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María Rosa Gálvez

Manuel Serrano y Sanz





Nació en Málaga, en el año 1768. Ignoramos quiénes fueron sus padres; sólo consta que era hija adoptiva del coronel D. Antonio Gálvez1 y de D.ª María Ana Ramírez de Velasco, sin que sepamos si la adopción se verificó únicamente por fines caritativos o por otras causas, pues parece algo extraño que la misma D.ª María Rosa, en su testamento, no cite a sus padres legítimos. Dichos señores la dejaron la mitad de los bienes que poseían en Málaga, Vélez y Puerto Real, con cláusula de sustitución en favor de doña María Josefa Gálvez y Valenzuela, Marquesa de Sonora. Cuando aún residía en Málaga, contrajo matrimonio con D. José Cabrera y Ramírez, capitán que fue de milicias, y luego Agregado en la Legación de España en los Estados Unidos. Por causas que la tradición conserva, ambos fueron desgraciados, pues se atribuía a D.ª Rosa una amistad demasiado estrecha con el potente favorito Godoy, si bien nos parece que en este punto la maledicencia ha exagerado notablemente los hechos, hasta afirmar que la poetisa recreaba al Ministro, no sólo con sus caricias, sino que, prostituyendo la poesía, le distraía de graves ocupaciones con la lectura de versos en extremo lozanos y verdes.2 Lo cierto es que siempre Godoy la protegió, y que, merced a su amistad con éste, consiguió que nada le costase la publicación de sus obras, hecha a expensas del Estado. Alterada la paz del matrimonio por los celos, D. José Cabrera se divorció, pidiendo el traslado a los Estados Unidos, y molestó con pleitos cuanto pudo a D.ª Rosa, quien atribuía todo esto a los manejos de unos Sres. Escorza, Rute y Arias, que tenían sugestionado a su marido. Parece que D.ª Rosa no logró sucesión, y si tuvo hijos, fallecieron de temprana edad, pues no vivían cuando testó poco antes de su muerte, ocurrida a 2 de octubre de 1806.3

Don Manuel José Quintana juzgó las poesías líricas de D.ª Rosa en estas palabras:

«Lo que más luce en ellas es un estilo claro y puro, y una versificación fácil y fluida. Estas dotes unidas á imágenes agradables y á pensamientos, si no siempre fuertes y escogidos, por lo menos generalmente dulces, recomiendan las poesías líricas de esta colección.»


De las obras dramáticas dice:

«Sólo nos contentaremos con manifestar que el estilo de las tragedias no tiene bastante color; que algunos de los asuntos que ha escogido no se presentan como muy interesantes, y que su facilidad en componer, induciéndola á producir mayor número de obras, ha perjudicado á la perfección particular de cada una. Varias escenas del Amnon y el acto segundo de la Delirante, manifestando su ingenio y capacidad, hacen sentir que no haya empleado exclusivamente en estas dos obras toda la aplicación y el trabajo que ha esparcido en las demás».


(Variedades de Ciencias, Literatura y Artes, t. V, pp. 159-164.)                


Muy distinto de este juicio es el que ha emitido el P. Blanco en nuestros días:

«Las aptitudes líricas de Rosa Gálvez, pomposamente exageradas por la galantería de sus contemporáneos, se movieron, por lo común, en la elevada esfera de la oda heroica y altisonante, imitando muy de lejos el estilo de Quintana. El desdén de la posteridad (que alcanza igualmente á sus obras dramáticas) no ha sabido disimular los defectos de escuela, ni atender al influjo de las circunstancias que tan frecuentemente se invoca en descargo de otros ingenios quizá de menos valor, porque algo bueno puede escogerse en las obras de nuestra poetisa.

Valen más que los líricos los ensayos dramáticos de D.ª María Rosa Gálvez, entre los que sobresalen Florinda, Blanca de Rossi y Ali-Bek, como tragedias; Un loco hace ciento y El Egoista, por sus descripciones de costumbres. Fué duramente atacado el Ali-Bek por su crudeza y sangriento colorido, rebatiendo la autora esta censura en una carta al Memorial literario».


(La Literatura española en el siglo XIX, por el padre Francisco Blanco García, pp. 45-63.)                





ArribaAbajoTestamento de doña María Rosa de Gálvez, mujer de D. Joseph Cabrera Ramírez

En la villa de Madrid, á treinta de Setiembre de mil ochocientos y seis, ante mí el infrascripto, Escribano de provincia y Comisiones de la Real Casa y Corte de S.M., y testigos que se espresarán, la señora Doña María Rosa de Galvez, natural de la ciudad de Málaga, hija adoptiva del Coronel Don Antonio Galvez y de D.ª María Ana Ramirez de Velasco, vecinos de la misma ciudad de Málaga (ya difuntos), de estado casada con Don Josef Cabrera Ramirez, Capitan de Milicias y oficial agregado á la legacion de S.M. en los Estados Unidos de América, dijo: se halla enferma en cama, pero con su sano juicio, cabal memoria y entendimiento natural, y por lo mismo ha deliberado formalizar su última disposicion testamentaria. Y ante todas cosas declara y confiesa que es católica apostólica romana y que cree el alto é incomprensible misterio de la SS.ma Trinidad y todos los demas misterios y artículos que tiene, cree y confiesa nuestra Santa madre Iglesia, bajo cuia fe ha vivido y protesta vivir y morir, tomando como toma por su intercesora y abogada á Maria SS.ma Reyna de los ángeles, señora nuestra, Santos ángeles de su guarda, nombre y devocion, para que intercedan con su divina magestad perdone sus culpas y lleve su alma á la celestial Jerusalen; bajo cuia esperanza hace y ordena su testamento del modo que sigue:

Primeramente encomienda dicha su alma á Dios que la crió y redimió, y el cuerpo á la tierra, el qual, hecho cadaver, quiere se le amortage con el ábito que elijan y dispongan sus testamentarios que adelante nombrará, y lo mismo la forma de entierro y iglesia en que haya de darsela sepultura.

