Escena I
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MACÍAS,
FORTÚN.
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MACÍAS | ¿Eso propone el marqués? | | ¿Para eso sólo te envía? | | Fortún, al lucir del día | | ten prevenido mi arnés. | |
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FORTÚN | ¿Direle que del combate | 5 | no desistes? |
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MACÍAS | ¿Desistir? | | ¿Y él lo pudo presumir? | | ¿Y sangre en sus venas late? | | Si olvida, mal caballero, | | el campo que concedió, | 10 | no me le ha de negar, no, | | el rey Enrique Tercero. | | Di más: que aunque el mismo rey | | el campo franco rehúse, | | y de su alto poder use | 15 | para hollar su propia ley, | | aún no está salvo el cobarde; | | pues que juro por mi espada, | | no quitarme la celada | | hasta que, temprano o tarde, | 20 | le encuentre por fin, doquiera, | | y en su pecho fementido | | deje mi acero escondido, | | vengando mi afrenta fiera. | | ¿Piensa el marqués por ventura | 25 | que soy yo la de Albornoz, | | que oigo temblando su voz | | y obedezco? ¡Qué locura! | |
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MACÍAS | Sí; di a Villena, | | de mi parte, que no olvide | 30 | lo que su clase le pide, | | lo que debe a la honra ajena: | | que es excusado su empeño; | | que si aún vivo, ha de saber | | que es porque anhelo beber | 35 | la sangre al traidor; que es sueño | | pensar que me vuelva atrás; | | y al hidalgo, que ya anhelo | | ver si es tan fuerte en el duelo | | como en la corte, dirás; | 40 | y tú al despuntar la aurora, | | provén, Fortún, cuidadoso, | | un alazán poderoso, | | y mi espada cortadora. | | Mis armas negras bruñidas | 45 | registra bien, y dos lanzas | | prevenme. Mis esperanzas | | mira no salgan fallidas. | | Mas si muero... |
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FORTÚN | Tiende un velo | | sobre agüero tan fatal. | 50 |
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MACÍAS | No sabe ningún mortal | | el fin que le guarda el cielo. | | A Rodríguez del Padrón, | | mi amigo, mi espada lleva, | | y déme la última prueba | 55 | de su afecto; mi pasión | | le cuenta, y mi fin cruel: | | di que la venganza mía, | | mi honor a su brazo fía. | | Tal confianza tengo en él. | 60 |
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FORTÚN | Adiós, señor, y descuida | | cuanto encargas a mi fe: | | yo te juro que lo haré | | por tu nombre y por mi vida. | | (Vase
FORTÚN.) |
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MACÍAS | Ve, y pide a Dios que me valga. | 65 | Pues no puedo ser amado | | de Elvira bella, ¡vengado | | del reto, a lo menos, salga! | |
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Escena III
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MACÍAS,
ELVIRA.
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Se siente abrir una puerta secreta a la
derecha, y aparece
ELVIRA cubierta con un manto negro, y debajo de
blanco, sencillamente de una cinta negra trae colgada una cruz de oro al
cuello.
