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Pruebas de amor conyugal

Comedia en dos actos

Manuel Bretón de los Herreros



portada

  —409→  

Escrita para el Liceo de Madrid y estrenada en el mismo el día 8 de abril de 1840



PERSONAJES
 

 
PAULA.
TERESA.
MARIANA.
DON AGUSTÍN.
DON RAMÓN.
DON CAYETANO.
UN QUÍDAM.
 

La Escena es en Madrid. Sala en casa de DON AGUSTÍN medianamente amueblada. Dos puertas laterales: la de la derecha conduce a la antesala, y ambas a las habitaciones interiores. Entre otros muebles habrá una cómoda y una mesa con recado de escribir.

 




ArribaAbajoActo I


Escena I

 

PAULA. MARIANA.

 
 

(PAULA sentada, acabando de bordar una cartera. MARIANA de pie quitándose la mantilla.)

 
PAULA
¿Conque hoy mismo? De alegría
no veo ya el abalorio.
MARIANA
Me han dicho en el escritorio
que llegará a mediodía.
PAULA
Ya dudaba ver el fin 5
de ausencia tan dolorosa.
MARIANA
Ocho días no son cosa...
PAULA
¡Quiero tanto a mi Agustín!
Al que en triste soledad
recuerda a su dueño amante 10
le parece cada instante
un siglo, una eternidad.
MARIANA
Ese pesar es muy justo.
¡Irse un marido a los tres
días de casado!
PAULA
¡Pues!
15
¡Mira qué plato de gusto!
Mas don Braulio el fabricante,
le envió de pronto a Ucles
comisionado y ¡ya ves!...
como el pobre está cesante... 20
No son de perder hoy día
cien duros.
MARIANA
Pero es fatal
que al tálamo conyugal
alcance la cesantía.
PAULA
Ya le emplearán, lo espero, 25
mediante la protección
de su amigo don Ramón,
que está ahora en candelero.
Y si no logro esta dicha,
¡cómo ha de ser! Fiel esposa, 30
me reduciré gustosa
a sopas de ajo y salchicha.
MARIANA
Gran virtud es menester...
PAULA
No me distraigas. Quisiera
acabar esta cartera... 35
MARIANA
¿Le quiere usted sorprender?
PAULA
Sí.
MARIANA
De realce dos palmas,
y enlazados los dos nombres
forman cifra...
PAULA
No te asombres.
—410→
Lo mismo están nuestras almas. 40
MARIANA
(En eso pone su ahínco:
por lo demás no se afana.)
PAULA
Ya sólo faltan, Mariana,
cuatro puntadas o cinco;
y pues salgo más deprisa 45
que imaginé con mi empeño,
antes que venga mi dueño
tiempo tengo de ir a misa.
MARIANA
Y sobrado.
PAULA
Tráeme pues
los guantes y la mantilla. 50

 (Suena dentro una campanilla.)  

MARIANA
Voy. Sonó la campanilla.
PAULA
Mira primero quién es.


Escena II

PAULA
¡Virgen, si a la esposa tierna
hoy vuelve sano y seguro,
otra misa oír te juro 55
descalza de pie y de pierna!


Escena III

 

PAULA. DON CAYETANO. MARIANA.

 
DON CAYETANO
Vengo a ponerme a los pies
de usted...
PAULA
Beso a usted la mano,
amigo don Cayetano.
MARIANA
¿Dejaré para después...? 60
PAULA
No, que si el tiempo no alcanza...
Perder la misa no quiero.
Anda, que ese caballero
es de toda confianza.


Escena IV

 

PAULA. DON CAYETANO.

 
DON CAYETANO
No quisiera ni un momento 65
incomodar...
PAULA
No... Iba a misa
DON CAYETANO
¡Oh! Es obligación precisa.
PAULA
Pero tome usted asiento.
DON CAYETANO
Gracias. (¡Rostro como el suyo...!)
¿Qué borda usted, vecinita? 70
PAULA
Una cartera.
DON CAYETANO

 (Acercándose a mirarla.) 

Es bonita.
PAULA

 (Levantándose y dándole la cartera.) 

Ahora mismo la concluyo.


Escena V

 

PAULA. DON CAYETANO. MARIANA.

 
 

(Trae MARIANA guantes, abanico y mantilla para su ama: esta pone la almohadilla sobre la mesa.)

 
MARIANA
Aquí está todo, señora.
DON CAYETANO

 (Mirando la cartera.) 

Exquisita es la labor.
Yo no he visto igual primor. 75
(Estoy por la bordadora.)
¡Es obra maestra!
 

(Se lo vuelve y PAULA la pone sobre la mesa.)

