131
Ibíd., p. 208.
132
Ibíd., p. 384. Así, «para pensar acerca de dos líneas paralelas en jeneral, basta que me represente dos líneas paralelas de determinada situacion, lonjitud, color, etc., i para pensar acerca de montes basta representarme uno o dos, de tamaños, figuras i colores determinados, a cierta distancia en que la vista pueda abrazar fácilmente sus dimensiones» (p. 234).
133
«De la ilusion que produce el uso de los nombres abstractos han dimanado no pocos de los absurdos que han contaminado por siglos la filosofía del entendimiento, i de que quizá no la han purgado del todo los trabajos de Locke, Berkeley, Condillac i otros eminentes filósofos. De aquí las formas sustanciales de la escuela peripatética, cualidades a que se atribuia cierta especie de realidad independiente. De aquí tantos conceptos erróneos relativos al espacio i al tiempo». Ibíd., 253. Véase además la pág. 174.
134
Ibíd., 114, 119, etc.
135
Ibíd., 358.
136
Ibíd., 294.
137
Las citas que he hecho en este párrafo corresponden a las Obras, I, p. 19, 345, 352, VIII, págs. XXIX, XXX y XXXVI.
138
Obras, XV, 61. Influjo de la civilización sobre la moralidad.
139
Obras, I, p. 152.
140
Ibíd., p. 154.