Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.


ArribaAbajoJornada II

 

Córrese una cortina, y véese SERAFINA sentada en una silla y DON JUAN retratándola.

 
DON JUAN
¿Cánsaste de estar así?
SERAFINA
Si es tu gusto el retratarme,
¿cómo puedo yo cansarme
de lo que te agrada a ti?
DON JUAN
Muchas veces te pedí, 5
si bien loco, altivo y vano,
que por mí tu soberano
cielo hiciera esta fineza
de tener de tu belleza
un retrato de mi mano. 10
Y aunque estoy agradecido
al haberlo tú otorgado,
no sé si me hubiera holgado
de no haberlo yo pedido.
SERAFINA
¿Cómo así?
DON JUAN
Como rendido
15
a tanto empeño, no sé
si dél airoso saldré.
SERAFINA
Tú, que a ti solo excedías,
¿tanto de ti desconfías?
  —452→  
DON JUAN
Sí.
SERAFINA
¿Por qué?
DON JUAN
Escucha por qué:
20
de la gran naturaleza
son no más que imitadores
-vuelve un poco- los pintores;
y así, cuando su destreza
forma una rara belleza 25
de perfección singular,
no es fácil de retratar,
porque como su poder
tuvo en ella más que hacer,
da en ella más que imitar. 30
Demás, que en una atención
imprime cualquier objeto
con más señas un defeto,
mi bien, que una perfección.
Y como sus partes son 35
más tratables, se asegura
la fealdad en la pintura;
y así, con facilidad
se retrata una fealdad
primero que una hermosura. 40
SERAFINA
Confieso, esposo, que eso
será en lo perfecto así;
pero no conviene en mí
la razón.
DON JUAN
Yo lo confieso
también; que es tanto el exceso 45
de tu hermosura, que aun esta
disculpa no lo es.
SERAFINA
Dispuesta
a oír la razón estoy, ya
que dicho el desaire está.
DON JUAN
No está, si oyes la respuesta. 50
Deste arte la obligación
-mírame ahora y no te rías-
es sacar las simetrías
que medida, proporción
y correspondencia son 55
de la facción; y aunque ha sido
mi estudio, he reconocido
que no puedo, desvelado,
haberlas yo imaginado
como haberlas tú tenido. 60
Luego si en su perfección
la imaginación exceden,
mal hoy los pinceles pueden
seguir la imaginación.
Y otra razón...
SERAFINA
¿Qué razón?
65
DON JUAN
Fuego, luz, aire y sol niego
que pintarse puedan; luego
retratarse no podrá
beldad que compuesta está
de sol, aire, luz y fuego. 70
 

(Levántase arrojando los pinceles.)

 
Y así, me doy por vencido,
y te pido, si mi amor
volver quisiere a este error,
no lo permitas, corrido
de ver que no he conseguido 75
retratarte parecida.
SERAFINA
Aunque quedo agradecida
a las razones que das,
ofrezco no volver más,
si me costase la vida, 80
a dejarme retratar
de ti, porque disgustado
no he de verte.
DON JUAN
Que me ha dado
disgusto, enfado y pesar,
no te lo puedo negar, 85
al ver que solo a este intento
me falta el conocimiento
que tengo de la pintura;
mas culpa es de tu hermosura.
 

(Sale JUANETE.)

 
JUANETE
Aquí viene.
DON JUAN
¿Quién?
JUANETE
Un cuento.
90
«Sordo un hombre amaneció;
y viendo que nada oía
de cuanto hablaban, decía:
'¿qué diablos os obligó
a hablar hoy de aquesos modos?' 95
Volvían a hablarle bien
—453→
y él decía: '¿hay tal que den
hoy en hablar quedo todos?',
sin persuadirse a que fuese
suyo el defecto». Tú así 100
presumes que no está en ti
la culpa; y aunque te pese
es tuya y no la conoces,
pues das, sordo, en la locura
de no entender la hermosura 105
que el mundo la dice a voces.
DON JUAN
¡Qué locura! Ven conmigo.
SERAFINA
¿Adónde, mi señor, vas?
DON JUAN
Hasta el muelle iré no más,
porque si verdad te digo, 110
divertirme será bien
deste necio sentimiento.
SERAFINA
Pues, ¿es tu divertimiento
el no verme?
DON JUAN
Sí, mi bien;
porque solo de esa suerte 115
que yo me divierta es justo;
pues con no verte, es el gusto
mayor de volver a verte.
SERAFINA
No cortesano, señor,
con esas galanterías, 120
las desconfïanzas mías
quiera divertir tu amor;
ya sé que te llevará
el aplauso que pregona
la fama de Barcelona, 125
viendo publicadas ya
sus carnestolendas, pues
mil disfrazadas bellezas
merecerán tus finezas.
DON JUAN
No desconfïada des 130
agora en pedirme celos,
que a ti en el mundo no hay quien
darlos pueda.
SERAFINA
Yo sé bien,
mejor que tú, tus desvelos.
DON JUAN
¿Mejor que yo?
SERAFINA
¿Qué mujer
135
propria más de su marido
que aun él mismo, no ha sabido?
DON JUAN
¿Eso cómo puede ser?
JUANETE
Cierto cura de un lugar
con un vecino reñía 140
donde su mujer lo oía;
y entre uno y otro pesar,
airado el cura y sañudo,
dijo aquel nombre inhumano
que empezando en 'cor-tesano', 145
viene a acabar en 'des-nudo'.
Su mujer, a esta ocasión,
dijo con desenvoltura:
«Testigos me sean que el cura
revela mi confesión». 150
Mira pues si habrá sabido
la mujer en sus defetos
de su marido secretos,
que no sabe su marido.
DON JUAN
¡Oh, qué tema tan cansado! 155
JUANETE
Aunque te enfades de oíllos:
«A cuatro o cinco chiquillos...»
DON JUAN
Calla.
JUANETE
¡Oh, cuento desdichado!
DON JUAN
Quédate, mi bien, adiós,
que al instante volveré. 160
 

(Vanse.)