 
PAULA
¡Qué!
No tal. Usted me avergüenza.
DON CAYETANO
Y aquí forman una trenza
dos iniciales, A y P. 80
¡Muy bien! Agustín y Paula.
Recíproco amor lo exige.
(¡Qué linda! Si no transige,
da conmigo en una jaula.)
PAULA
Es un débil testimonio 85
de mi conyugal afecto.
DON CAYETANO
¡Ah! Bien dicen, el perfecto
estado es el matrimonio.
Sobre tan plácida unión
no tienda Satán sus redes, 90
y Dios favorezca a ustedes
con fruto de bendición.
PAULA

 (Ruborosa.)  

¡Vaya!... Ponme la mantilla.
 

(JUANA se la pone.)

 
DON CAYETANO
Un niño hermoso y robusto...;
pero usted tendrá más gusto 95
en que sea una chiquilla.
PAULA
Haga Dios su voluntad.
Y usted, tan aficionado,
¿no se casa?
DON CAYETANO
He tropezado
con una dificultad.
PAULA
¿Cuál?
100
DON CAYETANO
Señora, ¡hay tanta maula!
Virtud, belleza, talento...
¿Dónde se halla ese portento?
¡Ah! ¿Dónde hallar otra Paula?
PAULA
En cualquier parte. Es tan poco 105
mi mérito...
DON CAYETANO
Y en mis años,
tras de tantos desengaños,
¡casarme!... No soy tan loco.
Novio con el pelo gris
no puede vivir tranquilo; 110
que tiene el alma en un hilo
y su honra pende de un tris.
El dinero puede mucho
—411→
y, aunque de ello no me aplaudo,
con el oro que recaudo 115
puedo llenar un falucho;
pero placeres comprados
ya se sabe lo que son.
Las telas del corazón
no salen a los mercados. 120
PAULA
No, señor.

 (Aparte a MARIANA.) 

¡Qué buen sujeto,
qué honrado es nuestro vecino!
DON CAYETANO
(¿Quién ha visto a un libertino
hecho fraile recoleto?)
MARIANA

 (Aparte a PAULA.) 

Y tan amable, tan franco... 125
DON CAYETANO
¿Y cuándo llega el consorte
feliz?...
PAULA
Hoy entra en la corte.
DON CAYETANO
(¡No volcara en un barranco!...)
Mil y mil enhorabuenas...
Y a mí mismo me las doy, 130
que su apasionado soy,
aunque le conozco apenas.
PAULA
¡Cómo! ¿Usted...?
DON CAYETANO
Sólo de vista,
mas sus virtudes proclama
con cien trompetas la fama. 135
PAULA
Favor que usted...

 (Tomando el abanico y el pañuelo.) 

Ya estoy lista.
DON CAYETANO
Si él me honra con su amistad...
PAULA
¡Oh! El honrado será él.
DON CAYETANO
Seré su amigo más fiel.
PAULA
Gracias. Es mucha bondad... 140
DON CAYETANO
Si puedo servirle en algo
PAULA
¡Ah, señor!
DON CAYETANO
Sin cumplimiento:
suyo es desde este momento
cuanto tengo y cuanto valgo.
Mas yo hablando a troche y moche, 145
y usted con mantilla puesta...
PAULA
No importa. Usted no molesta...
DON CAYETANO
¡Ah! Vaya usted en mi coche.
PAULA
No. Mil gracias...
DON CAYETANO
Hace un aire
terrible.
PAULA
De aquí a la Red
150
no está lejos.
DON CAYETANO
Mire usted
que lo tomaré a desaire.
Precisamente está ahora
a la puerta. Hice enganchar,
mas quise antes saludar 155
a mi vecina y señora.
PAULA
¡Y usted irá a pie por mí...!
DON CAYETANO
¡Eh! Mejor. Haré ejercicio.
El mucho regalo es vicio.
Vaya, diga usted que sí. 160
PAULA
Porque usted no tome a mal...
DON CAYETANO
Con usted iría al templo,
pero ese fuera un ejemplo
pernicioso a la moral.
PAULA
Es verdad.
MARIANA
(¡Camastronazo!)
165
DON CAYETANO
Mas ya que cauto me privo
de ese honor, hasta el estribo
sírvase usted de mi brazo.
PAULA
Mal pago a tanta fineza
sería un desdén grosero. 170

 (Tomando el brazo de DON CAYETANO.) 

Vamos... (¡Qué buen caballero!)
DON CAYETANO
(¡Bien va! Por algo se empieza.)


Escena VI

 

MARIANA.

 
¡Qué bien toma mis lecciones
el socarrón! ¡Cómo sabe
el tuno hacer la gatita 175
de Mari-Ramos! El diantre
son los hombres. Mi señora
le tiene ya por un ángel.
¡Bien! Esto es algo. Y no es poco
que, sin saber lo que se hace, 180
haya aceptado su coche.
Acaso más adelante,
luego que el pan de la boda...

 (Suena la campanilla.) 

Llaman. Voy... Ya ha abierto Jaime.


Escena VII

 

DON CAYETANO. MARIANA.

 
MARIANA
¿Qué! ¿Vuelve usted?...
DON CAYETANO
Sí, Mariana,
185
sí, querida. Vengo a darte
en albricias de mi dicha
este doblón para guantes.
MARIANA

 (Lo toma.) 

