los criminaliza.

El aforismo de una línea sin punto.

A por un aforismo que llovizne en la oscuridad.

La muerte llena de garabatos el pasado.

Tú y yo somos inmiscibles.

El hombre, un capullo de ilusiones.

Un aforismo es un esguince de la razón.

Quien ama nunca tiene explicación.

Fernando MENÉNDEZ, Tira líneas

Difácil, Valladolid, 2010, 72 págs.

En la insuficiencia de lo dicho vive la imaginación.

Los elogios nos dan a conocer a nuestro enemigo.

Cada hombre tiene su melodía doliente.

Dios ha creado el mundo con su dedo gordo.

Toda creación es una inmensidad póstuma.

Somos la ironía querida por el destino.

Más allá: una tautología superflua.

La memoria no solo tiene sus lagunas, también sus desiertos y sus exilios.

El ciego azar erótico del otro en el yo.

Donde acaba la ley empiezan los puntos de vista.

La poesía debería ser excepcional.

Es más evidente la duda que la certeza.

La prosa informa, la poesía forma.

El secreto de solo una vez.

Los textos discontinuos existen por razones morales.

El arte de llenar un hueco de inquietudes.

El aforismo es la dama libre entre los pensamientos.

Fernando MENÉNDEZ & José Ramón GONZÁLEZ, Fingimientos

Trea, Gijón, 2022, 62 págs.

SILVIA LÓPEZ ARIZA

La ausencia, la sombra nunca dibujada.

Aprovecha cada oportunidad para su ignorancia.

Una palabra me vino, una idea se fue.

El amor es un pliegue por donde llega la luz.

MARCO EDUARDO VARGAS RODGERS

Los olivos, como aforismos, maduran lentos.

La razón ofende a todas las ideologías.

No hay mayor dificultad que tener conciencia del silencio que nos rodea.

LUIS CURIEL

Solo el idealista se interesa por lo imposible.

Todo hombre tiene su campo de concentración.

MARÍA ISABEL SUÁREZ LUEGE

Bienaventurados los poetas que os mudáis de mentiras.

Un poema escupe la tragedia del silencio.

El principio de la poesía: los versos solo pueden engendrar versos.

MÁXIMO MENÉNDEZ MORÁN

La penumbra hospitalaria de los aforismos.

Los aforismos no tienen eterno retorno.

PABLO MONTALVO QUIRÁN

El amor es la audición de tu otro.

Los pensamientos son los arpegios del corazón.

ÁLVARO FERNÁNDEZ SIERRA

No sabemos si existe algún dios, pero sí existe la nostalgia luminosa del paraíso.

Dios es sordo y permanece sordo.

Nuestra mayor quimera: la avidez por lo absoluto.

MERCEDES SÁNCHEZ LOBERA

Vivimos en un baile de significados.

Tanto pensar para ser nubes.

Somos pequeñas metafísicas de infinito.

Florencio LUQUE, Caja de cromos

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 64 págs.

Seamos tolerantes hasta alcanzar la contradicción.

De tan inocente, predicaba con el ejemplo.

El inquietante silencio de las partituras.

El poema nunca es el mismo: espejo de quien lo lee.

Sombra: luz de luto.

La metáfora posee una identidad promiscua.

Desvelar un secreto es encontrar un plagio.

A la vejez siempre se llega joven.

Gabriel INSAUSTI, Estados de excepción

Libros al Albur, 2019, 54 págs.

La verdad requiere de tropos.

La belleza ha de hacerse de rogar.

La llave del domingo abre la jaula de la nada.

¿Servil? Ser vil.

La vida tiene efectos secundarios.

«Es por su bien» susurra toda sanguijuela.

En el momento en que abre la boca el escepticismo se refuta.

Es revelador en que haya que elegir entre la conversación y el beso.

Desde que existe el mando a distancia el mejor programa está en otro canal.

El aforismo es una destrucción creativa.

«Las cloacas del Estado», dicen. Qué redundancia.

La extraña intimidad de compartir paraguas.

El otro: ¿espejo o puerta?

La verdad es un valor de cambio.

¡El lobby! ¡Que viene el lobby!

El aforismo es la prisa de la prosa.

Dios se disfraza de rutina.

La etimología es ese leño en el que aferrarse en el naufragio del lenguaje.

La poesía es el único aparato en el que, para que se oiga mejor, se baja el volumen.

El yo es un texto, pero infestado de elipsis.

Gabriel INSAUSTI, Maneras de esperar

Libros del Aire, Cantabria, 2022, 68 págs.

Tu día, recuerda, lo mide tu sombra.

Siempre parece más interesante el libro que lee el vecino de asiento.

Alguien debería explicar la felicidad de ver llover desde ese porche donde nos hemos refugiado a la carrera.

¿Y la oficina de Sujetos Perdidos?

La creación más lograda se disfraza de descubrimiento.

