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Quiero agradecer las generosas palabras de Ofelia Kovacci, Presidenta de la Academia, que me llenan de satisfacción. Agradezco, además, a todos los señores académicos este premio al «Ensayo», reconociendo que este galardón tiene un sentido que no es premiar mi labor personal sino, fundamentalmente, llamar la atención sobre la presencia del Ensayo en el ámbito de la literatura argentina.
El ensayo es un género que a través de sus distintas vertientes (ya sea filosófico, literario, histórico), representa una fecunda expresión del pensamiento argentino. Tal pensamiento se fue forjando a través de distintos aportes. O sea que me parece justo darle este sentido al galardón que hoy recibo: no tanto como reconocimiento a una labor personal, que me llena de gratitud, sino como reconocimiento a quienes en la Argentina están empeñados, en distintos campos, en esta tarea de auto-conocimiento de lo que verdaderamente somos y cuál es el sentido de una identidad argentina.
Quiero, además, celebrar un ejercicio del azar: yo recibo este premio en una ceremonia donde hay dos hechos, que para mí constituyen una alegría imprevista. En primer lugar, el haber escuchado una exposición tan brillante, atractiva, y que brindó una visión poliédrica del mundo de Calderón de la Barca, como la que hizo el doctor Federico —368→ Peltzer. Escucharlo fue para mí una fiesta. En segundo lugar, fue también una fiesta inesperada el haber asistido a la entrega de premios a una pléyade de jóvenes egresados que, en universidades de distintas partes del país, han dado testimonio de una vocación por el mundo de las Humanidades. Este hecho tiene un carácter personal, de íntima satisfacción, y es el de saber que entre estos chicos hay dos tucumanos: Denise León y María Victoria Babot (representada por sus padres), criaturas de provincia que expresan el mundo del noroeste argentino y que se han formado en la misma universidad en la que yo cursé mis estudios.
Quiero decirles que agradezco el Premio de la Academia Argentina de Letras en el rubro «Ensayo». Pero haberlo recibido conjuntamente con todos estos jóvenes universitarios venidos de distintas partes del país, es para mí un galardón suplementario. Quiero decir con esto que me he sentido premiado dos veces.
Muchas gracias.