312. Dista cuatro leguas de la ciudad de Santa Cruz, y ciento y ocho de la capital de la provincia: se fundó en el año de 1714 por el P. Fray Santiago de Rivero, del orden de Nuestra Señora de la Merced, con indios de nación Chiriguanas, que apresaron, hasta el número de cincuenta familias, los del Piray, Cabeza y Abapó, del centro de la Cordillera, con quienes estaban en guerra, y las entregaron al gobernador y cabildo de Santa Cruz, quienes eligieron el paraje en que se halla, para contener a los infieles de nación Yuracarees, que por aquella parte hacían mucho daño a los vecinos de Santa Cruz, y aun intentaban —74→ entrar en la ciudad; con lo que se contuvieron, y retiraron a lo interior de la montaña.
313. Su situación es en una llanada baja, rodeada de monte, la plaza es bien grande, muy cubierta de pasto, y viene a ser un ejido para las mulas y caballos. En uno de sus frentes está la casa o habitación del cura, con varias oficinas para el beneficio del azúcar de su cosecha, y la escuela de los indios; en el mismo frente está la iglesia, es bien larga y ancha, las paredes de palizada, barro y adobe, muy baja de techo, cubierto con motacú, su adorno moderado. Mantiene una música de violines, bajones y otros instrumentos de boca, que aprenden los indios: entre todos serán doce.
314. Las habitaciones son unos galpones o chozas infelices y sin orden, techadas con motacú; el Cabildo se compone de cuantos empleos concejiles puede tener la más populosa ciudad, porque así sus curas lo han dispuesto, como si tuvieran toda la autoridad real.
315. La robustez, estatura, fisonomía, traje, usos, costumbres y armas de estos indios, es en todo conforme a los de las misiones de la Cordillera, que por menor se explican en el citado informe de 15 de enero de 1788, a que me remito.
316. Ni cuando se fundó esta población ni después, se le señaló el distrito de su jurisdicción, ni se les repartió a los indios las tierras para su labranza y cultivo, ni se asignaron las de bienes de comunidad y demás que previenen las leyes de estos dominios. En esta parte sigue igual método que la ciudad de Santa Cruz.
317. Los indios se ocupan cuatro días en la semana en trabajar para el cura los plantíos de caña, que siembran en los mejores terrenos que elige a su voluntad, y demás faenas en que quiera ocuparlos, como único sínodo que goza por asignación de patrón y prelado. Las cosechas, en años fértiles, son de consideración; suelen llegar a mil arrobas de azúcar, y pudieran ser más abundantes si pusieran otro empeño en la extensión y cultivo de sus cañaverales.
318. En la visita que hizo el Señor Obispo, D. Alejandro José de Ochoa, a estas misiones, en el año pasado de 1735, mandó a los curas llevasen una cuenta formal del producto de las chacras, labores, y cuanto trabajan los indios en los expresados cuatro días en la semana, y que se destinase la tercera parte para la fábrica de la iglesia, y las otras dos partes para el cura, con otras providencias económicas —75→ y gubernativas a los intereses temporales de la misión, con que la sujeta a la jurisdicción episcopal, y como bienes eclesiásticos dispone del ganado que posee el común de los indios.
319. Los dos días que, fuera del domingo, les quedan libre en la semana, los invierten en el cultivo de sus reducidas chacras, donde siembran arroz, algodón, yuca, camote, maíz, zapallos y alguna corta plantada de caña: en el corte y conducción de maderas para proveer de ellas a Santa Cruz, o en trabajar de peones en los chacos de los españoles, con el jornal de dos reales y medio, que perciben en plata o géneros.
320. Como es tan poca la utilidad que les queda, y lo pasan lo más del año en tan penosa servidumbre, los ha pervertido de modo, que se han hecho unos vagantes, dados al hurto y continuada embriaguez. Cuando visité estos pueblos en el año pasado de 1787, puse los medios para que se gobernasen y formalizasen según los previenen las leyes, pagando a S. M. el debido tributo, o en dinero o en los frutos de sus cosechas, a los precios corrientes; y por motivos prudentes y políticos tuve que dejar las cosas en el estado que las encontré hasta mejor ocasión, que tal vez podrá proporcionarse en la próxima revisita, de que tengo informado a ese Superior Gobierno, con fecha 13 de octubre del año anterior próximo, y bajo del número 546.
321. El temperamento de este pueblo es algo más ardiente que el de Santa Cruz, sano y su agua buena.
322. El ganado que en aquel tiempo poseía el común de los indios, era 230 cabezas de vacuno de yerro.
El todo de la población se compone de 1.701 indios.
323. Dista del antecedente veintitrés leguas de Santa Cruz veinticinco de la capital de la provincia ciento treinta y siete. Se fundó el año de 1764 por el Padre Gabriel Díaz, de la compañía de Jesús, con indios de nación Chiriguana, los cuales se pasaron de la Cordillera hasta el número de 300 a la Misión de los Santos Desposorios —76→ de Buena-vista, huyendo de otros de su propia nación, con quien tenían guerra. El referido Padre los acogió con mucho cariño, estableció y educó en este pueblo, con ánimo de que permaneciesen en él, hasta que viendo lo mal que se llevaban con los otros indios por ser de distinta nación, determinó separarlos, fundando el citado pueblo, en una crecida estancia que poseían los jesuitas de todos ganados, en el paraje donde hoy se hallan,
324. Su situación es en medio de una llanada deliciosísima, de tres leguas de campaña de fértiles terrenos, próximo al río Palometas, de exquisita agua, que proporciona grandes ventajas para la cría del ganado. Las habitaciones de los indios, iglesia y casa del cura, diferencian muy poco al antecedente. Su gobierno espiritual y temporal es igual en todo, y lo mismo en las labores y trabajo de los indios, cultivo de las tierras y frutos de ellas, a excepción de que no hay música de indios como en los demás.
325. La población se compone de 560 indios, y el número de ganado que poseía el común de los indios: de vacuno 800 cabezas de yerro, 10 yuntas de bueyes, 20 yeguas y 10 caballos.
326. Dista del antecedente doce leguas; de Santa Cruz diecisiete; y de la capital del gobierno ciento veintinueve. El origen de esta fundación fue una entrada que hicieron los Cruzeños a los indios de nación Chiquita, que se hallaban situados en el largo monte que cae a la banda del Río Grande por el E, para castigar los muchos daños que hacían. Con efecto quedaron vencidos, y se redujeron a poblar en el paraje que se los señalase; así se hizo por el Padre José Francisco de Arce, de la Compañía de Jesús, quien se encargó de su educación y gobierno en el año de 1691, e hizo la población en el sitio que llaman la Enconada de Cotoca, seis leguas distante de Santa Cruz: de aquí se mudó a Azusaqui, después a Palometas; y últimamente en el año de 1723 el Padre José Casas, de la misma Compañía, la estableció en Buena-vista, que es donde subsiste. El paraje es el más hermoso, de mejores terrenos, aguadas, temperamento y demás proporciones ventajosas a la comodidad humana, de las que presenta la vasta extensión del partido de Santa Cruz, y donde —77→ debiera haberse fundado esta ciudad, o mudarla en el día, supuesto que poco van a perder los vecinos en dejar sus casas, y mucho lo que ganan.
327. Su situación es un terreno elevado, o alto plan, que domina toda la campaña de sus inmediaciones: esta se compone de pequeñas lomas, pobladas de árboles y arbustos, que hacen a la vista un objeto muy agradable. Corren en distancia de poco menos de una legua el río Palometas, y algo más de dos el de Palacios, sin otros arroyos y manantiales inmediatos, de donde se proveen de agua.
