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  —226→  
VI

Yo he visto este libro con lo nuevamente añadido, y digo, que quitado lo que va testado de mi mano á folio 102 y 103, no tiene cosa por la cual no se pueda imprimir.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Selva de aventuras, compvesta por el Capitan Hieronymo de Contreras. ¶ Va repartida en nueue libros, los quales tratan de vnos estremados amores, que vn Cauallero de Seuilla llamado Luzman, tuuo con vna hermosa donzella llamada Arbolea: y las grandes cosas que le succedieron en diez años; que anduuo perlegrinando por el mũdo; y el fin que tuuieron sus amores, agora nueuamente corregida por el autor. (Adornito). Con licencia Impressa en Alcala de Henares, por Sebastiã Martinez. Año de 1582. Esta tassado a cinco blancas el pliego.

8.º- 160 hojas numeradas, con letras capitales grabadas.

Tasa.- Censura de don Alonso de Ercilla (ambas a la vuelta de la portada).- Licencia, a 23 de Junio de 1578.- Texto.- Soneto final.

La licencia se concedió a Luis Velázquez Garzón, y en ella se dice que la nueva edición fue corregida y enmendada por don Alonso de Ercilla.

Consta de nueve libros, y aunque es obra en prosa, lleva intercaladas muchas poesías de diferentes metros y de no aquilatado mérito en general.

Antes del soneto puesto al fin, lleva la fecha de 1583.

CATALINA GARCÍA, Tipografía Complutense, n. 574, de donde copiamos la descripción.

Hemos visto las ediciones de este libro hechas en Cuenca, Salvador Viader, 1615; Sevilla, Viuda de Alonso Escribano, 1578, 8.º; Sevilla, Alonso de la Barrera, 1579, 8.º; Bruxellas, Juan Mommarté, 1592, 8.º, y la traducción francesa de Gabriel Chappuys, Lyon, 1580, y París, 1587, 16.º, en ninguna de las cuales se halla la aprobación de Ercilla, como seguramente no se hallará tampoco en una de Barcelona, en 8.º, 1565, ni en otra de Zaragoza, 1615, 8.º, que cita Nicolás Antonio.

No sabríamos afirmar si las testaduras que dice Ercilla haber hecho en las hojas 102 y 103; sin duda en algún ejemplar de edición anterior, se mantuvieron en las posteriores. Habría sido interesante conocer cuales fueron los pasajes que tachó el poeta. La aprobada por él, nos dice Menéndez y Pelayo (Orígenes de la novela, t. I, p. CCCXLIX) que salió «con notables adiciones y cambiando el desenlace. Contiene nueve libros».

Vimos ya el juicio que a Pérez Pastor merecieron las poesías que se hallan en la obra; el argumento de ella lo ha dado Ticknor (III, 314) y respecto a su mérito; dice: «Toda la novela, dividida muy formalmente en ocho libros, es pesada por falta de amenidad en los pormenores y de viveza y gracia en el estilo; pero tiene algún mérito, por haber sido la primera de aquella serie de ficciones, después tan multiplicadas, que fundándose en la natural curiosidad acerca de un país como Italia, lleno de españoles y donde éstos vivían con una comodidad y regalo desconocidos en su patria; y de Argel, donde millares de sus compatriotas gemían en el más espantoso cautiverio, tuvieron siempre por base principal de su argumento é interés la relación de sus aventuras, ya militando en Italia, ya esclavos en Berbería. Lope de Vega, Cervantes y otros muchos escritores populares del siglo XVI trabajaron en este género».

No opinaba lo mismo el insigne Menéndez y Pelayo. «Más independiente de los modelos bizantinos, y más enlazada con la vida actual, se presenta la Selva de Aventuras...». El haber sido reimpresa varias veces, prueba que «se leyó bastante, y hoy mismo es de fácil y no desapacible lectura. El argumento es sencillo y bien combinado, en medio de la extremada pero no confusa variedad de episodios». Y después de transcribir algunos de los pasajes del libro, por cierto interesantísimos, continúa así:

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«La originalidad de la Selva de aventuras parece incontestable. De las novelas anteriores, sólo la de Peregrino y Ginebra, tiene alguna remota analogía de plan, pero hay mucha distancia del espíritu liviano de aquella narración á la intachable pureza moral de ésta. Todo en ella respira gravedad, y á la verdad, no se explica que el Santo Oficio, tan indulgente é indiferente con este género de literatura, hiciese la rara excepción de llevar Luzmán y Arbolea al Índice expurgatorio».





VII

Este libro que los señores del Consejo me mandaron que viese, y diese mi parecer, es el Furioso traducido en prosa castellana, tan aprobado y recebido en todo lenguaje y género de gente. En esta tradución van quitadas las cosas licenciosas, y las impertinentes para nuestra nación. Y en todo lo demás va fiel y de buen romance. Por lo cual, y porque en prosa será para muchos más gustoso, y será á entender mejor que en ninguna otra tradución de las que hasta hoy andan impresas, me parece que se puede bien imprimir, que no hallo cosa que lo impida.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Orlando / fvrioso de / Lodovico Ariosto / nvevamente tradvzido en prosa / Castellana, por Diego Vazquez de Contreras. / Dirigido a la mvy Illvstre Se- / ñora doña Iuana de Mendoça, y de la Cerda su señora. / (Viñeta de un caballero montado). / Con privilegio real. / En Madrid, en casa de Francisco Sanchez, impresor de libros. / Año. M. D. LXXXV. / A costa de Iuan de Montoya mercader de libros. / (Colofón:) Impreƒƒo en la muy noble villa de Madrid, en caƒa / de Franciƒbo Sanchez. Año de / M. D. LXXXV.

Folio, de 140 por 240 milms.- Port.- v. en bl.- 5 hojs. prels. s. f.- 236 hojs. de texto, á dos cols., que comprenden 46 cantos.- Prels.:- Aprobación de Ercilla: sin fecha.- A don Alonso de Erzilla. Soneto.- Real cédula de licencia y privilegio al autor por seis años: El Pardo, 15 de Noviembre de 1583.- Al discreto lector.- Dedicatoria.- Prólogo desta obra.- Tabla de las personas y hechos principales deste libro.

Advertiremos respecto á los preliminares, que en el ejemplar descrito por Pérez Pastor (Bibliografía madrileña, n. 217) están colocados en orden distinto los que siguen al privilegio real. El que hemos tenido a la vista es de la Biblioteca Nacional de Santiago de Chile.

He aquí el soneto dedicado a Ercilla:


   Entre Parnaso y Pindo y Elicona
La torre levantada está de Ercilla.
Adonde laureada veo la silla
De aquél que la araucana guerra entona;
   Al cual pone de un lado su corona
Apolo, y reverencia y se le humilla;
Y como en guerra el mundo maravilla,
La palma, de otra parte, de Belona;
   Pues, vos, oh! claro Sol de la Poesía,
Del coro de las Musas nuevo Apolo,
A vuestro Orlando habéis reconocido;
   Seguro podrá entrar por cualquier vía
Cualquier lector, acompañado ó solo,
A ver la historia y el moral sentido.