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MACÍAS | ¿Mas qué rumor?... ¿Una
llave?... | | ¿Una puerta?... ¡Vive Dios! | | ¿Quién? |
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ELVIRA | (Al paño.) | Corre, Beatriz. Adiós. | 95 | Nada el de Villena sabe. | | Antes que el crimen se acabe | | que venga, por si no puedo | | salvarle sola. Aquí quedo.- | | ¡Él es! ¿Macías?... | (Llega descubriéndose.) |
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MACÍAS | ¿Qué miro? | 100 | (Conociéndola arrebatado.) | ¿Es ella? ¿Sueño? ¿Deliro? | | ¡Elvira! |
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MACÍAS | ¡Necio de mí! ¡Qué
injusta y locamente | | mi fortuna acusé! Cuando alevosa | | te llamo y te maldigo, ¿tú a mis brazos | 105 | secretamente entre peligros tornas? | | ¡Perdón, ídolo mío! Mis ofensas, | | ofensas son de amor; a la ardorosa | | pasión que me consume acusa sólo: | | suyo es mi yerro, y mis ofensas todas. | 110 | ¿Yo soy tan venturoso todavía? | |
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ELVIRA | ¡Imprudente! Silencio, no esa loca | | alegría te ciegue, que aun la suerte | | aciaga se nos muestra. |
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MACÍAS | ¡Más dichosa | | nunca fue para mí! |
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ELVIRA | Tiembla, insensato. | 115 | Las horas, infeliz, nos son preciosas. | | Oye mi voz... |
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MACÍAS | Sí, Elvira, llega y habla. | | Habla, y que oiga tu voz. ¡Cuán deliciosa | | suena en mi oído! ¡Un bálsamo divino | | es para el corazón! ¡Ah! De tus ropas | 120 | al roce sólo, al ruido de tus pasos, | | estremecido tiemblo, cual la hoja | | en el árbol, del viento sacudida. | | La esperanza de verte, tu memoria, | | todo el encanto son de mi existencia. | 125 | Mas si te llego a ver, mi alma se arroba, | | y me siento morir, cuando en tus ojos | | clavo los míos; si por suerte toca | | a la tuya mi mano, por mis venas | | siento un fuego correr que me devora, | 130 | vivo, voraz, inmenso, inextinguible, | | y abrasado y pendiente de tu boca, | | anhelo oírte hablar; habla, bien mío; | | dime que te conduce aquí a deshora | | un amor semejante; y di que me amas, | 135 | ¡Y esto hará mi desdicha venturosa! | |
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ELVIRA | De ese fatal delirio que te ofusca | | la terrible verdad el velo rompa. | | La muerte está a tu lado, y el momento | | propicio acecha ya. |
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MACÍAS | ¡Venga en buen hora! | 140 | Y hálleme junto a ti. |
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ELVIRA | ¿Qué escucho? Atiende, | | ¿entrambos nos perdemos, y aún tú
nombras | | el riesgo sin temblar? Los asesinos, | | acaso aquí la planta sigilosa | | encaminando ya, su hierro aguzan, | 145 | y bien pronto en tu sangre generosa | | apagar se prometen el incendio | | de ese funesto amor. ¿Y tú lo ignoras? | |
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MACÍAS | ¿Qué profieres de amor y de
asesinos | | juntamente? |
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ELVIRA | Con mi oro, con mis joyas | 150 | esa puerta me abrí. Fernán la infame | | conjuración dispuso. |
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MACÍAS | ¡Oh, más hermosa | | te hace tanto valor! |
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ELVIRA | Dudo cuál puerta | | elegirá el cobarde. Sin demora | | sálvate, que a esto vengo. ¿Presumiste | 155 | que corriese en tu busca presurosa | | sin tan terrible causa? |
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MACÍAS | (Desesperado.) | ¡Santo cielo! | | No la trajo el amor, la trajo sola | | la compasión. |
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ELVIRA | Tú, ingrato, ¿mis tormentos | | con esa injusta desconfianza doblas? | 160 | ¿Vida y honor por compasión tan sólo | | arriesga una mujer? Deja, abandona | | tan injuriosas dudas. Urge el tiempo. | | Parte de aquí. |
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ELVIRA | No es afrentosa | | la fuga ante el puñal del asesino. | 165 | No mancharás huyendo tantas glorias | | que tienes adquiridas. Obedece: | | parte. |
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ELVIRA | ¿Qué te importa? | | Nadie soy para ti: ni ya uno de otro | | podemos ser jamás. |
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MACÍAS | ¡Jamás! ¿Y lloras? | 170 | ¿Cubres el rostro en las dolientes palmas? | | ¿Y quieres separarnos? ¡Ay! ¿No notas | | que ese llanto, en que gozo tantas dichas, | | es para el corazón letal ponzoña? | |
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ELVIRA | Sí, lloro, y por ti lloro; y si es
preciso | 175 | para que huyas decirte que te adora | | esta infeliz mujer; que no hay reposo | | para ella, si su intento se malogra; | | que morirá, si mueres, ya mi labio | | se atreve a confesión tan vergonzosa. | 180 | Sí; yo te amo; te adoro, ni me empacha | | el rubor de decirlo. ¿A cuánta costa | | del bárbaro imploré que me dejase | | un consuelo siquiera en ser virtuosa? | | Y él lo negó, y él mismo al