Tengo ya preparado el recuerdo, solo espero que suceda.

Que la nieve no haga ruido casi la hace más blanca.

Es aún más bello: no sabe que lo estamos mirando.

Sentir que a algunas cosas les debes una mirada.

Amor libre, pleonasmo.

Todo libro es de aventuras.

Gemma PELLICER, Medidas extremas

Renacimiento, Sevilla, 2021, 124 págs.

Al tiempo le gusta brujulear como si estuviera encerrado en un reloj ingrávido.

La meta del aforista radica en seguir avanzando.

Cada vez que leemos, la imaginación nos lee.

Las traiciones se reconocen en el perfume distinguido con que vienen envueltas.

La plenitud nos deslíe por dentro.

El buen amor nos exime de nosotros.

La eternidad de la muerte solo dura un instante.

El pasado es un indicio inescrutable.

Y aunque lo olvides en sueños, recuerda siempre que eres mortal.

Los pensamientos breves no son cortos, ni viceversa.

La nada lo llena todo.

La verdad solo importa si conviene. Firmado: Pepito Grillo.

La imaginación pone a la realidad en su sitio.

La memoria colectiva del olvido cotidiano; el pan nuestro de cada día.

Los Reyes Magos son los niños.

Amar carece de raíces.

La imaginación nos real(i)za.

Guillermo PUERTO, Rastreo íntimo. Aforismos para mi supervivencia

Biblioteca Nueva, 2011, 190 págs.

La moral no es un conjunto de normas, sino de respetos.

Las creencias no son certezas, sino pautas.

No quiero que mi luz adquiera velocidad, sino sedimento.

La verdad transmitida con fines instrumentales deja de ser verdadera.

La nada de la nada es el todo. Dialéctica esperanzadora para desesperados.

Solo el que sabe, se sabe ignorante pero rastreador.

La verdad como estilo y como exilio de la paranoia.

La razón explica; la intuición implica.

Isabel BONO, Hielo seco

Isla de Siltolá, Sevilla, 2015, 56 págs.

Souvenir de la palma

Cierra los ojos. Sube por la ladera de un volcán. Parecerá que pisas tu propio corazón.

Souvenir del vértigo

A veces me acuerdo de cosas que nunca pasaron, y esos recuerdos me hielan la sangre.

Días de nada

Ni siquiera el viento detrás de los cristales.

En su justa simetría

No hay que ser otro para ser feliz.

Ojalá

Ojalá el paraíso perdido fueras tú y no me lo dijeras nunca.

Arenas movedizas

Serlo todo a la vez y recordarlo.

El corazón del mono

Tener la certeza de que uno es otro después de contar su vida.

Todo está en calma

Saber que todo es desierto y el viento se lo lleva.

Jaime FERNÁNDEZ, Centinelas del sueño

La isla de Siltolá, Sevilla, 2020, 110 págs.

Al contrario que la mentira, la verdad no necesita repetirse.

Las primeras impresiones no nos dan tiempo para engañarnos. Por eso nos parecen fiables.

La paradoja humilla al dogma y desvela su falsa unicidad.

El sospechoso número uno sospecha de todos.

Donde hay creación hay incertidumbre.

Tenemos los medios para no llegar a ningún fin.

El olor a tierra mojada se cuela por la ventana como una promesa que no esperábamos que se cumpliese.

Para creer no es preciso saberlo.

Jaime FERNÁNDEZ, Maniobras de distracción

Isla de Siltolá, Sevilla, 2018, 108 págs.

Siempre tiene algo de inquietante escuchar nuestro nombre

Se puede engañar con palabras, no a las palabras.

La paciencia que se acaba no era paciencia.

El humor baja los humos a la realidad.

Cuando todos hablan de lo mismo, eso de lo que hablan habla por ellos.

Si el presente conociera el futuro no se reconocería.

La vida da tantas vueltas que rara vez cae de pie.

La muerte es la verdad que parece más mentira.

Mirar es descomponer lo visto.

Jesús COTTA, Homo mysticus

Jánica & Cypress, 2021, 108 págs.

Dios aborrece la eugenesia. Qué poco amor el suyo si solo hubiera permitido nacer lo perfecto.

Si yo no existo porque sí, el universo tampoco.

La nada es un infinito que el ser abre a machetazos.

Todo recuerda a todo, pero nada es lo mismo.

La naturaleza sobrepasa la razón y la razón trasciende a la naturaleza.

¡Qué asombrosamente maravilloso es todo! ¿De dónde, pues, el barrunto de que me falta algo?

Es más feliz quien se propone ser bueno que quien se propone ser feliz.

La muerte no se lo lleva todo, sino más aún.

El universo se ríe por boca de los niños, con toda esa trasparencia.

La sombra del suicida aprieta un instante antes el gatillo.

Hay algo que es más que todo lo que existe: el amor que lo mantiene.

Dios es lo más allá y lo más acá del universo.