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La alusión de Ercilla a las traducciones en verso de la obra del Ariosto toca especialmente a la de Jerónimo de Urrea, que por esos años llevaba ya no menos de cuatro ediciones hechas en España, la última de las cuales había salido a luz en Bilbao; Matías Mares, 1583, 4.º

Respecto a los pasajes licenciosos del original de que hablaba Ercilla, ya el traductor Vázquez de Contreras había advertido al discreto lector que tuvo que cercenar parte de algunos cantos, «porque la licencia italiana en muchas cosas desconforma con la libertad española», en lo que se conocería «haber guardado el decoro y gravedad» debido a tan heroico poema.

Cotejando el original italiano con la versión española, resulta que los pasajes licenciosos suprimidos (por lo menos algunos de ellos) son el del canto IV, que comienza:


S' un medesimo ardor, s'un disir pare,


y en el VIII:


Egli l' abbracia e a piacer la tocca.


Y en cuanto a las cosas impertinentes, también Urrea «innovó», como dice, dos o tres estancias «porque aunque son ingeniosas, no esperé que en España serían tan aceptadas», cuales eran, las que se referían a las guerras de Francia e Italia. Es sabido, por lo demás, que en la pintura de hechos y personajes españoles, inclusos algunos escritores, el traductor lo puso todo de su cosecha. En cuanto a Vázquez de Contreras, siguiendo un camino análogo, cuando llega al canto XXXV en que se celebran el Po y las hazañas del Duque de Este, puso en su lugar a Madrid y a Felipe II.




VIII

Yo he visto este libro que López Maldonado compuso, que por los señores del Consejo me fué remitido, el cual es de canciones amorosas, llenas de muchos y muy buenos conceptos, declarados por gentil estilo y lenguaje, en todo género de verso, sin haber en él cosa lasciva ni mal sonante, y sí muchas que á los buenos ingenios les darán gusto y recreación; por lo cual me paresce que se puede muy bien imprimir y que merece el autor por su trabajo la merced que pide.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Cancionero / de Lopez Maldo / nado. / Dirigido a la Illvstrissima / Señora, Doña Thomasa de Borja y / Enriquez mi Se / ñora, y de las villas de Grajar y Valuerde y / su tierra. / (Escudo del impresor). ¡Con privilegio. / Impresso en Madrid, en casa de Guillermo Droy, Impressor / de Libros. Acabose a cinco de Febrero. / Año de 1586.

4.º- 179 hojas foliadas (la última dice 189; hay algunas equivocaciones en la foliación).- 12 de prels., sin foliar, y una al fin en blanco.

Port.- v. en bl.- Aprobación de D. Alonso de Ercilla.- Tasa: Madrid, 5 Febrero 1586.- Licencia del autor por una vez: Madrid, 19 Abril, 1584.- Erratas (Juan Vázquez del Mármol): Madrid, 29 Enero 1586.- Prólogo.- Dedicatoria: Madrid, 28 Noviembre 1585.

PÉREZ PASTOR, Bibliografía Madrileña, n. 241.

Véase en la página 418 del tomo III de la Bibliografía Madrileña de Pérez Pastor el contrato celebrado por López Maldonado con Guillermo Drouy para la impresión de su Cancionero.

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Entre los versos laudatorios que este libro lleva en sus preliminares se hallan un soneto de Cervantes y cuatro coplas reales, en las que, jugando del apellido del autor, decía:


   Bien donado sale al mundo
este libro do se encierra
la paz de Amor y la guerra
y aquel fruto sin segundo
de la Castellana tierra:


con lo cual aquel gran ingenio pagaba, aunque sólo en parte por el momento, el elogio que López Maldonado había hecho dos años antes de la Galatea, para repetir en el Canto de Calíope en ella inserto:


   ¿Quién pensáis que es aquel, que en voz sonora
Sus ansias canta regaladamente,
Aquel, en cuyo pecho Febo mora,
El docto Orfeo, y Arión prudente:
Aquel que de los reinos del aurora
Hasta los apartados de ocidente
Es conocido, amado y estimado
Por famoso?: ¡López Maldonado!


Aplausos que había después de perpetuar para siempre, cuando en el escrutinio de la librería de Don Quijote, al llegar a la obra aprobada por Ercilla:

«Este es -siguió el Barbero- el Cancionero de López Maldonado.

»-También el autor de ese libro -replicó el Cura, es grande amigo mío, sus versos en su boca admiran á quien los oye y tal es la suavidad de la voz con que los canta, que encanta. Algo largo es en las églogas; pero nunca lo bueno fué mucho: guárdese con los escogidos».


A las poesías en elogio del libro y de su autor, que se hallan entre los preliminares, deben añadirse los versos que Lope de Vega les consagra en el Laurel de Apolo, de todos conocidos, y los de la Casa de la Memoria de Vicente Espinel, que concluyen así:


Que López Maldonado en dulce quexa
Suspenderá del propio infierno el llanto
Con alto verso y soberano canto.





IX

Yo he visto este libro llamado El Caballero Asisio, que los señores del Consejo mandaron que viese, y en él no hallo cosa mal sonante, ni contra buenas costumbres, antes es obra buena y provechosa, y, demás de ir muy arrimada á la historia y el celo devoto que el autor muestra en ella, el verso es justo y limado y contiene muchas sentencias y pasos de buen ingenio; por lo cual me parece que se puede bien imprimir. Fecha á trece de julio de 1586.


DON ALONSO DE ERZILLA Y ZÚÑIGA                


-Primera, segunda y tercera parte del Caballero Asisio, en el nacimiento, vida y muerte del Seraphico padre Sant Francisco. En octava Rima Compuesto por Fray Gabriel de Mata. Bilbao, Mathias Mares, 1587:

-4.º.- 13 hojs. + 109 fol. + 1 hoja + 78 fol. + 1 hoja. En el ejemplar visto falta la portada principal, que   —230→   está suplida en manuscrito, pero se conservan las de la Segunda y Tercera Partes. Las encabeza un grabado de madera que representa a un ginete armado de todas armas, con una cruz que sale del crestón del casco, y un pendón con la divisa: EN ÉSTA NO FALTARÉ, y la imagen de la Fe.- En la hoja primera, la tasa, firmada por Gonzalo de la Vega, secretario del Rey.- Segunda, vlta., erratas.- En la hoja tercera, la licencia del Provincial de la provincia de Cantabria, fray Tomás de Itumendia.- A la vuelta, la aprobación de fray Cristóbal de Fonseca, prior del monasterio de San Agustín de Pamplona, y confirmación de esta aprobación por Pedro de Cunzarren, secretario del Consejo Real del Reino de Navarra.- Hoja cuarta: Aprobación de Ercilla.- En las hojas restantes hasta que empieza la foliación está el privilegio real por seis años y los sonetos en loor del autor, del P. Salinas, el P. Padilla, el P. Torrejón, don Alonso de Bracamonte, que son dos; don Miguel Osorio, el licenciado Liñán de Vera y una octava del P. Salinas.- Al final falta alguna hoja de la tabla.