328. La población guarda mejor orden que las otras: las calles están a cordel, la plaza es grande y cuadrada. En uno de sus frentes está la iglesia y la casa del cura: aquella es magnífica, muy alhajada, y de una obra sólida, y según arte de arquitectura: muy pocas se encontrarán en la Sierra que le compita. Quisiera el Cabildo Eclesiástico de Santa Cruz, que su iglesia catedral fuera como esta. Tiene una música, entre voces e instrumentos de cuerda y boca, de más de 24 indios, más expertos que los de Porongo. La casa del cura está pegada a la misma iglesia, guarda igual construcción en la solidez del edificio, era colegio de los jesuitas, por lo que no carece de cuantas habitaciones y oficinas son necesarias al gobierno, tráfico y comercio que tenían. En el presente tiempo el cura se aprovecha de ellas para el beneficio de los azúcares, cuyas cosechas son superiores a los demás curatos. No hay en todo el reino del Perú otro que le aventaje en autoridad, comodidad y aun intereses; cuantos indios le habitan son unos siervos suyos, cuantos terrenos poseen es árbitro para aprovecharse de sus frutos, en cuyo cultivo emplea los brazos de aquellos miserables los cuatro días que en la semana se les tiene señalado por razón de sínodo; y es dueño absoluto para disponer del ganado de la Misión. Cuando la expulsión de los jesuitas, pasaban de 20.000 cabezas de ganado vacuno las que quedaron, y fueron entregadas por inventario al cura D. Manuel Andrade, que puso el Reverendo Obispo de Santa Cruz D. Francisco Ramón de Herboso, las cuales destruyó y consumó por aprovecharse del sebo, dejando sin ganado la Misión, con otros muchos excesos; y como era sobrino del Sr. Obispo, las resultas fueron darle el curato de San Roque de Potosí, que hoy sirve en el Arzobispado de Charcas. Por más diligencias que he hecho, no he podido haber a mis manos el inventario, me dicen está entre los papeles de temporalidades de la Real Junta Provincial de la Plata, bien que, aunque por él se le quiera hacer cargo al cura, su constitución es tal, que nada podrá adelantarse.
—78→329. De todo este considerable fondo sólo ha quedado el reducido número de 1.134 cabezas del ganado vacuno, y 875 del caballar: todo lo demás pereció.
330. Las habitaciones de los indios son unos galpones, que toman todo el frente de la calle, con su división para cada familia, muy reducidas, y del mismo material que las de los otros pueblos. En la inmediación del pueblo tienen un monte de naranjas dulces exquisitas, que forma sus calles como en las alamedas; hacen una vista deleitable, particularmente cuando están con el fruto maduro o en flor.
331. Cultivan sus reducidos chacos en los días que les queda libre, y tienen muy buenas cosechas de maíz, arroz, yuca, algodón, camote, zapallo, plátanos, caña dulce y piñas; con lo que comercian con los vecinos de Santa Cruz, a cambio de sal, charques, hachas, cuchillos y otros efectos.
332. En traje, costumbres y gobierno no diferencian con los otros.
333.Se compone esta población de 2.017 indios.
334. El establecimiento de esta reducción corre a cargo del racionero de la Santa Iglesia Catedral de Santa Cruz, D. Andrés del Campo y Galicia, quien con motivo de haber pasado el año de 1789 al pueblo de Santa Rosa, comisionado por el Gobernador Eclesiástico a la función del Santísimo Sacramento el día de Corpus, se le informó de la población de indios infieles de nación Yuracarees que había en lo interior de la montaña, a distancia de cinco leguas del pueblo y misión de los Santos Desposorios de Buena-vista, y de la disposición que tenían a abrazar nuestra Santa Fe católica: llevado de un celo cristiano, luego que concluyó esta festividad, pasó a informarse personalmente de las circunstancias de la población, calidad de los indios, y si efectivamente tenían el ánimo dispuesto de entrar en el gremio de la iglesia. Le acompañaron, el presbítero D. Pedro José de la Roca, que ha servido de cura muchos años en las misiones de Chiquitos, el juez comisionado de aquellos parajes, D. José —79→ de Cuellar Roca, y otras diferentes personas. Llegado que fue a la población, le salieron a recibir los indios con demostraciones de cariño y alegría, según acostumbran: él les trató del mismo modo, agasajándolos con abalorios, cintas y demás frioleras, de que se pagan. Les preguntó si querían ser cristianos, y que se les formalizará su población en mejor paraje; todos conformes respondieron, hacia tiempo lo deseaban, y no habían podido conseguir se les pusiera sacerdote. Viendo aquellas almas tan adictas a tomar el verdadero camino de nuestra salvación, trató con ellos se mudase el pueblo a un sitio, que llaman el Potrero de Santiago, fuera de la montaña, de excelentes proporciones, en distancia de cuatro leguas de Buena-vista. Practicada esta diligencia, dio parte a la Real Audiencia de Charcas, ofreciendo hacer a su costa la población, iglesia y casa del cura, y el referido D. Pedro José de la Roca, servir sin salario el ministerio de párroco. Por providencia de 30 de enero de 1790 aprobó aquel tribunal los designios de ambos eclesiásticos, y dando las gracias al primero en nombre de S. M. mandó, que para el nombramiento de párroco, ocurriese al Reverendo Obispo y a mí, a fin de que respectivamente proveyésemos con arreglo a leyes.
335. Con testimonio de esta providencia, me hizo su recurso dicho prebendado, e inmediatamente libré todas las órdenes convenientes a un fin tan santo. El Reverendo Obispo se opuso, por haberle informado de Santa Cruz, que era más conveniente reunir estos indios a los pueblos de Santa Rosa, o Buena-vista, con justificaciones nada sinceras, y con ellas dio parte a la Real Audiencia.
336. Habiendo yo pasado, cuando se hallaba pendiente el recurso, a la expresada ciudad de Santa Cruz, determiné reconocer por mí mismo el pueblo de dichos infieles; para examinarles, si querían reunirse a alguno de los que van referidos, y reconocer el paraje que se les había señalado para hacer la población. Todo ello lo encontré conforme a lo informado por el referido racionero, y con justificación lo hice presente a dicho regio tribunal en 6 de setiembre del citado año; por cuya superioridad se mandó en 15 de febrero del siguiente, formalizar la población en el paraje asignado, según las ofertas de dichos eclesiásticos, con lo que se puso silencio a las disputas y altercados, y se dio principio a ella: la que tiene muy pocos adelantamientos, por ser su costo mayor que el que se había propuesto el fundador; sólo se ha hecho una reducida capilla, que sirva provisionalmente hasta que se haga la iglesia, para lo que hay muy buena madera acopiada; y unas estrechas habitaciones para los indios.
—80→337. Por haberse levantado el plano antes que se pensara en semejante reducción, va el pueblo señalado de indios infieles en el mismo paraje que lo reconocí. El número de almas que tenía eran 180.
333. El total de este partido, con inclusión de las antiguas y nuevas reducciones de la Cordillera de indios Chiriguanas, asciende a 21.010 almas, y de toda la provincia 180.163, según se demuestra por el adjunto estado.
339. Fue descubierto en él año de 1768, a expensas del Reverendo Obispo de Santa Cruz, D. Francisco Ramón de Herboso, abriendo una senda desde el sitio llamado Chapani al río Chapari, cuya empresa se suspendió hasta el de 1775, en que por los dos hermanos D. Manuel y D. Ángel Mariano Moscoso, cura aquel de Punata, y este que lo fue de Tarata, y hoy Obispo del Tucumán, se destinó al P. Fray Marcos de San José Menendes, recoleto de la Orden de San Francisco, a que entrase a reconocer el estado de los indios infieles de nación Yuracarees, para tratar de su reducción y demás circunstancias de aquellos parajes.
340. En 25 de julio de dicho año, con la correspondiente licencia del referido Señor Obispo de Santa Cruz, emprendió su viaje con veinte hombres, provistos de útiles para desmontar e ir abriendo el camino, y los víveres necesarios.