A las mandas forzosas de Jerusalen, Redempcion de cautibos, santos hospitales General, Pasion y de San Juan de Dios de esta Corte, deja sesenta reales por iguales partes para todos, con lo que les separa del derecho que pudieran tener á sus bienes.

Manda se hagan celebrar por su alma cien misas rezadas, de las que sacada la cuarta parroquial, las demás se celebren en donde dispongan dichos sus testamentarios con la limosna de seis reales cada una.

Manda a D.ª Francisca de Casas y D.ª Maria Joanico y Casas, su hija, en atencion á la buena asistencia y serbicios que la han hecho y espera los continuen, seis reales de vellon á cada una, diarios, durante los dias de su vida, que se les suministrará por iguales partes por la heredera que nombrará, y pide la encomienden á Dios. Y asi mismo las manda tambien por las mismas razones todas las ropas del uso de la otorgante y muebles y menage de su casa, excepto las alhajas de plata, oro y pedrería y los libros y papeles; entendiéndose que los seis reales diarios que deja asignados á cada una por su vida, se han de entender sin sobrevivencia; de manera de que muerta la una, no ha de entrar la otra en el goce de los seis reales vitalicios, cuya contribucion ha de cesar con su muerte respectiva.

Declara que tiene contra si algunas deudas, de las quales no puede hacer expresion individual en este acto y quiere que se paguen puntalmente por el señor su heredero todas aquellas que consten de documentos legítimos y todas las demas que tambien consten como ciertas a sus testamentarios y heredero.

Declara tambien para descargo de su conciencia que por parte de D. Antonio Escorza Fiesco y Quevedo, D. Nicolas de Arias, don Diego de Rute y otros amigos y paniaguados de estos ha padecido crueles persecuciones que la han afligido mucho en su persona, honor y intereses, y aunque les perdona y tiene perdonados de todo corazon, no puede menos de decir y declarar para descargo de su conciencia y prevenir qualesquiera ardid ó cautela de que intenten valerse para figurar obligaciones pecuniarias ó de otra clase de parte de la otorgante, que ninguna obligacion tiene constituida en ningun tiempo con los referidos Escorza, Arias, Rute, ni sus coligados, y que si alguna obligacion o papel apareciese será supuesto, nulo, figurado y cuando mas firmado contra su voluntad, solo por obedecer á dicho su marido D. Josef Cabrera, á quien aquellos tenian enteramente dominado y engañado, y de consiguiente otorgado con violencia.

Declara asi mismo que en el matrimonio con el citado su marido D.n Josef Cabrera y Ramirez no tiene en la actualidad hijo alguno ni subcesion legítima que tenga derecho á sus bienes.

En la misma forma declara que por consequencia de no tener hijos ni sucesion legítima y en virtud de lo dispuesto por los referidos señores sus padres en el testamento que de mancomun otorgaron en la ciudad de Málaga á veinte y tres de Julio de mil setecientos y ochenta y siete ante el Escribano de aquel Número Don Miguel Martinez de Valdivia, todos los bienes y haciendas que goza y posee la señora otorgante asi en la villa de Puerto Real como en las ciudades de Málaga y Velez y la fueron adjudicados como legataria en la mitad de su caudal, en las particiones que se egecutaron en el mes de Mayo de mil setecientos noventa y tres, tocan y corresponden, verificado el fallecimiento de la otorgante sin subcesion, a la Ex.ma Señora D.ª María Josefa Galvez y Balenzuela, Marquesa de Sonora, mujer legítima del Excmo. Señor Conde de Castro Terreño, vecinos de esta Corte, á quien deben pasar en toda propiedad y posesion, como recíprocamente subrogada y substituida por los referidos Señores don Antonio de Galbez y su muger, para en este caso; y en el remanente que quedare de todos sus bienes, derechos, acciones, y futuras sucesiones que la pertenecen y puedan pertenecer á la otorgante por qualesquiera título, causa, razon ó motivo, instituye y nombra por su único y unibersal heredero de todos ellos á D. Prudencio de Guadalfajara, Conde de Castro Terreño, á quien pide la encomiende a Dios.

Y para cumplir y pagar cuanto deja dispuesto en este su testamento, nombra por sus albaceas y testamentarios al mismo Exmo. Señor Conde de Castro Terreño y al Lic.do Don Vicente de Chasco Abaytua, abogado del Ilustre Colegio de esta Corte, á quienes y á cada uno in solidum da poder y facultad cuanto en derecho necesiten para que después de su fallecimiento desempeñen el cargo de tales testamentarios, y á este fin les prorroga el término legal del albaceazgo.

Y por el presente reboca, anula, da por ninguno, de ningun valor ni efecto, rotos, nulos y cancelados otros qualesquier testamentos, cobdicilos, poderes para hacerlos y demás disposiciones testamentarias que antes de esta haya echo y otorgado, de palabra, por escrito ó en otra forma, pues ninguna quiere que valga ni haga fe judicial ni extrajudicialmente sino esta que ordena de su libre y espontánea voluntad, ó en la vía y forma que más haya lugar en derecho. En cuio testimonio asi lo dijo, otorgó y firmó (á quien doy fe conozco) siendo testigos D.n Andres Saenz Durango, D.n Matías Perez Vidal, D.n Faustino María Fernandez, D.n Josef Ruiz y D.n Nemesio Perogil, vecinos y residentes en esta Corte.-María Rosa de Galvez.-Ante mi, Simon Ruiz.4






