Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

11

Dice Saer en otro párrafo: «La paradoja propia de la ficción reside en que, si recurre a lo falso, lo hace para aumentar su credibilidad».

 

12

Juanele señala «Habrás de saber, tú, que aisladamente, nada existe, pues, todo está en todo». Este gesto pánico de integración total entre el hombre y su lugar y entre el escritor y su escritura es el gesto que retoma Saer en el modo de narrar. La cadencia del río es uno de los ritmos que conjugan la armonía buscada. («El río, / y esas lilas que en él quedan... / quedan... / No se morirán esas lilas, no?». Saer lo sabe: «Es obvio que no se puede hablar de estos ríos sin evocar su figura y su poesía, que se confunde con ellos». Cfr. Juan L. Ortiz Obra completa Entre Ríos: Universidad Nacional del Litoral, 1996, p. 751 y Juan José Saer «Sobre Juan L. Ortiz» en Poesía y Poética Número especial dedicado a Juan L. Ortiz, México: Universidad Iberoamericana, N. 18, primavera 1995, p. 55-63.