De la Luz solo se puede hablar a oscuras.

Dios anda componiendo su último poemario: el universo.

José Manuel BENÍTEZ ARIZA, En el corazón del bosque

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 84 págs.

La única soledad verdaderamente intolerable es la de quien busca una ocasión de hablar consigo mismo y encuentra que su interlocutor está siempre ocupado.

Atar muy en corto esa parte de nosotros mismos siempre dispuesta a desfilar.

Mi patria es privada.

Descubrí lo opresivo que puede llegar a ser el ruido de la primera vez que me dejaron a solas con el tictac de un reloj.

Motas de polvo: universos. La creación empieza con una sacudida de bayeta.

Morir es nuestro último acto social.

Después de muertos a todos se nos entiende un poco mejor.

Cuando me expreso con una lengua distinta a la mía nativa el actor que hay dentro de mí me guiña un ojo.

Sé de muchos para quienes mi ocio sería el equivalente a una condena a trabajos forzados.

Quien construyó la primera catedral se inspiró en un bosque. Y quedó muy descontento con la copia.

Juan KRUZ IGERABIDE, Hasta cuándo se puede tener razón

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 94 págs.

Bostezar como rebelión de fondo. Y de forma.

El aforismo es una manera discreta de profesar ignorancia.

La verdad no se conforma con la intención de decir la verdad.

Toda la verdad es un imposible.

¿Es el vacío parte del Universo o es el Universo parte del vacío?

Afirmar es apuntalar la duda.

La siesta imprime carácter.

Todo el arte de amar de Ovidio anulado por un parpadeo de ternura.

Escribir para ver qué pasa.

Admiro a los pensadores que llenan los abismos entre aforismo y aforismo.

La ciencia lo explica todo en parte.

Tengo la impresión de que existo a pesar de mí.

Lo que me sienta mal proviene de mí a través de ti.

Igual algo es Dios y no lo parece.

Gracias la vida, que aún no me ha matado.

Aforismos, de acuerdo. Pero, ¿hasta cuándo podemos tener razón? (Zagajewsky) Hasta antes de escribirlos.

Juan Manuel URÍA, Apuntes sobre pintura

Polibea, Madrid, 2022, 222 págs.

Pintar para acceder a la posibilidad de la pintura.

El pintor es el muecín que llama a un resurgimiento de la mirada.

¡Manchar, mancharlo todo!

Puedo imaginarme a Dios, con un lápiz entre los dientes, desplegando un gran papel sobre el suelo.

El realismo, esa trampa de la razón.

La actitud del aprendiz, siempre.

La inutilidad como libertad.

Como la línea recta, un buen cuadro tiende al infinito.

Caravaggio y la violencia de la luz.

Juan Manuel URÍA, Dos por la tarde

Apeadero de Aforistas & Themata, 2020, 80 págs.

Enamorarse supone cambiar inmediatamente de planes.

Manejar los miedos como se lleva una bandeja.

El fracaso es atractivo pero mal pagador.

Frases tan densas que más bien parecen pisapapeles.

El cuerdo renuncia al salto.

De una noria asusta más que no se mueva.

Pulir el error hasta que brille.

Un buen aforismo ha de ser redondo como un cuadrado.

Mi raíz está en el aire como una cometa.

El silencio también tiene su retórica.

Viejos con ojos de niño. El espíritu del todavía.

Primero tachar.

Juan Manuel URÍA, INFANCIA es lugar

Cypress, 2021, 84 págs.

Un espacio sin tiempo llamado infancia.

Territorio de la posibilidad, la infancia.

Mi hija me regresa. Ella tiene ese poder.

¡Cantar! ¡Quiero cantar! Y olvidar para qué se canta.

Una mirada construida y que construye.

Un espacio de resistencia, en definitiva, la infancia, la poesía y el silencio.

Juan VARO ZAFRA, Desaforado

Alhulia, 2002, 138 págs. págs.

Una buena solución es aquella a partir de la cual, y sin conocerlo previamente, se puede reformular el problema.

Aspiración a un tiempo cerrado, justificación de todas las morales.

Nunca debes aceptar lo que nunca te deban ofrecer.

Di la verdad como si mintieras y nadie dudará de tus mentiras.

Si un escritor es bueno, la mejor crítica a uno de sus libros debe ser su obra siguiente.

Lo bueno si largo, mientras bueno, dos veces mejor (cuatro veces bueno).

Ningún depredador tan paciente como el adulador.

Uno no es soberbio si dos no quieren.

La belleza prende de soslayo, harta de frente y asesina por la espalda.

Su más grande esfuerzo y también su mayor fracaso fue tratar de ser mediocre.

No hay hipnótico más fuerte que el remordimiento.

A lo más profundo ladra la nada.

No hay tacón más alto que un hábito.

Trabajar en un Leviatán que se muerde la cola.

Julián SERNA ARANGO, Menos es más

Anthropos, 2020, 94 págs.

