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El asalto de Mastrique, por el príncipe de Parma

Lope de Vega



  —fol. 53r→  
PERSONAJES
 

 
ALONSO GARCÍA,   soldado.
TAPIA,   soldado.
AÑASCO,   soldado.
SOTO,   soldado.
CAMPUZANO,   soldado.
EL DUQUE DE PARMA.
DON FERNANDO DE TOLEDO.
DON PEDRO DE TOLEDO.
DON LOPE DE FIGUEROA.
EL CONDE DE BARLAMÓN.
EL CONDE MASFLET.
OTAVIO GONZAGA.
MARCELA,   dama.
AYNORA,   flamenca.
BISANZÓN,   tudesco.
EL CAPITÁN CASTRO.
UN CASTELLANO FLAMENCO.
UN SOLDADO FLAMENCO.
EL GOBERNADOR DE MASTRIQUE.
ENRIQUE,   capitán flamenco.
UN TROMPETA.
ALFÉREZ MARTÍN DE RIBERA.
EL CAPITÁN PEREA.
HURTADO.
GABRIO CERBELLÓN DE LA GRAN CRUZ.
UN TAMBOR FRANCÉS.
EL CAPITÁN ROMÁN.
SOLDADOS FLAMENCOS.





ArribaAbajoActo I

  —fol. 53v→  
 

ALONSO GARCÍA.

 
ALONSO
Guerra, algún bellaco infame
debió de ser inventor
de vuestra furia y rigor,
aunque vuestra frente enrame
laurel de inmortal honor.5
Sufrir la escarcha del yelo
de enero, al flamenco suelo,
o al calor de julio en Libia,
no quita el valor, ni entibia
los rayos del quinto cielo;10
no el ver volar por el viento,
entre los rotos pedazos
de las armas, pies o brazos,
caer cuerpos ciento a ciento,
como pájaros en lazos:15
esto, ni espanta, ni altera.
Mientras un hombre no muera,
denle a comer y beber,
¡no hay más de andar sin comer
tras una rota bandera!20
¡Por vida del rey de espadas,
que de España iba a decir,
que no la pienso seguir
sin comer tantas jornadas!
¡Por comer nos han de oír!25
¡Pesia al caminar, amén,
somos acá los vencidos!
 

(AÑASCO, soldado.)

 
AÑASCO
¿Voces Alonso?, ¿con quién?
ALONSO
Con esos hombres vestidos
de hierro, y con vós también.30
¡Del primero que inventó
la guerra, Añasco, reniego!
AÑASCO
¿Eso decís?
ALONSO
¿Por qué no?,
¡y que la abrase mal fuego,
pues que tanto mal causó!35
AÑASCO
Bien decís, que fue Luzbel
el inventor de la guerra.
ALONSO
Heredó la guerra dél
las desventuras que encierra.
AÑASCO
¡Duro ejercicio!
ALONSO
¡Crüel!
40
¿De qué le sirve al de Parma,
que por Felipe se arma
después de mil pareceres,
la encamisada de Amberes,
y entrar en tocando al arma;45
degollar del fiero hereje
tanta gente, y hombres tales;
de qué sirve que le deje
quemados los arrabales,
y que del muro se aleje,50
si allá qué comer no había,
ni acá tampoco?
AÑASCO
Callad,
que ni a vuestra valentía
conviene esa liviandad,
ni a la patria vuestra y mía.55
¡Un español de Toledo
se queja de no comer!
ALONSO
Luego yo, ¿sin comer puedo
vivir?
AÑASCO
Que no puede ser,
de todo punto os concedo,60
mas que no se ha de decir.
ALONSO
Pues que no puedo vivir,
¿no me tengo de quejar?
Si no lo puede escusar,
¿no lo tengo de pedir?65
¿No come el Rey?, ¿y no come
cuanto vive?
AÑASCO
Así es verdad.
ALONSO
Pues, ¿cómo queréis que dome
tan natural calidad,
si no es que remedio tome?70
Todo come, hermano Añasco,
que todo perece luego
en faltando el pan y el frasco:
la leña se come el fuego,
la mar se come un peñasco,75
—fol. 54r→
el aire come el olor
de las flores, y la tierra
come el agua, y del humor
que en sus entrañas encierra
da el trigo, el fruto y la flor;80
come el tiempo mil ciudades,
come el olvido mil famas,
come el sol mil humidades,
come el pez al pez, las damas
dineros y voluntades,85
como el orín el acero
el juego con el dinero,
la poseia1 a más de dos,
¡hasta la sarna, por Dios,
come2 un estudiante entero!90
AÑASCO
Digo que tenéis razón,
pero el Duque nos da ejemplo.
ALONSO
¿No come3 el Duque?
AÑASCO
No son
las cosas que en él contemplo
de tan vil estimación.95
¿Qué vil soldado se trata
más mal? ¿Quién con mayor brío
un azadón arrebata?
¿Quién marcha al calor y al frío?
¿Quién a Alejandro retrata,100
cuyo nombre le fue puesto
no sin causa, pues ha sido
otro Alejandro?
ALONSO
Si en esto
al de Parma he desfernido,
él me ha castigado presto,105
y aun lo cobra adelantado,
pues sin comer he llegado
y, si me atrevo a pedillo,
me muestran aquel castillo
de mil flamencos armado.110
¡Pesia al castillo soy yo
culebrina que he de entrar
por el muro!
AÑASCO
¿Por qué no,
pues os han visto llegar
donde el fuego no llegó?115
¿No sois Alonso García,
el que en cualquier bitería
suele arrojarse el primero?
ALONSO
¡Más querría un buey y un cuero
de Esquivias, por vida mía!120
 

(Entre CAMPUZANO.)