 
SERAFINA
Dios te guarde. ¡Oh cuánto fue,
vendado y desnudo Dios,
el imperio tuyo! ¡Oh cuánto
supo rendir y vencer
de tus flechas el poder! 165
Dígalo yo, pues el llanto
que jamás imaginé
que ver enjuto podría,
tanto a un día y a otro día
domesticado se ve 170
que no es posible...
 

 (Sale FLORA alborotada.) 

FLORA
¿Señora?
SERAFINA
¿Qué tienes? ¿Qué ha sucedido?
FLORA
Llamando a la puerta...
SERAFINA
Di.
FLORA
Vi que era un hombre vestido
de marinero.
SERAFINA
Pues bien,
175
—454→
¿qué quiere?
FLORA
Tiemblo el decirlo;
darte...
SERAFINA
¿Qué?
FLORA
Una carta.
SERAFINA
¿Cúya?
FLORA
De Porcia.
SERAFINA
¿Y eso ha podido
turbarte?
FLORA
¿Pues no, si es,
ya que la verdad te digo, 180
don Álvaro el marinero?
SERAFINA
¿Le has visto tú?
FLORA
Yo le he visto.
SERAFINA
¿Dístete por entendida
de que él fuese?
FLORA
Fue preciso.
SERAFINA
¿Y qué te dijo?
FLORA
Que a ti
185
te lo dijese, me dijo.
SERAFINA
Pues di que no te atreviste,
medrosa de mi castigo;
y, como que de ti sale,
añade de cuánto es digno 190
el disfraz, y haz de manera
que sin verme (¡estoy sin juicio!)
ni que sepa que lo sé,
se vuelva al instante mismo.
FLORA
Yo lo haré así.
 

(Sale DON ÁLVARO de marinero.)

 
DON ÁLVARO
¿Para qué?
195
Que habiendo entrado atrevido
yo hasta aquí, porque de casa
salir a don Juan he visto,
ya es excusado que Flora
me diga lo que yo he oído. 200
SERAFINA
Antes parece que no
lo oísteis, pues habiendo sido
lo que os dije, que os volvieseis
sin verme, más es indicio
el atreveros a verme 205
de no oírlo, que de oírlo.
DON ÁLVARO
Es verdad; pero eso fuera,
hermoso imposible mío,
si de un delito no fuese
consecuencia otro delito. 210
Y pues a verte, no más,
en este traje he venido,
atento solo al recato
con que tu belleza estimo,
con que tu respeto adoro 215
y con que tu opinión miro;
no tanto extrañes el verme
que, disgustada conmigo,
sea ofensa la fineza
y desmérito el servicio. 220
SERAFINA
Señor don Álvaro, no
penséis que el pararme a oíros
es consentida licencia
que para hablar os permito;
que no es sino turbación 225
de que, cobrada, os suplico
me hagáis merced de dejar
la plática en los principios.
Y si es verdad que esto puede
ser que sea fineza, os pido 230
la ilustréis con una acción
digna de vós.
DON ÁLVARO
¿Cuál es?
SERAFINA
Iros
tan presto que pueda yo
veros a vós persuadido
a que el amor de mi esposo, 235
la paz del estado mío,
la obligación de mi sangre,
el trato, el gusto, el cariño,
me han trocado de manera
que, robusta encina, fijo 240
escollo, será más fácil
a los embates continuos
del mar, o a los destemplados
soplos del ábrego frío
moverse, que mi fineza, 245
si contrastase mi brío
todo el mar lágrimas hecho,
todo el aire hecho suspiros.
DON ÁLVARO
¿Qué importará que blasonen
tus altiveces conmigo 250
de ser al agua y al viento
dura encina, escollo altivo,
—455→
si antes que rebelde tronco
fuiste girasol que, al vivo
rayo de amor abrasado, 255
enamoraste sus visos,
y edificio antes que escollo,
en cuyo apacible sitio
vive amor idolatrado
deste humano sacrificio? 260
Pues siendo así, ¿cómo puedo
acobardar mis disignios,
si antes de haber sido armada
encina de hojas, yo mismo
reconocí amante flor, 265
y antes también de haber sido
escollo armado de yedra,
yo te conocí edificio?
SERAFINA
No lo niego. Mas también,
si me valgo de ese indigno 270
concepto que contra mí
hallaron tus desvaríos,
de esa humilde fácil flor
hacer el tiempo ha podido,
con las raíces que ha echado 275
dentro de mi pecho invicto,
inmortal tronco; y también,
de ese amoroso edificio,
caduca ruina. De suerte
que, uno atento al precipicio 280
y otro a la raíz atento,
olvidaron sus principios
tanto que, aun no conservando
la memoria del olvido,
han sido, son y han de ser, 285
en6 fuerza y en desperdicios,
ejemplo de lo que acaba
la carrera de los siglos.
DON ÁLVARO
¿Qué siglos? Si aun por instantes
cuentan hoy mis desatinos 290
la recién nacida edad
de tus rigores esquivos.
Ayer fue cuando me amaste:
no, pues, con tirano estilo
te valgas del tiempo ya, 295
que ni es ni ha de ser ni ha sido
posible que de un instante
a otro, de uno a otro improviso,
confesando tú que fuiste
primero flor y edificio, 300
crea yo que tan mudado,
¡oh hermoso, oh bello prodigio,
de lo que fuiste primero
estás tan desconocido.
SERAFINA
No la culpa de ese error 305
quieras partirla conmigo,
don Álvaro, que no es bien
dudar tú lo que yo afirmo.
Demás de que yo, a este efecto,
de ti mismo solicito 310
valerme; tú mismo sabes
mi honor, mi altivez, mi brío.
Y pues nadie como tú
examinó en los principios
lo ilustre de mis respetos, 315
lo honrado de mis desvíos,
lo atento de mis decoros,
lo noble de mis disignios,
a ti mismo te examina
en mi favor por testigo; 320
porque si a ti mismo tú
no te vences, será indicio
que de ti mismo olvidado,
no te acuerdas de ti mismo.
DON ÁLVARO
Sí me acuerdo, sí me acuerdo. 325
DON JUAN