Estimando. Ya ve usted
que mi consejo...
DON CAYETANO
Admirable.
190
El primer paso está dado,
que es lo difícil, lo grande
de estos negocios. Ganada
su confianza...
MARIANA
No obstante,
sin ganar la del marido... 195
DON CAYETANO
Y eso no será tan fácil;
¿verdad?
MARIANA
A fuerza de tiempo...
DON CAYETANO
Es que, si quieres que te hable
con franqueza, temo mucho
que la paciencia me falte 200
—412→
a lo mejor. ¿Es celoso?
MARIANA
No le he notado ese achaque
hasta ahora.
DON CAYETANO
Bien. ¿Y qué
me dices de su carácter?
¿Es hombre... de armas tomar? 205
(No tengamos aquí un lance
pesado...)
MARIANA
Es como una malva.
DON CAYETANO
No porque a mí me acobarde
ningún hombre cuerpo a cuerpo,
pero bueno es informarse... 210
Vaya, ¿y qué flaco es el suyo?
¿Juega al billar o a los naipes?
¿Es músico? ¿Es cazador?
¿Es literato?
MARIANA
Es cesante.
DON CAYETANO
Basta.
MARIANA
¡Sobre todo, chito!
215
No es bueno que sepa nadie...
DON CAYETANO
Por supuesto. (¿Yo callar?
Harto será. Soy tan frágil...
Mas ahora tendré prudencia...,
al menos hasta que alcance 220
la victoria. A algún amigo
de los más íntimos..., pase;
pero ¡en el café!...)
MARIANA
¿En qué piensa
usted?
DON CAYETANO
En mi plan de ataque.
Pero abur. Ya nos veremos 225
despacio, que si viene alguien,
podrá sospechar... Lo dicho.
Si me ayudas en mis planes
y logro lo que deseo,
te hago feliz. Dios te guarde. 230


Escena VIII

 

MARIANA.

 
Es preciso tener cara
de vaqueta y de vinagre
para negarse a servir
a sujeto tan amable.
La conciencia me remuerde 235
un poco; mas treinta reales
de salario mal seguro,
y sin provechos ni gajes,
¿qué son para que una moza
de mi rumbo vista y calce 240
y mantenga nada menos
que a un cabo de provinciales?
Si es tan santa mi señora
como de serlo se aplaude,
por más que sude el vecino 245
y por más que yo trabaje,
se quedará al fin y al cabo
tan honrada como antes.
Y aún mucho más; que no hay mérito,
como decía mi madre, 250
en que triunfe la virtud...
cuando nadie la combate.
Si se rinde, buen provecho.
Ella será la culpable.

 (Suena la campanilla.) 

¡Pues! Ella y los que gobiernan, 255
que, acumulando cesantes,
tantas ocasiones dan
para que el diablo las cargue.


Escena IX

 

MARIANA. AGUSTÍN.

 
DON AGUSTÍN

 (En traje de camino.) 

¡Mariana!
MARIANA
¡Ah!... ¡Señor! ¡Tan pronto!
Yo creí que hasta más tarde... 260
DON AGUSTÍN
He madrugado algo más
de lo que pensaba. ¿Qué hace
Paula? ¿Dónde está?
MARIANA
Ha salido
a misa.
DON AGUSTÍN
Eso es muy laudable.
MARIANA
Creyó que tendría tiempo 265
antes de que usted llegase...
¡Cuánto sentirá...!
DON AGUSTÍN
No importa.

 (Sentándose y dejando sobre una silla el sombrero.)  

Molido estoy del carruaje.
MARIANA
¿Se ha desayunado usted?
DON AGUSTÍN
Sí; medio capón fiambre... 270
Supongo que no habrá habido
novedad...
MARIANA
Ninguna.
DON AGUSTÍN
¿Y Gálvez?
MARIANA
¿Don Ramón? Ha estado malo.
DON AGUSTÍN
¿Qué me dices! ¿Cosa grave?
MARIANA
No, señor. El reumatismo... 275
Habrá seis días... Sí, el martes,
hizo cama. Pero ayer
cuando fui yo a preguntarle
cómo estaba de salud
encontré vacío el catre. 280
Ya está tan guapo. Hoy vendrá.
DON AGUSTÍN
Me alegro. Siento sus males
como si yo...
MARIANA
No lo extraño.
Son ustedes uña y carne...
(¡Voto va..., y no se lo he dicho 285
a don Cayetano!)
DON AGUSTÍN
Dame,
mientras viene mi mujer,
las cartas que haya de Cáceres...
MARIANA
No ha parecido el cartero.
DON AGUSTÍN
(Es raro el no contestarme 290
la familia. Sentiré
—413→
que desapruebe mi enlace...)

 (Suena la campanilla.)  

MARIANA
Llaman... Será la señora.
DON AGUSTÍN

 (Levantándose.)  