 
AÑASCO
Acá viene Campuzano.
Pues, ¿qué dice el Duque, hermano?
CAMPUZANO
A consejo llama ahora.
ALONSO
A consejo, luego ignora
la hambre deste cristïano.125
¡Junte a comer!, ¡pesia tal!,
y déjese de consejos.
CAMPUZANO
No lo busca el Duque mal
si, con soldados tan viejos,
trata el bien universal.130
AÑASCO
Decidme a los que ha llamado.
CAMPUZANO
Don Fernando de Toledo
es el primero que ha entrado.
ALONSO
Basta ser Toledo.
CAMPUZANO
Puedo
decir que es un gran soldado;135
don Lope de Figueroa,
él a sí mismo se loa,
y don Pedro de Toledo.
ALONSO
Otro Toledo.
CAMPUZANO
Bien puedo
loalle de popa a proa.140
Es marqués de Villafranca,
y hombre que, si la que ciñe
una vez del lado arranca,
de punta al pomo la tiñe,
que nunca la vuelve blanca.145
ALONSO
De las guerras, yo os concedo,
como en Toledo nacido,
que no falta, decir puedo,
ni señor deste apellido,
ni soldado de Toledo.150
¡Ved qué dos Toledos estos!
CAMPUZANO
Y vós García sois tres.
—fol. 54v→
Llamó4 Alejandro con estos
a Francisco de Valdés,
todos de España, y tras estos,155
Cristóbal de Mondragón
entró como coronel.
AÑASCO
Todos españoles son
mas, ¿a quién llamó con él?
CAMPUZANO
Al conde de Barlamón,160
general, como sabéis,
del artillería.
AÑASCO
Creo
que aquesta vez comeréis.
ALONSO
Que coman todos deseo,
aunque con hambre me veis.165
CAMPUZANO
El conde Masflet, maestre
de campo general.
AÑASCO
Es
hombre que, como le adiestre,
pondrá más mundo a sus pies
que un nuevo Colón le muestre.170
CAMPUZANO
También Otavio Gonzaga,
que de la caballería
es general.
ALONSO
Cuando haga
consejo el Duque este día,
más que no tratan de paga,175
quedo, que en la tienda están.
 

(TAPIA y SOTO, soldados.)

 
TAPIA
Que, en fin, a consejo van.
SOTO
Ojalá Farnesio intente,
Tapia, despedir la gente.
TAPIA
Quedo, aquí nos lo dirán.180
¿Sábese acaso, soldados,
esto que Alejandro intenta
por acá?
ALONSO
¿Somos privados
para que nos dé esa cuenta?
SOTO
Vivimos tan maltratados185
que, si no hay remedio, presto
daremos la vuelta a España.
CAMPUZANO
Lo que se sospecha desto
es que intenta alguna hazaña
donde se aventure el resto.190
ALONSO
Mándenos ir a buscar
de comer al mismo infierno.
 

(MARCELA en traje de soldado.)

 
MARCELA
No acabamos de marchar.
ALONSO
Aquí se están de gobierno;
no sé en lo que ha de parar.195
MARCELA
A ti no se te dará
mucho de que acá o allá
nos andemos deste modo,
porque para ti está todo
donde Serafina está.200
¿Hoy la has hablado?
ALONSO
¿Ha nacido
persecución de los cielos,
hay trabajo, ni le ha habido,
como que le pidan celos
a un hombre que no ha comido?205
¿Que, sin comer, pueda ser
amor loco y bachiller
quien sin comer no está mudo,
mas, desde que fue desnudo,
se ha enseñado a no comer?210
¡Oh celos!, ¡qué condición
os dio la envidia tan fiera!
Pero como pobres son,
que entran adonde quïeren
y atajan cualquier razón.215
¡Vive Cristo!, a no mirar
que están aquestos soldados
delante...
MARCELA
¡Qué lindo hablar!
A celos averiguados,
¿qué nombre les puedo dar?220
ALONSO
Marcela, ya me conoces.
¡Por vida del Duque, pues,
que si te arrimo dos coces...!
MARCELA
Averiguas con los pies
lo que el amor con las voces.225
¡Bien son todas tus acciones
—fol. 55r→
de bestia!
ALONSO
Quedo, Marcela,
dejémonos de razones,
que es azúcar y canela
de celos dos bofetones.230
Vete a alojar, que me incitas.
MARCELA
Si es verdad que esta flamenca
te agrada y la solicitas,
y en tu gusto soy mostrenca,
¿por qué a otro gusto me quitas?235
Déjame, que alguno habrá
que por su prenda me estime.
ALONSO
¡Ea, mi bien!, ¡bueno está
que una lágrima lastime,
puesto que se finja ya!240
¿Para qué, naturaleza,
en los ojos inventaste
lágrimas, que a tal flaqueza
a un roble, a un bronce obligaste,
y más con tanta belleza?245
Cuando quiere una mujer
dar veneno a nuestros ojos
sus ojos hace llover.
AÑASCO
No cesan esos enojos.
Las paces habéis de hacer.5250
¿Por qué habéis los dos reñido?
ALONSO
Celos flamencos han sido.
AÑASCO
Pues no es este buen lugar.
ALONSO
Ni aun es bien hecho celar
a un hombre que no ha comido.255
SOTO
Que ya están todos allí.
TAPIA
Y se tiene por muy cierto
ir a Mastrique.
SOTO
Es ansí.
CAMPUZANO
Quedo, la tienda han abierto,
escuchemos desde aquí.260
 