Pensar resta certezas.

Antología de atributos, la definición es sesgada.

La realidad es el ripio del sueño al despertar.

De tanto hablar del mundo terminamos por crearlo.

La mente es la pieza que sobra en el rompecabezas positivista.

Cada género literario dispone de su propia ontología.

El sustantivo convierte la filosofía en mausoleo.

Si Dios prevé el azar, no es azar; si no lo prevé, no es Dios.

El tiempo es una escuadra de instantes kamikazes.

El aforismo oficia la liturgia de la pausa.

El aforismo es inevitable. No pide permiso, y menos, perdón.

Karlos LINAZASORO, Buzón de sugerencias

Trea, Gijón, 2020, 112 págs.

He logrado lo que quería. Ahora no sé qué quería.

Nunca pidas consejos a Yoyatedije.

Antes de ponerse a escribir es conveniente saber cuándo ovula el poema.

También para estar en silencio hay que elegir las palabras más adecuadas.

Para luchar contra lo que está escrito hay que ser un gran lector.

La guerra es la distancia más corta entre dos puntos.

Llega un momento en que es mejor seguir las huellas de tus discípulos.

Siempre vamos a muerte.

Mantener las distancias para que luego el abrazo sea un choque de trenes.

Al silencio se le va la fuerza por la boca.

Un charco es un trozo de ruina de cielo.

Un axioma es lo que entra de lo que cabe.

La de vivir es casi siempre una vocación tardía.

Gracias a Dios, vamos tiritando.

La belleza no muere, se arruina.

La razón no tuvo infancia.

León MOLINA, Tirar la piedra y esconder la mano

La isla de Siltolá, Sevilla, 2019, 124 págs.

La belleza es una pregunta.

Sin carnalidad la espiritualidad deviene onanista.

Todos los poetas creen ser el albatros de Baudelaire.

Aun peor que un poema malo es un buen poema malo.

Solo deseo llegar a escribir lo mejor que yo sea capaz. Porque todo lo que hay más allá se conjura contra este empeño.

Aforismo. Agilidad mental a cámara lenta.

La edad te va poniendo manontróppico.

Soy la suma de futuros que sobrevivieron a la incertidumbre. Soy el éxito de mi antigüedad.

Cuando enciendes la luz multiplicas las sombras.

A más identidad, menos libertad.

«Yo» es una figura retórica.

Mirémoslo así: un hombre libre es aquel que no rinde pleitesía a sí mismo.

Manuel NEILA, Palabras en curso

Apeadero de Aforistas & Themata, 2021, 80 págs.

Cuando la vida se reduce a la mera vida, lector atento, se renuncia al sentido y al valor. Y en esas estamos.

El buen escritor es capaz de plagiar a diestro y siniestro, sin que se le note; el escrito mediocre, ni con esas.

A los artistas de vanguardia, pintar pasos de cebra en el desierto termina por parecerles una transgresión emocionante.

Los sueños realizados no resisten la prueba del tiempo.

A través de la poesía, la materia conoce lo que siente; a través de la filosofía, lo que piensa; a través del aforismo, lo que siente pensando.

Enseñanza del río: morir la vida; enseñanza del fuego: vivir la muerte.

Pensar, sentir, actuar: en este caso, el orden de los factores altera seriamente el resultado.

Senderos que se bifurcan: el de la buena vida y el de la vida buena.

La parte más elocuente del aforismo radica en el silencio que le precede y en el silencio que le sigue.

Desde Hipócrates, los aforismos propenden a cortar por lo sano.

Lugar común. Ideario connatural al pensamiento esclavo.

Con los primeros copos de nieve los ojos se llenan de recuerdos.

Aforismo. Luz de la palabra, sentencia con aguijón, gota de agua que colma el vaso, el ¡ay! de las cosas.

Mario PÉREZ ANTOLÍN, La más cruel de las certezas

Baile del Sol, 2013, 156 págs.

Al poner en orden las ideas, las desnaturalizamos.

¿Te has parado a pensar si detrás de tus caprichos hay una fisiología que manda y una psicología que obedece?

Lo que es difícil de explicar caerá pronto en el olvido.

La autoría carece de importancia: quién más, quién menos, todos hemos hecho nuestra contribución al imaginario.

La identidad llevada al extremo nos cosifica.

Los apotegmas que no empiezan con un presentimiento y no acaban con un estremecimiento carecen de amplitud argumentativa.

Me alimento intelectualmente de los descartes de otros pensadores. Con lo que ellos desprecian, yo hago mi obra.

Comportarse como si algo existiese es la única prueba de que exista.

Adelantarse a la moda y, cuando esta llegue, regresar a la tradición.

A medida que afianzo mis ideas se me borra mi ideología.

¡Qué decepción tan grande me he llevado al comprobar que con los fragmentos de la unidad se hace la pluralidad!