precipicio, | 185 | donde contigo acabaré, me arroja. | | Sí; yo también sé amar. Mujer ninguna | | amó cual te amo yo. Vuelve, recobra | | un corazón que es tuyo, y que más tiempo | | el secreto no guarda que le agobia. | 190 |
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MACÍAS | Más bajo, por piedad, que envidia tengo | | hasta del aire que te escucha. |
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ELVIRA | ¿Ahora | | qué tardas ya? Consérvame tu vida. | | Huye. |
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MACÍAS | ¿Siempre sorda | | a mi ruego serás? |
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ELVIRA | ¿Qué pronuncio?... Anda, y la aurora | | lejos de Andújar al lucir te encuentre; | | mi remedio a los cielos abandona. | | Yo encontraré un asilo impenetrable, | | en donde a salvo del traidor me ponga. | 200 | Comprometer tu fuga yo podría | | retardándola acaso. En tal congoja | | sólo esta daga tengo, que escondida | | (Saca una daga.) | entre los pliegues traje de mis ropas. | | Sírvate ella, aunque débil, de defensa. | 205 | A las puertas de Andújar, cautelosa, | | te seguiré a tu lado, hasta que libre | | te mire allí desparecer yo propia. | | Sólo una cosa exijo: has de jurarla. | | Si a pesar de la noche protectora, | 210 | que con sus densas sombras nos ampara, | | antes de que salvemos la espaciosa | | muralla y honda cava, sorprendidos | | por Fernán Pérez somos, oye: ahoga | | la piedad en tu pecho: que tu mano | 215 | en este corazón la daga esconda. | | Y así el remordimiento y la vergüenza | | borre, que entre los hombres le destrozan, | | no sea suya jamás; mi amor se salve, | | ya que imposible fue salvar mi honra. | 220 | Y si tú no te atreves, en mis manos | | pon la daga: la muerte no me asombra. | | Recuerda que a sus brazos de los tuyos | | pasara, y que esta noche a las odiosas | | caricias de un rival... |
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ELVIRA | Jura sobre esta cruz. | (La que trae colgada del cuello.) |
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MACÍAS | ¡Mujer heroica! | | ¡Yo lo juro ante Dios! ¡Oh qué suprema | | (Toma la daga.) | felicidad! ¡Por mí la muerte arrostra! | |
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ELVIRA | Primero que ser suya, entrambos juntos | | muramos. |
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ELVIRA | Peligrosa | 230 | fuera ya la tardanza. Ven: partamos.- | | ¿Mas qué rumor?... ¡Los cielos me
abandonan! | | (Escuchan.) | ¡Ellos son! A esta puerta se aproximan. | |
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MACÍAS | ¿Son ellos? No
entrarán. | (Corre el cerrojo.) |
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ELVIRA | ¡Ah!, por esotra. | | Corramos. |
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UNO | (Dentro.) | ¿Han cerrado? | (Golpea.) |
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FERNÁN PÉREZ | (Ídem.) | ¡Me han vendido! | 235 |
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MACÍAS | Ya es tarde; ya se agolpan | | esta entrada a tomar. |
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ELVIRA | ¡Suenan sus armas | | al pie de la escalera silenciosa! | |
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ELVIRA | ¿Mas no oyes? ¡Infelices! | | ¿Qué será de nosotros? ¡Ya ni
sombra | 240 | de esperanza nos queda! |
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MACÍAS | ¡Suerte impía! | | Jamás has desmentido tu espantosa | | tenacidad conmigo. |
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ELVIRA | Oye, siquiera | | (Corre a echar la llave a la puerta
secreta.) | ganemos algún tiempo: acaso pronta | | ya Beatriz llegará. |
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ELVIRA | ¿Y cómo | 245 | no temblar, si tu vida...? |
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MACÍAS | ¿Y qué me importa? | | ¿No me amas? |
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MACÍAS | Pues muramos; | | repítemelo siempre, y haz que lo oiga | | muriendo. |
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MACÍAS | ¿Qué, a ese mundo, | | que murmura de aquéllos que no logra | 250 | ni comprender siquiera, qué debemos? | | ¿No es él quien nos perdió con
engañosas | | preocupaciones? Llega. Las lazadas | | que al mundo nos unían ya están rotas. | | Ya vamos a morir; un moribundo | 255 | soy sólo para ti; ven, llega, y orna | | de flores mi agonía; di que me amas... | |
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ELVIRA | Calla: la muerte ya tiende sus sombras | | sobre nosotros. ¿No oyes?... ¿Y a este punto | | ha de venir la muerte rigurosa? | 260 | ¡Con tanto amor morir! |
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MACÍAS | ¡Ah! Tú cobarde | | me volverás aún: ¡morir no ha un hora | | desdeñado anhelaba, y tiemblo amado! | | (Desasiéndose.) | Deja: corro a su encuentro; más gloriosa | | sea mi muerte. |
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ELVIRA | (Siguiéndole.) | ¿Do corres contra tantos? | 265 |
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ELVIRA | ¡Ay, triste! ¿Qué haces?