¡Ah! No te detengas. Abre.


Escena X

 

DON AGUSTÍN.

 
¡La pobre!... Estos ocho días 295
se le habrán hecho mortales.


Escena XI

 

PAULA. DON AGUSTÍN.

 
PAULA
¡Agustín!

 (Se abrazan.)  

DON AGUSTÍN
¡Paula querida!
PAULA
¡Dulce sorpresa!
DON AGUSTÍN
¡Mi bien!
PAULA
Bendígate Dios, amén.
¿Vienes con salud, mi vida? 300
DON AGUSTÍN
Ya lo ves. ¡Y tú tan buena!
PAULA

 (Quítase la mantilla y la deja sobre la cómoda con el pañuelo y el abanico.)  

Sí, mas en tal desconsuelo
milagro ha sido del cielo
no haberme ahogado la pena.
DON AGUSTÍN
Yo también muerto de esplín 305
sin ti y entre aquellas gentes...
PAULA
¡Oh! Como otra vez te ausentes,
me voy contigo, Agustín.
Di, ¿recibiste en la villa
de Ucles una carta?...
DON AGUSTÍN
Sí.
310
PAULA
En tres noches la escribí.
DON AGUSTÍN
¡Tres pliegos y una cuartilla!
PAULA
Por horas y por momentos
un circunstanciado parte
de mis obras quise darte, 315
y hasta de mis pensamientos.
DON AGUSTÍN
Me cautiva el corazón
tanta fe, Paulita bella,
pero...
PAULA
Y otra como aquella
puse anoche en el buzón. 320
DON AGUSTÍN
Era inútil. Yo te creo...

 (PAULA toma la cartera que dejó sobre la mesa.) 

(Si tardo en volver aquí,
no gano, pobre de mí,
para portes de correo.)
PAULA
Toma.
DON AGUSTÍN
¡Qué fineza!
PAULA
En suma,
325
sólo amándote vivía;
con la aguja por el día,
por la noche con la pluma.
DON AGUSTÍN
¡Qué cartera tan preciosa!...
Con la cifra de los dos... 330
¡Otro abrazo, ángel de Dios!
¡Feliz yo con tal esposa!
PAULA
Y es poco para mi amor,
que quien el alma te da...
¡Ah!... ¿Sabes que tienes ya 335
otro amigo y protector?
¡Otro amigo! ¡Otro!... ¿Quién es?
PAULA
Don Cayetano, el vecino
de abajo.
DON AGUSTÍN
¡Ya!
PAULA
Anoche vino...
DON AGUSTÍN
¡Cómo!...
PAULA
A ponerse a mis pies.
340
DON AGUSTÍN
Y esa visita ¿a qué santo?...
PAULA
A título de vecino...
¡Qué buen sujeto! ¡Qué fino!
¡Cómo le afligió mi llanto!
DON AGUSTÍN
¿Tan tierno es de corazón? 345
PAULA
Y cristiano muy cabal.
¡Qué máximas de moral!
Vaya, es un santo varón.
DON AGUSTÍN
Como hemos vivido aquí
tan poco tiempo, no sé... 350
no conozco... Ya se ve,
todo consagrado a ti...
¿Es joven?
PAULA
No. Ya es machucho.
Cuarenta y tres le echo yo...
DON AGUSTÍN
Y su mujer ¿no subió?... 355
PAULA
¡Bah! ¡Si es soltero!...
DON AGUSTÍN
(¿Qué escucho!)
¿Cómo en casarse no piensa?
¡Eh! Será algún perdulario...
PAULA
No lo creas; al contrario,
tiene una fortuna inmensa. 360
DON AGUSTÍN
(¡Malo!)
PAULA
Es hombre muy profundo.
DON AGUSTÍN
Sí será...
PAULA
Y tan timorato...
Le inclinan al celibato
desengaños de este mundo.
DON AGUSTÍN
Yerros de la juventud... 365
PAULA
Si vieras con qué fervor
elogia el pobre señor...
DON AGUSTÍN
¿Tu hermosura?
PAULA
Mi virtud.
DON AGUSTÍN
¡Oiga!
PAULA
Un feliz matrimonio,
dice, es el supremo bien 370
en la tierra, es el Edén,
la...
DON AGUSTÍN
¡Mire usted qué demonio!
PAULA
Y como yo no imagino
encontrar en esta corte
tan angélica consorte... 375
  —414→  
DON AGUSTÍN

 (Entre dientes.)  

Prefiero la del vecino.
PAULA
¿Eh?
DON AGUSTÍN
Nada. (¡Y que ella se trague
la píldora!...)
PAULA
Pues de ti
hace unos encomios...
DON AGUSTÍN
¿Sí?
¡Qué bondad! ¡Dios se lo pague! 380
PAULA
Porque, aunque no te conoce
sino de fama hasta hoy...
DON AGUSTÍN
La fama dirá que soy
el mejor Par de los doce.
PAULA
Y añadió: Si puedo en algo 385
servirle, si en algo influyo,
cuente desde hoy como suyo
cuanto tengo y cuanto valgo.
DON AGUSTÍN
¡Tanto afecto en una noche!
PAULA
También me ha venido a ver 390
esta mañana...
DON AGUSTÍN
¡Mujer!
PAULA
¡Vaya, y me ha ofrecido el coche!
DON AGUSTÍN

 (Con risa sardónica.)  