ArribaAbajoObras poéticas de doña María Rosa Gálvez de Cabrera.-Madrid, Imprenta Real, 1804

Tres volúmenes en 8.°: el primero, de 367 páginas; el segundo, de 334, y el tercero, de 263

Tomo 1: Advertencia.-La campaña de Portugal (oda al Excelentísimo Sr. Príncipe de la Paz).-La Beneficencia (oda a la Excelentísima S.ra Condesa de Castroterreño, con motivo del discurso que pronunció en la Real Junta de damas en elogio de la Reina nuestra señora.-Las campañas de Buonaparte en Italia (oda).-La Poesía (oda a un amante de las artes de imitación).-Descripción filosófica del Real Sitio de San Ildefonso (oda a D. Manuel Quintana).-La vanidad de los placeres (oda).-En los días de un amigo de la autora (oda).-En elogio de la representación de la opereta intitulada «El Delirio», ejecutada en el Coliseo del Príncipe (oda).-La Noche (canto en verso suelto a la memoria de la señora Condesa de Carpio).-A D. Manuel Quintana, en elogio de su oda al Océano (versos sáficos).-Descripción de la fuente de la Espina en el Real Sitio de Aranjuez (romance endecasílabo).-A Licio (silva moral).-Despedida al Real Sitio de Aranjuez (octavas).-Bion (ópera lírica en un acto, traducida del idioma francés).-El Egoísta (comedia original en tres actos).-Los figurones literarios (comedia original en tres actos).

Tomo II: Advertencia.-Saúl (escena trágica unipersonal con intermedios de música).-Safo (drama trágico en un acto).-Florinda (tragedia en tres actos).-Blanca de Rossi (tragedia en cinco actos).

Tomo III: Amnon (tragedia original en cinco actos).-Zinda (drama trágico en tres actos).-La Delirante (tragedia original en cinco actos).

Doña Rosa Gálvez solicitó en 1803, por medio de D. Fermín Antonio Lumbreras, la impresión de sus obras dramáticas.

El Consejo de Castilla, a 14 de julio, acordó lo siguiente:

«Remítanse al Director de los Reales Estudios de San Isidro para que disponga se censuren estas obras en la forma ordinaria por el Catedrático que disputare; y la censura que diere, la remita al Consejo con su informe.»



Don Santos Díez dio su parecer en estas palabras:

«Señor Director:

He examinado las adjuntas obras dramáticas de D.ª María Rosa de Galvez, que de orden del Consejo se ha servido V.S. remitir á mi examen; y por lo que hace al Drama en un acto, intitulado Sapho, y al de en tres actos, intitulado La Negra Zinda, y á la Tragedia en cinco actos, intitulada La Delirante, no hallo reparo en que se permita su impresion, así porque son un fruto no despreciable del ingenio de una muger, como porque son unas obras examinadas y aprobadas por el Vicario eclesiastico, Ynquisidor ordinario de la villa de Madrid y su partido. Pero faltando esta circunstancia á la Tragedia intitulada Amnon, en cinco actos, de argumento sagrado, y al monólogo intitulado el Saul, igualmente de argumento sagrado, cuyo examen no es menos correspondiente que el de las otras referidas al Vicario é Ynquisidor ordinario, especialmente quando se trata de una muger que sin ser de aquellas matronas romanas discípulas del máximo Doctor de la Yglesia, San Gerónimo, escribe sobre asuntos tan delicados de la Historia Sagrada, soy de parecer que se remitan al examen de dicho Vicario eclesiastico, como asimismo las dos Tragedias intituladas la Florinda, en tres actos, y Blanca de Rossi, en cinco, por contenerse en ellas algunas cosas que no son impropias del examen del Vicario eclesiastico. Este es mi dictamen, salvo otro mejor.-Dios guarde á V S. muchos años.-Estudios Reales de Madrid, 30 de Agosto de 1803.-Santos Díez Gonzalez



Juntos con este documento se hallan otros acerca del mismo asunto, los cuales publicamos.

I

Debuelvo á VS. las adjuntas seis tragedias que se dice de D.ª Maria Rosa Galvez, que de acuerdo del Consejo me remitió para su censura; haciéndole presente, que vistas y reconocidas todas ellas por persona de mi confianza, me informa que son originales; que algunas se han representado en nuestros teatros con aceptacion del público; que son recomendables por su inbencion, lenguage, decoro y magestad; que la autora ha savido escoger los asuntos que ha puesto en scena y ha conseguido manifestar su numen poetica; que no hay nada en las tales piezas opuesto á nuestra santa fe católica, buenas costumbres, leyes del Reino, y regalías de S.M., por lo que es de parecer que puede concedérsele el permiso que solicita para la impresion de estas piezas.

Todo lo qual se servirá V.S. trasladar á la superior compreension de los Señores del Consejo para que en su vista se sirban acordar lo que estimen combeniente en quanto á la concesion de lizencia que la nombrada autora solicita para su impresion.-Dios gue. á V.S. muchos años.-Madrid y octubre 27 de 1803.-B.L.M. á V.S. su at.to servidor y capp.n-Juan Bautista de Ezpeleta.-Dn Bartolomé Muñoz de Torres.

Madrid cinco de Noviembre de 1803.-Se concede licencia para la impresion en la forma ordinaria.



II

Don Luis Fernandez Gonzalo del Rio, Caballero de la Real Orden de Carlos III, y Don Manuel de Sampelayo, Directores de la Real Caxa de Descuentos de Madrid, Tesoreria de la Comision gubernativa de Consolidacion de Vales, y Caxas de extincion y descuento;

Hemos recibido de D.ª Maria Rosa de Galvez sesenta reales vellon por haverla concedido el Consejo licencia para imprimir siete dramas tragicos que ha compuesto, titulados: Blanca de Rosi, Florinda, La Negra Zinda, Amnon, Saul, Saffo y La Delirante.