La ocasión es la auténtica soberana de la historia. Sin ella, no habría sucesos; tan solo proyectos desechados.

A mí no me interesa la verdad, sino su oponente: el descreimiento interrogativo.

¿Hay tantos mundos como mentes, o en un solo mundo caben todas las mentes?

Yo-eres-tú-soy-yo-en-otro y juntos hacemos que parezca fácil el intercambio.

Oscura lucidez que hace del pensar una cizalla que corta certidumbres.

Michel F., Contradicciones reunidas

La isla de Siltolá, Sevilla, 2022, 76 págs.

Confidencia: verdad en horario nocturno.

Cuando amas no hay plan B.

El parecido entre poetas confirma la promiscuidad de las musas.

Hasta donde yo he podido vivir (Epitafio).

La autoexigencia suple la falta de enemigos.

Una fe de erratas como tarjeta de presentación.

El ego es una rata, se alimenta de cualquier cosa.

Desde que no es nadie ha empezado a ser él.

Ser es estar de regreso.

Lo profundo busca la luz y viceversa.

Al final de la melancolía un cofre de monedas de oro.

El crepúsculo barre para casa

El mensaje de las nubes: proteja su imaginación.

Miguel AGUDO OROZCO, Impertérrito pluscuamperfecto

La isla de Siltolá, Sevilla, 2020, 62 págs.

Cuando llega junio la primavera se desmaya.

Si tú me dices ven, lo jode todo.

Somos enanos a escombros de gigantes.

¿La definición de aforismo es un aforismo?

La memoria es una aúntología.

El tornillo es el poema que le falta al poeta.

Nacionalismo: tabula raza.

Las etimologías son las mitologías de las palabras.

Parapienso, luego existo.

Miguel AGUDO OROZCO, Parapensares

La isla de Siltolá, Sevilla, 2017, 66 págs.

Te oDios.

Con esos ojos. Conejos osos.

Reír: volver a ir.

No dejes el ayer para mañana.

Donde pongo elogio, pongo la bala.

Soy 70% agua y 30% náufrago.

Me autoconvenció.

La ex-actitud del lenguaje.

LIBERATURA.

El aforismo nace, no crece, a veces se reproduce y

Miguel Ángel ARCAS, Aforemas

Fundación José Manuel Lara & Vandalia (nova), Sevilla, 2004, 64 págs.

Nunca podrás deshacerte de lo que has perdido.

Visible y velada: la poesía.

El placer es la felicidad que no quiere salir del cuerpo.

Ser breve y saciar.

Es ridículo pensar que el futuro

va a ponerse de acuerdo con nosotros.

La risa te cepilla los dientes del alma.

La mentira no supone el engaño.

También el silencio puede ser retórico.

Se equivocan quienes piensan que lo real

no hay que inventarlo.

Que la fortuna te dé su nombre.

Nadie tiene la culpa de que Dios esté siempre muriéndose.

Enigma: cuando la respuesta se pregunta.

Miguel Ángel ARCAS, Más realidad

Pre-Textos, Valencia, 2012, 68 págs.

Sospechar: reconstruir lo no visto.

Humillar debilita.

La ignorancia une mucho.

Noche, elipsis perfecta.

La fe une.

El conocimiento desata.

Una lengua es un mapa de lo posible.

La realidad alguna ver fue deseo.

La Naturaleza nunca fracasa.

La imaginación se opone a la retórica.

La Historia no se repite.

El futuro sí.

Todo punto es punto y seguido.

Un recuerdo, árbol entre la niebla.

Voz: andamio del alma, siempre en obras.

Un beso es un caballo de Troya.

Alcanzar la profundidad por elevación.

El aforema configura un pensar poético.

Breve artefacto líquido destinado a convocar el pensamiento.

El aforema no sabe.

Sencillamente afirma.

Un aforema es un mecanismo creativo de la duda.

Un aforema no es cierto ni incierto.

Un aforema crea su verdad.

Su aparición nos entrega más realidad.

Miguel Ángel GÓMEZ, Caída libre

Libros al Albur & Apeadero de Aforistas, 2019, 49 págs.

Los libros se tumban a esperar a oír tus pasos.

Hasta los mejores cometen errores. Yo tengo muchos con la cabeza alta.

El amor es como estar una última hora en la tierra.

Todo poema es como una huella dactilar en un plato de cristal.

Sabemos que lo inolvidable nos malcría.

Besos sanguíneos.

Olvidó su máscara, recuperó su cara.

Miguel Ángel GÓMEZ, Rol de esqueletos

Apeadero de Aforistas, 2021, 110 págs.

En el sofá tumbados, llorando, como sombras de miseria.

Estoy a un paso del más allá, dijo el esqueleto Paranoico.

La sombra interna vuelve al poeta y le mira.

El esqueleto Arpa le ladra al cielo.

Que leo todo como si estuviera en aprietos.