Parece, pues, en vista de esto, que el aserto de los anotadores de Ticknor de que no se hubiera publicado un «tomo tercero», está equivocado (III, p. 150).

Califica el autor norteamericano tales obras de Mata, como «colección de leyendas sin orden, interés, ni color» y que, en realidad, valen poco.

Más benévolo es el juicio de Ferrer del Río: «Bajo la influencia del tiempo le ocurrió dar a San Francisco de Asís el extraño corte de caballero andante... Para captarse la voluntad de los lectores, les pide que tengan en cuenta


    La mucha ocupación, edad temprana,
Pues es cuasi en el año de novicio,
Do falta tiempo y nunca el ejercicio».


»A tan juveniles años y en tales días, bien se puede excusar el sesgo dado a la relación de la vida del glorioso fundador de la orden franciscana; y después de su lectura, se halla racional que la recomendara Ercilla por la veracidad y el celo devoto, por el verso limado y justo y por sentencias y pasos de buen ingenio».

Fray Gabriel de Mata había publicado, también en Bilbao en 1589, en otro volumen, asimismo en 4.º, la Vida de San Francisco y otros cinco Santos; la Vida de San Diego de Alcalá; en dicho año, (de que hay edición madrileña de 1598) y los Cantos morales, en 1594; todo según Nicolás Antonio. El último de esos libros se imprimió en Valladolid y se halla descrito en el Ensayo de Gallardo, n. 2964.




X

-Philosophia cortesana moralizada. Por Alonso de Barros. Madrid, por Alonso Gómez, 1587, 8.º

Muy enredado anda hasta ahora lo relativo a esta obra. Resume ese hecho así Fitzmaurice-Kelly, n. 210: «Se dice comunmente que la Philosophia cortesana moralizada fué publicada por primera vez en 1487 (sic) por 1587?); pero el año 1567 es la fecha que da Pascual de Gayangos y Enrique de Vedia en la traducción que hicieron de Ticknor, vol. III, p. 556. Es dudoso que esta Philosophia cortesana moralizada sea idéntica con los Proverbios morales de Barros (Pérez Pastor, pp. 131-132); el balance de las probabilidades está en contra de la teoría; pero como las copias (sic) de la Philosophia son desconocidas; es imposible hablar del hecho con alguna certeza».

A pesar de tal conclusión, las pruebas que Pérez Pastor, (quien tampoco logró ver ejemplar alguno de Philosophia cortesana), da acerca de la diversidad de ambas obras nos parecen concluyentes; pero, saliendo ya del campo de las hipótesis, ¿cómo puede dudarse ni por un momento que así sea, cuando poseemos el testimonio expreso de Fernández de Navarrete que en su Vida de Cervantes (p. 69) nos da sin duda alguna como de visu la fecha de la impresión de la Philosophia cortesana y hasta añade   —231→   que hay en ella un soneto de Cervantes y una aprobación de don Alonso de Ercilla. ¿De dónde, a no haber visto el libro, pudo sacar semejantes asertos?

Y si todo esto no parece aun bastante para probar la existencia de la obra, léase el siguiente párrafo de una real cédula, fecha en el Pardo, a 17 de noviembre de 1587, que encontramos en el archivo de Indias y que íntegra dimos a luz en las páginas XX-XXI del tomo I de nuestra Biblioteca Hispano-americana: «El Rey.- Por cuanto vos, Alonso de Barros, mi criado, me habéis hecho relación que habéis compuesto una pintura intitulada Philosophia cortesana, con ciertas diferencias de figuras y letras, que se contienen en un pliego grande; y la habéis moralizado en una relación aparte, y me habéis suplicado que teniendo consideración á lo que en ello habéis trabajado os diese licencia y mandase que por algún tiempo, vos ó la persona ó personas que vuestro poder hobieren, lo podáis imprimir y vender en las Indias y no otras algunas; y habiéndose visto por los de mi Consejo dellas y la dicha obra de que suso se hace minción, y el previlegio que por el mi Consejo de Castilla se os dió para imprimirla...». Y si tal medió, claro es que precedió aprobación, y, que ésta fuera la de Ercilla ya nos lo dijo Navarrete. El haberse despachado, según es de creer, la casi totalidad de la edición para las Indias vendría a explicar también el que no parezca ahora ejemplar en Europa. ¿Llegará al fin a descubrirse el paradero del que tuvo en su mano aquel biógrafo de Cervantes?




XI

En este libro no hallo cosa por donde no se pueda imprimir, antes hay muchas agudas sentencias y de buen gusto; y en nuestra lengua hasta agora no ha habido quien con tanto cuidado y curiosidad haya tratado della; por el cual trabajo el autor merece se le haga la merced que pide.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Floresta / Española, de / apothegmas, o sentencias, / sabia y graciosamente / dichas de algunos / Españoles. / Colegidas por Melchior de / sancta Cruz de Due- / ñas, vezino de la / ciudad de To- / ledo. / Dirigido al Excelentis- / mo (sic) señor don Juan / de Austria. / Con Licencia. / En Cvenca. / Por Juan Alonso de Tapia. / 1588. / (Al fin:) En Cvenca. / Símbolo Por Juan Alonso de / Tapia, Impressor, / año de 1588.

12.º -318 hojas: 317 foliadas, inclusas ocho de principios, y una en blanco al fin.- Signs.: A-Z, Aa-Dd de doce hojas, menos Dd, que es de seis.

Port.- v. en bl.- Aprobación de don Alonso de Ercilla: sin fecha.- Licencia por una vez al librero Hernán Ramírez: Madrid, 10 de Oct. de 1576.- Epístola dedicatoria suscrita por el autor.- Al lector (octava:) «De aquesta Floresta, discreto lector».- Texto.- Nota final.- Hoja en bl.

Fueron muchas las ediciones que alcanzó esta obra, á contar desde la primera, que es de Toledo, 1574, 8.º, tantas, que sólo en la biblioteca de la Hispanic Society of America hay 16. Adam Schneider, que ha dado una lista de ellas, (Spaniens Anteil an der deutschen Literatur, 1898, pp. 133-139, citado por Menéndez y Pelayo, Orígenes de la novela, t. II; LXV) no conoció esta de Cuenca que describimos. De las que salieron a luz después de la que lleva la aprobación de Ercilla en la única que la encuentro reproducida es en la de Medina del Campo, viuda de Francisco del Canto, 1598, en 12.º, edición que se escapó a la diligencia del historiador de la Imprenta en esa ciudad.

La noticia y juicio crítico que de esta obra aprobada por nuestro poeta ha dado Menéndez y Pelayo (obra y lugar citados) nos excusa de toda apreciación sobre ella.



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XII

Yo he visto este libro, del cual es el verso muy bueno; tiene cosas de ingenio, puestas por buen estilo, sin haber alguna mal sonante, y muchos gustarán de leerle; por lo cual me parece que se puede bien imprimir. Fecha en Madrid, 27 de julio de 1587.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Florando de Castilla Lavro de Cavalleros, compuesto en octaua rima, por el Licenciado Hieronymo de Guerta natural de Escalona. Dirigido a Doña Maria de Porres y Zuñiga, muger de don Iuan Hurtado de Mendoza, Señor de Fresno. (Escudo). Con Privilegio. Impresso en Alcala de Henares, en casa de Iuan Gracian que sea en gloria. Año de M. D. LXXX VIII. A costa de Iuan Garcia Callejas mercader de libros. Esta tassado en tres reales y ocho marauedis en papel.