Y de esta carta de pago ha de tomar razon el Señor Don Salvador Rodriguez Palomeque, del Consejo de S.M. en el Tribunal de la Contaduria Mayor, y Contador de esta Real Caxa y Tesoreria; con cuya formalidad se ha de presentar para su intervencion en la Contaduria general de la misma. Comisión Gubernativa.-Madrid ocho de Noviembre de mil ochocientos tres.-Luis Fernandez Gonzalo del Rio.-Manuel de Sampelayo.5



III

Señor:

Doña Maria Rosa de Galvez, muger legitima de Don José Cabrera, Agregado á la Secretaria del Ministerio de los Estados Unidos de América á L.R.P. de V.M. con el mas profundo respeto expone: que ha compuesto tres tomos de Poesias, entre ellos dos de Tragedias originales, para cuya impresion tiene ya las correspondientes licencias. En este estado se halla imposibilitada de dar á luz dichas obras, por no tener con que costear los gastos de impresion, y defraudada, por consecuencia, de la compensacion á que no deja de ser acrehedora su aplicacion. A esto puede agregarse el deseo de hacer público un trabajo que en ninguna otra muger, ni en nacion alguna tiene exemplar, puesto que las mas celebradas francesas solo se han limitado á traducir, ó quando mas han dado á luz una composicion dramática; mas ninguna ha presentado una coleccion de Tragedias originales como la Exponente. Y como no tenga otro medio de conseguirlo que el de lograr de la piedad de V. M. se digne mandar en la Real Imprenta que impriman las mencionadas Obras poéticas, aun quando despues solo allí se vendan; y que por otra parte no se arriesga la cantidad que para esto adelante la Imprenta Real, pues puede reembolsarse de lo primero que produzca la impresion, quedando lo restante á favor de la Exponente. Por tanto, A V.M. rendidamente suplica se sirva por un efecto de su notoria clemencia, y para que no perezcan en el olvido unas composiciones que han costado infinitos desvelos á la suplicante, dar la orden conveniente á la Real Imprenta, para que bajo la inmediata correccion de la misma Autora, imprima los expresados tres tomos de Poesias originales, sin exijir por aora su costo de la Exponente, sino reintegrándose despues del producto de la misma obra, de lo que se gaste, y dejando el resto á beneficio de la Autora. Gracia que espera de la Real bondad de V.M. cuya importante vida prospere Dios dilatados años.-Madrid y Noviembre veinte y uno de mil ochocientos tres.-Señor:-A L.R.P. de V.M.-Maria Rosa de Galvez.

(A continuación). Como pide, dése á el efecto orden al Subdelegado de la Real Imprenta.-Fecho en San Lorenzo, 25 de Noviembre de 1803.



IV

Exmo. Señor [Príncipe de la Paz:]

Muy señor mio: concluida ya la impresion de mis Obras poéticas, que S.M. me hizo la gracia de mandar por medio de V.E. se verificase sin mi desembolso en la Imprenta Real, á condicion de reintegro, suplico á V.E. se sirva dispensarme el honor de presentar á S.M. y á mi Señora la Reina los dos ejemplares que para este efecto remito á V.E., conservando para sí el tercero, aun quando no por el mérito de la obra, al menos por la novedad de ser produccion de un sexo que no se dedica á las Bellas Letras.

Con este motivo me ofrezco á las órdenes de V.E., suplicándole me continue la proteccion que hasta aora le he debido en esta y las demas solicitudes que dirigiré á S.M. por mano de V.E., á quien suplico igualmente disimule esta importunidad, teniéndome por su mas reconocida humilde servidora Q.B.L.M. de V.E.-Maria Rosa de Galvez.-Madrid 19 de Setiembre de 1804.



V

Señor:

Doña María Rosa de Galvez, á los Reales P. de V.M., con el mas profundo respeto, expone: que hallándose concluida la impresion de sus Obras poéticas, que V.M. tuvo á bien mandar se costease, á condicion de reintegro, por la Real Ymprenta, ha tenido el honor de ofrecer á los Pies de V.M. dos ejemplares de dichas sus Obras, que tales como son carecen de exemplo en su sexo, no solo en España sino en toda Europa. En este estado es la primera obligacion cubrir el desembolso de la Ymprenta Real con lo que produzca la venta de las insinuadas Poesías; pero de este modo la piedad de V.M. no logra todos sus efectos, pues la Exponente permanece sumergida en la misma indigencia que antes de conseguir la primera gracia, respecto á que no puede servirla de alivio el producto de su trabajo, ínterin no esté reintegrada la Ymprenta; y mediante á que el coste suplido por esta no llegará á diez y ocho mil reales, á V.M. suplica rendidamente que por un efecto de su bien conocida benignidad se sirva perdonar á la Exponente el coste de dicha impresion, suplido por la Real Ymprenta, mandando dar la correspondiente orden para que todos los ejemplares se pongan á disposición de la Autora, y se la entregue el total importe de los vendidos ó que se vendieren, para alivio de su escasa situacion. Gracia que espera de la notoria piedad de V.M., cuya importante vida prospere Dios dilatados años.-Madrid 18 de Septiembre de mil ochocientos y quatro.-Señor:-A L.R.P. de V.M.-María Rosa Galvez de Cabrera.

(A continuación). S.M. ha concedido á la parte la gracia que pide.-Fecho á 26 de Setiembre 1804, por oficios á la Galvez y al Subdelegado de la Ymprenta.






ArribaAbajoAli-Bek. Tragedia en cinco actos, por doña María Rosa de Gálvez.-Madrid. Oficina de D. Benito García y C.ª 1801

En 8.º

La licencia para que se representara está dada en Madrid a 28 de abril de 1801.