Mirar es exiliarse y comporta una estética.

Miguel CATALÁN, Suma y sigue

Libros al Albur, 2019, 62 págs.

En la traición, el amor del más fuerte termina convirtiéndose en la fuerza del más débil.

El destino puede ensañarse porque carece de remordimiento.

Lo que está en todas partes es invisible.

Hace ya algún tiempo que las redes sociales decretaron el estado de felicidad permanente.

Se va a la moda para destacar sin destacar.

En última instancia el amor verdadero es indiscernible de la bondad.

Toda religión institucional empequeñece la idea de Dios para adaptarla a sus intereses.

El adicto, ese libre esclavizado.

La dicha del amor conyugal es la más profunda porque llega al fondo desde dentro.

Me gustan más las ventanas que los muros pero sin muros no habría ventanas. Casi todo en la vida es de este tenor.

Contándome el sueño, se quedó dormida.

Una gran desgracia: no conocer los propios límites.

El amor está por encima de la verdad.

VIRTUD PROFILÁCTICA. Lo bueno del aforismo es que se puede escribir una barbaridad, pero no da tiempo a argumentarla.

Paula DÍAZ ALTOZANO, Meteórica

Apeadero de Aforistas & Cypress, 2021, 64 págs.

Las cometas detestan la cuerda.

Al escritor nadie lo ve cuando interpreta.

La oscuridad de las estatuas emanó cuando robaron sus ojos.

La filosofía descifra el mundo; la poesía lo muestra.

La forma cambia; el contenido se reproduce.

Soy mi batalla.

¿Quién no ha escrito ya este aforismo?

Cortar de raíz no tiene sentido.

Mi reloj es un sonajero.

Tal es la luz de los astros, que ciega a la oscuridad.

Un diario solo puede escapar de la rutina si carece de fechas.

Mi piano fue árbol una vez.

Desearía saber en qué número empieza el infinito.

El presente aún no ha llegado.

Pelayo FUEYO, La muerte, la poesía

La isla de Siltolá, Sevilla, 2019, 108 págs.

Cada verso de un poema debería ser como una sentencia que no impida darle valor al conjunto.

Al espejo: «Esto no es forma de ser yo».

Los poetas: embajadores del mundo.

La muerte es un lujo que no nos deberíamos permitir.

El mundo es un teatro, y Dios está en la concha afónico.

Solo el sueño de Dios tiene coherencia.

De una cosa no tengo duda: no hace falta saber que estás muerto.

A Dios lo tenemos que recrear.

¿Se puede morir más de la cuenta?

El crepúsculo barre para casa.

Rafael IBÁÑEZ MOLINERO, La vida en minúscula

Apeadero de Aforistas, 2020, 44 págs.

Oigo a mi cuerpo cuchichear a mis espaldas.

Aprender a mirar como antes de que me enseñaran a prestar atención.

En mi hijo, el espejo. En el espejo, mi padre.

Qué difícil subrayar la vida en la primera lectura.

Nos pensamos herederos de unos valores, una cultura, un planeta... Y somos albaceas.

Voy renunciando a mis sueños, pero añoro al soñador.

Soy más fiel a mis contradicciones que a mis principios.

Colgaba mi cuerpo, creyéndome jinete, cuando soy centauro.

Ego, te absolvo.

Ramón EDER, Aforismos y serendipias

Renacimiento, Sevilla, 2021, 127 págs.

En el aforismo el fondo y la forma son inseparables.

El aforista es una mezcla de filósofo sin sistema y de poeta sin ripios.

Los aforismos que no son inolvidables merecen el olvido.

A los aforismos muy largos siempre les falta algo.

El que no sabe olvidar está condenado a recordar incesantemente sus derrotas.

Es fácil ser bueno cuando estamos enamorados. (Dándole la vuelta a Pavese).

Tanto que exista Dios como que no exista resulta increíble.

No todo lo que reluce es Góngora.

La paradoja de la vida es que hay que vivir como si fuéramos libres sabiendo que no lo somos.

Uno de esos que escriben con la mano izquierda pero que corrigen con la mano derecha.

La verdad es terrible o no es una verdad.

La vida, bien entendida, es una alegre huida hacia adelante.

A los pestillos de las puertas les debemos muchos ratos de felicidad.

Hay que cambiar mucho en la vida para seguir siendo el mismo.

Nadie lee dos veces el mismo libro.

La vida es una especie de chapucero milagro.

La belleza de la verdad es la verdad de la belleza.

El que al leer no retrocede, no avanza.

El nuevo Heráclito: «Todo influye».

Un libro de aforismos solo es aceptable si es muy bueno.

Ramón EDER, Cafés de techos altos

Renacimiento, Sevilla, 2020, 99 págs.

La imagen de nuestra pareja nos delata.

Siempre somos «pre» o «post» algo.

Sonreír es vencer la ley de la gravedad.

La segunda muerte del escritor es el olvido.

