1121
Hay en esta afirmación de Vergara margen para una duda, pues junto con aseverar que no estaba en Santiago a la llegada de aquel Gobernador, se le fue a reunir por tierra a Penco (Información de Gómez, XIV, 85); ni pudo contarse tampoco entre los salidos de la Imperial, puesto que éstos se juntaron con el ejército en el paso del Biobío. ¿En qué parte estaba, por consiguiente, a la llegada de don García? Posiblemente en el camino de Lima a Chile, con la gente y caballos que hicieron ese viaje por tierra, al cual habría querido referirse en aquella su respuesta al decir que no se halló en la defensa del fuerte de Penco, porque «venía por tierra»
.
1122
Y aquí debemos acreditar la presencia de Vergara en Millarapue, citando para ello su respuesta a la pregunta 35 de la información de Juan Gómez (XIV, 85): «[...] queste testigo llegó [a Penco] con la demás gente por tierra, e después de llegado, el dicho señor Gobernador con toda la gente partió desta dicha ciudad [Concepción] [fuerte de Penco, debiera decir] para la conquista de Arauco e Tucapel [...], en ]a cual jornada hubo con los naturales ciertas guazábaras e recuentros, en los cuales los dichos naturales pelearon y acometieron como gente belicosa [...], hasta que llegó a las provincias de Tucapel [...]»
.
1123
«Francisco de Villagrán, natural de Santervás, cabe León [...]»
. Calvete de la Estrella, Vida de don Pedro Gasca, II, 300.
1124
Juan de Castellanos en su crónica rimada de la Historia del Nuevo Reino de Granada, (I, p. 215), relatando algún incidente de la campaña de Jerónimo de Ortal allí, dice:
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y cítale también en algún otro pasaje de ese su libro.
1125
Cieza de León, Guerra de las Salinas, p. 334. Con el mismo grado figuró también en esa expedición D. Martín de Solier, a quien tan triste hado le corrió más tarde en Chile.
1126
La fecha que lleva ese título en un documento que se halla incorporado en la hoja 182 del vol. 2281 del archivo de la Real Audiencia, es de 29 de marzo de 1555.
1127
Justifiquemos desde luego el aserto del poeta, cosa sumamente fácil en este caso con sólo tener a la vista la respuesta que el propio Gabriel de Villagra dio a la pregunta 67 del interrogatorio de Francisco de Villagra (XI, 67), y con las palabras de éste en el título de la encomienda de indios que le concedió, en las que da fe de la parte culminante que le cupo en el buen éxito del combate: «e a la vuelta que volvimos a la ciudad de Santiago, andando en sus términos el capitán Lautaro, indio muy belicoso, que había sido el principal en la muerte del dicho Gobernador [Valdivia] e traía alterados e rebelados muy gran cantidad de indios en junta general, desasosegando a los que entonces estaban de paz, haciendo muchos robos, daños e muertes, os hallasteis contra él en la guazábara que se le dio, en la cual servísteis a S. M. con cargo de capitán de la infantería, y fuisteis mucha parte para que el dicho Lautaro fuese desbaratado, preso y muerto [...]»
(XXV, 197).
1128
Así lo expresa él, declarando al tenor de las generales en el proceso de éste (XXI, 543). Los nombres de los padres los da Thayer Ojeda en su citado artículo de los Anales de la Universidad de Chile, t. 139, p. 385.
1129
En su citada declaración, que es de 1558, manifiesta que le conocía desde hacía treinta años.
1130
Recuérdese lo dicho a propósito del nacimiento de Francisco de Villagra. Nos inclinamos en este caso a dar a Gabriel esa patria, por cuanto era la de la madre de Francisco.