Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.


ArribaAbajoCuadro III

 

Cráter de un volcán.

 

Escena I

 

MATEO, bajando por el aire, montado en un diablo.

 
MATEO
Baja ya, bestia maldita,
que aquí es donde yo te guío.925
Apéame, o te rocío
la piel con agua bendita.
Con tiento, no dé un vaivén
y me abra la piamáter.

 (Llega al suelo. Voceando.) 

¡Ah de adentro! ¿Es éste el cráter930
del Vesubio?
VOZ DE HOMBRE

 (Dentro.) 

Sí.
MATEO
Pues bien,
aquí sobre ese demonio
que me sirvió de bagaje
con un urgente mensaje
me envía el mago Sofronio.935
VOZ DE MUJER

 (Dentro, sonando al lado opuesto que la primera.) 

¿Quién eres?
MATEO
Soy su discípulo.
VOZ DE HOMBRE
Presenta la credencial.
MATEO
Puestos traigo por señal
su cíngulo y su manípulo.
VOZ DE MUJER
¿Y a quién buscas tú?
MATEO
¿No encierra
940
gran número este volcán
de gnomos, genios que están
en los huecos de la tierra?
VOZ DE HOMBRE
Sí.
MATEO
¿No hay además aquí
con los gnomos gran porción945
de salamandras, que son
los genios del fuego?
VOZ DE MUJER
Sí.
MATEO
Pues, salamandras y gnomos,
vuestro favor imploramos
mi maestro y yo.


Escena II

 

Dicho, EL REY DE LOS GNOMOS y LA REINA DE LAS SALAMANDRAS, cada cual por su lado, y ambos con numeroso séquito.

 
EL REY DE LOS GNOMOS
Aquí estamos
950
todos.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Sus amigos somos.
EL REY DE LOS GNOMOS
¿Qué manda?
MATEO
Pide rendido
que desde hoy al plenilunio
de agosto contra Fortunio
y contra su protegido,955
sacudiendo vuestra inercia,
vuestro auxilio le prestéis.
El tal Paulino sabréis
que gastó orejas de a tercia.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Sí, de sus antecedentes960
cargantes nada ignoramos.
EL REY DE LOS GNOMOS
Pero nosotros gustamos
de ser, así, indiferentes.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Y a pesar de nuestros vivos
deseos de que triunféis,965
creo que a mal no llevéis
que prosigamos pasivos.
EL REY DE LOS GNOMOS
Con Fortunio en relación
estamos. No es regular
el ir por nadie a quebrar970
con él sin ton y sin son.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Hechos a esta esfera ardiente,
dejarla nos desconsuela,
que al aire libre, nos hiela
la frialdad del ambiente.975
EL REY DE LOS GNOMOS
Hechos a la lobreguez
de esta región, al pasar
a la de la luz solar,
nos ciega su brillantez.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Seguid la lucha emprendida980
contra Fortunio, contando
con que os serviremos cuando
vaya de capa caída.
MATEO
Si sólo entonces habéis
de ser nuestros valedores,985
lo que es entonces, señores,
maldita la falta hacéis.
EL REY DE LOS GNOMOS
Así, pues, luego tomad
la cabalgadura vuestra,
y al buen Sofronio esta muestra990
llevadle de mi amistad.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Y la mía: aliada fiel
y obediente a su precepto,
haré cuanto quiera, excepto
incomodarme por él.995
MATEO
Todavía no he acabado.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Nosotros sí.
EL REY DE LOS GNOMOS

 (Despidiéndose.) 

Conque, amigo...
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Dadle memorias.
MATEO
Si digo
que...
EL REY DE LOS GNOMOS
De mi parte un recado.
MATEO
Si es que tinieblas y ardores1000
queréis, pudierais poneros
vosotros a cocineros,

 (A las Salamandras.) 

vosotros a minadores,

 (A los Gnomos.) 

y así de unos y otros yo
me valdré contra Paulino.1005
EL REY DE LOS GNOMOS
¡Qué sandez!
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
¡Qué desatino!
MATEO
¿No consentís?
EL REY DE LOS GNOMOS Y
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
No.
GNOMOS Y
SALAMANDRAS
No.
MATEO
¿No?

 (A LA REINA DE LAS SALAMANDRAS.) 

Pues con toda la atención
que de derecho se os debe,
Sofronio va a henchir de nieve1010
y hielo vuestra mansión.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
¡Qué oigo!
MATEO

 (A EL REY DE LOS GNOMOS.) 

Es duro de testuz,
y allá en vuestros callejones
va a dar por cien boquerones
capaz entrada a la luz.1015
EL REY DE LOS GNOMOS
¿Cómo?
MATEO
Y a no poder más,
en las más hondas cavernas
pondrá miles de linternas
con reverberos de gas.
TODOS
No, no.
MATEO
Con esto no hablo
1020
más de mi embajada. Estoy
a los pies vuestros, y voy
a cabalgar en mi diablo.

  (Hace que se va.) 

EL REY DE LOS GNOMOS
No, ya que vos tan prudente
buscáis a Sofronio arrimos,1025
nosotros nos decidimos
por él espontáneamente.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Sí, que es una iniquidad
que ese Paulino os dispute
vuestra plaza y que disfrute1030
de tanta fama.
EL REY DE LOS GNOMOS
Es verdad.
MATEO
Gracias.
EL REY DE LOS GNOMOS

 (A los Gnomos.) 

Ya veis con qué medio
nos sacan de nuestro caos;
conque, hijos, entusiasmaos,
ya que no hay otro remedio.1035
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS

 (A sus Pajes.) 

Denme una cota de mallas.
EL REY DE LOS GNOMOS
Soldados míos, venid.
 

(Empiezan a salir Gnomos por todas partes.)

 
MATEO
¡Bien!
EL REY DE LOS GNOMOS
Vasallos, a la lid.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
A la pelea, vasallas.
EL REY DE LOS GNOMOS
Abrámonos a la tierra1040
por esos aires camino.
LA REINA DE LAS SALAMANDRAS
Guerra a Fortunio y Paulino.
EL REY DE LOS GNOMOS Y
TODOS
¡Arma, arma, guerra, guerra!
 

(Puéblanse todos los peñascos del cráter de Gnomos y de Salamandras armados, que al son de una música marcial ejecutan un baile.)

 


 
 
FIN DEL CUADRO TERCERO