Ser padre te redime de haber sido hijo.

Se creía un pensador pero era solo un pensativo.

Es importante saber decir «Sí, pero no».

Los libros breves que se pueden leer de una sola sentada tienen el encanto de que pueden producir una emoción ininterrumpida.

En los géneros literarios ya no hay jerarquías.

Hay días que solo se salvan por la noche.

El amor convierte el pasado en futuro.

El aforismo es el género literario más fácil de escribir, pero más difícil de escribir bien.

Ramón EDER, El cuaderno francés

Huacanamo, Barcelona, 2012, 57 págs.

Robar corazones no está prohibido.

Una prudencia excesiva le hizo caerse por la escalera. Las escaleras como mejor se bajan es sin pensar en las escaleras.

Haber vivido entre dos siglos es una especie de absurdo privilegio.

La vida es una ficción basada en hechos reales.

Las lágrimas también tienen su arco iris.

Hay fracasos que nos vienen como anillo al dedo.

Característico de una época explosiva es el fragmento.

Le gustaba el mar pero visto desde las tabernas.

Crimen perfecto: matar a alguien a disgustos. No se dejan pruebas.

Nunca olvidó a aquella rubia que le convirtió un verano en una especie de King Kong.

A veces hay que ser ambiguo para dejar las cosas claras.

Si te portas bien solo te cortaremos las alas.

El misterio de las piernas femeninas termina donde comienza.

El rinoceronte parece un montón de barro cabreado.

Yo soy tú y mis circunstancias.

El simétrico milagro.

Un libro que según se va leyendo va cambiando de título.

Morirse es una especie de vagancia superior.

Me gustan las frases que comienzan donde terminan.

Ramón EDER, El oráculo irónico

Renacimiento, Sevilla, 2019, 125 págs.

El que siempre es irónico tiene la enfermedad de Hamlet.

Escribir da sentido a la vida aunque se escriba que la vida no tiene sentido.

El canto de las gaviotas es la áspera música del mar.

Toda amistad genera un pequeño dialecto privado.

Los aforistas son los abogados del diablo.

Un año vivido con intensidad puede ser casi eterno.

Los mejores aforismos suelen tener siete palabras.

Los críticos literarios bondadosos no son de fiar.

En los géneros literarios ya no hay jerarquías.

Hay amistades que están basadas en una respetuosa lejanía.

Nos parece normal estar vivos pero no es normal.

Llega una edad en la que uno si no ha triunfado ya sabe que no triunfará nunca, ni aunque triunfe.

Enamorarse es lo más parecido a resucitar.

Reunión de aforistas, crítico literario muerto.

Una sociedad que solo valora el éxito es una sociedad condenada al fracaso.

Al final uno acaba pensando que un día perfecto es un día cualquiera.

Ramón EDER, La vida ondulante

Renacimiento, Sevilla, 2012, 125 págs.

Las amistades nocturnas parecen sólidas, pero suelen ser líquidas.

Rebelarse es relevarse.

La verdad hay que decirla siempre que nos beneficie.

La inteligencia, a partir de cierto grado, se vuelve humorística.

Emborracharse con un amigo, cada vez que lo vemos, es una buena costumbre que acaba con la mejor amistad.

El aforismo es un género literario que no gusta a los lectores pasivos.

Somos inmortales todos los días de nuestra vida, excepto uno.

Los críticos literarios bondadosos no son de fiar.

Nadie olvida la frase con la que fue expulsado del paraíso.

No sé si Dios existe, pero lo cierto es que insiste.

Un buen aforismo es un relámpago en las tinieblas.

Sonreír es vencer la ley de la gravedad

Cada día es una odisea y cada noche una ilíada.

El pasado es imprevisible, cambia constantemente en la memoria.

Acariciar purifica las manos.

Enamorarse de viejo es una fiesta en el infierno.

Cada vez que miramos el reloj perdemos un segundo de vida.

Es bueno que una frase esconda otra.

Escribir es construir frases que es mejor que existan a que no existan.

Ramón EDER, Palmeras solitarias

Renacimiento, Sevilla, 2018, 84 págs.

Lo que nos gusta mucho nos acaba complicando la vida.

Nadie nos puede quitar lo que hemos regalado.

Hay cosas importantes que sabemos pero que no sabemos que las sabemos.

Los escritores de aforismos que no se contradicen son como discos rayados.

El que te revela un gran secreto te complica la vida.

Si publicas un aforismo muy bueno, ya es de todo el mundo.

Al tiempo que vivimos es bueno añadirle fragmentos de eternidad.

Ramón EDER, Relámpagos

Cuadernos del Vigía, Granada, 2013, 80 págs.

Cojeaba tan bien que nadie sabía de qué pie cojeaba.

En sueños nadie es monógamo.

En las fotografías no salimos como somos, pero somos como salimos.

J'aime Gil de Biedma.

