1
Ramón Menéndez Pidal: Los españoles en la literatura, Buenos Aires, 1960, Col. Austral, pág. 35. Remitía Menéndez Pidal a un catálogo de obras de ese género, compuesto por Fidelino de Figueiredo. El catálogo y la aguda exposición del crítico portugués son ahora fácilmente accesibles: Pirene, Introducción a la historia comparada de las literaturas portuguesa y española. Trad. de Carmen Muñoz, Madrid, 1971, Col. Austral, págs. 161-195 (Capítulo VII: «Una forma híbrida de crítica»).
2
Se cita por La caverna del humorismo. Segunda edición, R. Caro Raggio, Madrid, 1920, pág. 125. En adelante las referencias a las páginas se dan entre paréntesis, dentro del texto, sin más indicaciones.
3
Cito por la
edición de Barcelona, 1873, págs. 121-122. El texto de 1869,
donde faltan las palabras «de idealidad y
de espíritu burlesco, de fantasía y de
prosaísmo»
, lo recoge, entre otros de distintos
autores, Wido Hempel en su estudio «Über
spanisch humor», Romanische Forschungen, 72,
1960, págs. 322-369
(pág. 361).
4
Emilio González López: El arte narrativo de Pío Baroja: Las trilogías. Las America, New York, 1971, págs. 96-98. Del humorismo en la obra de Baroja se han ocupado con lucidez Luis López Delpecho: «Perfiles y claves del humor barojiano», Revista de Occidente, VI, 1968, págs. 129-150, y Biruté Ciplijauskaité: Baroja, un estilo, Ínsula, Madrid, 1972 (Capítulo VI: «Distancia y humorismo: dos constantes barojianas»). Se limita a resumir algunas ideas de La caverna del humorismo, sin extraer consecuencia alguna, Salvador Clotas: «El azar y la intuición. Baroja reconsiderado a través de sus opiniones sobre literatura» (en J. Benet et al.: Barojiana, Taurus, Madrid, 1972, págs. 113-42, espec. 137-140).
5
Enrique Díez-Canedo: Conversaciones literarias, Madrid, 1921, págs. 267-272.
6
Azorín: Ante Baroja, Zaragoza. 1946 («El personalismo de Baroja», ABC, 8 abril 1919, págs. 132-133).
7
G. Sobejano: «Componiendo Camino de perfección», (Cuadernos Hispanoamericanos, N.º 265-267, Julio-Septiembre.)