4.º-8 hojas de principios y 168 foliadas de texto.- Colofón.- Página blanca.

Tasa (a la vuelta de la portada).- Soneto de Bartolomé López de Enciso y el licenciado Remor y Araque.- Privilegio del Rey al autor: San Lorenzo, 19 de Septiembre de 1587.- Erratas.- Soneto de doña Ana de Valdés.- Estancias de doña Clariana de Ayala.- Soneto de Diego de Aguiar.- Dedicatoria. -Prólogo al lector.- Aprobación de don Alonso de Ercilla: Madrid, 27 de Julio de 1587.- Sonetos de don Luis de Vargas Manrique y Luis Barahona de Soto.

CATALINA GARCÍA, Tipografía Complutense, n. 633, que ha reproducido la aprobación de Ercilla, y que no se halla en la edición de la Colección de Autores Españoles de Rivadeneyra (t. XXXV, pp. 225-277.)

Dice Ferrer del Río: «De la andantesca familia del héroe de Ariosto es el Florando de Castilla del licenciado Jerónimo de Huerta. Lástima da que al desenvolvimiento de una insípida fábula dedicara su númen fecundo en versificación fluida y galana; con fundamento encomióla Ercilla, y dijo que gustarían de leerla muchos, dando así á entender que no participaba de la afición de sus contemporáneos á los libros de caballería andante; mas no sin añadir que el Florando "tenía cosas de ingenio puestas por buen estilo"»: observaciones atinadísimas, diremos a nuestra vez. Ercilla aplaudía el verso, algo de la invención, pero en manera alguna el fondo de la obra; ni ¿cómo podía hacerlo él, historiador escrupulosísimo, si los hubo, con un argumento descabellado, aun en medio de su ficción?




XIII

En este libro no hallo cosa mal sonante ni contra buenas costumbres; va todo él muy arrimado á la historia, según la escribió Antonio de Nebrija; el verso es bueno y contiene muchos conceptos y cosas agudas y de ingenio grande; y, así, me parece que se puede imprimir, y que Duarte Díaz, autor, merece bien la merced que pide, pues, siendo portugués, se ha podido vencer á sí mismo, poniendo su cuidado y trabajo en alabanza de los castellanos. A 17 de Noviembre de 1589.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-La / Conquista / que / hicieron / los poderosos y Catholicos Reyes / Don Fernando, y Doña Ysabel, en / el Reyno de Granada. Cõpuesta / en Octaua Rima, por Duar- / te   —233→   Dias, Lusitano. / Dirigida a Don Christoual de Mou- / ra, Comendador mayor de Alcan / tara y de la Camara de su Mage- /stad, y de su Consejo de estado, y Se / miller de Cors del Príncipe / Don Felipe, nuestro / Señor. / Con Licencia y privilegio. / En Madrid. / Por la viuda de Alonso Gomez, Impressor / del Rey nuestro Señor. /Año de. 1590.

8.º.- 286 hojas fols., más 8 de prels. y 2 al fin sin numerar.- sign. A-Z, Aa-Nn.- todas de 8 hs. -los prels. sin signatura.

Port.- Erratas al verso.- Tasa: Madrid, 22 Enero 1590.- Aprob. de don Alonso de Ercilla y Zúñiga: 17 Nov. 1589.- Priv. al autor por diez años: Aranjuez, 25 Noviembre 1589.- Texto, 21 cantos en octavas.- ¿2 hojas en bl.?

PÉREZ PASTOR, Bibliografía Madrileña, n. 327, que ha copiado gran parte de la aprobación de Ercilla.

Entre los ocho sonetos que se registran en los preliminares, el primero es de fray Pedro de Padilla.

Estiman los anotadores de Ticknor (III, p. 499) que este libro de Díaz es «una producción de escaso mérito, que, más que poema, es una crónica rimada, pues como el mismo Ercilla dice en la aprobación, firmada por él y por Lucas Camargo, «va muy arrimado á la historia, según la escribió Antonio de Nebrixa». «También Ercilla estuvo atinado, añade Ferrer del Río, en decir que el verso de este libro es bueno y contiene buenos conceptos y cosas agudas y de ingenio grande».




XIV

En este libro, que los señores del Consejo me mandaron que viese, no hallo cosa mal sonante; tiene buenos y agudos conceptos, declarados por gentil término y lenguaje, y los versos líricos son los mejores que yo he visto; por lo cual y por el trabajo é ingenio del autor merece que se le haga la merced que pide. Fecha á 7 de Enero de 1587.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Diversas / Rimas de Vi- / cente Espinel / Beneficiado de las Igle- / sias de Ronda, con el Arte Poética, y / algunas Odas de Oracio, traduzidas / en verso Castellano. / Dirigidas a Don / Antonio Alvarez de Veamonte, y / Toledo; Duque de Alua, y Huesca / Condestable de Nauarra, Marques / de Coria, Conde de Saluatierra, y / de Lerin, Señor del Valle de / Corneja, &c. / Con privilegio. / En Madrid, por Luis Sanchez. / Año M. D. XCI. / Vendese en casa de Iuan de Montoya, mercader / de libros en Corte. / (Al fin.) En Madrid / Por Luis Sanchez. Añ. 1591.

8.º.- 166 hojas foliadas, más 16 de preliminares y dos al fin sin numerar.- sign. A-Y.- todas de 8 hojas.- La traducción del Arte Poética está impresa en letra cursiva.

Port.- v. en bl.- Tasa: Madrid, 9 Junio 1591.- Erratas.- Priv. al 1591.- Erratas.- Priv. al autor por diez años: Madrid, 7 Marzo 1591.- Ded. (en tercetos).- Aprob. de D. Alonso de Ercilla: 7 Enero 1587.- «Prólogo en alabança de la poesía por Alonso de Valdes, Secretario de Dõ Rodrigo de Mendoça, gentil hombre de la Cámara de su Magestad».

PÉREZ PASTOR, Bibliografía Madrileña, n. 353, que describe también a continuación de la presente, otra del mismo año, y en la cual la aprobación de Ercilla va inmediatamente después de la portada.

Entre las piezas laudatorias, figuran un soneto de Lupercio Leonardo de Argensola, uno de Lope de Vega y otro de Pedro Montes de Oca, «el Indiano», aquel amigo de Cervantes celebrado por él en el Canto de Calíope y en el Viaje al Parnaso, de quien hemos contado en alguna parte que dejó alguna de su familia en Chile.

Bien conocida es la crítica que del carácter de Espinel y de sus méritos literarios hizo Cervantes en el capítulo II de su Viaje al Parnaso:

  —234→  

    Este, aunque tiene parte de Zoilo,
Es el grande Espinel, que en la guitarra
Tiene la prima y en el raro estilo.