341. Como había mediado el tiempo de siete años del primer descubrimiento, y aquel se hizo abriendo una estrecha senda, sólo quedaron reducidos vestigios de ella, por haber crecido la montaña: estos graves obstáculos, lo pantanoso del terreno, y lo áspero de la serranía, que no ofrece otra cosa que precipicios, les causó infinidad de trabajos y fatigas, que los más no quisieron sufrir, y a los veinte días dejaron al religioso con tres o cuatro, volviéndose para sus casas.
342. No obstante, revestido de fortaleza, continuó su camino con los pocos que le quedaban, y guiados de cinco indios que encontraron a media montaña beneficiando sal, fueron a dar a un pueblo llamado Coné, inmediato a las juntas del río Chapari, que se compondría de 150 indios, de quienes fueron recibidos con mucha alegría, y hospedados con humanidad, proveyéndoles de aquellos víveres que producía el terreno, y manifestando su buena inclinación a abrazar nuestra Santa Fe católica.
343. A los cincuenta y tres días determinó dicho religioso regresar a Cochabamba para dar cuenta de su expedición, habiendo tratado con los indios volver con el auxilio de más gente, víveres y los efectos que apetecen; y ellos le ofrecieron esperarlo con casa y capilla hechas, en el sitio que les explico y señaló.
344. Llegado que fue a Cochabamba, y dado cuenta de su comisión, —82→ determinaron los dos hermanos curas, volviese con mayores auxilios, para reducir aquellos infieles y formalizar la población: y teniendo dispuestas sus cosas por el mes de abril del siguiente año de 1776, emprendió su viaje con los Padres Fray Tomás de Anaya y Fray José Villanueva de la misma religión, llevando algunos peones para poner el camino en estado de que pudiesen transitarlo con bestias. Este último se volvió antes de internarse en la montaña, por haber caído enfermo. Gastaron dos semanas en vencer las grandísimas dificultades de poner corriente una estrecha senda, y al cabo de ellas llegaron a las Salinas, donde encontraron algunos indios, y con su auxilio pasaron al pueblo del Coné, y fueron recibidos con más excesivas demostraciones de alegría que la primera vez.
345. A los cuatro días hicieron la habitación a los religiosos, y una reducida capilla, donde principiaron a celebrar el santo sacrificio de la misa, o instruir en los rudimentos de nuestra verdadera creencia a aquellas almas en cuya santa operación se continuó con empeño el tiempo de cuatro meses, y viéndose desamparados de todo auxilio, sin tener para su sustento más socorro que las frutas silvestres que mendigaban de los mismos indios, faltándolos hasta la harina para hostias, no obstante las repetidas cartas que escribieron a los dos expresados curas del estado en que se hallaban, determinó retirarse Fray Tomas Anaya a su convento, y por hallarse Fray Marcos padeciendo una grande hinchazón en las piernas que le impedía caminar a pie, resolvió quedarse sólo entre aquellos infieles a esperar los deseados auxilios. Escribió con su compañero al cura de Punata, mandándole la cuenta de los gastos de esta segunda expedición, que todos ellos ascendían a 168 pesos, e instándole a que lo socorriese.
346. Las resultas fueron, enviarle víveres, chaquiras, y un sacerdote secular que le acompañase, con que consiguió reparar la misión; en términos que atrajo hasta 500 indios, y por ser 200 de ellos de otra parcialidad llamada Chuchis, determinó hacerles pueblo, separado, con la denominación de San Antonio, que no tuvo subsistencia.
347. Viendo tan favorables progresos, le pareció conveniente salir para Tarata a formar a los curas del buen estado en que quedaba la reducción, a fin de que concurriesen a sostenerla con los gastos precisos, dejando al sacerdote secular, quien a pocos días se retiró al mismo pueblo de Tarata, llevando consigo algunos indios, para que viesen los curas su buena disposición y enseñanza; y enterados estos párrocos de su capacidad e inclinación, determinaron bautizarlos, con lo que les pareció haber concluido la empresa, pues determinaron —83→ que Fray Marcos pasase a la ciudad de la Plata a dar parte al referido Señor D. Francisco Ramón de Herboso, que había sido promovido a aquel arzobispado, para que proveyese de la subsistencia de la Misión, representando los muchos gastos que habían hecho.
348. El Señor Arzobispo despidió a Fray Marcos, diciendo, que el no metía su hoz en miel ajena: que ocurriese al Señor Obispo de Santa Cruz, y sólo le dio veinticinco pesos.
349. Se presentó a la Real Audiencia, dando parte de su conquista espiritual, para que de los caudales de temporalidades se asignase lo preciso a la conservación y prosperidad de aquella santa obra; y por el Señor Presidente se le denegó, expresando no había fondos para ello.
350. Viéndose destituido de toda esperanza en medio de tan gran conflicto, dio el acaso de llegar a la ciudad de Chuquisaca en el año de 1779 D. Ignacio Flores, electo gobernador de las Misiones de Moxos, quien traía, el designio de facilitar mejor y más breve camino desde Cochabamba a ellas, que el que se transita por la ciudad de Santa Cruz; y habiendo comunicado el pensamiento con uno de los señores de la Real Audiencia, le propuso el de Yuracarees, y que para tomar los conocimientos necesarios se informase del referido Fray Marcos. Así lo hizo, y enterado del estado de aquella reducción, paraje y más corto tránsito para abrir su proyectado camino, le instó a que reiterase dicha solicitud en la Real Audiencia, ofreciéndola su protección. Con efecto por este medio consiguió se le libraran 1.000 pesos en los caudales de Moxos, con la calidad de que entrasen en poder del referido D. Ignacio Flores, para que por su mano le fuese auxiliando, y fomentando la misión de Yuracarees, y que se le franqueasen los oficiales y familias que pidiese de los pueblos de aquel gobierno.
351. Esta tan útil providencia, que hubiera tenido unos rápidos progresos, se entorpeció por habersele destinado a D. Ignacio Flores de comisario en la linea divisoria con los portugueses en la parte de Matogroso; y viendo Fray Marcos que no tenía otro recurso, que continuar por sí la empresa, se ofreció a ello, con tal que se le auxiliase con lo preciso. Condescendió el Sr. Flores, franqueándole 200 pesos, y orden para que en Moxos se le facilitaran los artesanos que pidiese.
352. Con esta disposición salió de Chuquisaca para la ciudad de Santa Cruz, y embarcándose en el puerto de Paylas, aportó al pueblo —84→ de Loreto, que es el primero de los de Moxos, donde tomando cinco de los mejores artesanos, se condujo con ellos, sus mujeres e hijos a la reducción de Yuracarees en catorce días de navegación, río arriba, dando principio en 4 de octubre de dicho año de 1779 en la continuación de sus progresos evangélicos, y despachó aviso al referido Señor Flores, informándole las proporciones que ofrecía esta navegación, y demás circunstancias de aquellos parajes.
353. Estas noticias, le alentaron a tomar resolución de entrar con cien hombres, en derechura por Chapani, abriendo y allanando el camino en la forma posible. Provistos de lo necesario al efecto, y estando en distancia de dos días de camino del sitio de San Mateo, le alcanzó un propio que mandaba la Real Audiencia, dándole parte haberle nombrado de comandante en jefe de las tropas que se destinaban para sujetar y escarmentar a los indios que se habían rebelado con su caudillo Tupacamaro, previniéndole, que inmediatamente pasase a tomar el mando de ellas.
354. Enterado el Señor Flores de esta novedad, nombró por su teniente a D. Antolín Peralta en el gobierno de Moxos, encargándole la apertura del camino; y dando otras disposiciones a los adelantamientos de la misión, se volvió para la ciudad de la Plata.
355. Peralta se llevó mal con Fray Marcos, quitándole los indios Moxos, que eran el principal nervio para formalizar el pueblo que tenía adelantado, por cuyo motivo determinó retirarse para dar parte al Señor Flores de los excesos de su teniente; quien, sin embargo de la justicia de Fray Marcos, sostuvo a Peralta por hallarse protegido del cura de Tarata.