¿De veras?
PAULA
Para ir a misa.
¡Qué bondad!... Quedarse a pie
por servirme.
DON AGUSTÍN
Sí; je, je...
395
PAULA
¿De qué te ríes?
DON AGUSTÍN
...De risa.
Ha sido mucha atención.
Y... ¿aceptaste?
PAULA
Sí, mi dueño.
Lo tomó con tal empeño...
DON AGUSTÍN
¡No puedo más! ¡Maldición! 400
PAULA

 (Asustada.) 

¡Ay, Dios mío! ¿Qué te ha dado?
¿Es a mí o es al vecino?...
DON AGUSTÍN
Ese hombre es un libertino
de profesión, un malvado.
PAULA
¿Cómo?...
DON AGUSTÍN
¡Y no lo has conocido!
405
¡Ah! ¿Qué hombre a mujer bonita
con buena intención visita
en ausencia del marido?
Te habló de virtud anoche
para ganar tu amistad, 410
y hoy tienta tu vanidad
ofreciéndote su coche.
¡Y tú le oíste tranquila
cuando de tu esposo dijo
tantas lindezas! ¿Qué hijo 415
le he sacado yo de pila?
¿Creerá, ¡pese a Belcebú!,
ese hipócrita insolente
que soy yo tan inocente...
o tan simple como tú? 420
PAULA
¡Ay, no te enojes! Perdona...
Yo he obrado sin malicia...
DON AGUSTÍN
Sí, sí; yo te hago justicia.
Esa ingenuidad te abona.
Si del bribón que te engaña 425
vil cómplice hubieras sido,
no harías a tu marido
revelación tan extraña.
PAULA
Incauta fui; no te asombres,
querido. Mi buena fe... 430
¡Oh! De hoy más aprenderé
a conocer a los hombres.
¡Miren el mosquita muerta!...
¡Con qué diabólico enredo
quería...! No tengas miedo, 435
que otra vez estaré alerta.
Si a mis ojos se aparece
el pérfido seductor,
le hablaré con el horror
y el desprecio que merece. 440
¡Ah! Sea culpable o no,
no vuelva jamás aquí.
Basta que te enfade a ti
para aborrecerle yo.
Aunque me ofrezca el Perú 445
como me ha ofrecido el coche,
¿será ese viejo bamboche
tan amable como tú?
DON AGUSTÍN
Tan bello es tu corazón
cual tu rostro. No me ofendo: 450
basta; sólo te encomiendo
que aproveches la lección.
Voy a salir, y este traje...
Otro pantalón; camisa...
PAULA
¿Adónde vas tan de prisa? 455
DON AGUSTÍN
A dar cuenta de mi viaje.
PAULA

 (Abriendo un cajón de la cómoda.)  

¿Qué pantalón?
DON AGUSTÍN
El azul
turquí.
PAULA

 (Revolviendo el cajón.)  

No sé dónde está.
Debajo... Aquí... Este será...
No; es mi mantilla de tul. 460
DON AGUSTÍN
Despacha.
PAULA
¡Si no lo encuentro!...
¡Ah! Ya ha parecido. Ten.

 (Saca un pantalón y se le da.)  

DON AGUSTÍN
Ahora la camisa.
PAULA
Bien.

 (Abriendo otro cajón.)  

En este cajón del centro...
DON AGUSTÍN
Sí.
PAULA

 (Registrando.) 

En este lado hay calcetas...
465
DON AGUSTÍN
Falta me hacen; vengan unas.
PAULA

 (Dándole un par.)  

Toma... ¿Y te vas en ayunas?
  —415→  
DON AGUSTÍN
No; ya almorcé.
PAULA

 (Registrando el cajón.)  

Servilletas...,
sábanas..., que he de coser...,
enaguas...
DON AGUSTÍN
¿Tanto te cuesta?...
470
PAULA
¡Ah! Toma.
DON AGUSTÍN

 (Mirando la camisa que le da PAULA y volviéndosela.)  

¿Qué me das? ¡Si esa
es camisa de mujer!
PAULA

 (Riéndose.)  

Dices bien. Aturrullada
con el dulce regocijo
de verte...

 (Revuelve otra vez el cajón.)  

DON AGUSTÍN
Vamos...
PAULA
Pues, hijo,
475
ninguna tienes planchada.
DON AGUSTÍN
¡Voto a...! Me lleva Pateta.
PAULA
No te incomodes, por Dios.
¿Has ensuciado las dos
que llevaste en la maleta? 480
DON AGUSTÍN
Sí, mujer; en ocho días...
PAULA
¡Qué quieres! Pensando en ti
noche y día... Yo creí
que tan pronto no vendrías.
DON AGUSTÍN
Pero es extraña omisión 485
esperar...
PAULA
Calla, que presto...