Torna: | | cumple antes lo jurado... ¡No me escucha! | |
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(Sale
MACÍAS.)
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MACÍAS | ¡Fernán Pérez!
¿Do estás? |
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ELVIRA | ¡Ya el mal se colma! | | (Corre a una ventana del foro, que abre, y
se asoma.) | ¡Beatriz! ¡Beatriz! ¡Socorro! |
(Escucha: se oye ruido de espadas a la
derecha.)
| ¡Don Enrique! | | (Se aparta de la ventana y vuelve a la
derecha.) | ¡Nadie oye! ¡Nadie viene! ¡Ah!, la
horrorosa | 270 | (Cae en un asiento.) | lid se percibe ya. |
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MACÍAS | (Ídem.) | ¡Me habéis muerto! |
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ELVIRA | (Arrojándose del asiento.) | ¡Macías! -Ya le inmolan | | los pérfidos! ¡Tened! |
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(Va a salir al encuentro de
MACÍAS, pero éste al mismo tiempo vuelve
a entrar retrocediendo, la mano izquierda en la herida, y la daga en la
derecha: le persiguen de cerca
FERNÁN,
ÁLVAR y tres hombres: al mismo tiempo uno de
ellos corre a abrir la otra puerta y entran otros tres, dos de ellos con teas.
ELVIRA al ver llegar a
MACÍAS le sostiene, y él cae sobre el
asiento.)
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MACÍAS | (Al entrar.) | ¡Ah!, ¡ni aun vengado | | muero! |
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Escena IV
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ELVIRA,
MACÍAS,
FERNÁN PÉREZ,
ÁLVAR, seis armados.
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FERNÁN PÉREZ | (Se detiene asombrado.) | ¡Aquí mi esposa! | |
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ELVIRA | ¡Socorredle si es tiempo! |
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MACÍAS | Ya es en vano: | 275 | mortal la herida siento. |
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FERNÁN PÉREZ | ¡Esto soporta | | mi furor! Separadlos. |
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(Quiere adelantarse y tras él los suyos,
pero
ELVIRA se opone a ellos.)
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ELVIRA | Asesinos, | | no lleguéis. Monstruo, a contemplar tu obra | | ven tú. Sí; el triunfo es tuyo, pero
inútil | | si no acabas también con quien le adora. | 280 | No; nunca seré tuya; te aborrezco. | | ¡Maldición sobre ti! |
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FERNÁN PÉREZ | ¿Qué oigo, traidora? | | Infiel, tiembla... |
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ELVIRA | (Con ironía amarga.) | El punto ya es llegado. | | (A
MACÍAS.) | ¡Salva, mi único bien, salva a tu esposa! | | Lo juraste. | (Arrebatándole la daga, que
él alarga débilmente.) |
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ELVIRA | Ya no tiemblo. | 285 | (Enseñando la daga a
FERNÁN PÉREZ.) | La tumba será el ara donde pronta | | la muerte nos despose. | (Se hiere y cae al lado de
MACÍAS.) |
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FERNÁN PÉREZ | ¡Álvar! | (Al conocer su intención hace
seña a
ÁLVAR, que está más cerca de
ELVIRA, que la detenga.) |
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ELVIRA | (Cayendo.) | Dichosa | | muero contigo. |
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MACÍAS | (Haciendo un último
esfuerzo.) | Es mía | | para siempre... sí... arráncamela ahora, | | tirano. |
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MACÍAS | Muero contento. | 290 | (Expira.) |
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ELVIRA | Llegad... ahora... llegad... y que estas bodas | | alumbren... vuestras... teas... funerales. | |
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(Expira. Se oye ruido de muchas personas que
llegan cerca.)
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FERNÁN PÉREZ | (Agitado.) | ¿Quién?... ¡Qué zozobra! | |
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BEATRIZ | (Dentro.) | Acaso es tiempo aún. |
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