356. De esta retirada se siguió a la misión gravísimo perjuicio, desertando muchos indios con sus familias a sus antiguas habitaciones; y aunque el cura de Tarata mandó a otros sacerdotes, ninguno de ellos tuvo subsistencia, ni se avino con los indios, hasta que echó mano del Padre Fray Francisco Buyán, de la misma religión, que reparó en lo posible el daño causado, atrayendo con dulzura y política la mayor parte de los fugitivos, formalizando la población, según lo permitían las cortas fuerzas, y haciendo plantíos de cocales, cacahuales y algodonales, cuyos terrenos son adaptados a estas plantas, como abajo se dirá; con lo cual logró destinarlos al trabajo de la agricultura, e irlos haciendo útiles:13 pero como los auxilios eran escasos, —85→ y jamás pudo conseguir el que se le pusiese compañero para el desahogo de su conciencia, y que le sostuviese en el trabajo, se salió aburrido al año pasado de 1783, dejando abandonada la misión; y viéndose los indios sin religioso, continuó la deserción aun en los que se hallaban bautizados, incurriendo muchos de ellos en la apostasía de volverse al gentilismo. Esta es en suma toda la historia de la misión de Yuracarees: resta hacer la descripción geográfica de aquellos parajes, y adelantamientos de los españoles en las haciendas de coca que han establecido en ellos.
357. La reducción de Yuracarees, denominada la Asumpción, está situada al N y E de esta ciudad de Cochabamba, en distancia de treinta y cuatro leguas de camino: confina por el S con el partido de Mizque, por el N, E y O con terrenos incógnitos.
358. Tiene varios ríos caudalosos, que llevan su corriente por el N; y son el Paracti, con el que confina por este rumbo, el cual se forma de los de Choquecamata, Catacajes, San Vicente, Colomi, San Mateo, Chilliguar, Millumayo, Putintirú, Trestetillas, San Cristóbal y Santa Rosa; todos ellos abundan de excelente pescado; como son, dorados, sábalos, motoro, pati, zurubís y otros, los que pescan a flecha los indios, a excepción del de Millumayo, por ser su agua salada, en términos, que de ella hacen sal los indios para su gasto, y es muy parecida a la de Inglaterra. En la unión del río de San Mateo con el Paracti se embarcan en canoas para seguir navegación a Moxos.
359. El terreno es de mucha serranía, poblada de espeso monte, y no se encuentra otra llanura que donde se ha establecido la reducción, que comprende tres leguas de largo, y cuatro de ancho en forma triangular; en lo demás apenas se halla llanada de seis a ocho cuadras de ancho y largo. En la cumbre hay una cordillera de diez leguas de tránsito, en subida y bajada; sumamente fría, y muy peligrosa de pasar, pues a los que les coge la nevada perecen, y han sido muchas las muertes que se han seguido en este arriesgado paso, particularmente de aquellas gentes pobres, que van a trabajar en las haciendas de cocales. El camino es de los más fragosos de todo el reino del Perú: tiene una cuesta de nueve leguas, con muchos saltos, atolladeros y precipicios, sin pastos para las bestias, y sólo una aguada muy corta, lo que ha hecho perecer muchas de ellas, y perderse las cargas; y este es el motivo de haberlo desechado la Real Audiencia de Charcas para conducir por él los efectos de receptoría de Moxos, y vuelto a valerse del de Santa Cruz: bien que aseguran sujetos inteligentes, que por la estancia de Colomi puede abrirse mejor camino, desechando la Cordillera.
—86→360. El temperamento es sano, y más húmedo y cálido que el de Santa Cruz: en los dos reinos de la naturaleza, animal y vegetal, se diferencian poco.
361. La fertilidad que ofrecen aquellos terrenos es de consideración, y esto ha movido a muchos vecinos de esta ciudad y valle de Clisa, arrostrando los peligros del camino, a establecer haciendas de cocales. Actualmente hay cincuenta y dos, bien que las más de muy corta extensión, pues son unos reducidos pedazos de tierra; alguna otra tiene distinto fundamento. La primera que se hizo fue por cuenta del cura de Tarata, en el sitio llamado Itirapampa, es la mayor de todas: en ella ha gastado considerables cantidades de pesos, que dudo los costee: en los primeros años dio abundantes frutos, más en el día ha decaído tanto que está abandonada. Las demás hago juicio tendrán iguales efectos, porque los plantíos no se hacen con aquel cultivo necesario al beneficio de tan delicada yerba: sólo se roza el monte, se quema toda la leña, y sin sacar el raigambre, forman sus catos y plantan la coca; y como es tierra virgen, y logra de aquellas sales de la hoja que se pudre, de la que se cae en tan espesa montaña, y de las cenizas de sus quemas, los primeros años no hay duda se consiguen unos frutos pingües, si bien no de buena calidad por lo áspero de la yerba: en los siguientes, aunque se suaviza por no estar la tierra tan brava, se van secando las raíces, como que falta aquel primer vigor que inmediatamente presta a la planta el jugo nutricio de su robustez; y como pasajero, decae en términos que, por más que se esfuercen en reponer los huecos, no pueden conseguirlo por la ingratitud del suelo, en no permitir la extensión necesaria a las raíces. No así sucediera si se prepararan los terrenos con el beneficio que se acostumbra en los Yungas de la provincia de la Paz, donde tienen unas haciendas de la mayor consideración, como que son el nervio de su riqueza. La falta de medios para estos costos es la causa de que no lleguen a prosperar como las otras: las pérdidas de no tener preservatorios para conservar la coca en la sazón con que debe sacarse, y las que presenta aquel terrible camino, es y serán unos obstáculos insuperables al alivio de esta provincia, y un suave aliciente a que se vayan consumiendo los cortos fondos de muchos de aquellos hacendados, por la lisonjera esperanza de mejorar de fortuna.
362. A más de este fruto se da bien el arroz, el algodón, el café y el cacao en muchos parajes, y no hay duda que si se dedicaran al fomento de estos plantíos, como que tienen otra resistencia, y no causan los crecidos costos de la coca, sacarían distinta utilidad. A más de ellos se crían en mucha abundancia camotes, yucas, plátanos, paltas, piñas, guayabas, naranjas y cidras de extraordinario tamaño. Hay terrenos muy parente para el añil.
—87→363. Comestibles, sólo se hallan las frutas que produce el país, todo lo demás se conduce de fuera con infinito trabajo, costos y pérdidas.
364. El proyecto de los hacendados es establecer población en la inmediación del río San Mateo: se ha dado principio a la capilla, y hay algunas casas hechas.
365. Los indios Yuracarees son de buena presencia y robustez, pero muy flojos y haraganes; su traje en los hombres es una camiseta o coton hecho de corteza de árboles, sin mangas; el pelo suelto y cortado por delante sobre las cejas, estas y las pestañas cortadas, desnudos de pie y pierna, sin cosa alguna en la cabeza, con muchos abalorios en el pescuezo y en los puños, y la cara pintada de varios colores. El de las mujeres se diferencia muy poco del de los hombres, solo en que no tienen cortado el pelo, ni usan de tantos abalorios: algunas gastan camisetas de lienzo de algodón que tejen sus mujeres; es más larga que la de corteza, particularmente en estas que les llegan a los talones, sus armas es la flecha, y el idioma muy parecido al de los Moxos.
366. La reducción no tiene método ni formalidad, se divide en dos partes el pueblo: el de la Asumpción y el de Coni; en aquel está la capilla, es muy pobre y reducida, no puede computarse el número de almas de que se compone, porque hay ocasión que pasan de 500, y otras que apenas se encuentran seis u ocho familias; mayormente con el motivo de haber estado sin sacerdote más de cuatro años, ahora ha vuelto a entrar el Padre Buyán, que puede remediar mucho los estragos que ha padecido.