(Córrase una tienda o cortina y véanse sentados el DUQUE DE PARMA armado con bastón y, a sus lados, DON LOPE DE FIGUEROA, DON FERNANDO y DON PEDRO DE TOLEDO, OTAVIO GONZAGA, el CONDE DE BARLAMÓN, el CONDE MASFLET. Los soldados se arrimen al teatro.)

 
DUQUE
DE PARMA
Señores, ya habéis visto y advertido
en la poca asistencia, aunque con causa,
que el Rey nuestro Señor hace a este ejército;
también sabéis que los soldados todos
han padecido inumerables penas265
y trabajos que son intolerables,
y de ser referidos imposibles,
mayormente los fuertes españoles
que, en país tan remoto de su patria,
no tienen otro amparo que el del cielo.270
Tengo temor que amotinarse quieren,
porque la sed y hambre los aflige,
—fol. 55v→
y ha mucho tiempo que la paga esperan,
si no es que los empleo en algún sitio
de tierra, que pudiese la esperanza275
del saco entretenellos algún tiempo,
para lo cual ninguno me parece
más conveniente sitio que Mastrique:
es confín de Alemania, y juntamente
del país de Liege, donde están seguras280
las municiones, armas y otras cosas
para cualquiera sitio necesarias.
Este es mi intento; el vuestro saber quiero.
DON FERNANDO
Invitísimo duque de Plasencia
y generoso príncipe de Parma285
Alejandro Farnesio, cuyos hechos
escurecen las glorias de Alejandro,
no hay hombre aquí que, por servir cual debe
la Majestad de nuestro rey Felipe
y a vós, que en su lugar estáis ahora,290
no aventure mil vidas que tuviese.
DUQUE
DE PARMA
¡Oh heroico don Fernando de Toledo,
honor deste apellido! ¡Cuán al justo
convienen las palabras con el nombre!
DON PEDRO
Si busca vuestra Alteza en los Toledos295
el alma del deseo de servirle,
a las manos le pida, no a la lengua.
DUQUE
DE PARMA
Don Pedro, de sus manos soy testigo.
Iremos a Mastrique.
OTAVIO
Donde quiera
que vuestra Alteza mande, iremos todos,300
porque no hay voluntad si no es la suya.
DUQUE
DE PARMA
¡Oh, buen Otavio! ¿Qué decís, don Lope
de Figueroa?
DON LOPE
Juro a Jesucristo
que me admira y espanta vuestra Alteza:
vaya al infierno, y demos a los diablos305
una batalla, y voto a Dios de hacellos
huir más tierra que perdieron cïelo.
DUQUE
DE PARMA
¿Conde Masflet?
CONDE MASFLET
Comience vuestra Alteza
el sitio de Mastrique, aunque es difícil,
que todos moriremos en la empresa.310
DUQUE
DE PARMA
¿Conde de Barlamón?
CONDE DE
BARLAMÓN
Las grandes cosas
solo se hicieron para grandes pechos.
—fol. 56r→
Si se amotinan ya los españoles,
¿cómo pueden mejor entretenerse?
DUQUE
DE PARMA
Pues alto. Vamos, con favor del cielo,315
a sitiar a Mastrique: vós, don Lope,
con la caballería, o la más parte,
en la mano derecha iréis marchando,
y don Fernando de Toledo lleve
la izquierda con su tercio y el que lleva320
Francisco de Valdés, y los valones
podrán acompañarle, que por medio
yo iré con lo restante del ejército,
por acudir a las dificultades.
DON PEDRO
Pienso que el enemigo nos encuentre,325
que marcha en orden, y es mayor en número.
DON LOPE
Si él nos encuentra, no se irá alabando,
¡por vida de don Lope!, del encuentro,
que aún no se habrá secado aquella sangre
de los que degollamos en Amberes330
y, ¡voto a Dios!, que, si en mi mano fuera,
que no quedara vivo luterano.
DUQUE
DE PARMA
Vamos, y sepan todos nuestro intento,
porque marchemos con igual contento.
 

(Ciérrese la tienda, y los soldados digan.)