 (Dentro.) 

¿Cómo, habiendo anochecido,
no hay aquí luz?
FLORA
¡Mi señor!
SERAFINA
¡Muerta estoy!
DON ÁLVARO
¡Estoy perdido!
FLORA

 [Aparte.] 

¡Que nunca falte a este paso
galán, hermano o marido! 330
DON ÁLVARO
¿Qué he de hacer?
SERAFINA
No sé.
FLORA
Yo sí.
DON ÁLVARO
¿Qué es?
  —456→  
FLORA
Esperar escondido
en este cancel, que él
entre en su cuarto.
DON ÁLVARO
Eso elijo,
no por mi peligro tanto, 335
como, ¡ay Dios!, por tu peligro.
 

(Escóndese, y sale DON JUAN.)

 
SERAFINA
¡Que esto sin mi culpa pueda
suceder, cielos divinos!
DON JUAN
¿Cómo no hay aquí una luz?
SERAFINA
Descuido, señor, ha sido 340
de las crïadas.
 

(Sale FLORA con luces.)

 
FLORA
Aquí
están ya.
SERAFINA
Mucho te estimo
( [Aparte.]  Esforcemos, corazón,
la pena que no resisto.)
el haber vuelto tan presto. 345
DON JUAN
Unos parientes y amigos
me obligaron a volver
a casa, habiéndome dicho
que importaba que viniese
a ella...
SERAFINA

 [Aparte.] 

¡Ay de mí!
DON JUAN
...a darte aviso
350
de que han trazado una fiesta...
SERAFINA

 [Aparte.] 

¡Vivamos, alma!
DON ÁLVARO
[Aparte.] De un hilo
pendiente estuve.
DON JUAN
...en que salen
mañana a los regocijos
de Barcelona, embozadas 355
sus familias, permitido
uso entre nosotros, pues
lo mejor y más lucido,
con sus mujeres, hermanas
y hijas, tienen por estilo 360
gozar así los disfraces,
juegos y otros artificios.
Y como este es el primero
año que no los has visto,
han querido festejarte; 365
y aun a la vuelta imagino
que en la quinta de don Diego
de Cardona, que es el sitio
más deleitoso porque es
sobre el mar, han prevenido 370
un banquete. De su parte
y de la mía te pido
que te disfraces y salgas
con ellas, que yo el vestido
o traje que tu eligieres, 375
de aquí a mañana me obligo
a traerte: ¿qué respondes?
SERAFINA
¿Tengo yo elección ni arbitrio
más que tu gusto? Él es solo
alma y ley de mi albedrío; 380
y porque veas, señor,
con cuánto gusto te sirvo,
ven a mi cuarto, que quiero,
ya que este favor recibo
de ti, enseñarte unas muestras 385
de tela que había traído
a otro propósito, y quiero
que veas la que yo elijo.
DON JUAN
¡Quién pudiera de diamantes
no solo hacerte el vestido, 390
mas para que le pisaras,
irte empedrando el camino!
SERAFINA
Aunque yo no te merezca
esas finezas, te afirmo
que las merece mi amor: 395
ven, pues.

 (Toma ella la luz.) 

DON JUAN
¿Qué haces?
SERAFINA
¿Qué? Mi oficio,
que es servirte.
DON JUAN
Toma, Flora,
tú esa luz.
SERAFINA
Es desatino,
que Flora no ha de hacer más
de aquello que yo la digo; 400
pues ella me sirve a mí
 

(Hace SERAFINA señas a FLORA.)

 
en ver cómo yo te sirvo.
 

(Vanse los dos.)

 
FLORA
Señor don Álvaro, ya
que está seguro el camino,
seguidme. 7

 (Toma la otra luz.) 

  —457→  
DON ÁLVARO
Sí haré con harto
405
temor.
FLORA
¿De qué?
DON ÁLVARO
De haber visto
la verdad de cuán valiente
es en su casa un marido.
 

(Al ir tras ella, suena ruido.)