Extracto en que se hace demostrable la exportación e importación, que por un cálculo prudencial se regula de los frutos y comercio comprensivo a esta provincia de Cochabamba
367. Importación de los frutos y comercio de los diecisiete curatos de su antiguo corregimiento, fuera de la provincia.
Por 200.000 fanegas de trigo y maíz, que se regulan salir para las provincias de la Plata, Potosí, la Paz, Puno, etc., a 2 ps. 2 reales | 450.000 | —88→ |
Por las maquilas de 160.000 fanegas, que de ellas se regulan salir en harinas, a 2 reales | 40.000 | |
Por 240.000 varas de tocuyo, cuatro lisos de varios anchos, unos con otros a 2 reales vara | 60.000 | |
Por 80 juegos de manteles y servilletas, a 5 pesos | 400 | |
Por 10.000 varas de trencillas, puntas finas y comunes, a 4 rs. vara | 5.000 | |
Por 400 pares de medias de la banda, de lana, a 12 reales | 600 | |
Por 300 docenas de sillas y otros muebles de madera, a 25 pesos docena, unos con otros | 7.500 | |
Por 600 cabezas de ganado vacuno para los Yungas, a 12 pesos | 7.200 | |
Por 800 quintales de jabón, a 16 pesos quintal | 12.800 | |
Por 500 cestos de coca de Yuracarees, u 7 pesos | 3.500 | |
Por la loza que se fabrica en esta ciudad | 600 | |
Por los vidrios que se extraen, de los que se fabrican en el Valle de Clisa | 500 | |
Por 4.000 pesos que se regula importa el comercio que la gente vulgar hace con gallinas, huevos, cola, y otras menudencias con que trajinan | 4.000 | |
Por 100 arrobas anís, a 4 pesos | 400 | |
Por 25 quintales de pólvora, a 26 pesos quintal | 650 | |
Por 100 arrobas de almidón, a 12½ reales arroba | 156 | 2 |
Por los fletes de mulas y burros | 12.000 | |
Por 480 onzas de oro que se regulan salir al año del mineral de Choquecamata, Cocapata y Lizaguarata, a 15 pesos onza | 7.200 | |
Por 1.200 marcos de plata piña, que se regulan al año sale de los minerales del partido de Arque, a 7 pesos | 8400 | |
________ | ____ | |
620.906 | 2 |
368. Importación del comercio dentro de la misma provincia, con los partidos de Mizque, Santa Cruz y Valle-grande.
Por 16.000 varas de tocuyo, cuatro lisos de varios anchos, a 2 reales | 4.000 |
Por 15 juegos de manteles y servilletas, a 5 pesos | 75 |
Por 1.000 varas trencillas, puntas y encajes, a 4 reales | 500 |
Por 40 pares de medias de lana, a 12 reales | 60 |
Por 500 fresadillas de lana, a 8 reales | 500 |
Por 50 pellones, a 3 pesos | 150 |
Por 100 hachas, a 3 pesos | 300 |
Por 30 azadones, a 3 pesos | 90 |
_______ | |
5.675 |
369. Reventas que se hacen a dicho partido de los efectos de Castilla, y de los de las provincias de afuera.
Por 10.000 panes de sal, a 2 reales | 2.500 | —89→ |
Por 250 arrobas de yerba del Paraguay, a 8 pesos | 2.000 | |
Por 300 varas de palio de Quito, a 3 pesos | 900 | |
Por 100 libras de añil, a 3 pesos | 300 | |
Por 4.000 varas de ropa de obraje, a 6 reales | 3.000 | |
Por 600 varas de bayeta de chorrillo, a 3 reales | 225 | |
Por 800 varas de cordoncillo, a 3 reales | 300 | |
Por 400 varas de jerga, a 2 reales | 100 | |
Por 500 costales de lana, a 6 reales | 375 | |
Por 30 libras de lana de colores, a 5 reales | 18 | 6 |
Por 6 libras de galón, y melindre, a 30 pesos | 180 | |
Por otras tantas de hilo de oro, y plata fino, al mismo precio | 180 | |
Por otras tantas de oro ordinario, a 20 pesos | 120 | |
Por 3 paquetes de color, a 8 pesos | 24 | |
Por 50 gruesas de cuerdas de guitarra y violín, a peso | 50 | |
Por los efectos de Castilla | 5.000 | |
Por 500 cuchillos, a 2 reales | 125 | |
Por 400 cestos de coca, a 8 pesos | 3200 | |
________ | ____ | |
18.597 | 6 |
370. Al partido del Valle-grande.
Por 24.000 varas de tocuyo, cuatro lisos, a 2 reales | 6.000 |
Por 5 juegos de manteles y servilletas, a 5 pesos | 25 |
Por 500 varas de trencillas, puntas y encajes, a 4 reales | 250 |
Por 50 pares de medias de lana de la banda, a 12 reales | 75 |
Por 2.000 fresadillas de lana, a peso | 2.000 |
Por 200 pellones ordinarios, a 3 pesos | 600 |
Por 100 sombreros de vicuña ordinarios, a 3 pesos | 300 |
Por 400 hachas, a 3 pesos | 1.200 |
Por 100 azadones, a 3 pesos | 300 |
_________ | |
10.750 |
371. Reventas que se hacen a dicho partido, de los efectos de Castilla y de los de las provincias de afuera.
Por los efectos de Castilla, incluso el fierro | 8.000 | |
Por 6.000 varas de bayeta de obraje, a 6 reales | 4.500 | |
Por 15.000 varas de bayeta de chorrillo, a 4 reales | 7.500 | |
Por 6.000 varas de bayeta blanca, a 2 reales | 1.500 | |
Por 400 varas de jerga, a 2 reales | 100 | |
Por 300 costales, a 6 reales | 225 | |
Por 30 libras de lana de colores, a 5 reales | 43 | 6 |
Por 200 arrobas de yerba, a 8 pesos | 1.600 | |
Por 40.000 panes de sal, a 2 reales | 10.000 | |
Por 50 libras de añil a 4 pesos | 200 | |
Por 50 ídem. de maxno, a 2 pesos so | 100 | |
Por 80 gruesas de cuerdas de guitarra y de violín, a 8 reales | 80 | |
Por 50 ponchos ordinarios, a 6 pesos | 300 | |
Por 6 libras de galón y melindre fino, a 32 pesos | 192 | —90→ |
Por 20 ídem ordinarios, a 20 pesos | 400 | |
Por 1.000 cuchillos, a 2 reales | 250 | |
Por 200 cestos de coca, a 8 pesos | 1.600 | |
_________ | ____ | |
36.590 | 6 |
372. Al partido de Santa Cruz de la Sierra.
Por 20.000 varas de tocuyo, cuatro lisos, a 2 reales | 5.000 | |
Por 500 varas de trencillas, puntas y encajes, a 4 reales | 250 | |
Por 2.000 fresadillas de lana, a peso | 2.000 | |
Por 200 pellones ordinarios, a 3 pesos | 600 | |
Por 500 hachas, a 3 pesos | 1.500 | |
Por 100 azadones, a 3 pesos | 300 | |
_________ | ||
9.650 |
373. Reventas que se hacen en dicho partido, de los efectos de Castilla y de los de las provincias de afuera.
Por 30.000 panes de sal, a 2 reales | 7.500 | |
Por 12.000 pesos de los efectos de Castilla | 12.000 | |
Por 5.000 varas de ropa de obraje, a 6 reales | 3.750 | |
Por 10.000 dichas de bayeta de Chorrillo, a 4 reales | 5.000 | |
Por 4.000 ídem de bayeta blanca a 2 reales | 1.000 | |
Por 500 varas de gerga, a 2 reales | 125 | |
Por 1.200 costales de lana, a 6 reales | 900 | |
Por 150 libras de lana de color, a 5 reales | 93 | 6 |
Por 500 arrobas de yerba del Paraguay, a 8 pesos | 4.000 | |
Por 80 libras de añil, a 4 pesos | 320 | |
Por 100 ídem de grana o maxno, a 2 pesos | 200 | |
Por 40 ponchos ordinarios, a 6 pesos | 240 | |
Por 10 libras de hilo de oro y plata, fino, a 30 pesos | 300 | |
Por 10 ídem de galón y melindre, a 30 pesos | 300 | |
Por otras 10 de oro ordinario, a 20 pesos | 200 | |
Por 6 paquetes de color, a 8 pesos | 48 | |
Por 60 gruesas de cuerdas de guitarra y violín, a 8 reales | 60 | |
Por 3.000 cuchillos, a 2 reales | 750 | |
Por 300 cestos de coca, a 8 pesos | 2.400 | |
_________ | ____ | |
39.186 | 6 |
374. Entradas de dichos partidos a la tesorería principal de estas reales cajas de los ramos de real hacienda, con rebaja de los sueldos de los empleados, y demás gastos que se ocasionan y quedan allí invertidos.