 (Acercándose a la puerta de la izquierda.) 

¡Mariana! Una plancha, el cesto
de la ropa, el almidón...
DON AGUSTÍN
¿Quién espera a que la plancha
se caliente?
MARIANA
¿Llama usté?
490
DON AGUSTÍN
Sin planchar me la pondré
como un tío de la Mancha.

 (Despidiendo a MARIANA.) 

Allá voy. La cubriré
con la corbata, y así...
PAULA
¿Saco la levita?
DON AGUSTÍN
Sí,
495
y el chaleco de piqué.


Escena XII

 

PAULA.

 

 (Sacando la levita y el chaleco.)  

¡Válgame Dios! ¡Cuánto siento...!
¿Dónde estará la levita?
¡Jesús! La cómoda está
tan revuelta... El primer día 500
que me levante de humor
y el tiempo me lo permita,
la he de arreglar... Aquí está.

 (Saca una levita.)  

La pondré sobre una silla

 (Lo hace.)  

mientras busco ese chaleco. 505

 (Revolviendo el cajón.)  

Aquí no está. En el de arriba...

 (Abre otro y saca de él un chaleco.)  

Por acá... Ya di con él.

 (Desdoblándolo.)  

¡Ay, que le falta una cinta!
¡Válgame el cielo! ¿De dónde
saco ahora?... Tiene prisa... 510
¡Ah! Esta es larga. Cortaré...

 (Toma de la almohadilla unas tijeras y corta un pedazo de la cinta.)  

El pedazo en la otra esquina
con un alfiler...

 (Lo prende.) 

Ya está.
Voy al instante; no diga
que no le ayudo a vestirse. 515

 (Deteniéndose y desdoblando la levita.)  

¿Tendrá polvo? No; está limpia.

 (Estirando el faldón.)  

Por vida de las arrugas...
Pero ¿qué veo! ¡Desdicha!...
Un botón colgando...
DON AGUSTÍN
 (Dentro.)  ¡Paula!
PAULA
¡Voy corriendo! La almohadilla. 520

 (Registrándola.)  

¡Ay! ¡No tengo seda negra!
¿Qué haré? ¡Por vida...! ¡Por vida...!
La aguja tengo enhebrada...,
pero ¡con seda amarilla!
DON AGUSTÍN

 (Dentro.)  

¡Paula!
PAULA
¡Allá voy, amor mío!
525

 (Se sienta y cose apresuradamente el botón.)  

Coseré con esta misma.
¿Qué he de hacer? ¡Malditos sastres!
¡Malditos de Dios! No cuidan
de asegurar los botones...
Daremos luego con tinta 530
a la seda...

  —416→  

Escena XIII

 

PAULA. DON AGUSTÍN.

 
 

(DON AGUSTÍN viene en mangas de camisa, con la corbata puesta y cubierta con sus puntas la pechera.)

 
DON AGUSTÍN
¡Vamos, Paula!
PAULA

 (Cortando la seda.) 

¡Ah!
DON AGUSTÍN
¿Qué haces?
PAULA

 (Levantándose.) 

Nada. Cosía
un botón que estaba flojo.
DON AGUSTÍN
¡Válgate Dios!
PAULA
¡Ese Utrilla...!
DON AGUSTÍN
Sí, Utrilla. ¿Es este el chaleco? 535

 (Lo toma.) 

PAULA
Sí, mi bien.
DON AGUSTÍN

 (Soltando el chaleco.)  

¡Cuerno, madrina!
PAULA
¡Ay Dios!...
DON AGUSTÍN
¡Maldito alfiler!
PAULA

 (Toma el chaleco y prende mejor el alfiler.) 

¡Diste en él por donde pincha!
DON AGUSTÍN
¡No lo hubieras tú prendido...!

 (Se chupa un dedo.)  

PAULA

 (Asustada.)  

¡Sangre! Irán a la botica... 540
DON AGUSTÍN
No es nada. Me chupo el dedo...
de gusto.
PAULA
Prendí la cinta
porque no esperases...
DON AGUSTÍN
¡Oh!...
¡Por las ánimas benditas,
despacha!
PAULA
Ya no hay cuidado.
545

 (Ayudándole.)  

Mete el brazo. El otro. Avisa
cuándo he de atar...
DON AGUSTÍN

 (Poniéndose los botones del chaleco.)  

(¡Qué mujer
para un pobre!) Ata. (Da grima
el pensar...)
PAULA
¿Aprieto?
DON AGUSTÍN
Basta.
PAULA
Ya está. Ponte la levita, 550

 (Se la da.) 

mientras te saco un pañuelo...
DON AGUSTÍN

 (Poniéndose la levita.)  