 
SOTO
Parece que ya se van335
de la tienda.
ALONSO
El seso pierdo.
TAPIA
¿Qué habrán hecho en este acuerdo?
AÑASCO
De la paga tratarán.
ALONSO
¡Si a mí me hubiera creïdo
la nación!
CAMPUZANO
Y aun más de dos
340
son del parecer que vós
habéis, Alonso, tenido.
¡Pesia tal con quien nos trae!,
¡no cae en lo que padece
gente que no lo merece!345
ALONSO
Quien no tropieza, no cae.
Pues, ¡por vida de García
y del soldado que veis,
que algún día os acordéis
de lo que os dije algún día!350
Señor Duque, de quien yo
jamás un ducado tengo,
¿sirvo al Rey, o por quién vengo
donde el diablo me engañó?
¡Bien haya el santo oficial355
hormas, hierro, aguja y hilo,
que se ríen del estilo
del estrépito marcial!
¡Vive Cristo que es un puto
el que se viene a la guerra360
a sembrar sangre en la tierra,
que da en quejas todo el fruto!
Toma el hato, mochillero;
guía a España.
MARCELA
Eso me agrada:
servir y no medrar nada,365
—fol. 56v→
comer mal, vestir acero.
Vámonos, Alonso, a ver
sábanas por estandartes,
¡qué ejército como un martes
mercado en Zocodover!370
¡Vive Cristo que reviento
de cólera!
AÑASCO
No es razón
que, hasta saber su intención,
hagáis algún movimiento.
MARCELA
Oh, ¡qué gracioso soldado!,375
de almíbar y agua rosada,
sin dinero, todo es nada,
¿qué hará bien un mal pagado?
¡Oh letras, bien haga el cielo
al que os inventó, que, en fin,380
no hay estudiante tan ruin
que no le reluzga el pelo!
¿Cuál médico, mate o cure,
no tiene bien qué comer?,
¿o cuál hombre puede haber385
que escriba, prenda, o procure,
abogue, juzgue?, ¿o quién sea
que, en fin, no descanse o viva?
ALONSO
¡Oh guerra soberbia, altiva,
sangrienta, homicida y fea!390
¡Que viva un cura mil años
entre el frasco y el pernil,
y que aquí un soldado vil
muera por reinos estraños!
Acabose, a España luego.395
CAMPUZANO
Vive el cielo que acertáis,
pues en Flandes os heláis,
y andáis cargados de fuego.
Tráigase el este mosquete,
señor don Fernando, el tío.400
AÑASCO
Por hambre, cansancio y frío
diga qué cielo promete.
¡Ea, que no hay qué aguardar!
SOTO
Con trompetas y atabales,
de Amberes los arrabales405
hizo quemar y abrasar;
que sin duda imaginó
que comían los soldados
los luteranos asados,
que el fuego entonces quemó.410
¡Pues no son los españoles
Caribdes, borracho!
TAPIA
Hablad
mejor de su autoridad.
SOTO
¡Dáseme dos caracoles!
ALONSO
¿Cómo hablar? Es un bellaco415
a pagar de mi dinero.
CAMPUZANO
Es un vinagre.
AÑASCO
Es un cuero
y mayor ladrón que Caco.
ALONSO
Quedo, tocan a marchar.
MARCELA
Trompetas y cajas son.420
CAMPUZANO
¿Qué habrá sido la ocasión?
ALONSO
Nunca tocan a pagar.
TAPIA
Oíd, todo hombre se arma,
cosa que un sitio aperciba.
VOCES

 (Dentro.) 

¡El duque Alejandro viva!,425
¡viva el gran duque de Parma!
 

(Cajas y trompetas. Entre el CAPITÁN CASTRO.)

 
TAPIA
¿Qué es aquesto?
SOTO
No lo vea.
ALONSO
El capitán Castro viene.
CAMPUZANO
Sin duda noticia tiene,
pues de su cámara es.430
CAPITÁN CASTRO
Ea, fuertes españoles,
honra de nuestra milicia;
los que volvéis por la suya
de Felipe que os envía;
los que de su patrimonio,435
que estos tiranos le quitan,
cobráis las tierras con sangre,
y a costa de tantas vidas;
los que tienen, donde el sol
peina, cabellos de tíbar,440
y donde un cristal los baña
—fol. 57r→
cuando amanece en las Indias;
hoy Alejandro Farnesio
quiere que os volváis en Midas,
dándoos un sitio que os dore445
las manos y la codicia.
A sitiar vais a Mastrique,
solo vuestro bien le obliga,
para que de vuestra mano
cobréis deudas tan antiguas.450
No le mueve mayor fama,
ni mayor gloria le incita,
que pagaros lo que os debe,
y así os ruega, y os suplica,
vais como quien6 sois, y hagáis455
lo que de vuestra osadía
tiene esperanza que haréis...
AÑASCO
No más, Castro, no prosigas.
No tenemos qué te dar,
de aquesta nueva en albricias,460
si no es el rogar al cielo
que por largos años vivas;
que premie el Rey tus servicios
para que también le sirvas
en sus consejos de España,465
cuando en su Corte residas.
Alejandro es gran señor;
Italia, España lo digan;
todas le ofrecen laurel,
y ellas se ciñen de oliva;470
que es Alejandro, soldados,
Héctor...
SOTO
Pirro...
TAPIA
Macinisa...
MARCELA
Cipïón...
ALONSO
César...
CAPITÁN CASTRO
Pues alto,
marchad, y Alejandro viva.
 

(Todos «¡Alejandro viva!», y éntrense con cajas, y toquen trompetas, y salgan BISANZÓN, tudesco, y AYNORA, flamenca.)