 
FLORA
Vamos de aquí. Mas... no salgas,
espera.
DON ÁLVARO
¿Qué ha sucedido?
410
FLORA
Que viene Juanete.
DON ÁLVARO
Mata
la luz haciendo algún ruido,
que yo tomaré la puerta
sin que me vea.
 

(Cae FLORA, mata la luz y sale JUANETE.)

 
FLORA
Hecho y dicho.
¡Jesús mil veces!
JUANETE
¿Qué es esto,
415
Flora?
FLORA
Esto es haber caído,
Juanete.
JUANETE
¿En la tentación
o en qué?
FLORA
Qué sé yo en qué ha sido;
toma esta vela y volando
ve a encenderla.
 

(Al ir a tomar la vela, tropieza con DON ÁLVARO.)

 
JUANETE
¡Jesucristo!
420
FLORA
¿Qué es eso?
JUANETE
Ver, aunque a obscuras,
cuán grande espanto has tenido,
pues has barbado de espanto.
DON ÁLVARO

 [Aparte.] 

¡Que hubiese de dar conmigo!
Pero ya hallé con la puerta. 425

 (Vase.)8 

FLORA
¿Estás loco?
JUANETE
Lo que digo
es cierto, aquí anda más gente.
¿Señor?
 

(Sale DON JUAN con luz.)

 
DON JUAN
¿Qué voces, qué ruido
es este?
FLORA
No es nada.
JUANETE
¿Cómo
que no es nada? Es muchísimo. 430
FLORA
Yendo a cerrar esa puerta
tropecé: esto solo ha sido.
JUANETE
Más ha sido que eso solo,
pues yo también...
DON JUAN
Dilo, dilo.
JUANETE
...tropecé aquí con un hombre 435
que de tu cuarto escondido
salía.
DON JUAN
¡Válgame el cielo!
¿Hombre aquí?
JUANETE
Y nada lampiño.
FLORA
Yo era, señor, con quien él
dio.
JUANETE
No era, ¡vive Cristo!
440
Miente, señor, por la barba.
DON JUAN
¿Estás loco? ¿Estás sin juicio?
( [Aparte.]  Mas, ¡ay cielos!, yo lo estoy
si en un instante colijo
que el llevarme Serafina 445
de aquí, y con traidor aviso
dejar aquí a Flora... Pero,
¿qué es esto? ¡Ay de mí! Yo mismo
miento si lo digo, y miento,
¡ay de mí!, si no lo digo.) 450
Toma, toma aquesta luz,
que quiero, aunque no imagino
que digas verdad, mirar
la casa; entra, pues, conmigo.

 [Aparte.] 

Apuremos, corazón, 455
todo el veneno al peligro.
JUANETE
Eso, bien podrás no hallarlo;
mas, señor, lo dicho, dicho.
 

(Saca la espada, y éntrase DON JUAN y JUANETE con luz, y sale SERAFINA.)

 
SERAFINA
Flora, ¿qué ha sido esto?
FLORA
Apenas
sabré, señora, decirlo. 460
Don Álvaro iba a salir;
Juanete a este tiempo vino;
maté la luz; encontrole;
dio voces; don Juan al ruido
salió, y va mirar la casa. 465
SERAFINA
¿Sabes si él ya9 habrá salido?
 

(Sale DON JUAN.)

 
DON JUAN
La casa miré y no hay nadie.
—458→
Serafina, ven conmigo
a mi cuarto, escogerás
qué joyas y qué vestido 470
has de llevar a la fiesta.
SERAFINA
Tu gusto solo es el mío;

 [Aparte.] 

¡Válgame Dios! ¡Qué de asombros
en solo un instante he visto!
DON JUAN

 [Aparte.] 

¡Válgame Dios! ¡Qué de cosas 475
llevo que pensar conmigo!
FLORA
Tú tienes culpa de todo.
JUANETE
Pícara, lo dicho, dicho.
 

(Vanse todos.)

 
 

(Salen EL PRÍNCIPE y CELIO de noche.)

 
CELIO
¡Notable es tu tristeza!
PRÍNCIPE
¡Ay, Celio! Tan rebelde la extrañeza 480
es de mi pensamiento
que solo siento el bien del mal que siento.
CELIO
Yo juzgaba estos días
pasados que eran tus melancolías
vivir de Porcia ausente; 485
mas después que su padre cuerdamente
dejó el Gobierno y vino
a Nápoles, ni creo ni imagino
qué, pues favorecido de tu estrella,
con la seña que tienes, 490
a aquestas rejas cada noche vienes
y tu mal no mejora;
y mas, señor, ahora
que don Álvaro ausente
aun te ha quitado aquese inconveniente. 495
PRÍNCIPE
¿Qué importa, Celio, ver a Porcia bella,
si de mi pena no es la causa ella?
Este divirtimiento
es no más que engañar el pensamiento.
CELIO
Pues, ¿qué causa has tenido 500
para que no sea amor este, ni olvido?
PRÍNCIPE
Yo la causa dijera
si al hablar no temiera
que ha de calificarse por locura.
CELIO
Ya que eso se asegura 505
de la objeción explica tu tristeza.
PRÍNCIPE
¿Acuérdaste de ver una belleza
que, huéspeda de Porcia el mismo día
que de España venía,
fue a mis ojos, en espacio breve, 510
monstruosa exhalación de fuego y nieve?
  —459→  
CELIO
Bien me acuerdo por señas, que ese día
se fue también; y novedad sería
que en la ausencia empezase tu violencia
cuando se acaban otras en la ausencia. 515
PRÍNCIPE
No porque al primer paso,
antes de ver las sombras del ocaso,
tal vez el sol en nubes se obscurece,
podremos decir dél que no amanece;
no porque al primer susto 520
del relámpago y trueno
tal vez se desvanezca el rayo, es justo
decir que no fue rayo de iras lleno;
no porque de su seno
nazca tal vez, orilla 525
del mar, a breve edad la fuentecilla,
donde su cuna en su sepulcro vea,
dirán que su cristal, cristal no sea;
no porque ardiente llama
al primer resplandor con que se inflama 530
expirase tal vez de un soplo herida,
se dirá que no tuvo ser ni vida;
y no porque, tal vez en el primero
albor, la flor examinase el fiero
yelo que su esplendor adormeciese, 535
se dirá de la flor que flor no fuese.
Luego no porque hallase en un momento
la nube, el mar, el soplo, el yelo, el viento,
mi amor recién nacido,
sol, rayo, fuente, llama y flor no ha sido. 540
CELIO
Bien argüir pudiera
contra aquesa razón, si ya no oyera
en el jardín sonoro el instrumento,
que es la seña de Porcia.
PRÍNCIPE
Escucha atento,
que el tono ha de decirme 545
si llegaré a la reja, o si he de irme;
pues de concierto están nuestros desvelos;
que llegue si es amor, que huya si es celos.
 