Sabido es también de todos que Espinel fue autor de la estrofa que lleva su nombre, más conocida con el título de décima, o por lo menos, el que restableció su uso ya olvidado en su tiempo.

En sus Rimas, observa Ticknor (III, p. 188) «distingue las formas italianas, prefiriéndolas á las españolas, á pesar de que en el escaso uso que de éstas hace se luce más que en aquéllas».

Debe justificarse el elogio de Ercilla, no tanto por la amistad que con Espinel le ligara, como cree Ferrer del Río, cuanto porque algunas de sus composiciones, v. g., la que intituló «Buscar ocasión de celos», es felicísima, y sus «Quejas de la dicha pasada» muy superior a la que sobre esta materia hizo Silvestre: opinión de los anotadores de Ticknor que no podemos menos de acatar.




XV

Yo he visto este libro de Duarte Díaz de Sonetos y Canciones y otras cosas de pasatiempo en lengua portuguesa y castellana, y diferente género de versos: habrá muchos que gusten de leerlas; no tienen cosa deshonesta ni mal sonante por lo cual se pueda dexar de imprimir.


DON ALONSO DE ERZILLA                


-Varias obras / De Dvarte Diaz, em lingoa Portuguesa, é Castellana. / Dirigidas a Dona / Margarita Corte Real. / (Escudo del impresor). / Con privilegio. / En Madrid, por Luis Sanchez. /Año M. DXCII. / (Al fin:) En Madrid. / En casa de Luis Sanchez. / Año M. DXCII.

4.º.- 4 hojas de prels. s. f. ni prels. ni sign., más 75 fols., y una en bl.- Sign. A-K, todas de 8 hojas, menos la última que tiene cuatro.

Port.- v. en bl.- Tasa: Madrid, 11 Abril 1592.- Erratas.- Suma del priv. al autor por diez años: Madrid, 20 Febrero 1592.- Aprob. de don Alonso de Ercilla.- Soneto al rey don Felipe.- Otro al príncipe don Felipe.- Otros dos a don Cristóbal de Mora (el primero en tres lenguas, española, portuguesa e italiana).- Texto.- Colofón.- H. en bl.

El texto contiene sonetos, canciones, liras, estancias, etc., la mayor parte en portugués y algunos; en castellano; entre otros, un soneto a don Alonso de Ercilla, «pidiéndole despacho» de la censura de esta obra, y otro a doña María de Bazán para que haga el mismo ruego al célebre poeta, su esposo.

PÉREZ PASTOR, Bibliografía madrileña, n. 384.

El primero de esos sonetos lo habían reproducido ya los anotadores a Ticknor. (III, p. 499), y el segundo Ferrer del Río (p. 449). He aquí ambos, advirtiendo que este último se halla en la hoja 8 vuelta y el primero en el folio 37:




A don Alonso de Ercilla, suplicándole despacho


    Si en el gallardo pecho castellano
Tanto puede el amor, como se muestra
En blanda, dulce y regalada muestra,
Por mil escritos descubierto y llano;
   Y si la dura y tenebrosa mano
De la ausencia cruel, siempre siniestra,
Tocó, señor, jamás el alma vuestra,
Derramando mil lágrimas en vano;
—235→
   O si acaso la quexa que despide
Una alma portuguesa puede tanto,
Que castellanas almas enternezca:
   Presteza el corazón os ruega y pide,
Porque saliendo, el esperado canto
A la presencia de mi Sol ofrezca.

   Valerosa señora, á quien se debe
En parte agradecer el precio y gloria
De La Araucana, celebrada historia
Que a la inmortalidad por vos se mueve:
   Así de las hermanas todas nueve
Alcance vuestro nombre tal memoria,
Que recoja del tiempo alta vitoria,
Puesto que todo lo consuma y lleve:
   Que supliquéis con tierno y dulce ruego
Al que nunca se cansa, ó se despide
Del gusto de agradaros noche y día,
   Que decrete mis versos luego luego
Cierto lo debe hacer, pues se lo pide
Del tronco de Bazán doña María.


García Peres en su Catálogo razonado biográfico y bibliográfico de los autores portugueses que escribieron en castellano (Madrid, 1890, p. 152) dio la especie de que Ercilla había sido amigo de Díaz «y quizá su compañero de armas»: es posible esto último, y de lo primero no puede caber duda cuando vemos que se dirige a la esposa del poeta en los términos en que lo hace, que, a la par de una súplica envolvían la delicadísima atención de recordarle, trasladándolo íntegro, aquel verso de La Araucana en que Ercilla había puesto en el poema, dándole parte de gloria, el nombre de su esposa. No creemos, por esto, que con ninguno de esos sonetos Díaz se hubiese anticipado a solicitar del poeta el pronto despacho de la censura en el temor de que pudiera o acostumbrara demorarlas.




XVI

Yo he visto este libro de Arte Poética española, cuyo autor muestra haberle costado mucho estudio y trabajo llevar al cabo esta materia, por ser dificultosa y no bien entendida de muchos; va en buen estilo y lenguaje, y será muy provechosa para los inclinados al ejercicio de la poesía; y, así, será razón que ande impreso.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Arte / poetica / española / con vna fertilissima sy / lua de Consonantes Comunes, Proprios, Esdruxulos, / y Reflexos, y vn diuino Estimulo del / Amor de Dios. / Por Iuan Diaz Rengifo, natvral / de Auila. / Dedicada a D. Gaspar de Zv / ñiga, y Azeuedo Conde de Monterey, y señor de / la casa de Viezma y Vlloa &c. / (Escudo de la Compañía de Jesús). / Con privilegio. En Salamanca, en casa de / Miguel Serrano de Vargas, Año: 1592. / (Al fin:) En Salamanca, / En casa de Miguel Serrano de Vargas, Año, 1592.

4.º.- 188 h.- sig., desde la quinta, *-A-Ss, a-e.- Port.- Suma del priv. al autor por diez años: Madrid, 20 Febrero 1592.- Aprobación de don Alonso de Ercilla, sin fecha.- Al Conde de Monterey: Salamanca, 26 Julio 1592.- Canción fúnebre á la muerte de doña Inés de Velasco y Aragón, condesa de   —236→   Monterey.- Tasa: Madrid, 13 Julio 1592.- Al... lector.- Dos sonetos de don Pedro de Guzmán al lector.- Erratas: Salamanca, 19 Junio 1592.- Texto.- Nota final.

Las últimas 20 hojas, sign. a-e y con foliación aparte (1 á 40) contienen: «Explicación de los consonantes proprios que van en la Silva».

GALLARDO, Ensayo, t. II n. 2026.