De Santa Cruz de la Sierra | 534 | 0½ |
Del Valle-grande | 1.369 | 0½ |
De Mizque | 11.862 | 0½ |
__________ | ____ | |
13.765 | 1½ |
375. Entradas a la tesorería de la real renta de tabacos de esta ciudad, producto de ella en dichos partidos.
De Santa Cruz de la Sierra | 3.932 | 1½ |
Del Valle-grande | 30 | 1 |
De Mizque | 615 | 2 |
__________ | ____ | |
4.577 | 4½ |
376. Resumen de esta importación.
Del comercio en las provincias de afuera | 620.906 | 2 |
Ídem, con el partido de Mizque | 5.675 | |
Ídem de las reventas que se hacen en este partido | 18.597 | 6 |
Ídem con el partido del Valle-grande | 10.750 | |
Ídem de las reventas que se hacen en este partido | 36.590 | 6 |
Ídem con el partido de Santa Cruz | 9.650 | |
Ídem de las reventas que se hacen en este partido | 39.186 | 6 |
Ídem de la entrada anual a la tesorería principal de estas reales cajas de Cochabamba, de los ramos de real hacienda | 13.765 | 1½ |
Ídem, para la de la real renta de tabacos | 4.577 | 4½ |
__________ | ____ | |
759.699 | 2 |
377. Exportación a las provincias de afuera y Misiones de Moxos y Chiquitos.
A la tesorería general del virreinato de Buenos Aires, por los ramos de real hacienda, rebajados sueldos de empleados y demás gastos | 87.665 | 4½ |
Ídem de la del tabaco a dicha capital | 2.749 | |
Ídem de la administración de correos de esta ciudad a la de Buenos Aires | 1.300 | |
__________ | ____ | |
91.714 | 4½ | |
A España, por las carreras de Buenos Aires y Lima, de los géneros de Castilla | 200.000 | |
Ídem a las Misiones de Moxos y Chiquitos, por el sueldo de sus Gobernadores | 6.000 | |
__________ | ||
206.000 |
378. Al Cuzco y demás lugares del Collado.
Por 140.000 varas de ropa de obraje, a 4 reales | 70.000 | ||
Por 60.000 dichas de Chorrillo, a 2 reales | 15.000 | ||
Por 25.000 dichas blanca, a 1½ reales | 4.687 | 4 | |
Por 9.000 varas de cordoncillo, a 2 reales | 2.250 | ||
Por 3.000 varas de gerga, a 1½ reales | 562 | 4 | —92→ |
Por 6.000 costales de lana, a 4 reales | 3.000 | ||
Por 60 frezadas, a 6 pesos | 360 | ||
Por 600 libras de lana de colores, a 4 reales | 300 | ||
Por 200 pellones finos, a 15 pesos | 300 | ||
Por 12 ordinarios, a 7 pesos 4 reales | 90 | ||
Por 20 alfombras, a 8 pesos | 160 | ||
Por 300 chuces, unos con otros, a 12 reales | 450 | ||
Por 500 libras de galón, y melindre, a 25 pesos | 1.250 | ||
Por 100 dichas de ídem ordinario, a 15 pesos | 1.500 | ||
Por 3 aderezos bordados, a 75 pesos | 225 | ||
Por 2.000 arrobas, de azúcar del Cuzco, a 6 pesos 4 reales | 13.000 | ||
__________ | |||
113.000 |
379. Arequipa, y demás lugares de la costa.
Por 11.000 arrobas algodón en rama, a 20 reales | 27.500 |
Por 750 botijas de vino, a 8 pesos | 6.000 |
Por 750 quintales de aguardiente, a 20 pesos | 15.000 |
Por 100 arrobas de aceite, a 8 pesos | 800 |
Por 30 arrobas de charquecillo, a 7 pesos | 210 |
Por 100 arrobas de aceitunas, a 5 pesos | 500 |
Por 1600 cestos de ají de Palpa, a 4 pesos 4 reales | 7.200 |
Por 12 arrobas de pepitas de melón, a 7 pesos 4 reales | 90 |
__________ | |
57.300 |
380. A los Yungas de la Paz.
Por 14.000 cestos de coca, a 7 pesos | 98.000 |
381. A Chucuito y Salinas de Garci-Mendoza.
Por 90.000 panes de sal, a 1½ reales | 16.875 |
Por 40 cargas de boquillas secas, a 12 pesos | 480 |
__________ | |
17.355 |
382. A las provincias de Potosí y la Plata.
Por 200 sombreros de vicuña, a 28 reales | 700 | |
Por el ramo de diezmos perteneciente a la mesa capitular del arzobispado | 28.000 | |
Por la trigésima al colegio seminario | 1.458 | 1 |
Por el gasto en los colegiales, con respecto a 50, que se regulan a 300 pesos | 15.000 | |
Por censos y capellanías | 4.000 | |
Por el descuento del un 5 por %, de los sínodos de los curas de esta provincia, para los de las misiones de Moxos y Chiquitos. | 633 | 0½ |
Por los gastos de, los litigantes en la Real Audiencia | 4.000 | |
Por 6.000 cordobanes de Mataca, a 6 reales | 4.500 | |
Por los gastos que causa la curia arzobispal | 1.500 | —93→ |
Por las cuartas con que contribuyen los curas del arzobispado | 1.980 | |
Por 300 suelas de San Pedro, a 2 pesos | 600 | |
Por 200 arrobas de garbanzos, a 20 reales | 500 | |
__________ | ____ | |
62.871 | 1½ |
383. De la Receptoría de Moxos y Chiquitos de esta ciudad para la de la Plata.
Por 1.500 libras de cacao, a 8 reales | 1500 |
Por los efectos de liencería de algodón, baúles y otros muebles de carpintería | 800 |