Manuscrito de principios del siglo XIX.

66 hojas en 4.º

Biblioteca Nacional, Xx-541.

Señores de la Junta de Direccion de Teatros:

Doña Maria Rosa de Galvez, ante V.SS., con el devido respeto, expone: que ha compuesto una Tragedia original en cinco actos, titulada Ali-Beck, la qual, passadas ya las correspondientes censuras y aprobaciones, se halla en poder de V.SS. prompta á que pueda efectuarse su representacion e impression quando se sirvan determinarlo. La situasion de la exponente, que ha experimentado crecidas perdidas en sus rentas, de resultas de la última desgraciada epidemia de Cadiz, la obliga á dirigir á V.SS. esta súplica, que á no ser en tales circunstancias no se havria resuelto á hacer. Sabe que ultimamente se ha acordado por V.SS. que el premio destinado á las composiciones dramáticas de esta clase, sea el tres por ciento del producto de todas sus representaciones por tiempo de diez años; pero como además de ser una muger sin herederos tiene en el dia que subvenir á gastos que probablemente no se le ocurrirán otra vez en su vida, y que además se atreve á esperar que V.SS., por el interes que se toman en la mejora de los Teatros, de que hemos visto ya evidentes pruebas, no se negarán á conceder su proteccion á una muger, la primera entre las españolas que se ha dedicado á este ramo de Literatura, acude á la bondad de V.SS., haciéndoles presente que tiene empezadas, y al concluir, otras varias composiciones dramáticas que espera se representarán bajo la sabia dirección de V.SS., y en ellas se conformará al insinuado premio del tres por ciento, ú otro que V.SS. se sirvan señalarla. Pero en quanto á la Tragedia el Ali-Bek, tanto por haverla compuesto en la inteligencia de veinte y cinco doblones, quedando la pieza absolutamente vendida, como porque las circunstancias actuales de la exponente la obligan á solicitar este auxilio,

A V.SS. suplica, que en atención á lo expuesto, al estado en que ya está la citada Tragedia, y principalmente al carácter y situacion de la suplicante, se sirvan por esta vez, y sin que sea ni pueda ser ejemplar, concederla el premio de veinte y cinco doblones por una vez, con renunciacion del tres por ciento, ó bien el que juzguen digno de la Tragedia, de que por este medio queda la Autora desapropiada, y V.SS. en absoluta posession. Assi lo espera de la bondad de V.SS.-Madrid y Mayo veinte y uno de mil ochocientos uno.-Maria Rosa de Galvez.

(Al margen de la primera página):

Madrid 4 de Junio de 1801.-Como lo pide.

Original, con firma autógrafa.-Dos hojas en fol. Biblioteca Nacional. Papeles que fueron del Sr. Asenjo Barbieri.






ArribaAbajoEl califa de Bagdad, por Rosa Gálvez. Zarzuela en un acto

Letra de principios del siglo XIX.

La licencia para la representación está dada en Madrid a 18 de abril de 1801.

29 hojas en 4.º

Biblioteca Nacional, Xx-564.




ArribaAbajoLa familia a la moda

No llegó a imprimirse esta comedia, acerca de la cual hemos visto el siguiente documento:

Excmo. Señor Governador del Consejo:

Doña María Rosa de Galvez, vezina de esta Corte, ante V.E. con el devido respeto, hace presente: que haviendo compuesto una Comedia original en tres actos, intitulada La familia á la moda, y estando ya recivida y repartida para su representacion en el Coliseo de los Caños del Peral, se pasó al Tribunal eclesiástico de la Vicaría, para obtener la correspondiente venia. Pero en este no solo se negó la licencia, sino que se añadió que así se ejecutaba por ser la insinuada comedia inmoral y ser escuela de la corrupcion y el libertinage, como manifiesta la nota puesta al fin de la misma, que la suplicante exhibe ante V.E. con la mayor veneracion. Si solo se huviese negado la licencia, acaso havria tolerado este acaecimiento la autora por no mover contextaciones dilatadas y molestas; pero el motivo que expresa la relacionada nota, sobre ser en cierto modo denigrativo, denota claramente que no ha sido la comedia bien comprehendida. Para prueba de esta verdad basta la misma composicion, cuyo asunto y objeto es, como debe ser, poner en ridículo ciertos vicios. No cansará la exponente la atención de V.E. con hacer la apología de su Comedia, puesto que ella misma es su mejor defensa; si fuese este un asunto digno de una controversia formal, no dudaria la autora sostener publicamente que se padeció equivocacion en la censura de la Vicaría; pero tampoco es justo que se la defraude del premio de su trabajo y se la tache de inmoral en sus composiciones, sin darla mas razon. Tiene la suplicante el ejemplar en su comedia intitulada Un loco hace ciento, de que no siempre son justas las censuras de la Vicaría, pues fue reprobada en dicho Tribunal, y despues, examinada por el Exmo. Señor antecesor de V.E. fue aprobada y se ha representado é impreso con general aceptacion; y asi se atreve á esperar que la justificacion de V.E. se sirva hacer examinar la insinuada Comedia por censores de conocida imparcialidad é inteligencia; y si el resultado de sus dictámenes es, como cree la autora, favorable á su composición, en que además está pronta á hacer qualquiera justa enmienda,

A V.E. rendidamente suplica se sirva en uso de su autoridad pasar el correspondiente oficio al Sr. Vicario, y dar el permiso necesario para la representacion de la referida comedia intitulada La familia á la moda, que acompaña á esta reverente súplica; lo que así espera de la notoria justicia de V.E.-Madrid, veinte y seis de Febrero de mil ochocientos cinco.-María Rosa de Galvez.