De las varias ediciones que alcanzó la obra, la única en que se reprodujo la aprobación de Ercilla es la de Madrid, 1606, que ha sido descrita por Pérez Pastor (II, n. 933), quien se olvidó de advertir que la primera había salido en Salamanca, y, por consiguiente, diremos, en vida del poeta. De las que nosotros hemos tenido a la vista, no está en las de Madrid, 1628 y 1644, ni en las de Barcelona, 1703 y 1759. No estará de más tampoco prevenir que Nicolás Antonio (I, p. 285) y otros bibliógrafos cuya nómina trae Uriarte (Catálogo, III, p. 37) afirman que el autor de la obra fue el jesuita Diego García de Rengifo, mistificación de la que parece haberse percatado Ercilla, pues en su aprobación no nombró al autor, como solía. Sin embargo, más acertado respecto a la paternidad del Arte poética sería decir que aquel religioso auxilió con sus conocimientos a Juan Díaz Rengifo, su sobrino, según éste confiesa en la advertencia al cristiano y prudente lector, cuando advierte que se valió para su trabajo de «los apuntamientos de hombres doctos, á quien he comunicado, y en especial los que hubo de un padre de la Compañía de Jesús, maestro y deudo mío, que profesó veinte años letras humanas, siendo prefecto y lector de mayores en uno de los más principales y numerosos estudios que tiene su orden».

Por más imperfecta que se suponga a la obra de Díaz Rengifo, nadie podrá dejar de reconocer que la vulgarización que alcanzó es prueba manifiesta de haber sido, como lo notaba Ercilla, «muy provechosa para los inclinados al ejercicio de la poesía».




XVII

Yo he visto este libro que los señores del Consejo me remitieron, intitulado Diálogo de las guerras de Orán, compuesto por el capitán Baltasar de Morales: es historia verdadera, y por la noticia que tengo de muchas cosas que en él se contienen, puedo juzgar que va fielmente escripto y que gustarán muchos de leerle; y así, me parece que se puede muy bien dar licencia para que se imprima.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Dialogo / de las gver / ras de Oran, compvuesto / por el capitan Baltazar de Morales, natural / de la Rambla, que se hallo en todas las / que aqui se tratan del tiempo de / los Condes de Alcaudete / tuvieron aquella / tenencia. / Dirigido a Martin Alon / so de Montemayor. / Símbolo(?) / Símbolo / (Adorno tipográfico). Símbolo Con Previlegio Real / Símbolo / Impresso en Cordoua en casa de Francisco / de Cea, Impressor de libros. Año de / 1593. / (Al fin:) Con Privilegio / Impresso en Cordova por Francisco de Cea / Impresor de libros al Alamillo / Año de 1593.

8.º.- Port.- A la vuelta, aprob. de D. Alonso de Ercilla, s. l. n. a.- Priv. por diez años: Burgos, 14 de Septiembre de 1592.- Texto.- Nota final.

Dice Valdenebro y Cisneros, de quien tomamos la precedente nota bibliográfica: «No he visto la edición príncipe de este rarísimo libro, que fué reimpreso en las pp. 239 á 279 del t. XV de la Colección de libros raros ó curiosos, titulado Guerras de los españoles en África, Madrid, Miguel Ginesta, 1881, (8.º). De esta reimpresión, encabezada con un facsímil de la primera hoja de la edición de 1593, he sacado la papeleta anterior». La Imprenta en Córdoba, n. 36.

  —237→  

Añadiremos nosotros que la obra de Morales fue conocida de Nicolás Antonio (Bib. Hisp. Nova, t. I, p. 183) y que la aprobación de Ercilla que en ella se encuentra no llegó a noticia de Ferrer del Río. Notemos que Ercilla dice haber prestado su aprobación al libro «por la noticia que tengo de muchas de las cosas que en él se contienen». ¿A qué aludía con eso?




XVIII

Yo he visto este libro, intitulado Mexicana de Gabriel Lasso de la Vega, que se le ha dado otra vez licencia para imprimir, y, asimismo, lo añadido, y digo que se le puede dar mejor agora, por haberle, mejorado con más cuidado y curiosidad.


D. ALONSO DE ERCILLA                


-Mexicana / de Gabriel / Laƒƒo de la Vega, emendada / y añadida por ƒu miƒ- / mo Autor. / Dirigida a don Fer- / nando Cortes, tercero Marques / del Valle. / Lleva esta segvnda impres- / ƒion treze cantos mas que la primera. / (E. de a. del Mecenas.) / Con privilegio. / En Madrid, por Luis Sanchez. / (Filete.) / Año. 1594. / A coƒta / de Miguel Martinez.

8.º.- Port.- v. en bl.- 7 hojs. prels. s. f.- 304 hojs. con el v. de la última en bl.- Desde la hoja 295 al fin se encuentra la «Apología en defensa del ingenio y fortaleza de los indios de la Nueva España por el Licenciado Gerónimo Ramírez».

Prels.:- Erratas.- Tasa: Madrid, 29 de Abril de 1594.- Aprob. de 1594.- Aprob. de D. Alonso de Ercilla.- Real cédula de licencia y privilegio: 6 de Dic. de 1591.- Soneto de D. Luis de Vargas Manrique al retrato de Cortés.- Retrato, en madera, de Cortés a la edad de sesenta y tres años.- Prólogo del Licenciado Gerónimo Ramírez al discreto lector.- Ded. del autor al Marqués del Valle: Madrid, 7 de Marzo de 1594.- Soneto del capitán Gerónimo Cortés; hermano del Marqués del Valle.- Id. del capitán Francisco de Aldana al retrato del autor.- Retrato, en madera, de Gabriel Laso de la Vega a la edad de 29 años.

¿Necesitamos decir que la primera edición de la obra de Laso de la Vega lleva por título Primera parte de Cortes valeroso, y Mexicana, y que salió a luz en Madrid, en 1588? La aprobación de Ercilla, que Pérez Pastor copió en su Bibliografía Madrileña (p. 179) y que reprodujimos también nosotros en la Biblioteca Hispano-Americana (t. I, p. 523) es tan ajustada a la verdad, que para apreciarla, véase lo que decía respecto del mérito de esa segunda edición aquel sabio bibliógrafo: «Las adiciones son muy importantes y en lo que se conserva de la primera hay muchas y muy notables variantes, con las que el autor procuró mejorar su obra».




XIX

Yo he visto este libro que por los señores del Consejo me ha sido cometido; y demás de ser historia española y que contiene una de las más insignes victorias que los cristianos contra infieles han tenido, toca el autor con gentil espíritu historias y poesías que gustarán muchos de leerlas, que le habrá costado estudio y largo trabajo; por lo cual merece se le dé la licencia que pide.


DON ALONSO DE ERZILLA Y ZÚÑIGA                


-Las Navas de / Tolosa. / Poema heroico / De Cristoval de Mesa. / Al Príncipe   —238→   don Felipe N. S. / (Escudo de armas reales). / Con privilegio. / En Madrid por la biuda de P. Madrigal. / Año M. D. XCIIII. / A costa de Esteban Bogia, librero. / (Al fin:) En Madrid / Por la biuda de Pedro Madrigal. / M. D. XCIIII.

8.º.- 324 hojas foliadas, más de 8 de preliminares y 4 al fin sin numerar.- Sign. ¶, A-Z, Aa-Ss.- todas de 8 hs.