_________ | |
2.300 |
384. Al Tucumán y Paraguay.
Por 1.000 libras de grana o maxno, a 2 pesos | 2.000 |
Por 3.000 arrobas de yerba del Paraguay, a 6 pesos | 18.000 |
Por 300 mulas para carga y silla, a 12 pesos | 3.600 |
Por 1.000 burros, a 4 pesos | 4.000 |
Por 24 pellones de lana larga, a 12 pesos 4 reales | 150 |
Por 8 ponchos balandranes, a 35 pesos | 280 |
__________ | |
28.030 |
385. A Chile.
Por 200 libras de almendras, a 6 reales | 150 | |
Por 600 libras de cominos, a 4 reales | 375 | |
Por 10 libras de colores labrados, a 4 reales | 3 | 6 |
Por 50 libras de orégano, a 2 reales | 12 | 4 |
Por un quintal hilo acarreto | 30 | |
Por 6 cargas de nueces y cocos, a 30 pesos | 180 | |
__________ | ____ | |
751 | 2 |
386. A Lima.
Por 2.000 libras de chocolate labrado, a 4 reales | 1.000 | |
Por 1.000 libras de añil, a 3 pesos | 3.000 | |
Por 1.000 varas de paño de Quito, a 3 pesos | 3.000 | |
Por 20 libras de solimán labrado, a 6 pesos | 120 | |
Por 600 gruesas de cuerdas de guitarra, a 8 reales | 600 | |
Por el dinero que remiten al convento grande de Lima, los de Santo Domingo y San Agustín | 3.000 | |
Por la asignación que S. M. tiene hecha de limosna al hospital de San Andrés | 1.562 | 4 |
__________ | ____ | |
12.282 | 4 |
387. Exportación a los partidos de Santa Cruz, Valle-grande y Mizque, dentro de la provincia.
Por 200 cabezas de ganado vacuno, a 8 pesos | 1.600 |
Por 600 cabezas de ganado ovejuno, a 4 reales | 300 |
Por 400 arrobas de charque y cecina, a peso | 400 |
Por 50 quintales de sebo en hoja y majado, a 10 pesos | 500 |
Por 50 arrobas de grasa, a 4 pesos | 200 |
Por 50 botijas de vino, 4 7 pesos | 350 |
Por 3 piaras de miel, que hacen 60 odres, a 8 pesos | 480 |
Por 200 panes de quesos, a 1 peso | 200 |
Por 200 arrobas de pimiento o ají, a 2 pesos | 400 |
__________ | |
4.430 |
388. Al Valle-grande.
Por 2.600 arrobas de cecina y charque, a peso | 2.600 |
Por 700 quintales de sebo majado y en hoja, a 10 pesos | 7.000 |
Por 100 arrobas de grasa, a 4 pesos | 400 |
Por 2.500 arrobas de ají, a 2 pesos | 5.000 |
Por 3.000 libras de cera, a 2 reales | 750 |
Por 1.000 libras de palillos, a 2 reales | 250 |
Por 150 odres de miel, a 8 pesos | 1.200 |
Por 20 arrobas de miel de abejas, a 2 pesos | 40 |
Por 300 suelas, a 2 pesos | 600 |
Por 20 arrobas de mantequilla, a 6 pesos | 120 |
Por 1.500 quesos, a peso | 1.500 |
Por 2.600 cabezas de ganado vacuno, a 6 pesos | 15.600 |
__________ | |
35.060 |
389. A Santa Cruz de la Sierra.
Por 190 odres de miel, a 8 pesos | 1.520 |
Por 600 quintales de sebo majado y en hoja, a 10 pesos | 6.000 |
Por 2.200 arrobas de azúcar, a 4 pesos | 8.800 |
Por 500 arrobas de arroz, a 12 reales | 750 |
Por 400 libras de achiote, a 2 reales | 100 |
__________ | |
17.170 |
390. Resumen general de esta exportación.
Por el dinero que sale de estas reales cajas, de las administraciones de tabaco y la de correos, para la tesorería general de Buenos Aires | 91.714 | 4½ |
Del que se regula por los géneros de Castilla en ambas carreras de Lima y Buenos Aires | 200.000 | |
Por el sueldo de los Gobernadores de Moxos y Chiquitos | 6.000 | —95→ |
Al Cuzco y demás lugares del Collado | 113.135 | |
A Arequipa y demás lugares de la costa | 57.300 | |
A los Yungas de la Paz | 98.000 | |
A Chucuito y Salinas de Garci-Mendoza | 17.355 | |
A las Provincias de Potosí y la Plata | 62.871 | 1½ |
A la Receptoría de las Misiones de Moxos y Chiquitos de la Plata, de la de esta ciudad | 2.300 | |
Al Tucumán y Paraguay | 28.030 | |
A Chile | 751 | |
A Lima | 12.282 | 4 |
Dentro de la provincia | ||
A Mizque | 4.430 | |
Al Valle-grande | 35.060 | |
A Santa Cruz de la Sierra | 17.170 | |
__________ | ____ | |
746.399 | 2 |
391. Demostración
Importación | 759.699 | 2 |
Exportación | 746.399 | 2 |
__________ | ||
Lo que resulta en favor de los 17 curatos de Cochabamba | 13.300 |
392. Importación y exportación de los frutos que del partido de Mizque salen para el Valle-grande y Santa Cruz.
393. Al de Santa Cruz.
Por 1.500 fanegas de harina de trigo, que se regulan salir un año con otro, al precio de 3 pesos 4 reales, con inclusión de los fletes | 5.250 |
Por 120 botijas de vino para dicha ciudad, y misiones de Moxos, y Chiquitos, a 12 pesos, con fletes | 1.440 |
__________ | |
6.690 |
394. Al del Valle-grande.
Por 30 botijas de vino, a 10 pesos | 300 |
Por 40 fanegas de harina de maíz, que se regulan salir en cada un año, a 4 pesos | 160 |
Por 500 ídem de trigo, a 20 reales | 1.250 |
__________ | |
1.710 |
395. Ídem los que salen del Valle-grande para el partido de Mizque.
Por 200 libras de cera, a 2 reales | 50 |
Por 100 libras de palillos, a 2 reales | 25 |
Por 600 cabezas de ganado vacuno, que se regulan salir, un año con otro, para el engorde y aumento de las estancias y reventa, a 3 pesos | 1.800 |
__________ | |
1.875 |
396. A Santa Cruz.
Por 1.000 fanegas de maíz para dicha ciudad y misiones, a 3 pesos | 3.000 |
397. Ídem los que salen de Santa Cruz para el Valle-grande y Mizque.
Por 300 arrobas de azúcar, a 4 pesos | 1.200 | |
Por 60 arrobas de arroz, a 12 reales | 90 | |
Por 400 cabezas de ganado vacuno, que se regulan un año con otro salir para el engorde y su reventa, con que comercian, a 4 pesos | 1.600 | |
Por 50 libras de achiote, a 2 reales | 12 | 4 |
__________ | ____ | |
2.902 | 4 |
398. Al Valle-grande.
Por 1.000 cabezas de ganado vacuno, que sale para comerciar con él los de este partido, después de su engorde, a 20 reales | 2.500 |
Por 200 arrobas de azúcar, a 4 pesos | 800 |
Por 50 arrobas de arroz, a 12 reales | 75 |
Por 200 arrobas de aguardiente de caña, a 3 pesos | 600 |
__________ | |
3.975 |
399. Importación de los frutos que salen de dichos partidos para las provincias de afuera.
Por 6.000 fanegas harina de trigo y maíz, que se regulan salir para las provincias de Potosí y la Plata, a 20 reales | 9.000 | |
Por sus maquilas, a 2 reales | 1.500 | |
Por 1.000 cabezas de ganado vacuno, que se regulan extraer en pie para las referidas provincias, a 9 pesos | 9.000 | |
Por 1.300 arrobas de ají, a 2 pesos | 2.600 | —97→ |
Por 1.500 arrobas de charque y cecina, a 1 peso | 1.500 | |
Por los fletes de mulas y burros de cien piaras, que se regulan emplearse en la arriería, de los efectos de las Misiones de Moxos y Chiquitos, y otros comercios | 10.000 | |
Por 309 botijas de vino, a 6 pesos | 1.800 | |
Por 300 odres de miel, a 8 pesos | 2.400 | |
__________ | ||
37.800 |
400. Del Valle-grande.
Por 2.000 cabezas de ganado vacuno, que por parte de la laguna salen en pie a dichas provincias, a 4 pesos | 8.000 |
Por 6.000 arrobas de charque y cecina, a peso | 6.000 |
Por 3.200 arrobas de ají, a 2 pesos | 6.400 |
Por 10.000 libras de cera, a 2 reales | 2.500 |
Por 3.000 libras de palillos, a 2 reales | 750 |
Por 200 odres de miel, a 8 pesos | 1.600 |
Por 700 suelas, a peso | 700 |
Por 60 arrobas de mantequilla, a 6 pesos | 360 |
Por 50 arrobas de miel de abejas, a 2 pesos | 100 |
Por 2.000 quesos, a un peso | 2.000 |
Por 55.340 mazos de tabaco en rama, que se regulan salir a la factoría de esta ciudad, de donde se proveen las provincias inmediatas, a medio real | 3.540 |