(Dentro canta PORCIA.)

 
PORCIA
¿Para qué es, amor tirano,
tanta flecha y tanto sol, 550
tanta munición de rayos
y tanto severo arpón?
 

(Sale PORCIA a la reja cantando.)

 
PRÍNCIPE
Esperando, Porcia bella,
estuve a ver si tu voz
—460→
me despedía con celos 555
o llamaba con amor.
PORCIA
Este es afecto que aunque
no fuera seña en los dos
siempre sucediera; pues
cualquiera dama, señor, 560
con el amor o los celos
despide o llama.
PRÍNCIPE
Es error,
que yo sé alguna que, estando
al revés de esa opinión,
suele llamar con los celos 565
y con los amores no.
PORCIA
Muy necio será el amante
que, viendo agravio y favor,
haga del uno desprecio
y del otro estimación. 570
PRÍNCIPE
No digo yo que será
cuerdo; solo digo yo
que lo rebelde tal vez
hace su efecto mayor.
PORCIA
Bien mi firmeza amparara 575
la opinión de esa opinión
si esta noche, como otras,
tuviésemos ocasión
de hablar despacio.
PRÍNCIPE
Pues, ¿qué
nos lo embaraza?
PORCIA
El temor
580
de no estar ya recogido
mi padre, pues le obligó
el disgusto de la ausencia
de mi hermano a la atención
de unos despachos; y así, 585
lo que haya de hablar con vós
es fuerza que este instrumento
lo acompañe porque no
pregunte por mí escuchando
que aquí divertida estoy, 590
y pueda también, el ruido
de la música, el rumor
desmentir de nuestras voces.
PRÍNCIPE
No será esta la ocasión
primera que hablado haya 595
en cláusulas el amor,
y fantasías; que todas
compuesta música son.
PORCIA
Pues escuchadme, que tengo
mil cosas que hablar con vós; 600
y aunque sea desta suerte
importa decirlas hoy.

 (Toca y representa.) 

Mi padre dejó el gobierno,
ya lo sabéis, por razón
de retirarse a vivir 605
a la aldea de Belflor.
Mi hermano, que embarazaba
aquesta resolución
con haber sin su licencia
ídose sin que él ni yo 610
sepamos dónde, le ha dado
de apresurar la ocasión
de suerte que irse mañana
intenta de aquí. El dolor
me enmudece, porque haya 615
en mí tan nueva pasión
que todos canten tañendo
y llorando sola yo.
PRÍNCIPE
Bien es menester, ¡oh Porcia!,
disfrazar al dulce son 620
de ese instrumento esa nueva,
bien como para el dolor
suele dorarse lo amargo
del remedio; aunque mejor
pudiera decir que es 625
cierta especie de traición
halagar con la dulzura
y matar con el rigor.
PORCIA
¿Quién más que yo deseara...?
 

(Sale JULIA.)

 
JULIA
Que ha bajado mi señor 630
al jardín; sus pasos siento.
PORCIA
Esto es cumplir con los dos.

 (Canta.) 

Si celos han de vencerme,
aunque blasones de Dios,
—461→
¿para qué es, amor tirano, 635
tanta flecha y tanto sol?
PRÍNCIPE
De celos canta, señal
cierta que al jardín entró.
 

(Retírase; y por dentro llega DON LUIS a la reja.)

 
CELIO
¿Quién, sino tú, tuvo puesta
en música su pasión? 640
FLORA
¿Quién va?
PORCIA
¿Quién es?
DON LUIS
Yo soy, Porcia;
que tanto me divirtió
tu voz estando escribiendo,
que su dulce suspensión
me hizo bajar al jardín, 645
bien que a pesar del dolor
de la ausencia de tu hermano.
PORCIA
En estas rejas estoy,
gozando en ellas el blando
viento que corre veloz, 650
con mi voz y este instrumento
divertida.
DON LUIS
¿Qué mejor?
Y mientras yo me paseo
por él, te ruega mi amor
vuelvas a cantar.
PORCIA
Sí haré,
655
si en eso gusto te doy;
y mas si te alejas. Pues
volverá a ser la canción...