Port.- v. en bl.- Tasa: Madrid, 28 Junio de 1594.- Erratas (Juan Vázquez del Mármol): Madrid, 14 Junio 1594.- Priv. al 1594.- Priv. al autor por diez años: San Lorenzo, 28 Agosto 1593.- Aprobación de don Alonso de Ercilla y Zúñiga.- Dedic.- Cristóbal de Mesa a Torcuato Taso á Mantua donde fué desde Roma (soneto).- Torcuato Taso á Cristóbal de Mesa á Roma (soneto).- Otro de Jerónimo Gagliardi. (Estos tres sonetos están en italiano).- A los lectores.- Texto (1883 octavas repartidas en 20 cantos).- Sonetos de don Pedro Ramírez de Guzmán, Baltasar de Escobar, Miguel López de Aguirre, Francisco Cascales y Licenciado Diego Vélez de Dueñas.- Colofón.- p. y h. en bl.

Al frente de cada canto se pone el argumento en una octava.

PÉREZ PASTOR, Bibliografía madrileña, n. 443.

«A todas luces se debe calificar de legítimo y merecido el elogio de Ercilla, nota Ferrer del Río, pues hay verdadero estro en el poema, que llama heróico su autor estimable, y fue el primero que salió de su pluma».

¿Ni qué mucho que así se expresara nuestro académico, cuando sabemos que Mesa había tenido por maestro en Italia durante cinco años al Taso y que en España, como observa Navarrete (p. 30) había estudiado con Pacheco, Medina y el Brocense; y, por fin, que el insigne Lope de Vega le había dedicado en la silva VII de su Laurel de Apolo el siguiente elogio?


   Y á Cristóbal de Mesa,
Trípoda de las Musas y de las Gracias,
¡Oh letras, pocas veces sin desgracias!
Llama para ganar tan alta empresa:
Que cuando mires tanta copia impresa,
Y tan alta virtud sin premio mires;
Imposible será que no suspires;
Que sigue pocas veces, ó ninguna,
A la virtud la próspera fortuna.





XX

Yo he visto este libro del Cerco de Diu, traducido de lengua portuguesa en castellana por fray Pedro de Padilla; la cual tradución está bien y fielmente hecha, con mucha propiedad y buen lenguaje. Es libro que ha muchos días que anda impreso en lengua portuguesa (desde el año de 1574), bien recibido de todos, y así me parece que lo será en la nuestra. Fecho á 17 de Hebrero de 1594 años.


D. ALONSO DE ERCILLA Y ZÚÑIGA                


-La verdade / ra historia, y / admirable svcceso del / segundo cerco de Diu, estando don Iuã Maz / carenhas por Capitan, y Gouerna / dor de la fortaleza. / Compuesto por Ge / ronimo Corta real, y dirigido al Rey / don Sebastian, primero de / este nombre. Traducido en len / gua Castellana por fray Pedro de / Padilla Carmelita. Dirigido á Don Carlos de Alaua. / Con privilegio. / Impresso en Alcala de Henares en casa de Iuan Gracian. / Año. M. DXCVII.

8.º- 360 pp. dobles (y 12 más de principios).

Prels.:- Fe de erratas: Alcalá, 22 Marzo 1597 (Lic. Cristóbal de Orduña).- Tasa, á cinco blancas   —239→   pliego: Madrid, 5 Mayo 1597 (Gonzalo de la Vega).- Prólogo de fray Pedro de Padilla.- Ded. a don Carlos de Alava: Convento de Nuestra Señora del Carmen de Madrid, a 16 de Febrero de 1595.- Aprobación de don Alonso de Ercilla y Zúñiga: 17 de Febrero de 1594.- Priv. por ocho años a favor de fray Pedro de Padilla: Madrid, 17 de Marzo, 1594.- Ded. de Cortereal al rey don Sebastián.- Carta del mismo al lector.- Censura de fray Bartolomé Ferreira: 21 de Febrero 1574.

El poema está en verso suelto, en 21 cantos.

GALLARDO, Ensayo, t. III, n. 3328, donde se ha reproducido la aprobación de Ercilla.

Volvía el poeta a dar su aprobación a otro trabajo de Padilla, ya fraile entonces, sin alcanzar a verla en letras de molde, pues el libro sólo vino a salir a luz tres años después de muerto Ercilla.

Esa aprobación viene a instruirnos de que el poeta conocía perfectamente el portugués, puesto que si ya no se pudiera así afirmar por su larga estancia en Portugal, en esta pieza asegura que la traducción «está bien y fielmente hecha».




XXI

En este libro hallo muchas cosas buenas, que son la gravedad de la historia, la grandeza y valor de nuestro Príncipe y nación, el buen estilo, verso y lenguaje con que se escribe; por lo cual me parece que es bien que se imprima.


DON ALONSO DE ERCILLA Y ÇUÑIGA                


-El vitorioso Carlos Quinto, compuesto por don Gerónimo de Urrea. Dirigido a la S. C. R. M. del Rey Don Felipe.

Manuscrito existente en la Biblioteca Nacional de Madrid, que consta de 3 hojas en blanco; el título al verso del folio 4; al folio 5 vuelto, la aprobación de Ercilla; foliado en seguida desde 1 al 171.- Con nueva foliación: al verso del folio I, Arcadia de Sanazaro (sic) traducida por don Hieronymo de Urrea en lengua castellana.- A la vuelta del folio segundo, sin que preceda prólogo ni aprobación: «Suelen las más de las veces, etc.»- Consta de 80 hojas, las dos últimas muy maltratadas.

Según lo que se ve, la aprobación de Ercilla se refiere al Vitorioso Carlos, y no a La Arcadia, como lo había aseverado Latassa en su Biblioteca Aragonesa, t. I, p. 267.

Trata la obra de la guerra de Carlos V contra los protestantes alemanes. Respecto a su mérito, diremos que Menéndez y Pelayo (Orígenes de la novela, I, p. CCLXXVII, nota 2) disiente de la opinión de Ercilla, pues no le juzga digna de ver la luz pública.

Hacía ya mención de aquel poema, Andrés en su Discurso, en los siguientes términos, que completan lo que Ercilla expresaba en su aprobación:


    Este que en nuestro idioma numeroso
el Orlando tradujo Furïoso,
y el Carlos victorioso
escribió del heróico Carlos Quinto,
aunque en mapa sucinto,
las victorias y hazañas
que consiguió en provincias tan estrañas.


Acerca de la persona y producciones de Urrea, véase a Hazañas y la Rúa, Obras de Gutierre de Cetina, t. I, p. 128; y con especialidad respecto de uno de ellas, el estudio de Jerónimo Borao, Noticia de don Jerónimo Jiménez de Urrea y de su novela caballeresca inédita D. Clarisel de las Flores, Zaragoza, 1866.



  —240→  
XXII

Yo he visto este libro, y en él no hallo cosa mal sonante ni contra buenas costumbres; y en lo que tocan la historia, la tengo por verdadera; por ver fielmente escritas muchas cosas y particularidades que yo vi y entendí en aquella tierra, al tiempo que pasé y estuve en ella; por donde infiero que va el autor muy arrimado á la verdad, y son guerras y acaecimientos que hasta ahora no las he visto escritas por otro autor, y que algunos holgarán de saberlas.


DON ALONSO DE ERCILLA                


-Elegías / de / Varones ilustres de Indias, / compuestas / por Juan de Castellanos. Segunda Parte.