(En la cubierta de este documento se lee):

27 de Febrero.-Informe el Censor.-Fecho en 28 de dicho, segun minuta. Se dió licencia para la impresion y se remitió la Comedia al Secretario de Teatros en 17 Marzo.

Archivo Histórico Nacional.-Consejo de Castilla.-Teatros, legajo 7.º






ArribaAbajoLas esclavas amazonas. Hermanos descubiertos por un acaso de amor. Comedia (en verso)

Hay dos manuscritos de principios del siglo XIX en la Biblioteca Nacional. Consta el uno de 50, y el otro de 52 hojas en 4.º

De esta comedia decía el Memorial literario:

«Nos pareció que el argumento no es muy interesante y que carece de novedad. Pueden hallarse argumentos desconocidos, y, sin embargo, no excitar interés; pero el de este drama, á más de ser muy vulgar, no despierta la curiosidad. En efecto, estamos fastidiados de ver en el teatro encuentros de hermanos largo tiempo hacía separados; reconocimientos de esposos, de amigos, etc.»


(Memorial literario, (continuación), t. IV, pp. 177-178.                


Entre los papeles que el Sr. Asenjo Barbieri legó a la Biblioteca Nacional se encuenta éste:

He reciuido del Sr. Juaquin de Luna, tesorero del teatro de los Caños del Peral, por mano de los Interventores de dicha compañía, nuevecientos reales vellon, por mi Comedia original intitulada Las esclavas Amazonas, representada en dicho teatro desde el dia 4 del corriente en adelante.-Madrid y Noviembre 13 de 1805.-Son 900 rs. vellón.-Maria Rosa de Galvez.-V. B-Agustin Roldan.-Rafael Perez.-Eugenio Christiani.-Páguese: Pinto.


Original, con firmas autógrafas. Una hoja en 4.º




ArribaAbajoLa ópera cómica. Acto único

Letra de principios del siglo XIX.-27 hojas en 4.º

«Esta pieza (dice una nota) irá unida a la tragedia Ali-Bek, como si las dos fueran una sola.»






ArribaAbajoSafo. Drama trágico en un acto, por doña María Rosa de Gálvez, Valencia, Imprenta de Esteban, 1813

En 4.º

Comienza así este monólogo:

SAFO
   Noche desoladora, fiel imagen
de mis continuos bárbaros tormentos,
no cese tu rigor, no tus furores;
el hórrido silbido de los vientos,
el rayo desprendido de la esfera,
el ronco son del pavoroso trueno
halaga un corazon desesperado.
¡Ah! perezca en tu horror el universo,
perezca la morada que mantiene
al hombre entre los hombres mas perverso;
anégale en tus aguas, mar undoso,
y entre tus ondas su cadaver yerto
suba al Olimpo y del Olimpo baje
á sepultarse en el profundo averno;
mas tú te calmas; ¿eres insensible
á mi fatal plegaria, á mis lamentos?
¿Eres como Faon? ¡ay! ni su nombre
piadoso vuelve á repetir el eco.
¡Espantosa quietud! Todo enmudece,
y al tormentoso horror sigue el silencio.
Las negras furias que mi amor persiguen
me privan hasta el bárbaro consuelo
de ver el orbe vacilar al choque;
de los embravecidos elementos.
Vecina el alba, volverá á la tierra
el marchito verdor; plácido el cielo,
ofrece al fin serenidad y vida.
Hoy, por la última vez, el firmamento
verán mis ojos de llorar cansados.
Sol, apresura tu brillante vuelo;
verás á Safo en su postrera angustia
perecer, ú olvidar su ingrato dueño.





ArribaAbajoSaúl. Escena trágica unipersonal, por doña María Rosa Gálvez, Valencia, Imprenta de Esteban, 1813

En 4.º




ArribaAbajoUn loco hace ciento. Comedia en un acto en prosa, para servir de fin de fiesta: por doña María Rosa de Gálvez, Madrid, En la Oficina de D. Benito García, y Compañía, Año de 1801

112 páginas en 8.º

En el ejemplar que hemos visto en la Biblioteca municipal de Madrid, hay a la conclusión una nota manuscrita, que dice:

Aprobada.-Madrid 25 de Febrero de 1810.

Dicho ejemplar tiene adiciones y correcciones manuscritas.

De esta comedia hay dos manuscritos en la citada Biblioteca: consta el primero de 30 hojas útiles, en 4.º, y el segundo de otras tantas.

El primero contiene á la conclusión la siguiente aprobación:

«Nos el Dr. D. Francisco Ramiro y Arayos, Pbro., del Consejo de S.M. en el de la Suprema y General Inquisicion, dignidad de Arzipreste de Sta. María en la Iglesia Magistral de Alcalá de Henares, y Vicario Ecco. en esta villa de Madrid y su Partido, &.ª

Por la presente y lo que á nos toca, damos licencia para que la Comedia titulada Un loco hace ciento se pueda representar en los teatros públicos en esta Corte, mediante á que habiendo sido reconocida, no contiene, al parecer, cosa que se oponga á nuestra santa fee y buenas costumbres.-Madrid veinte y siete de Marzo de mil ochozientos diez y seis.-Dr. Ramiro.-Por su mandado, Josef María Paton






ArribaAbajoUn loco hace ciento. Fin de fiesta en un acto en prosa, por doña María Rosa de Gálvez

Letra de principios del siglo XIX.-56 páginas en 4.º

Biblioteca Nacional.-Manuscritos, Xx-695.

En el Archivo Histórico se conservan los siguientes papeles relativos a esta obra:

I

Señor Vicario eclesiástico de Madrid:

He visto de orden de V.S. la adjunta pieza intitulada Uh loco hace ciento, y me parece que su representacion puede acarrear incombenientes en las actuales circunstancias, por ridiculizarse en ella las cosas de Francia, y no me parece combeniente en una época en que Madrid está lleno de oficiales franceses, que se les dé motivo de quejarse de que los ridiculizan, lo qual pudiera tener mui malas consequencias.