¡No, por la Virgen santísima!,
que esa cómoda es... el caos,
y me darás una almilla,
un calcetín... Me apodero 555
de este tuyo de batista.

 (Toma el pañuelo de PAULA.) 

PAULA
¿Y guantes?

 (Tomando el sombrero y yéndose enfadado.) 

Los compraré
de camino.
PAULA

 (Llorando.)  

¿No te dignas
de decirme adiós siquiera?
¡Con qué crueldad me castigas, 560
ingrato!
DON AGUSTÍN

 (Entre enojado y enternecido.)  

No, mujer; pero...
Vaya, abrázame.

 (Se abrazan.)  

(¡Es tan linda
y tan cariñosa!...) Adiós.
PAULA
No me guardes ojeriza.
Yo me enmendaré...
DON AGUSTÍN

 (Enternecido.) 

¡No llores!...
565
Adiós, Paula. (¡Es una niña!)


Escena XIV

 

PAULA.

 
¡Pobre Agustín! Se ha enfadado
con razón. ¡No tener lista
la ropa! Pero ocupada
con la cartera y la cifra... 570
¡Cunde tan poco el bordado
de abalorio!... Y las epístolas
amorosas que le he escrito...
Vamos, parece mentira
cómo se pasan las horas, 575
y hasta qué punto complica
los deberes conyugales
una ausencia repentina.
¡No poder una pagar
costurera ni modista...! 580
Si me ayudase Mariana,
tal cual, pero ¿y la cocina?

 (Suena la campanilla.)  

¡También es fatalidad
que esté tan mal de camisas
mi amado Agustín! ¡Jesús! 585
¡Mal haya la cesantía!


Escena XV

 

PAULA. DON RAMÓN.

 
DON RAMÓN
Buenos días, bella Paula.
PAULA
Muy felices, don Ramón.
Celebro la mejoría.
  —417→  
DON RAMÓN
Malo o bueno, siempre estoy 590
a los pies de usted.
PAULA
También
de enhorabuena estoy yo.
DON RAMÓN
Sí, ya he visto en la escalera
a Agustín; mas mi intención
era visitar a Paula, 595
y sin cumplir no me voy,
señora, con un deber
tan grato a mi corazón.
PAULA

 (Recelosa.)  

(¡Qué oigo!) ¿Quiere usted sentarse?
DON RAMÓN
Sí haré.

 (Ofrece una silla a PAULA y él ocupa otra.)  

Usted sólo me dio
600
un parabién; mas yo espero
retribuirle con dos.
PAULA
¿Con dos parabienes?
DON RAMÓN
Sí,
y a mí propio me los doy.
Uno por la bienvenida 605
de Agustín, que es mi mejor
amigo, como usted sabe,
y otro porque creo que hoy
será colocado.
PAULA
¿Sí?
DON RAMÓN
Y ganando en graduación 610
y en sueldo.
PAULA
Y a usted sin duda
debemos ese favor.
DON RAMÓN
Él merece mucho más.
PAULA
¿Fuera de la corte?
DON RAMÓN
No,
que si usted saliese de ella 615
faltara a Madrid el sol.
PAULA
¿Cómo?... ¡Usted me dice...!
DON RAMÓN
Injusto
fuera que tan linda flor
vegetase oscurecida
en Moguer o en Castropol. 620
PAULA
Esas lisonjas...
DON RAMÓN
¿Lisonjas?
No, señora, no lo son.
Si hay ángeles en la tierra,
uno es usted.
PAULA
(¡Oh rubor!...)
DON RAMÓN
¿Quién no envidiará la dicha 625
de don Agustín? Su unión...
PAULA

 (Levantándose. DON RAMÓN se levanta también.)  

¡Eh! Basta, ¡mal caballero,
pérfido amigo, hombre atroz!
DON RAMÓN
¡Qué escucho!
PAULA

 (Sin oírle.) 

¡Venir, a título
de amigo y de protector, 630
a requerirme de amores!
DON RAMÓN
¡Yo, señora!...
PAULA
¡Qué traición!
DON RAMÓN
Pero si yo...
PAULA
¡Aparte usted!
DON RAMÓN
Pero, Paulita, ¡por Dios!...
PAULA
Ni por Dios, ni por la Virgen. 635
Yo tengo honra. ¡Soy quien soy!
DON RAMÓN

 (Siguiéndola.) 

¿Quién ha pensado...? Oiga usted...
PAULA
No, ¡jamás, jamás! ¡Qué horror!
 

(Vase por la puerta de la izquierda y óyese el cerrojo con que la asegura por dentro.)

 


Escena XVI

 

DON RAMÓN.

 
¡Y echó a la puerta el cerrojo!
¿Qué diablos la he dicho yo 640
que huye de mí como huyera
de algún sátiro feroz?
¡Porque la digo que es linda
se pone como un dragón!
¿Qué fuego ha visto en mis ojos, 645
qué mano se deslizó,
atrevida aventurera,
que así confunde el amor
con una galantería
propia del genio español 650
y de la franca amistad
que su esposo me inspiró?
¡Y cuando vengo a anunciarla
que debe a mi protección
y a mi influjo su ventura, 655
me paga con una coz!
No presumí que sería
tan zaina de condición.