Hállanse en las pp. 179-36r. Desde la 326 empieza la Tercera Parte, que termina en la 565, con la cual se da remate al texto del tomo IV de la Colección de Autores Españoles de Rivadeneyra, Madrid, 1847, que comienza por la Primera Parte de la obra de Castellanos, impresa primeramente en Madrid, en 1589, 4.º.

Los preliminares de esa Segunda Parte, que es que la que interesa en este caso, son los siguientes: -Dedicatoria del autor a Felipe II (soneto).- Censura de don Alonso de Ercilla, sin fecha.- Elogios de la obra por varios ingenios: versos latinos de Miguel de Espejo; y sonetos de Jerónimo Gálvez, Juan Ciberio de Vera, don Bernardo de Vargas Machuca, Lázaro Luis Irango y uno del autor.

«Hasta aquí don Alonso, dice Vergara y Vergara, que no encontró en su fecunda y hábil pluma ni una palabra de elogio ó siquiera de crítica sobre el mérito literario de las Elegías. Ni agradeció la lisonja de la evidente imitación de su Araucana; pues es indudable que Castellanos la había leído y más indudable que su lectura fué la que despertó la idea de contar en verso las historias de estas tierras».

Al paso que acusa a Ercilla de embustero al afirmar en su aprobación que había estado en Venezuela, incurre en el error de aseverar que su obra se había publicado en 1553, y para que no quede duda de que no se trata de un yerro de imprenta, repítelo en nota, señalando el hecho como ocurrido treinta años antes de la publicación de las Elegías.

Un mal entendido amor patrio hizo caer a tan apreciable autor en extravíos como ése, y en el otro más grave aún, si cabe, de anteponer la obra del beneficiado de Tunja a la del cantor de Arauco. Razón sobrada asistía al doctísimo Menéndez y Pelayo para manifestarse indignado de que tal cosa pudiera sostenerse.

Ercilla no puso fecha alguna a su censura, como de ordinario lo acostumbraba, ninguna de las otras piezas preliminares está datada tampoco, ni aun la misma dedicatoria de Castellanos a Felipe II; pero sí puede asegurarse que ha debido de ser escrita después de 1589, puesto que en ese año salió a luz la Primera Parte de las Elegías, y la aprobación de Ercilla se refiere a la Segunda Parte de las mismas, y casi seguramente antes de 1592, en la que el autor concluía de escribir la Cuarta Parte.

Es digna de estudiarse la aprobación de nuestro poeta a la obra del antiguo soldado, por cuanto dice que hallaba en ella fielmente escritas «muchas cosas que yo vi y entendí en aquella tierra, al tiempo que pasé y estuve en ella».

¿Cuáles fueron las «cosas y particularidades» que Ercilla «vio y entendió en aquella tierra al tiempo que pasó y estuvo en ella?». Para tratar de resolver este punto es   —241→   de suponer, desde luego, que la aprobación comprendiese también la Parte Tercera de las Elegías, pues aunque lleva elogios por separado, no aparece con aquel requisito indispensable para su publicación. Ercilla se limita a decir «yo he visto este libro» sin aludir a parte determinada, y es de importancia sentar este hecho, porque ciertamente nada de lo que Castellanos trata en la Segunda puede convenir con la afirmación del poeta; no así de la Tercera, donde a la larga se cuentan los hechos de Benalcázar y de otros capitanes en el Perú, hasta las últimas incidencias a que dio lugar el alzamiento de Francisco Hernández Girón, de quien hace expresa mención en La Araucana. De todos modos, harto más debió de ser lo que entendió de aquella tierra que lo que vio, pues los hechos de que se trata no se verificaron en su tiempo. Bástenos con decir en confirmación de esto, que las batallas de Chuquinga y Pucará, últimas de las revueltas del Perú, se libraron en 1554, cuando aun Ercilla no había llegado a aquel país.




XXIII

Dice Quevedo en su dedicatoria del libro que vamos a citar a don Ramiro Felipe de Guzmán, duque de Medina de las Torres: «Hallé estos poemas por buena dicha mía y para grande gloria de España en poder de un librero, que me las vendió con desprecio. Estaban aprobadas por don Alonso de Ercilla y rubricadas del Consejo para la imprenta...».

-Obras / del bachiller; Francisco de / la Torre. / Dalas a la impreƒion D. Franciƒco de / Queuedo Villegas Cauallero de la / Orden de Santiago. / Ilvstradas con el / nõbre, y la protecciõ del / Excelentissimo Señor / Ramiro Felipe de Guzmán, Duque de / Medina de las Torres, Marques / de Toral &c. / Símbolo Símbolo / Con privilegio. / En Madrid en la Imprenta del Reyno, / (Filete). Año de M. DC. XXXI. / A coƒta de Domingo Gonçalez mercader de libros.

16.º.- Port.- v. en bl.- 15 hojas prels. s. f.- 126 hojas, con el v. de la última en bl.- Hojas 131-144: Sigvense tradv- / ciones, de Horacio, y del Petrarca, del Maeƒtro Sanchez / Brocenƒe. / Van precedidas de una advertencia de don Juan de Almeida a quien leyere.

Prels.:- Suma del privilegio: Madrid, 14 de Marzo de 1630.- Fe de erratas, suscrita en Madrid por el Licenciado Murcia de la Llana.- Suma de la tasa: 7 de Octubre de 1631.- Aprob. de don Lorenzo Vander Hammen y León: Madrid, 17 de Septiembre de 1629.- Id. del maestro Joseph de Valdivieso: Madrid, 2 de Octubre de 1630.- Dedicatoria.- D. Francisco de Quevedo á los que leyeren.- Pág. bl.

Hay edición facsimilar hecha por Mr. Archer M. Huntington, en 1903.

No nos incumbe entrar en detalles de la curiosa controversia a que dio lugar la averiguación de quién era el verdadero autor de este libro. Quevedo lo estampó en la portada, si bien lo confundió con el bachiller Alonso de la Torre, el que compuso la Visión deleitable; creyeron otros más tarde que la obra era en realidad de Quevedo, que había querido ocultarse bajo aquel nombre, -cosa de que no protestó-, hasta que, por último, la crítica ha puesto en claro que en efecto había existido y era el verdadero autor del libro un Francisco de la Torre, bachiller también como el otro así llamado, pero que había existido y escrito el libro hacia los últimos años del siglo XVI. Bastaba para llegar a esa conclusión considerar que la obra llevaba la aprobación de Ercilla, que por lo que sabemos, tuvo a su cargo las funciones de aprobante por el Consejo, por lo menos desde 1580 en adelante, hasta el de 1594, en que murió. En el caso presente no es posible conocerla, pero cuando Quevedo, que, sin duda, la tuvo a la vista, se limitó a decir que esa aprobación se hallaba en el manuscrito,   —242→   aunque sin señalar su fecha, -si es que la llevaba-, y al hablar de aprobación, claro está que asentía a la publicación de la obra, como no pudo menos de ser, cuando el propio Quevedo, buen juez en tales materias, decía que «era grande gloria de España».

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