 
AYNORA
¡Qué pesados celos tienes!475
BISANZÓN
¿Parécente muy pesados?,
¿cuán libre de mis cuidados,
Aynora gallarda, vienes?
AYNORA
¿Con qué puedo asegurarte?
BISANZÓN
Con no te apartar de mí.480
AYNORA
Y estarás seguro.
BISANZÓN
Sí.
AYNORA
¿No estarán en otra parte?
BISANZÓN
No.
AYNORA
Luego ¿no hay confïanza
en ausencia de mujer?
BISANZÓN
No, que no hay son de querer485
a que no sepan mudanza.
AYNORA
¿No me dices que me tienes
en el alma?
BISANZÓN
Así lo digo.
AYNORA
Luego siempre estoy contigo,
cuando vas, o cuando vienes.490
¿Qué importa verte, o no verte,
si es más llano que la palma
que, teniéndome en el alma,
no puedo dentro ofenderte?
BISANZÓN
Estás, por comparación,495
del grande amor retratada,
que eres pintura colgada.
AYNORA
¿Dónde?
BISANZÓN
En la imaginación.
Mas, como lo que ha de estar,
y en espíritu caber,500
otro espíritu ha de ser,
y un alma en otra ha de entrar,
quédesete el cuerpo allá,
y otro cuerpo topar puedes,
donde sin alma te quedes505
mientras la suya te da.
Mas no gastemos quimeras,
ni me des, Aynora, enojos,
que bien se te ve en los ojos
que tú me quieres de veras.510
Trasticot, que no ha de haber
en todo el campo español
que no te parezca un sol,
¡todos los has de querer!
AYNORA
¿Tú me has visto con alguno515
desde que salí de Amberes?
  —fol. 57v→  
BISANZÓN
Tienes razón, no te alteres,
que no has hablado a ninguno,
porque pienso que son tantos,
que alguno no puede ser,520
que es devoción de mujer
la fiesta de Todos Santos.
AYNORA
Parte a buscarme qué coma
y déjate ya de hablar,
porque no puedo marchar.525
BISANZÓN
Aliento, mi vida, toma
hasta el castillo que ves,
que allí el campo ha de hacer alto.
AYNORA
Cuerpo de sustento falto
no mueve a compás los pies.530
Parte o déjame: yo iré.
BISANZÓN
¿No podemos ir los dos?
AYNORA
No tengo aliento, ¡por Dios!,
¡ni puedo tenerme en pie!
BISANZÓN
¿Cómo le tienes sin mí,535
y me dices que te irás?
AYNORA
Del enfado que me das
me ha obligado a hablar ansí.
Bueno es que te den cuidado
los celos de una mujer,540
y no el darla de comer.
¡Tú eres lindo enamorado!
Así hay muchos que, con celos,
el alma a comer darán,
pero no darán un pan545
al dueño de sus desvelos.
Parte, y busca qué comer.
Si recelas, paga el plato,
que no hay paño más barato
que el gusto de la mujer.550
Sin un jardín puede un hombre
pasarse, y hace un jardín
de gran costa, y dale, en fin,
de entretenimiento el nombre;
sin caza puede pasar,555
y gasta en perros y en aves
su hacienda, aunque, en hombres graves,
bien se puede perdonar;
sin jugar pudiera ser
pasara con más sosiego,560
que muchas veces el juego
hace bajezas hacer;
sin galas puede también,
que con un vestido honesto,
curioso, limpio y bien puesto,565
parece un hombre más bien;
mas, que sin mujer se acueste,
ello es caso trabajoso:
luego aquello que es forzoso
es barato, aunque más cueste.570
BISANZÓN
Agora tu hambre creo,
si es verdad que sutileza
es ingenio.
AYNORA
Mucho atiza,
y que le adelgaza creo.
Y por los mismos efetos,575
de necesidad forzosos,
hay mil pobres ingeniosos,
y pocos ricos discretos.
BISANZÓN
Voy porque no apures más,
con la hambre, el pobre seso.580
AYNORA
Ve, que ser tuya profeso,
y donde estoy me hallarás.
 

(Váyase BISANZÓN.)

 
Dura cosa es servir tirano dueño;
grave, tener un pleito el juez airado;
terrible, pobremente estar casado;585
triste, por ambición perder el sueño;
—fol. 58r→
füerte, fiar la vida a un corto leño;
necia, mandar el que ha de ser mandado;
estraña, el libre en un papel forzado;
crüel, sufrir el grande al que es pequeño;590
fiera, el premio perder quien le merece;
mortal, tener mujer propia a disgusto;
y vil cosa es pedir de ningún modo,
pero asistir a lo que se aborrece,
forzando el alma y esforzando el gusto,595
es muerte sin morir, que es más que todo.
 

(Entre MARCELA.)