 [Canta.] 

Amor, si de tus rigores
te vences, ¿para qué son 660
tanta munición de rayos
y tanto severo arpón?
CELIO
Ya dice que volver puedes,
pues vuelve a cantar de amor.
PRÍNCIPE
¿Puedo llegar, Porcia?
PORCIA
Sí,
665
que aunque mi padre bajó
al jardín, podrás oírme
el aviso que te doy.

 (Tañendo.) 

Mañana se va a su aldea,
en ella tiene, señor, 670
un castillo que del bosque
es rústica población.
Si en achaque de la caza
a él quisieres ir, mejor
en él tendremos mil veces 675
para hablarnos ocasión.
PRÍNCIPE
Digo que iré, Porcia mía,
a verte.
DON LUIS

 [Dentro.] 

¿Porcia?
PORCIA
¿Señor?
DON LUIS

 [Dentro.] 

Ya es hora de recogerte.
PORCIA
Fuerza es irme.
PRÍNCIPE
Adiós.
PORCIA
Adiós,
680
y ya que el tiempo me quita
aun esta breve ocasión,
hablando contigo iré,
si no de celos, de amor,
en otro sentido.
PRÍNCIPE
¿Cuál?
685
PORCIA
Eso lo dirá mi voz.

 [Vase y canta dentro.] 

       ¡Ay mortal ausencia!
       ¡Ay partida unión!
       ¡Ay noche sin día!
       ¡Ay día sin sol! 690
PRÍNCIPE
Ya que de amor y de celos
variar hubo la canción,
fue de ausencia, pues así
también convenga a los dos;
mas con una diferencia: 695
que ella habla conmigo y yo
con aquel bello imposible,
diciendo de ambos la voz.
 

 (Ella, dentro, canta y él representa.) 

LOS DOS
      ¡Ay mortal ausencia!
       ¡Ay partida unión! 700
       ¡Ay noche sin día!
       ¡Ay día sin sol!
 

(Vanse los dos.)

 
 

(Sale DON ÁLVARO y FABIO de gala, con máscaras.)

 
DON ÁLVARO
Aquesta la puerta es
de palacio, a quien la fama
de catalán nombre llama 705
la plaza del Clos; y pues
es aquí donde a parar
todas las máscaras vienen,
donde los músicos tienen
—462→
tablado para danzar, 710
aquí es donde esperaré
ver aquella disfrazada
que, de Flora acompañada,
salió de casa; pues fue
fuerza no haberla seguido 715
hasta que, desta manera,
de máscara me vistiera
para no ser conocido.
FABIO
No dudes que aquí, señor,
ocasión de hablar tendrás, 720
pues al máscara jamás
se le ha negado el favor
de hablar todo el tiempo que
el rostro tenga cubierto,
como no sea descubierto 725
quién sea.
DON ÁLVARO
Notable fue
la introdución destos días,
pues, aunque padre o marido
las acompañen, han sido,
Fabio, las galanterías 730
permitidas.
FABIO
Y es de suerte
que, con ser tan belicosa
nación esta y tan celosa,
no ha sucedido una muerte.
DON ÁLVARO
Ea, ya en la plaza entrando 735
diversos disfraces vi.
FABIO
Verlos podrás desde aquí
pasar tañendo y cantando.
 

(Dentro suena grita, córrese una cortina y están en un tabladillo los músicos, y salen las mujeres que pudieren por una parte bailando con máscaras, y por otra los hombres con trajes diferentes.)

 
MUJER 1.ª
Veniu las miñonas,
a bailar al Clos, 740
tararera,
que en las Carnestoltas
se disfraz Amor,
taratera.
HOMBRE1.º
Veniu los fadrines 745
al Clos a bailar,
tarareta,
que en las Carnestoltas
Amor se disfraz,
tararera. 750
DON JUAN
¿Qué, bien mío, te parece
desta común alegría?
SERAFINA
Que no tuve mejor día
en mi vida, y te agradece
mi amor el haberme hecho 755
tal festejo.
DON JUAN
Para mí
lo fuera también si aquí
la confusión de mi pecho
me le dejara gozar,
aunque en vano me atormento 760
con mi mismo pensamiento.
JUANETE
Volver quieren a bailar.
MUJER 1.ª
Sonau, músicos, sonau.
HOMBRE 1.º
Prevenid las castañetas.
MÚSICOS
Què voleu? 765
TODOS
Las paraletas
digan tots10.
MÚSICOS
Que me pleu.
 

(Bailan todos juntos, los unos quedan a una parte, y DON ÁLVARO y FABIO a otra.)