En la vida si no puedes con todo no puedes con nada.

Todos tenemos la vaga sensación de haber estado en el Titánic.

Ricardo MARTÍNEZ-CONDE, Cuentas del tiempo

Pre-Textos, Valencia, 1994, 54 págs.

Palabra: la curación y el riesgo.

Al cielo y al infierno por el mismo camino.

El amor como una forma de duda, nada más.

No hay perversidad que perdure sobre la ironía.

La nostalgia será, con el tiempo, la única referencia de identidad para los sensatos.

¿El tiempo? Cuando me pregunten responderé como el mar.

La certeza: esa categoría tantas veces incapaz de ser justificada.

El que viaje se olvida: he ahí el beneficio.

El hombre, ya es hora decirlo, necesita un enemigo.

Vivir: exponerse.

Ricardo MARTÍNEZ-CONDE, Por el camino

Trea, Gijón, 2017, 62 págs.

¿Qué sería de la locura si no se ocultase tras la apariencia de la verdad?

Mis dudas nacen de mis certezas; en eso apenas dudo.

Vivir es responder a un hábito.

El espejo, siempre distinto.

¡Cuidémosnos de la rara habilidad de algunos para convertir su disculpa en nuestra condena!

¿Cuándo se igualan los hombres? No cuando viven; menos cuando piensan. Tal vez cuando se toman la venganza; o cuando alguna aurora ya no vuelve.

El maestro es, sencillamente, el que ha errado antes.

Cuando todo se acaba, todo comienza a acabarse de nuevo.

Una vez me rodeó la vida. Una vez.

Ricardo VIRTANEN, Bazar de esquirlas

Renacimiento, Sevilla, 2019, 112 págs.

Tocar con el pensamiento. Una manera suprema de conocer.

Las metamorfosis del olvido.

Internet: parodia del universo.

Todos los domingos tienen algo de apocalíptico.

Serena y voluble, el ala de la costumbre.

Manejar verdades como puños nos aproxima al paleolítico.

Podrá morirse el árbol y desaparecer, pero la raíz se queda bajo tierra.

En todo aforismo te aguarda una encerrona.

¿La realidad encoge cuando la pensamos?

Entre mi nacimiento y mi muerte hay un paréntesis demasiado fugaz como para olvidarme de sus extremos.

En el amor los efectos secundarios son de primer orden.

La duda me completa.

Las ramas de mi pasado se están quedando sin hojas.

El amor implica una jauría para los sentidos, o no es.

El tiempo no sabe perderse a sí mismo.

¿Por qué un gramo de lucidez se parece tanto a la eternidad?

Rosendo CID, El aburrimiento no está hecho para gente con prisas

Apeadero de Aforistas, 2021, 64 págs.

En cada uno de nosotros hay un aburrimiento único e inaccesible para los demás.

Aunque nos disguste, el aburrimiento es una de las experiencias humanas más singulares de nuestro ser.

Las matemáticas del aburrimiento tienden al infinito.

Al aburrimiento le gustan los puntos suspensivos.

El aburrimiento es nuestro agujero negro cotidiano.

En el aburrimiento viven las musarañas.

En realidad el aburrimiento está a la espera de que lo resolvamos de una vez.

El aburrimiento no encaja con el capitalismo, de ahí que debamos prestarle más atención.

Cuando alguien se aburre profundamente se vuelve individual a la vez que parece perder su individualidad.

El aburrimiento nos resguarda de la intemperie social.

Aburrimientos que son un regreso a esa infancia aletargada que esperaba que todo cambiara de repente.

Esos aburrimientos que introducen grietas de forma imperceptible en las conversaciones hasta ensordecerlas y volverlas insustanciales.

El aburrimiento adormecido, algodonoso e inmóvil de las tardes de agosto que con la llegada del invierno echaremos de menos.

El aburrimiento blanquecino que procede de las miradas de los maniquíes, que buscan en el horizonte el único punto de escape al tedio de los escaparates que los acogen.

Esos aburrimientos que nos exigen pensarlos para saber si son o no aburrimientos.

Los aburrimientos estables y predecibles que nos construimos para no caer en el desorden de la vida.

Cuando despertó, el aburrimiento todavía estaba allí.

El aburrimiento, si breve, dos veces bueno.

Tomás RODRÍGUEZ REYES, Suprema moralidad

La isla de Siltolá, Sevilla, 2020, 90 págs.

Toda armonía es un eco del universo.

La luz carece de relato.

Todo sucede en una polifonía armónica de la que no eres más que contrapunto finito.

La poesía dirige al hombre desde la lengua hacia el lenguaje, de su ecuación finita al tanteo con el conocimiento numinoso.

La realidad sucede a pesar de su imposibilidad.

El sucedáneo del tiempo es la geografía de la memoria.

Contempla el mundo como si solo sucediera una vez: hallarás su permanencia.

Todo lo ocupa una bandada de ecos.