 
MARCELA
Celos de aquesta mujer
y de mi amado enemigo
me traen por más castigo,
si mayor le puede haber,600
donde la hable y la vea,
por ver si es tan linda cosa,
que a veces suele una hermosa,
hablando, parecer fea.
AYNORA
En viendo algún español605
se me va el alma tras él,
que me parece que dél
salen los rayos del sol,
y este, por mi vida, es tal,
de tal gracia, talle y brío,610
que diera por velle mío
una corona imperial.
¡Qué bien se pone el sombrero!
¡Qué gallardo asienta el pie!
Pues, si le hablo, yo sé615
que dirá que es caballero.
No hay cosa que le esté mal,
¡qué bien puesta espada y daga!
Pues, ¿qué le diré que haga,
que no vuele a un ave igual?620
Saben amar con regalos,
y ya tan diestros están,
que de cuando en cuando dan,
con los regalos, los palos.
¡Oh bizarría española!625
Quiero hablarle.
MARCELA
Yo, si viene,
flaqueza en los ojos tiene,
no es buena para andar sola.
Llegue, pase los umbrales,
no tiemble, parta con brío,630
hagamos un desafío,
pues son las armas iguales.
AYNORA
Decid, español hidalgo,
¿harán alto ahora aquí?
MARCELA
Si queréis hacerle en mí,635
parad, y mandadme en algo.
AYNORA
¿Cuánto este castillo está
de Mastrique?
MARCELA
Media legua,
y no erais vós mala yegua
para llegar presto allá.640
AYNORA
Estoy agora cerril,
tengo condiciones bravas.
MARCELA
Si amor os echa sus trabas,
sufriréis desde una a mil.
AYNORA
¿Con quién venís?
MARCELA
¿Yo? Conmigo.
645
AYNORA
¿No sois soldado?
MARCELA
Sí soy,
sino que quebrando voy
de la amistad de un amigo.
AYNORA
¿Qué no tenéis compañía?
MARCELA
La vuestra tener quisiera,650
en cuya amistad pudiera
alojar la infantería.
AYNORA
¿Con quién venís me decid,
—fol. 58v→
porque de la suya sea?
MARCELA
Con el capitán Perea,655
un hidalgo de Madrid
a quien, por su gran valor,
estima el duque de Parma.
AYNORA
Tocando va al alma al arma
este soldado de amor.660
Si fuérades capitán,
soldado, fuera con vós.
MARCELA
Quebráramonos los dos,
según los golpes se dan,
que anda la guerra muy hueca,665
pero ¿qué plaza queréis?,
porque conmigo tendréis
coselete, o pica seca.
AYNORA
Cualquiera plaza con vós
es bien que me satisfaga,670
si me adelantáis la paga7.
MARCELA
¡Traspiés va dando, por Dios!
Amor es vino que mueve
zancadillas y traspiés,
y todo para después675
en dormir lo que se bebe8.
Ahora bien, los dos seamos
soldados deste Perea
que os digo; Mastrique vea
qué asalto a sus muros damos.680
Vós seréis mi camarada,
y tomaremos yo y vós
dos boletas, que las dos
valdrán tanto como nada.
Dadme esos brazos en prendas685
desta amistad.
AYNORA
Soy dichosa.
 

(Entre BISANZÓN.)

 
BISANZÓN
¿Cómo es esto? ¡Oh, linda cosa!
Como el caballo sin riendas,
como sin viento la mar,
como sin agua la tierra,690
como sin armas la guerra
no se puede gobernar,
así la mujer sin gusto:
¡ah crüel!
AYNORA
Este tudesco
es mi galán.
MARCELA
Yo estoy fresco.
695
BISANZÓN
Pagarme tiene el disgusto.
AYNORA
¡Mátale, español!
MARCELA
¿No hay más,
sino «mátale, español»?
BISANZÓN
Aún hoy no se ha puesto el sol,
y antes de irse el sol te vas.700
AYNORA
¡Saca, mis ojos, la espada!
¡Dale por la cara un tajo!
MARCELA
¿Y no puede, uñas abajo,
darme él alguna estocada?
BISANZÓN
¿Cómo mataré al villano?705
Sacar la espada es bajeza,
que no es bien que en su flaqueza
quede afrentada la mano.
Español, ¿qué haces aquí?
MARCELA
Estoy con esta mujer.710
BISANZÓN
Su dueño debes de ser.
MARCELA
Claro está.
BISANZÓN
¿Su dueño?
MARCELA
Sí.
BISANZÓN
Aynora, ¿es tu dueño ese hombre?
AYNORA
Pues lo dice, ¿no está claro?
BISANZÓN
¿Y vienes ya con su amparo?715
AYNORA
A sombra estoy de su nombre.
BISANZÓN
Español, matarte quiero.
MARCELA
Yo no estoy para morir.
AYNORA
¡Qué braveza!
MARCELA
¡Qué fingir!
BISANZÓN
Que saques la espada espero...720
MARCELA
Y yo que la gente llegue.
BISANZÓN
... porque te he de hacer de un salto
subir volando tan alto,
que el sol te abrase o te ciegue.
MARCELA
No sé cómo le replique.725
BISANZÓN
¿Qué dices?
MARCELA
Que bien me está,
porque vea desde allá
la gente que hay en Mastrique,
y al Duque le contaré
si la tomará, o si no.730
  —fol. 59r→  
BISANZÓN
Allá puedo echarte yo,
español, de un puntapié.
MARCELA
Sin duda es de muchos puntos,
mas tudesco, si ha de ser,
échame con la mujer,735
para que nos vamos juntos;
y será cuento estremado
debido a tus pies ligeros,
pues seremos los primeros
que hayan en Mastrique entrado.740
BISANZÓN
El Duque es este; agradece
que llega en tropa al castillo.
MARCELA
Mejor puedes tú decillo,
y agradece que se ofrece,
que si no, más que te ensalzas,745
ya, por el aire esparcido,
algún ave hiciera nido
en las ramas de9 tus calzas,
que tardaran en subir
tanto tiempo, que pudiera750
crïar una primavera,
y en el otoño salir.
 

(Soldados en orden, cajas, banderas, el CAPITÁN PEREA, DON PEDRO DE TOLEDO, DON LOPE DE FIGUEROA, CAPITÁN CASTRO, el DUQUE DE PARMA.)

 
DUQUE
DE PARMA
Esto podéis decir al castellano.
CAPITÁN CASTRO
Yo voy con tu licencia. ¡Ah10 del castillo!
 