 
HOMBRE 1.º
Aven per tot el llogar.
MUJER 1.ª
Veniu vosaltres con mí. 770
JUANETE
Aven, fadrines, de axí
a altre carrer a bailar.
FABIO
¿Hasla conocido?
DON ÁLVARO
Sí;
y el alma me lo dijera
aun cuando yo no supiera 775
que era ella.
FABIO
Pues aquí
seguro puedes hablar
mientras embozado estés.
DON ÁLVARO
Gozaré la ocasión, pues.
Máscara, ¿queréis danzar 780
conmigo?
SERAFINA
Vuestra esperanza
tarde pienso que llegó.
DON ÁLVARO
¿Por qué tarde?
SERAFINA
Porque
no estoy para hacer mudanza;
—463→
y es vana la pretensión 785
vuestra.
DON ÁLVARO
Pues yo presumía
que una mudanza podría
por mí hacerse.
SERAFINA
Es ilusión.
DON ÁLVARO
Alguna vez la habréis hecho.
SERAFINA
Quizá que por eso estoy 790
dispuesta a no hacerla hoy
porque la hice ya.
DON ÁLVARO
Mi pecho
no debe desconfïar.
DON JUAN
El máscara te ha pedido
danza; si te ha conocido 795
o no ya es fuerza el danzar:
si te conoce, porque
sería descortesía;
y si no, porque sería
cuidado.
SERAFINA
Yo danzaré
800
si tú licencia me das;
que yo por ti me excusaba.
DON JUAN
¿Por qué por mí?
SERAFINA
Porque estaba
atenta a tu voz no más.
DON JUAN
Esto es permitido aquí. 805

 (Aparte.) 

¿Quién será el que a Serafina
más que a las demás se inclina?
DON ÁLVARO
En fin, ¿no respondéis?
SERAFINA
Sí.
¿Qué es lo que danzar queréis,
máscara? Que ser no quiero 810
grosera...
DON ÁLVARO
Toca el Rugero.
SERAFINA
¿Por qué el Rugero escogéis?
DON ÁLVARO
Porque, a vuestra vista atento,
decir pueda en esta calma...
 

(Tocan, y mientras danzan, representan, y la música responde, todo a compás, sin pararse nunca los instrumentos.)

 
MÚSICA
Reverencia os hace el alma, 815
reina de mi pensamiento.
DON ÁLVARO
Y más cuando en vós contemplo
que Amor os debe adorar...
MÚSICA
...por ídolo de su altar,
por imagen de su templo. 820
SERAFINA
De nada ofenderme quiero,
que quejarse de un rigor...
MÚSICA
...licencia daba el amor
a que pueda un caballero.
SERAFINA
Mas lo que excusar intento 825
es que pueda vuestra llama...
MÚSICA
...en el sarao a su dama
decirla su pensamiento.
SERAFINA
Y así, para cortesía,
esto basta; perdonad. 830
DON ÁLVARO
Bien dice en su brevedad
esa dicha que era mía.
SERAFINA
Mejor lo dirá adelante,
avisándoos ofendida.
DON ÁLVARO
¿Qué?
SERAFINA
Que me importa la vida;
835
que os volváis luego al instante.
Vamos, amigas, de aquí.
 

(Cesan los instrumentos y quedan todos suspensos.)

 
DAMA 1.ª
¿Con tanta priesa? ¿Por qué
irte quieres?
SERAFINA
No lo sé.
FLORA
¿No te agrada el puesto?
SERAFINA
Sí,
840
pero ya parece que es
hora que nos recojamos.
HOMBRE 1.º
Por la Tarazona vamos
a mi quinta.
DON JUAN
Mejor es;
que allá, sin publicidad, 845
nos podremos divertir.
 

(Vanse.)

 
MÚSICO 1.º
Pues deja ya de venir
gente, los puestos dejad.
DON JUAN
Juanete: saber procura,
siguiéndole hasta después, 850
ese máscara quién es.

 (Vase.) 

JUANETE
Mi cuidado te asegura
de vista, aunque al cabo vaya
del mundo.
FABIO
¿De qué has quedado
tan triste?
DON ÁLVARO
De ver cuán vanas
855
para mi imposible amor
son todas mis esperanzas.
—464→
Presumiendo hallar, ¡ay triste!,
algún alivio a mis ansias,
fleté aquese bergantín 860
que surto en el mar me aguarda,
y sin despedirme,¡ay cielos!,
de mi padre y de mi hermana,
vine a ver a Serafina,
mal dije, a esa fiera ingrata, 865
esa esfinge, esa sirena,
ese veneno, esa rabia.
JUANETE

 [Aparte.] 

Sin duda es fraile y está
convidado en otra casa,
pues que va con tanta priesa. 870
DON ÁLVARO
Y pues que finezas tantas
merecerla, al verme Fabio,
no han podido una palabra
de agrado, y la última fue
decirme que el que me vaya 875
su vida importa: ¿qué espero?
Crean mis desconfïanzas
de una vez que ya este bien
se perdió; y pues siempre se halla
el principio del consuelo 880
con el fin de la desgracia,
tratemos de vivir; toma
estos trajes y estas galas.

 (Quítase el capote y la máscara, y queda de marinero.) 

Vuélvelos a quien los dio,
que yo, mientras de aquí faltas, 885
la gente de mar haré
que se junte, porque vayan
por agua y viento mis dichas
a buscar sus esperanzas.
JUANETE

 [Aparte.] 

¡Oigan qué transformación! 890
Aunque no le veo la cara,
que es marinero sé ya,
pues es el traje en que anda.
FABIO
La resolución más cuerda
es esa.
DON ÁLVARO
Porque no haga
895
mi pena, entrando en consejo
conmigo, alguna mudanza,
ya me hallarás embarcado
cuando vuelvas; porque es tanta
la fe con que a Serafina 900
ha querido y quiere el alma,
que si a su vida le importa
mi muerte, es justo buscarla.
JUANETE
Voy tras él porque no puedo
verle, mas seguirle basta. 905
DON ÁLVARO
¡Ha del mar!
 