Fecha, etc.

Archivo Histórico Nacional.-Consejo de Castilla.-Teatros, legajo 8.º



II

Excmo. Señor Governador del Consejo:

Doña María Rosa de Galvez, residente en esta Corte, ante V.E. con el devido respeto hace presente: que entre otras piezas dramáticas, ha compuesto, con deseo de que se represente en los teatros de ella, una comedia original en un acto; su título, Un loco hace ciento. Con arreglo á lo prevenido, sobre las correspondientes censuras pasó la insinuada composicion al Tribunal de la Vicaría en el qual, á pesar de no contener cosa alguna contra la moral cristiana, se ha tenido por oportuno reprobarla. Con este motivo acudió la exponente á dicho Tribunal, solicitando por un pedimento se la diese copia de la censura y motivos de la reprobacion y se la oyese en justicia sobre este particular. Solicitud tanto más justa quanto que tiene algunos fundados motivos para presumir que para la reprobacion haya intervenido alguna parcialidad. No ha sido posible, Señor Exmo., que al menos admitan su pedimento en aquel Tribunal, contentándose con responderla que no hai práctica de admitirse semejantes recursos. A la verdad, parece extraño que al autor, de una obra no se le diga en que yerra, siquiera para proporcionarle medios de enmendarse en lo sucesivo; pero así sucede, y por el mismo caso se le priva de la gracia de que su obra pase á otro Censor, á no ser siguiendo un recurso en el Consejo, para lo qual no todos tienen oportunidad. En este estado, y con la particularidad de ser esta produccion obra de una señora española, cuya singular circunstancia cree la exponente ser acreedora á algun favor, mucho más quando tiene dada ya y está aprobada completamente una tragedia original, y espera continuar sus tareas, que por su sexo, no dejarán de contribuir al lustre del Teatro español; en este estado, pues, acude á la justificacion de V.E., y mediante á que el mejor medio de manifestar si es ó no fundada la reprobacion de la insinuada comedia, es que esta sea vista y reconocida por otros sujetos que hagan de ella una censura escrupulosa, pero imparcial,

Á V.E. suplica rendidamente, que usando de su autoridad, y como Juez protector de los Teatros, se sirva pedir al Tribunal de la Vicaría la enunciada comedia en un acto titulada Un loco hace ciento, y mandarla censurar por los sujetos que guste, exceptuando el que la reprobó, y se presume que en hacerlo procediese no con toda la imparcialidad que se debe; que así lo espera de la notoria justificación de V.E.-Madrid veinte y ocho de Mayo de mil ochocientos uno.-Maria Rosa de Galvez.






ArribaAbajo Catalina, o la bella labradora. Comedia en tres actos: traducida del francés por doña M. R. de G.-Madrid. Oficina de D. Benito García y C.ª Año de 1801

120 páginas en 8.º

De esta comedia decía el Memorial literario de 1802 (p. 96):

«Este drama presenta una novela ó historieta puesta en diálogo, sin que en ella se halle cosa que huela á comedia, como se la ha querido titular. La principal heroína es una mujer que ha tenido la desgracia de enamorarse y casarse con un calavera, que la hizo infeliz; pero habiendo muerto éste, vive desconocida como arrendadora de una corta hacienda; profesando un odio eterno á los hombres en general, está nuevamente enamorada, casi sin pensarlo, de otro joven, por fortuna, no menos tierno y virtuoso que ella. La llegada repentina del padre de su primer marido, el reconocimiento de éste y la nuera, forman un feliz desenlace, pues se conoce quál es la suerte y estado de aquella labradora, se descubre su nuevo amante, y, en fin, el buen suegro los casa, haciéndolos dueños de la mitad de los bienes, que eran quantiosos.

Este drama es traducido del francés, pero no trasladado al castellano, pues se ha quedado en el lenguaje mestizo, tan de moda entre la turba de los malos traductores.»






ArribaAbajoOda en elogio de las fumigaciones de Morvó, establecidas en España a beneficio de la Humanidad, de orden del Excelentísimo Señor Príncipe de la Paz, por doña María Rosa de Gálvez



   No á la implacable muerte
Sacia del fiero Marte sanguinoso
La universal desolacion; en tanto
Que de su carro el grito pavoroso
Los pueblos llena de dolor y espanto,
Ella por las regiones
De la tierra, á su aspecto estremecida,
Vuela feroz, seguida
De dolencias sin fin; altos blasones
Soberbios tronos, militares lauros,
Vagando encarnizada,
Arrebata, derroca, hunde en la nada.
................................

   No suena, en tanto, el golpe repetido
Del artesano en su taller desierto;
No el labrador al campo lleva uncido
El manso buey, ni al bullicioso puerto
El marinero con afán camina;
Que en la comun ruina
Reina el silencio de la tumba; acaso
Resuena el bronce hueco
Entre las sombras de la noche, y vaga
Al aire impuro su clamor medroso;
Acaso un ¡ay! y el eco
De la sagrada religion se escuchan,
Mientras rueda espantoso
El carro de la muerte, conduciendo
Las víctimas heladas,
Con su sordo rumor estremeciendo
Las mansiones de lágrimas regadas.

   Como en la ardiente Libia el viento impele
Las montañas de arenas encendidas,
Cubriendo en remolinos centellantes
Ejércitos y tiendas esparcidas;
Así los infelices habitantes
De Gades el contagio sepultando,
El torrente voraz de sus horrores
Va por la fertil Bética llevando;
Ni al tiempo cede, que Hidra venenosa
De inmortales cabezas,
Do se ataja un destrozo ciento nacen......