Por los fletes de arriería se regulan un año con otro | 2.000 |
__________ | |
33.950 |
401. De Santa Cruz.
Por 8.000 arrobas de azúcar, a 4 pesos | 32.000 |
Por 6.000 arrobas de charque y cecina, a peso | 6.000 |
Por 100 quintales de cebo majado y en hoja, a 10 pesos | 1.000 |
Por 1.000 arrobas de arroz, a 12 reales | 1.500 |
Por 1.500 libras de achiote, a 2 reales | 375 |
Por 39.000 libras de cera, a 2 reales | 750 |
Por 300 odres de miel, a 8 pesos | 2.400 |
Por el flete en el continuado trajín de la arriería | 6.000 |
__________ | |
50.025 |
402. Exportación a las provincias de afuera en los efectos que consumen dichos partidos.
Por los efectos de Castilla | 5.000 | ||
Por los de la tierra se regula | 2.000 | —108→ | —98→ |
__________ | |||
7.000 |
40.3. Del Valle-grande.
Por los efectos de Castilla | 2.000 |
Por los de la tierra | 1.500 |
__________ | |
3.500 |
404. Del partido de Santa Cruz.
Por los efectos de Castilla | 14.000 |
Por los de la tierra | 4.000 |
__________ | |
18.000 |
405. Resumen de la importación y exportación de dichos partidos.
Por la importación de los frutos para la ciudad de Cochabamba partido de su antiguo corregimiento | 4.430 |
Para el partido de Santa Cruz | 6.690 |
Para el del Valle-grande | 1.710 |
Por los que salen de dicho partido para las provincias de afuera | 37.800 |
__________ | |
50.630 |
406. Por la exportación de los efectos que entran a dicho partido.
Por los géneros que se proveen de la ciudad de Cochabamba | 5.675 | |
Por las reventas que de los efectos de Castilla, y de los de las provincias de afuera, Fe hace de dicha ciudad para el expresado partido | 18.593 | 6 |
Por el ramo de tributos y alcabalas que entran en las reales cajas de Cochabamba | 11.862 | ½ |
Por el producto de la real renta de tabacos que entra en la administración principal de ella | 615 | 2 |
Por los efectos de Castilla que le entran de las provincias inmediatas | 5.000 | |
Por los de la tierra | 2.000 | |
__________ | ____ | |
43.746 | ½ |
407. Demostración.
Importación | 50.630 | |
Exportación | 43.746 | ½ |
__________ | ____ | |
6.883 | 7½ |
408. Del del Valle-grande.
Por la importación de los frutos para la ciudad de Cochabamba y partidos de su antiguo corregimiento | 35.060 |
Por los que salen para el partido de Santa Cruz | 3.000 |
Ídem para el de Mizque | 1.875 |
Ídem para las provincias de afuera | 33.959 |
__________ | |
73.885 |
409. Por la exportación de los efectos que entran en dicho partido.
Por los géneros que se provee de la ciudad de Cochabamba y partidos de su antiguo corregimiento | 10.750 | |
Por las reventas que de ella se hacen de los efectos de Castilla y de las provincias de afuera | 36.590 | 6 |
Por el ramo de tributos y alcabalas | 1.369 | ½ |
Ídem por el de tabaco | 30 | 1 |
Por los efectos de Castilla de que se provee en las provincias inmediatas | 2.000 | |
Ídem por los de la tierra | 1.500 | |
__________ | ____ | |
52.239 | 7½ |
410. Demostración.
Importación | 73.885 | |
Exportación | 52.239 | 7½ |
__________ | ____ | |
Lo que resulta en favor del partido | 21.645 | ½ |
411. Del de Santa Cruz.
Por la importación de los frutos para la ciudad de Cochabamba, y partidos de su antiguo corregimiento | 17.170 | |
Por los que salen para el de Mizque | 2.902 | 4 |
Ídem para el Valle-grande | 3.975 | |
Ídem para las provincias de afuera | 50.025 | |
__________ | ____ | |
74.072 | 4 |
412. Por la exportación de los efectos que entran en dicho partido.
Por los géneros que se provee de la ciudad de Cochabamba y partidos de su antiguo corregimiento | 9.850 | ||
Por las reventas que de ella se hacen de los efectos de Castilla y de las provincias de afuera | 39.186 | 6 | |
Por el ramo de tributos y alcabala | 534 | ½ | —100→ |
Por el del tabaco | 3.932 | 1½ | |
Por los efectos de Castilla que se provee de las provincias inmediatas | 14.000 | ||
Ídem por los de la tierra | 4.000 | ||
__________ | ____ | ||
71.503 |
413. Demostración.
Importación | 74.072 | 4 |
Exportación | 71.503 | |
__________ | ____ | |
Lo que resulta a favor del partido | 2.569 | 4 |
414. Resumen general de lo que resulta en favor de la provincia de Cochabamba y sus respectivos partidos, del comercio interno entre ellos, y externo con las de afuera.
De la ciudad de Cochabamba y partidos de su antiguo corregimiento | 13.300 | |
Del partido de Mizque | 6.883 | 7½ |
Del Valle-grande | 21.645 | ½ |
De Santa Cruz de la Sierra | 2.569 | 4 |
__________ | ____ | |
Total | 44.398 | 4 |
415. Ídem del resultado en favor de la provincia de Cochabamba con el comercio externo de las de afuera.
De Cochabamba y partidos de su antiguo corregimiento | 620.906 | 2 |
Del de Mizque | 37.800 | |
Del Valle-grande | 33.950 | |
De Santa Cruz | 50.025 | |
__________ | ____ | |
742.681 | 2 |
416.
De Cochabamba y partidos de su antiguo corregimiento | 689.739 | 2 |
Del de Mizque | 7.000 | |
Del Valle-grande | 3.500 | |
De Santa Cruz | 18.000 | |
__________ | ____ | |
718.239 | 2 |
417.
Importación | 742.681 | 2 |
Exportación | 718.239 | 2 |
__________ | ____ | |
Lo que resulta en favor de la provincia | 24.442 |
418. De la antecedente demostración resulta el corto ingreso en toda la provincia de 24.442 pesos. Si reflexionamos las proporciones de sus pingües terrenos, ricas vetas, abundantes ríos, y lo muy poblada que se halla, no puede menos de notarse, que la desidia de sus habitantes es la causa de la misma que sufre, y el riesgo de verse cada día en más deplorable estado hace ejecutivo su remedio.
419. Bien conozco, que el tratar de él es una empresa de las más delicadas, y que pide distinta pluma, cuyas materias ha confundido los más sabios políticos en reinos civilizados, como que necesita la combinación de muchas partes, y las más de ellas deben graduarse por cálculos y conjeturas, que, aunque a la especulación parezcan fáciles, se hacen, sino imposibles, sumamente dificultosas a la práctica. ¿Y qué diremos en una provincia, donde sepultando sus moradores en el olvido los sentimientos del pundonor, se abandonan con el ocio y haraganería a los vicios más abominables, y detestables costumbres? ¿Podrá tener remedio un mal tan radicado, que se ha hecho común a la naturaleza de estas gentes?
420. Parece que el intentarlo, sino se gradúa por fanático capricho, por lo menos ha de conceptuarse de temerario o casi imposible; pero como sea esta la causa y origen de la miseria de Cochabamba, y a la que se debe ocurrir, sino en el todo, en parte, me contraeré a hacer demostrable: que su provincia no carece de cuantas proporciones presenta la naturaleza a la felicidad del hombre, sino de una activa aplicación a aprovecharse de lo mucho que ofrece, y que el remedio de sus miserias no es otro que desterrar la ociosidad, reformando unos abusos que la precipita a su entera ruina, dos partes en que dividiré el plan del presente asunto.