(Salen algunos marineros.)

 
MARINERO 1.º
¿Señor?
DON ÁLVARO
¿Es tiempo
para partir, camaradas?
MARINERO 2.º
El mejor tiempo es del mundo,
el mar se mira en bonanza.
DON ÁLVARO
Pues, ¡alto! ¡A embarcar, amigos! 910
¡Adiós, adiós esperanzas!
¡Adiós, Serafina!
[GENTE]11

 (Dentro.) 

¡Fuego,
fuego!
DON ÁLVARO
¿Qué voces son varias
las que oigo?
MARINERO [1.º]12
A lo que se ve,
toda la quinta se abrasa 915
de don Diego de Cardona.
DON ÁLVARO
( [Aparte.]  ¡Ay de mí! ¡Que en ella estaba
Serafina.! Sentimientos,
no acudáis a la venganza,
sino al reparo.) Venid 920
conmigo. ( [Aparte.]  Que fuera extraña
fortuna de mis desdichas
si hubiese venido a darla
la vida cuando ella piensa
que la muerte.)
JUANETE
¡Cielos! Tanta
925
la violencia es del incendio,
que en un instante a ser pasa
volcán del mar.
[GENTE]13

 (Dentro.) 

¡Fuego, fuego!
DON ÁLVARO
¡Entre pavesas y llamas,
monstruo de fuego, humo y polvo, 930
un caballero a una dama
saca en los brazos!
 

(Sale DON JUAN con SERAFINA.)

 
DON JUAN
Amigos:
si esta ruina, esta desgracia,
—465→
piadosos os ha traído
para socorrer a tanta 935
gente como aquí perece,
la más noble, la más alta
será que aquesta hermosura
tengáis un instante en guarda,
en tanto que vuelvo yo 940
a costa de vida y alma
a su socorro; que son
los que mi favor aguardan
deudos, parientes y amigos.
DON ÁLVARO
Bien podéis, señor, dejarla. 945
DON JUAN
Y adiós, que el valor me lleva
y obligaciones me llaman
a su empeño.
[GENTE]14

 (Dentro.) 

¡Fuego, fuego!
JUANETE
¡Señor! ¡Oye! ¡Espera! ¡Aguarda!

 [Aparte.] 

Otra vez se arroja allá, 950
el diablo que tras él vaya.
DON ÁLVARO
( [Aparte.]  ¿Quién en el mundo habrá visto
jamás dicha tan extraña?
¿En mis brazos Serafina
no está ya? ¿No está en la playa 955
aguardando un bergantín?
Pues, ¿qué espera? Pues, ¿qué aguarda
mi amor?) ¡Amigos, al mar!
MARINERO 1.º
¿Qué es lo que intentas?
MARINERO 2.º
¿Qué trazas?
FABIO
¿Qué es esto, señor?
DON ÁLVARO
Después
960
lo sabréis. Diga la fama
que siempre la propria dicha
está en la ajena desgracia.
 

(Vanse llevándola.)

 
JUANETE
¿Oyen ustedes? ¿Qué digo?
Miren, que aquesa es mi ama. 965
 

(Dentro uno.)

 
CABALLERO
Como la gente se salve,
la hacienda no importa nada.
[OTRO]15
De todos no ha perecido
sino sola una crïada
de Serafina.
 

(Sale DON JUAN.)

 
DON JUAN
¡Esperad
970
que allá con vosotros vaya!
Amigos, esa hermosura
que os entregué desmayada,
restitüid a mis brazos,
que ya...
JUANETE
Señor, ¿con quién hablas?
975
DON JUAN
Con unos hombres del mar,
a quien dejé vida y alma
en Serafina. ¿Haslos visto?
Que debieron de llevarla,
sin duda, a albergar a alguna 980
de aquesas pobres barracas.
JUANETE
No la llevan sino al mar,
pues aquel bergantín, que alas
le da viento y pies los remos,
lleva a Serafina.
DON JUAN
Calla
985
si no quieres que mi aliento
te abrase.
JUANETE
Gentil venganza;
llévate tu esposa quien
de máscara se disfraza,
siendo un pobre marinero, 990
y ¿he de pagarlo yo?
DON JUAN
Aguarda,
¿el máscara era, ¡ay de mí!,
el marinero que estaba
ahora aquí?
JUANETE
Sí, señor.
DON JUAN
Matome mi confïanza. 995
Pero, ¿qué aguardo que no
me arrojo al mar en venganza
de mi honor?
 

(Salen todos los de la máscara.)

 
TODOS
¿Qué es esto?
DON JUAN
Es
una desdicha, una rabia,
una afrenta, una deshonra, 1000
tan grande, ¡ay de mí!, tan rara,
que no me atrevo a decirla
hasta después de vengarla;
y ha de ser desta manera.
¡Espera, ladrón, pirata 1005
destos piélagos! Que yo,
—466→
contra el fuego y contra el agua,
lidiaré igualmente. Dadme,
¡cielos!, o muerte o venganza.

 (Éntrase, arrojándose al mar.) 

JUANETE
Por aqueste «¡hombre a la mar!» 1010
se dijo ya.
TODOS

 (Dentro.) 

¡Al agua, al agua!
JUANETE
A remo y vela el bajel
huye; y él, racional barca,
en vano seguirle intenta.
DON JUAN

 (Dentro.) 

¡Amparo, cielo!
TODOS
Él te valga.
1015