ArribaAbajoOda en elogio de la Marina española, por doña María Rosa de Gálvez.-Madrid, 1805

Fue juzgada así por un crítico de aquel tiempo:

«No es poco lauro para las armas españolas el que entre tantos ilustres poetas como han cantado su honor y gloria, se halle una poetisa conocida ya en el Parnaso español por otras muchas composiciones en los géneros más sublimes de la poesía.

Sea qual se fuese el lugar que esta ilustre dama debe ocupar entre los demás poetas de la nacion, no se la podrá privar del mérito de dar á su sexo un grande exemplo, cultivando las nobles artes, y de ser, sino la única poetisa española, á lo menos la principal y más fecunda; todos convendrán tambien, á lo menos así nos parece, en que reune, á un talento naturalmente poético, fuego, facilidad, gracia y á veces armonía.

Esta oda sola bastaría para probar nuestra proposicion. El plan que en ella parece se ha propuesto la autora, es formar una como relacion poética del combate, y aunque esto no es lo más propio de la oda, en la que debe advertirse cierto descuido y como confusion, se arrebata tanto á veces en su entusiasmo, que toca verdaderamente en lo lírico»:

Prepáranse ambas esquadras al combate:


   Y por la niebla obscura
Rompe á su frente la feroz discordia
Con su funesta antorcha iluminando
El odio que á las naves va guiando.
Cual suelen al embate repetido
De horrible terremoto
Luchar unas con otras las montañas,
Lanzando el encendido
Azufre de sus cóncavas entrañas,
Así al trabarse la naval pelea
Se acometen, se estrellan, se destrozan
Las embreadas moles,
Se incendian, se aniquilan,
Del cañon arrojando el rayo ardiente.
   Nelson va á gritar: ¡Victoria!
....quando la muerte
Llegando enfurecida,
Le arrancó la palabra con la vida.

«Imagen propia y adequada. Tambien nos parece muy agraciada y natural la invencion de Neptuno, que irritado de la naval pelea con que los mortales turban la paz de su feliz morada, manda á las ondas que los sumerjan á todos; no podia pintarse de un modo más poético la cruel borrasca que se siguió al combate, y que tan contraria nos fué»;


   Suena el clamor, la obscuridad se aumenta,
Desencadena el huracán Eolo,
Y el marinero en vano en la tormenta
Busca la estrella del helado Polo.
Muerte y muerte no más por todas partes,
Los peñascos, el viento, el mar, el cielo,
Les presentan sañudos;
Y á tanto horror como en su daño crece,
El se abandona y sin temblar perece.



Minerva o el revisor general, t. II, pp. 49-51. Año 1806.




ArribaAbajoViaje al Teide. Por doña María Rosa de Gálvez

Oda.

Variedades de Ciencias, Literatura y Artes. Obra periódica.-Año segundo.-Tomo III.-Madrid. Año de 1805.

Páginas 301 a 308.

Empieza así esta oda:



   ¡Portentosa natura! Yo en mi mente
Saludo tus augustas maravillas,
Obra de un Dios de eterna omnipotencia;
Permíteme que pueda reverente
Al tiempo que me humillas
Con tu magnificencia,
Del Teyde abrasador cantar la cumbre,
Su altura prodigiosa,
Su hondo abismo y su mole cavernosa.

   El astro de la luz, padre del dia
Del globo de la tierra
Sus rayos escondia,
Cuando yo penetraba
De Laguna la selva deliciosa.
Si entre el horror sangriento de la guerra
Sublime Tasso en su cantar mudaba
La horrible trompa en cítara de amores
Que en la selva de Armida resonaba,
Del bosque de Laguna Apolo en tanto
La imagen inspiró á su dulce canto.

   Por él mil arroyuelos se deslizan
Que en tortuoso giro
Cortan del valle el plácido retiro.
Allí en largas praderas fertilizan
El plátano sabroso;
Aquí verdes colinas esquivando
Su falda van lamiendo
Y del tronco pomposo
Del drago la altivez desenvolviendo,
Que de su seno abriendo las vertientes,
De púrpura matiza las corrientes.
Las frutas y las flores
Lisonjean y halagan los sentidos
Con su sabor y olores;
Encantan los oidos
Las quejas de los dulces ruiseñores,
Y del canario y colorín hermosos
A par resuenan ecos armoniosos.

   La bóveda perpetua de verdura
De esta selva sombría
Pasó entre sus antiguos moradores
Por el elíseo campo
Do en eterna ventura
Habitaban las sombras inmortales
De los varones y héroes virtuosos;
Al tiempo que en el Teyde los malvados,
Testigos desgraciados
De su gloria, lloraban envidiosos,
Y con hondos clamores
Del volcán agotaban los ardores.

   Envuelta en estas lúgubres ideas
Mi mente se agitaba
Cuando veloz la noche desplegaba
Su manto por el mundo;
Las sombras por el viento descendian,
En los copados árboles caian,
Y el silencio profundo
De las aves mostraba al caminante
Del forzoso descanso el dulce instante.

   La senda dejo y encontrar procuro
Un asilo propicio á mi reposo;
Busco y elijo como el más seguro
De una alta roca el hueco pavoroso,
Por donde entre el horror que le acompaña
Su cóncavo presenta la montaña.

   Dejo el temor, y al resplandor sombrío
De las humosas teas
Me adelanto con planta vacilante;
Mis ojos vagan por el centro frio,
Y en él ¡gran Dios! encuentro la morada
De la implacable muerte;
Ella su trono obstenta
De esta horrible mansion en el silencio....






ArribaCarta a los editores de las Variedades acerca del juicio que de las Amazonas cautivas se publicó en el Memorial literario

Variedades de Ciencias, Literatura y Artes, t. VIII, pp. 359-361.





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