 (Suena la campanilla.)  

Como apenas la he tratado...
Merecía, ¡voto a briós!... 660
No, que el justo sufriría
la pena del pecador.
 

(Queda un momento pensativo. Toma luego el sombrero y se dirige a la puerta de la izquierda.)

 


Escena XVII

 

DON RAMÓN. DON CAYETANO.

 
DON CAYETANO

 (Sin pasar de la puerta.) 

Pues ya ha salido de casa
el recién venido esposo,
le vengo a cumplimentar... 665
—418→
Pero ¿me engañan mis ojos?

 (Adelantándose.)  

¡Ramón!...
DON RAMÓN
¡Cayetano insigne!
¡Aquí tú!
DON CAYETANO
¡Tú tan famoso!
DON RAMÓN
Ya ha días que no nos vemos.
DON CAYETANO
Desde el año treinta y ocho. 670
DON RAMÓN
¿Dónde has estado?
DON CAYETANO
En París
en Roma..., y luego en Oporto,
en Cádiz... ¡Siempre gozando!
Hay humor y sobra el oro...
DON RAMÓN
¡Bravo! ¿Vuelves según eso 675
tan libertino (y tan tonto)
como te fuiste?
DON CAYETANO
¡Eh, qué quieres!...
Mientras uno sea mozo...
DON RAMÓN
¡Mozo tú!
DON CAYETANO
Es decir, soltero.
Y tú, grandísimo zorro, 680
¿humillaste ya la frente
al yugo del matrimonio?
DON RAMÓN
¿Pues no sabes que soy viudo?
DON CAYETANO
No me acordaba. Supongo
que no será tan austero 685
tu luto... ¿Se hace negocio?
¿Cómo te tratan las bellas?
Siempre fuiste venturoso.
DON RAMÓN

 (Riéndose.)  

Ya no. Me acaban de dar
calabazas...
DON CAYETANO

 (Dándose una palmada en la frente.)  

¡Ah! ¡Demonio!
690
Ya comprendo... ¡La Paulita!
¡Mi linda vecina!
DON RAMÓN
¿Cómo!
DON CAYETANO
¡Pobre hombre! Has llegado tarde.
DON RAMÓN
Ya sé que es casada.
DON CAYETANO
¡Bobo!
El marido es lo de menos. 695
DON RAMÓN
¡Oh! ¿Qué estás diciendo?
DON CAYETANO

 (Bajando la voz.) 

Hay moros
en la costa.
DON RAMÓN
No es posible...
DON CAYETANO
Quédese esto entre nosotros;
pero has de saber que Paula
corre de mi cuenta.
DON RAMÓN
¿Qué oigo!
700
DON CAYETANO
Ya he ganado a la doncella,
y lo que es el ama, pronto
capitulará...
DON RAMÓN
¡Mentira!
¡Infamia!
DON CAYETANO
¡No hables tan gordo!
Cuando yo te digo...
DON RAMÓN
Mientes
705
como un vil.
DON CAYETANO
¡Eh! Poco a poco...
(Ya es forzoso hacer de tripas
corazón.) Tomas un tono...
DON RAMÓN
El que merece un villano.
DON CAYETANO
A tal insulto respondo 710
con una estocada.
DON RAMÓN
Acepto.
DON CAYETANO
(¡Muerto soy!) No es a propósito
este sitio para hablar
del dónde, el cuándo y el cómo.
En mi habitación podemos 715
tratar...
DON RAMÓN
Bien.
DON CAYETANO
Soy hombre solo...
DON RAMÓN
¿Dónde?...
DON CAYETANO
En esta misma casa,
cuarto principal, que pongo
a tus órdenes...
DON RAMÓN
Suprime
cumplimientos enfadosos. 720
DON CAYETANO
Lo cortés y lo valiente
no se excluyen. ¿A qué prójimo
eliges para padrino?
DON RAMÓN
A don Agustín Orozco.
DON CAYETANO
¡Calle! ¡Al marido!...
DON RAMÓN
Cabal.
725
DON CAYETANO
Yo tengo que buscar otro.
A las dos te espero abajo.
DON RAMÓN
Puntual seré. (Si le rompo
la crisma, tendré siquiera
ese justo desahogo.) 730


Escena XVIII

 

DON CAYETANO.

 
Yo tiemblo. ¡Terrible apuro!
¡Por esta lengua maldita...!
Mengua es faltar a la cita;
soltar la pelleja... es duro;
y él me mata ¡de seguro! 735
si se efectúa la lid.
¿Qué haré, cielos!... ¡Ah! Un ardid...
Ya el peligro no me inquieta,
pues hay oro en mi gaveta
y policía en Madrid. 740

 (Vase por donde vino.)  




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