(Un FLAMENCO CASTELLANO en lo alto con dos soldados con sus arcabuces cargados.)

 
CASTELLANO
El Príncipe ha llegado con su ejército.755
CAPITÁN CASTRO
¡Ah del castillo!
CASTELLANO
Prevenid las bocas
de los mosquetes para que sus balas
sean palabras que por mí respondan.
CAPITÁN CASTRO
Ya vuestra Alteza ha visto la respuesta,
y milagro volver con vida ha sido.760
DUQUE
DE PARMA
¡Oh villano!, ¿esto ha hecho? ¿Hay en el mundo
tan gran atrevimiento? ¡Hola! ¡Al momento
poned a este castillo tres cañones,
y batilde con furia hasta rendirle!
 

(SOLDADO FLAMENCO.)

 
SOLDADO FLAMENCO
Monsiur, cañones plantan; batir quieren.765
CASTELLANO
¡Hola, español!, ¡el que veniste!, ¡escucha!
CAPITÁN CASTRO
Vuelto me han a llamar, ¿no veis las señas?
DUQUE
DE PARMA
Mira qué quieren.
CAPITÁN CASTRO
¿Qué es lo que me dices?
CASTELLANO
¿Con qué concierto nos querrá su Alteza?
CAPITÁN CASTRO
A mí me ha dicho que las vidas solas,770
y pues le ha de rendir, y degollaros,
que acetéis el partido os aconsejo.
CASTELLANO
¿Qué haré?
SOLDADO FLAMENCO
Acetalle, y estimar la vida.
  —fol. 59v→  
CASTELLANO
Yo bajo con mi gente y, para señas,
unas varillas blancas llevaremos.775
CAPITÁN CASTRO
Ya se han rendido, y el partido acetan.
DUQUE
DE PARMA
¿Quién son los capitanes que hoy estaban
de guarda a mi persona?
CAPITÁN PEREA
Hoy es de guarda
de vuestra Alteza don Martín de Argote.
DUQUE
DE PARMA
¿Y quién con él?
CAPITÁN PEREA11
El capitán Ysasaba.
780
DUQUE
DE PARMA
Vayan los de Perea, y entren juntos.
Aguardar mi palabra, defendiendo
que no muera flamenco, ni consientan
que se les quite más que las haciendas,
pues que sin resistencia se han rendido.785
Vós, Castro, haréis en el castillo luego
mi alojamiento, porque mientras dura
el sitio que a Mastrique poner quiero,
aquí pienso tener mi casa y corte.
MARCELA
Hoy me quiero vengar deste tudesco.790
Óigame una palabra vuestra Alteza.
DUQUE
DE PARMA
Decid soldado12, y presto.
MARCELA
Diré en breve
lo que llegar a tu valor me mueve:
aquel tudesco, señor,
de su huésped ha robado795
aquella flamenca, y dado
muestras de tenerla amor.
Mas ella, que a otra nación
debe de estar inclinada,
a cuanto le dice, airada,800
responde, nitifistón.
Hoy que traía cargado
no el arcabuz, el celebro,
quiso decirle un requiebro
del ejército apartado,805
y, porque no consintió,
dice que la ha de matar.
Llegué, y púdela librar
cuando tu Alteza llegó,
mas, si se queda con ella,810
pondralo en ejecución.
DUQUE
DE PARMA
¡Bárbara es esta nación!
DON LOPE
Sí, mas la flamenca es bella.
 

(Hablen el DUQUE y DON LOPE.)

 
DUQUE
DE PARMA
¿Agrádaos, don Lope?
DON LOPE
¿A quién
cualquiera mujer no agrada815
no siendo monja, o pintada,
con quien nunca estuve bien?
La una porque es de Dios,
la otra, porque no es.
 

(Aparte MARCELA y el tudesco.)

 
MARCELA
Ya hablé con el Duque.
BISANZÓN
Pues,
820
¿qué le has dicho de los dos?
MARCELA
Quién eras me preguntaba;
dije que un noble soldado,
que esta mujer has sacado
de Amberes, adonde estaba,825
y que te quieres casar.
—fol. 60r→
Si te lo pregunta, di,
con mucha humildad, que sí,
porque te hará castigar.
BISANZÓN
Yo lo haré.
DUQUE
DE PARMA
Mucho me enoja,
830
que estos traten las mujeres
tan mal.
DON LOPE
Viendo que en Amberes
poco o nada se despoja
quemando los arrabales,
cargan con las prendas vivas.835
DUQUE
DE PARMA
Son las flamencas esquivas,
aunque amando, liberales.
Tudesco.
BISANZÓN
Señor.
DUQUE
DE PARMA
¿Tu nombre?
BISANZÓN
Bisanzón.
DON LOPE
Allá quisiera
que algo el Rey me remitiera;840
digo, a la ciudad, no al nombre.
DUQUE
DE PARMA
¿Es verdad que hacer querías
lo que dice aquel soldado?
BISANZÓN
Días ha que lo he tratado
cansado de sus porfías,845
pero siempre se defiende.
DUQUE
DE PARMA
¿Hay bárbaro semejante?,
¿pues eso dices delante
de mí?
BISANZÓN
Luego ¿esto te ofende?
DUQUE
DE PARMA
Dalde dos tratos de cuerda.850
BISANZÓN
Señor, ¿pues esto es pecado?
DUQUE
DE PARMA
¡Sí es hereje!
DON LOPE
Eso he pensado.
BISANZÓN
Español.
MARCELA
De mí se acuerda.
DON LOPE
Llevalde de aquí.
DUQUE
DE PARMA
El matar
que no es pecado porfía.855
MARCELA
Él el casarse decía,
mas no le dieron lugar.
¡Lindamente lo ha pagado!
DUQUE
DE PARMA
Don Lope, escusado estoy,
porque hasta alojarnos hoy860
estoy con algún cuidado.
No haya desorden aquí,
mi palabra di a esa gente.
 

(Váyase el DUQUE.)

 
DON LOPE
Tu Alteza seguramente
puede confïar de mí.865
MARCELA
¿Qué te parece si he dado
traza con que libre estés?
AYNORA
Echarme quiero a tus pies;
de un tirano me has librado.
DON LOPE
Ah, seó soldado español.870
AYNORA
¿Quién llama?
MARCELA
El que el mundo loa,
don Lope de Figueroa,
más claro en fama que el sol.
¿Qué manda vueseñoría?
DON LOPE
Esa flamenca, oye aparte,875
puédese parar con parte
pagando la cortesía.
MARCELA
Por no ofender tu decoro,
hoy que tu bandera sigo,
seré Alejandro contigo,880
y te daré la que adoro.
Con parte la paro al dado,
no pagando, pues la dan,
porque con el capitán
no ha de tirarse el soldado.885
Ya es tuya, un poquillo es lerda,
dale cuatro sofrenadas,
que a las primeras jornadas,
podrá ser que el trote pierda.
DON LOPE
¿De dónde sois?
MARCELA
De un lugar
890
donde no nació cristiano.
DON LOPE
Seamos amigos.
MARCELA
Es llano
que os tengo de visitar,
que si con la flamenquilla
os curo la enfermedad895
que hace aquí la soledad,
de las demás de Castilla
ya vuestro medico soy,
y es la visita forzosa13.
 

(ALONSO con algunas ropas viejas.)

 
ALONSO
¡Que no hallase alguna cosa!900
—fol. 60v→
¡La guerra a los diablos doy!
¡Que todos en la riqueza
del castillo hayan metido
las manos, y yo haya sido
la escoba de la pobreza!905
¿Que será aqueste arambel,
o hay aquí un diablo que tope?
Mas ¿qué hace aquí don Lope,
y mi Marcela con él?
DON LOPE
Dadme la mano y los brazos910
y esta cadena tomad.
ALONSO
No va mala la amistad,
si de oro se hacen los lazos.
¡Aynora también aquí!
MARCELA
Oye, Aynora.
AYNORA
¿Qué me quieres?
915
MARCELA
¿Ves14 este?
AYNORA
Vile en Amberes.
MARCELA
Es mi camarada.
AYNORA
¿Ansí?
MARCELA
Sí, Aynora; vete con él;
sabrás el alojamiento.
AYNORA
Voy con notable contento.920
MARCELA
No le espera menos él.
AYNORA
¿Dizque tengo de ir con vós?
DON LOPE
Así queda concertado.
Ven.
AYNORA
Vamos.
DON LOPE
¡Yo he saqueado
la mejor prenda, por Dios!925
 

(Vanse AYNORA y DON LOPE.)

 
ALONSO
¿Qué hacía vuesa merced
aquí con el General?
MARCELA
Trato ya en cierto caudal,
y hame hecho esta merced.
ALONSO
Y ¿qué es la mercadería930
en que vuesa merced trata?
MARCELA
No es paño holanda, ni plata.
ALONSO
¿Pues qué?
MARCELA
Cierta niñería.
ALONSO
Bien dice, que bien podrán
resultar niños del trato.935
MARCELA
Sepa que anda muy novato.
ALONSO
Las novedades lo harán.
MARCELA
Él me da celos a mí;
en lengua flamenca diga:
«Sepa que vendí su amiga940
en español».
ALONSO
¿Cómo así?
MARCELA
Hésela dado a don Lope
por esta joya invencible,
y tengo por imposible
que vuesa merced la tope.945
ALONSO
¿Y la cadena no puedo
topar, si hago y digo?
MARCELA
Sí,
que la tomé para ti,
que eres mi amor, y mi miedo.
Póntela, cesen enojos,950
que, fuera de que te adoro,
es la condición del oro
hacer alegres los ojos.
ALONSO
No era menester, por Dios,
mas siendo de tales manos,955
cesen los enojos vanos,
y hagamos paces los dos.
MARCELA
Hazme tú flamenca a mí,
que yo te responderé;
quizá te despicaré.960
ALONSO
No lo estoy, por Dios, mas di:
¿quiéresme dar un abrazo,
mis ojos?
MARCELA
Tu velfderthine.
ALONSO
Tantos dices que conviene
alargarte luego el brazo.965
¿Quiéresme cuanto te quiere
esta alma?
MARCELA
Dat vuilghiuuil.
ALONSO
Yo lo soy, y te soy fiel,
¿éraslo tú?
MARCELA
Jit minhere.
ALONSO
¿Olvidarás15 mi afición?970
MARCELA
Liuerte steruen, mi bien.
ALONSO
¿Y querrás alguno bien,
Marcela?
MARCELA
Nitifistón.

 
 
FIN DEL PRIMER ACTO
 
 

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